-Buenos días Cup_ - Acomodó su cabeza como lo hacía normalmente hasta que se dio cuenta que en la cama de al lado no había nadie- ¿Cuphead? ¡¿CUPHEAD?!-

-Estoy aquí hermano- Respondió desde una extraña lejanía como si estuviera al otro lado de la pared, demasiado tranquilo como si recién acababa de despertar

-¿Donde? ¿Acaso atravesaste el muro?- Se apegó a esta misma esperando escuchar la voz con más claridad

-Claro que no, estoy aquí abajo-

La taza azul giró su cabeza casi 360 grados, hasta finalmente darse con la sorpresa de una mano saliendo debajo de la cama, parpadeo un poco esperando que fuera una ilusión lo cual lo contradijo en cuanto esta se volvió a meter a los confines de la oscuridad debajo de la cama.

-¿Que haces allá abajo? Más te vale que sea con sentido- Le cuestionó levantándose de la cama y ver debajo de la de su hermano, encontrándolo acostado empujando un gran montículo de objetos en una esquina, como ambas camas estaban al lado de las esquinas del cuarto era normal que a veces escondieran algo ahí... pero no tantas cosas como ahora-... ¿Que estás haciendo?...

-Previniendo antes de que algo malo pase, ya sabes- Siguió empujando el montículo intentando meterlo lo más profundo posible- ¿Me podrías pasar una frazada?

-Espera, espera, espera ¿Que algo malo pase? Cups... lo malo ya está pasando, no veo la razón por la que hacer todo esto en este preciso momento- Se arrodillo girando la cabeza para observarlo de un mejor ángulo

-Créeme que no quieres saberlo, solo sé que... a veces es mejor mantener algunas cosas ocultas y esta vez no es la excusa ¿Podrías pasarme la frazada ahora?- Estiró su mano esperando el objeto- O una toalla, estoy bien con cualquier que parezca menos sospechoso

Mugs aún estaba muy confundido pero no se negó a su pedido, se levantó y buscó en los cajones y le dio lo que pidió observando como ahora tapaba todo mientras trataba de darle forma de algo menos... sospechoso

-Haces esto por Ben ¿No? Te prometo que no sacaré más cosas de tu cuarto si eso te mejora el ánimo- Le habló ahora sentado en la cama al ya no soportar estar más tiempo arrodillado sin sentido

-Ummm... ¿Tal vez?- Después de todo ese tiempo finalmente salió de su escondite y se puso de pie haciendo sonar su espalda por pasar demasiado tiempo ahí- Eso dolió...como decía, he pensando limpiar mi lado del cuarto, ya le hacía falta ¿No? Así que no pienses mucho en... "Ben", él no tiene que ver nada con esto

-No creo que entre los significados de limpiar incluyan hacer un montículo de objetos y enterrarlos en la esquina de tu cama- Le mencionó con una sonrisa divertida por ese hecho

-Cada quién tiene su propio significado, solo mira. Ahora mismo está todo limpio y impecable, hasta yo mismo me sorprendo- Señaló su lado de la habitación con orgullo

-Sigo pensando que es por tu amigo, desde ayer que lo conocí has estado volviendo a tus actos extraños, no quiero pensar que estás perdiendo las pocas neuronas que te quedan Cups-

-Claro que no, nosotros no tenemos esa clase de biología-El contrario alzó su ceja, dándose a entender de una mejor forma- Lo que quiero decir es que voy a estar bien, solo estoy haciendo esto por limpieza y...-Su ánimo cambio a uno más incómodo mirando para un lado con desínteres, su hermano no iba a dejarlo tranquilo al menos que...- porque no me gustaría que Ben venga a mi cuarto y se de cuenta de la persona que soy...-

-Eso suena más realista- Se le veía satisfecho con esa respuesta y con ese ánimo se dirigió hacia la puerta- Ahora no perdamos el tiempo y vamos a comer que en unas horas Kettle estará otra vez con nosotros, me muero por presentarle tu nuevo amigo, sé que se llevarán muy bien. Quién sabe, hasta tal vez le cuente más sucesos de los que yo podría-

-Les pediría que no lo hagan, por favor-Sus palabras fueron directas y neutras para que sepa que lo decía en serio-

-Sí, sí claro. Solo baja, tal vez un buen desayuno te ayude ¡Nos vemos abajo hermano!- Despareció de su mirada en cuanto completó sus palabras

Cuando supo que estaba lo suficientemente lejos la taza roja empezó a buscar entre los objetos del cajón de su hermano, si notaba la ausencia de alguno lo negaría probablemente, pero en su defensa, lo necesitaba.

Enredado entre otros más, estaba un rosario y después de una exhaustiva búsqueda encontró una cruz. De seguro lo llamarían infantil por seguir creyendo lo que veía en televisión, estas cosas supuestamente deberían ser suficientes para alejar al demonio o darle alguna clase de pesar o dolor al acercarse.

Mugs siempre tenía algunos, no porque sea religioso, la razón era que hace tiempo antes de la aventura que tuvieron y apostar sus almas, a veces les llegaban invitaciones para ir a alguna festividad de esta clase.

Al tratarse de varios reinos con variedad de especies este tema era muy amplio, muchos  alababan o seguían las creencias de cierto ser superior distinto al que otros podrían creer, pero de lo que estaban seguros es que había algo arriba de sus cabezas que los cuidaban o guiaban para no acabar en las garras de Devil y era aquel que guiaba a los ángeles.

En el caso de la familia de tazas, ellos no seguían a alguien a tal punto de asistir mucho a los templos que hacían en sus honores, solo lo hacían a veces por obligación o por mero respeto, como era el caso de funerales, bautizos, etc.

En esos casos Mugs era el que se quedaba la mayoría del tiempo para la ceremonia y por eso le daban cosas como esta para apoyarla como los demás creyentes, en cambio Cups mayormente llegaba tarde con alguna excusa sin recibir nada.

Ahí la razón.

Así que con los objetos volvió al misterioso lado debajo de su cama y los colocó justos abajo, casi rodeando la frazada que su hermano le había pasado.

Como le había dicho era por seguridad, ahora que ese demonio podía entrar y él no debía negarse, tenía en cuenta que en algún momento se vería en la desagradable situación de que vea sus objetos más preciados o que guardaban un secreto que solo su hermano conocía pero sabía que sería incapaz de contarlos sin importar cuanta confianza tuvieran, cosas de hermanos.

Se negaba a que esto pasara y no hiciera algo antes, por lo que los ocultó lo mejor que pudo y una vez listo, finalmente bajo al primer piso para estar con el antes nombrado.

Como el día de ayer, volvió a colocar alguna galletas en un plato, además de dos tazas con té. Tal vez no era lo que muchos llamarían un desayuno completo, pero tampoco es como si lo necesitaran.

Nisiquiera sabían como funcionaba 100% su anatomía ¿Que esperaban?

Como Mugs fue el primero en llegar, también fue el que terminó más antes.

Como había mencionado el día anterior solo se había quedado esa vez con la esperanza que Kettle regresaría el día presente, ya no era necesario que se quedara, así que, como lo hizo las veces anteriores se despidió de su hermano y se fue sin decir más.

Cuphead estaba tranquilo, siguió tomando su té y comiendo algunas galletas, aunque estas últimas solo fueron un par y después las dejó a un lado, tenerlas de desayuno, almuerzo y cena 3 días seguidos le estaba afectando.

Mientras tomaba un sorbo, escuchó como una vez más tocaban la puerta

-"¡Cup! ¡Cup!" He regresadoooo- Parecía que lo estaba cantando o una clase de juego

La taza estaba confundido así que miró el reloj, dándose cuenta que recién era las 8 de la mañana ¿Que estaba haciendo aquí a esa hora? 

Tampoco era como si se tratara de otra persona, no había nadie más con esa voz, ese humor extraño y con molestos comentarios que "Bendy" se dignaba a decir, era algo muy distinto y ya estaba empezando a notar la diferencia obvia entre el diablillo y un mortal.

Como fue en un inicio se acerco a la puerta aunque ya no con tanto miedo, para así escuchar su voz más clara y estar seguro de sus suposiciones.

-¿Bendy?... Ese tu nombre ¿Verdad?- Se apegó lo suficiente a esta para estar seguro de que lo estuviera escuchando

-Wow, es un milagro que te hayas acordado, sniff no sabes lo orgulloso que me siento, voy a llorar de alegría- Expresó con burla mientras hacia el ademán de estar llorando

-No se supone que debas estar aquí, es muy temprano- Abrió ligeramente la puerta para ver afuera solo unos centímetros, aún no se sentía listo para verlo cara a cara totalmente o estar tan cerca

El diablillo entendió su temor con ese acto, así que retrocedió lo suficiente para estar a una distancia considerable como el día que hicieron el trato- Pues, no veo el porque no. Tu hermano no está, tu abuelo tampoco y la posibilidad de que te quedes solo todo el día es muy alta

Cuando vio que el peligro se alejó finalmente abrió totalmente la puerta que los separaba viéndolo una vez más, no tenía el disfraz de ayer, eso quería decir que...- Vamosw a ir al casino si no me equivoco

-Eso mismo. La anterior vez no hiciste nada, eso si que me decepciono, por lo que ahora tengo otro trabajo para tí ANTES que lo preguntes, no tendrás que acercarte ni nada por el estilo, es algo que tu sabes hacer muy bien, lo prometo- Se alejó más con tal de que saliera completamente de su hogar y vayan al lugar predicho

-...Solo serán unas horas... dí que sí y acepto-

-¿Unas horas? Si sabes que el casino necesita toda la ayuda posible ¿No?- Parecía un poco fastidiado por esas palabras- Además que no es como si hubiera algo importante hoy-

La taza no sabía si el demonio conocía sobre la llegada de Kettle, de no ser el caso, no quería decírselo para no ponerlo en un posible peligro que incluya mandarlo más lejos, así que se le ocurrió otra cosa- Es que no sé si mi hermano va a llegar más temprano, los problemas se han apasiaguado

-En todo caso no te preocupes, te aseguro que no va a volver a casa hasta tarde. Hubo un cierto... percanse con robots, ejem, uno se va a salir de control en...- Miró su muñeca como si hubiera reloj, aunque a simple vista no se veía nada- 1 hora

-Tu... ¿Dañaste un robot?- Más que pánico parecía duda. Uno de los pocos que los creaban eran esos científicos locos, pero como su nombre decía, estaban tan dementes que serían capaces de matar a quién se metiera con sus preciadas máquinas, tenían sensores para todo por su gran inteligencia siendo imposible acercarse desapercibido

-Pues claro, solo fueron unos cuantos cables por aquí y otros por allá... nada grave. Tu hermano va a estar bien, hace mucho también vencieron a uno más fuerte, este será pan comido y créeme que va a demorar mucho ahí. Sin contar que al parecer no fui el único que intentó sabotearlos-

-Voy a adivinar... culpaste a alguien más- Ahora se le notaba nervioso, se suponíe que él debia de estar con su hermano y si sabía el problema con la verdadera razón del caos que se iba a desatar ayudarlo. Ahora se sentía un complice al mantenerse en silencio. Adios al pensamiento de ser un héroe

-¿Tal vez? Era necesario. Ahora dejemos de perder el tiempo y vámonos antes de que se nos haga tarde y no vuelvas a hacer nada. No quiero que ese sacrificio que hice sea en vano-

-...-

-Y vámonosss- Empezó a caminar ignorando el silencio de la taza, ya había planificado que esto pasaría, por lo que no se le hizo ninguna sorpresa-

Tal y como lo había pensado, Cups lo siguió nuevamente, al ya conocerse el camino no se perdió y tampoco encontraron obstáculos, por lo que llegaron notablemente rápido, no hubo conversaciones como de costumbre pero al menos ya no se sentía el ambiente pesado al ya tener la idea de como sería.

Llegaron al objetivo, como siempre destruido aunque un poco limpio en la entrada, afuera casi al lado de las gradas donde solía haber una alfombra roja, ahora se encontraban enormes cantidades de materiales de construcción, a Cups no le sorprendió después de ver lo que pasó la última vez.

Aún alejado del demonio dio inicio a la duda que tenía.

-Ahora dime ¿Cuál es esa increíble acción que ahora haré para ayudarte?- 

-Pues, una cosa es segura. No vas a limpiar más con la escoba que das asco con eso. Solo haz lo que acostumbras. Destruir todo a tu paso- El demonio fue el que tomó la escoba y se dirigió a la entrada para completar su deber- Recuerda solo pulverizar los escombros de gran tamaño ¿Sí? Ni se te ocurra golpear una pared o algo, lo haces y lo notaré-

-Destruir... escombros... esto me suena mucho ¿Nos estuviste espiando?-

-No es mi culpa que ciertas tazas decidieran jugar al escondite cerca de aquí, ahora solo haz lo que te pedí antes de que me arrepienta más de tener que buscar ayuda tuya-

Bendy se metió a lo profundo del casino siendo rodeado por la oscuridad, una vez se aseguró de que no estaba cerca, la taza roja empezó con su trabajo sacando todas las rocas en su camino como consecuencia del derrumbe.

Su mente divagaba en Kettle, en sí ya estaba en casa o si iba a demorarse más tiempo de lo acordado, le gustaría que fuera lo último, solo esta vez.

-Y listo...-

La taza sacó un rastro de sudor de su rostro observando todo el entorno, ahora se podía caminar con normalidad como antes gracias a su exhaustiva limpieza, estaba orgulloso de si mismo ya que se aseguró de que no quedará algo no agradable a la vista.

Quería saber que hora era, pero no había ni un reloj cerca, la entrada la había dejado tapada con la rocas. No quería que si llegara a destruirla alguien lo notara y lo viera desde afuera con eso pasaría a ser titularlo como un traidor. 

Por el momento estaba bien con que nadie supiera nada, desde que empezó a estar con Bends, se sentía peor consigo mismo, en esos momentos presentía que si llegaran a dejarle salir a las calles nuevamente, no iba a ser capaz de ver a todos de la misma forma.

Estaba ayudando a un demonio para que el diablo vuelva, eso no tendría perdón. Ni de Dios, sin importar el contexto con el que lo hacía, ahí sin duda sería odiado totalmente.

-(¿Por qué siempre me tengo que meter en estos problema?)- Pensó para sí mientras sus caminaba hacia la entrada del casino donde se suponía que debía estar su compañero

Ya había terminado su parte y esperaba que fuera el único trabajo por hoy.

Cuando entró, todo estaba oscuro como de costumbre al no tener conexión elétrica, lo cual hizo más difícil hallar su objetivo, por no decir que casi le daba un paro cardiaco.

-¡¡AHH!! ¿¡QUE ES ESA COSA?!- Señaló lo que parecía una criatura en el techo de cabeza tratando de limpiar algunas telarañas

-¡¡AHHH!! ¿¡¡PORQUÉ GRITAS!!?-  El ser giró la cabeza dándose a ver el típico diablillo que conocía

-Espera... ¿Bendy? ¿Cómo llegaste allá arriba...?- Se cuestionó ya que estaba a varios metros del suelo, no se le veía con ninguna cuerda o artilugio para agarrarse de esa manera- ¿Puedes trepar muros?

-¡Claro que soy yo, cabeza de taza! ¿Quién más va a estar aquí? ¿¡EH?!- Agito un brazo como queja, mientras que su otra mano seguía pegada fuertemente al techo- Claro que no puedo trepar muros ¿Tengo cara de araña?

-¿Es otra mentira?- 

-¡Claro que no! Simplemente estoy aprovechando que es madera para agarrarme de ella - Ahora levantó ambas manos- ¿Ves? Espera... ¡¡AHHH!!

Pasó demasiado rápido, en cuanto despegó su mano su cuerpo también lo hizo, como si un supuesto pegamiento hubiera perdido sus propiedades el demonio cayó a gran velocidad y se golpeó fuertemente el suelo.

Lo último que se escuchó fue como si un globo de agua se reventara y entonces una gran mancha de tinta estaba en medio de todo junto con la corbata de moño que poseía.

Cups solo retrocedió lentamente, no sabía que hacer en esos momentos. El demonio siempre regresaba, aunque no se creía listo para ver su método teniendo en cuenta como otros lo hacían.

Como si tuviera vida, todo el líquido oscuro empezó a moverse hasta el centro, donde empezó a formarse una masa que lentamente se transformó el cuerpo, lo primero que se vio fueron los ojos y la boca aunque un tanto deformes.

Aún así fue aprovechado por el contrario al ya tener esas partes de su cuerpo.

-¿¡CóMo te atRevEs!? ¡NiSiquIera intenTaste HacEr AlgO para impedir mi desgracia!-

La taza lo miró de manera extraña, era como hablar con alguien nuevo por las característica y el cambio de voz que trataba de modularse, aunque rapidamente fue recuperado-  Yo no fuí el que se soltó de lo único que me matendría arriba-

El cuerpo de Bendy ya estaba completo, así que se levantó y se dirigió hacia un lado en el que estabas sus guantes- ¿Ahora como se supone que vuelva a subir? ¿Sabes lo difícil que fue conseguir eso sin lastimar mucho el techo?

La taza no le siguió la conversación, se le veía frustrado y no quería hacerlo el también, por lo que se matuvo a su distancia aún tranquilo, cada vez que se dejaba llevar demasiado por sus sentimientos empeoraba las cosas, así que lo tomó como la mejor opción.

Justo en el área que había caído estaba aún la corbata de moño, por lo que se dirigió hacia ella, dudando sobre si agarrarla o no. 

Pero finalmente lo hizo al tener en cuenta que Bends parecía ser capaz de enojarse más con él si no hacía algo pronto, se sentía obligado a hacer algo para no tenerlo nuevamente de mal humor, la última vez fue a su casa y ya lo veía haciendo otro plan si veía que esto no estaba funcionando.

Para su suerte no sintió que nada cambió, tampoco una energía extraña o algo por el estilo. Solo era eso, un objetivo común y corriente hecho de tela.

-Oye... Te estás olvidando de esto- Captó la mirada del demonio y alzó el objeto para que lo vea-

-Oh- Tocó debajo de su cabeza donde debería estar su cuello dándose cuenta que tenía razón- Finalmente haz decidido hacer algo bien... ahora dámelo- Estiró sus manos con tal de que Cups se lo lanzara

Eso fue lo hizo, observando como se lo ponía de una manera que quedaba flotando basicamente en el aire, no entendía que sentido tenía pero tampoco lo busco, así de extraño era Inkwell.

-Muchas gracias, pero esto no quita el hecho de que ¡Literalmente! ¡Me impediste terminar con esta parte del techo!- Aún seguía molesto, pero al menos no hubo una amenaza de por medio- Mañana_misma hora _aquí.Vas tener un trabajo extra ¿Entendiste?-

-¿Ok?...- Cups no entendía lo que pasaba, sentía que se había calmado demasiado rápido. Era como si tuviera más paciencia que antes, lo cual fue extraño sentir y... sospechoso-

-¿Por qué retrocedes?- Giro a verlo al escuchar algo raspando el suelo

-Nada... ¿Puedo irme?-

-Si ya terminaste lo de afuera, podemos irnos- El diablillo se volvió líquido avanzando hacia adelante manteniendo el espacio con la taza - Aunque no veo cual es la necesidad de que quieras terminar tan temprano. Sabes que no va a ver nadie ahí ¿No?

-Lo sé... pero como dije es para prevenir- Caminó detrás del diablillo en cuanto empezaron a avanzar. Ambos traspasaron la entrada aún cubierta de rocas con sus habilidades y continuaron

-Aún sigo repitiendo que ahí no va a ver ni una sola alma solo para que lo sepas-

-Hay posibilidades- No estaba muy acostumbrado a hablar entre sí mientras caminaban, era algo nuevo. Por lo que así como empezó, terminó con un último comentario del de cuernos.

-Solo quiero asegurarme que vas a continuar con tu parte del trato y no te vas a distraer como hoy, ya sabes lo que pasará si no sigues el acuerdo. Y que hasta el momento no he roto el trato que tenemos, por lo que tu familia sigue bien y por eso es que tu debes de completar con la tarea predicha. Te lo menciono porque desde mañana todo se va a volver más pesado ¿Entendiste?-

Atrás suyo Cuphead asintió con la cabeza aún siguiéndole los pasos.

Llegó y como dijo el demonio, no había nadie. Lo cual fue una sorpresa, pero las probabilidades de que fuera una demora también eran altas, desde todo esto que pasaba todo fue perdiendo sentido y complicando muchas acciones en diferentes ámbitos.

Aún se matenía tranquilo, hasta que empezó a anochecer. Su hermano tampoco llegaba, así que no tuvo de otra que empezar a comer las galletas que dejó del desayuno.

Estaba cansado pero seguía esperando al abuelo. Fue el momento en el que la puerta se abrió cuando recuperó sus sentidos después de casi caer dormido en la mesa.

Pero del otro lado solo estaba Mugs, unas partes de su cabeza estaban rotas y algunas manchas de gasolina pintaban sus prendas, cerró la puerta detrás suyo, también parecía cansado y triste, se sentó en la mesa cabizbajo sin dirigirle la mirada.

-¿Mugman? ¿Estás bien?-

- No..., por esta vez no Cups... El abuelo no va a venir hoy y no sé cuando lo hará-

-¿Mandó una carta o algo así?- Pensó en las razones de su acción-

-No, pero me gustaría que si lo hubiera hecho- Suspiró mirando finalmente al contrario- El barco en el que iba Kettle, está perdido-

-...¿Que?...-

-Fui a buscarlo en la orilla del mar pero no venía su embarcación, le pregunté a los demás que también estaban esperando como yo, pero nadie sabía nada - Su voz empezó a recortarse- De repente alguien con un megáfono nos dijo que ese barco está perdido, ya que no han recibido noticias y nisiquiera se ha confirmado que llegó a su destino...-

-Podrían estar en medio del mar hace días....-

-Si ese es el caso, no sé que esperar, dicen que algunos ya fueron en su búsqueda pero no encontraron nada... Kettle tal vez esté...- Una gota chocó con la madera de la mesa Cups se dio cuenta que la taza azul estaba llorando-

Cups fue hacia él y lo abrazó como pudo, antes de que Mugs lo hiciera de igual forma con todas sus fuerzas, sintiendo como la humedad se acumulaba en su hombro.

La taza roja aún seguía en shock por la noticia, no lograba razonar lo que acababa de oír, las cosas no deberían de ir por ese rumbo, mientras más lo pensaba más de ese líquido se acumulaba en sus ojos hasta finalmente caer por sus mejillas.

Tomó fuertemente a Mugman entre sus brazos, queriendo que fuera solo una ilusión, que el abuelo llegó a casa a salvo y que en unos segundos vendría para preguntarles porque estaban tan tristes y les prepararía chocolate caliente.

Pero nadie vino.

Continuará---

Dudas----

Un gusto mis pesadillas, aquí Natura reportándose.

Vaya capítulo ¿No?

¿Que creen que pasó con Kettle? 

¿Ven a Bendy capaz de hacer algo hasta ese punto? o ¿Siquiera tuvo algo que ver?

No tengo ninguna noticia hoy, ni comentario. Solo que ya estoy en vacaciones de mitad de año... casi, así que eso me dio el tiempo y tranquilidad que necesitaba. Por lo cual finalmente puedo dibujar al Cuphead y Bendy después de todo este tiempo.

Sin más que decir, nos vemos mis pesadillas.