Todo estaba ocurriendo con total normalidad, la noticia del futuro bebé para el matrimonio fue tomada de buena manera. Fue al médico al día siguiente de la prueba para no tener ninguna duda, aquella mañana la pareja estaba temprano con una sonrisa recibiendo al rubio para poder mínimo ver alguna manchita de vida.

La revisión se dio con esa misma felicidad de las parejas que acudían a él, emocionados por ver solo esa pantalla en blanco y negro. El doctor explicaba cada uno de los estudios que hacía mientras Jisung solo miraba a cualquier otro lugar, siempre se sentía nervioso en revisiones así y no le gustaba mirar la pantalla de la ecografía. Después de unos largos minutos de presentación y confirmar que todo iba bien llegaba la hora de imprimir los resultados y que la pareja pueda irse feliz a casa.

-¿Así que tu siguiente revisión será una semana después que se cumpla el trimestre?- preguntó el alfa tomando la mano de su esposa.

-Sí, siempre es en la mañana así que estaré avisando eso con una semana de anticipación- Jisung sonrió.

La omega bonita entregó un sobre al rubio -Es algo de dinero para puedas pagar las vitaminas y algunas cosas.

Jisung agradeció aceptando el sobre sin ver el contenido pero podría adivinar cuando más o menos sería.

-Por favor no dudes en llamarnos si te falta o te sucede algo ¿si?.

Y fue así como la pareja se iba mirando aquella foto de la ecografía. El omega suspiró para después meter el sobre en el bolsillo de su chaqueta e irse, estaba pensando en cómo serían las siguientes semanas, los embarazos anteriores nunca fueron tan buenos durante los primeros meses, el malestar era terrible.
Felix a veces venía a verlo porque sabía como se sentía su amigo y la madre de Jisung también se compadeció a veces llegando a cocinar algo durante esas semanas no sin antes siempre darle un sermón y pedirle que parara con eso.

El abdomen plano del rubio se hacía más duro pero sin algún indicio de crecimiento, con los 3 meses completos Jisung estaba coordinando todo para la siguiente cita médica, la pareja tenía más probabilidades que ver solo un punto blanco esta vez. El día de su cita médica llegó y mientras estaba en el taxi mandando un mensaje a un cliente que requería de sus servicios como diseñador, otro mensaje apareció en sus notificaciones.

"<Joven Minho>
Lo siento Jisung, estoy tratando un asunto importante ahora y no podré ir a la cita médica pero esta es mi dirección, puedes dejarlo"

Jisung frunció el ceño, era la primera vez que esto sucedía, no entendía bien que era tan urgente pero no podía culparlos, eran una pareja con una vida más ocupada que las que llegaron a él por lo que esta vez le tocaba ir solo.

-Es raro verte sin alguno de tus clientes- mencionó el doctor mientras levantaba la camiseta de Jisung y colocar el líquido.

-Creo que están muy ocupados, son una pareja con trabajos más agotados.

-Eso supuse, recordé ver a esa mujer en un anuncio publicitario de una clínica dental.

La revisión ocurrió como siempre, Jisung se mostró distraído y preguntando lo básico que las parejas hacían para poder responder las dudas que tendría el matrimonio.

-¿cuántas fotos deseas?-

-Dos de cada uno estaría bien-

Mientras las imágenes salían de la máquina y Jisung se limpiaba el gel del estómago, el médico solo se quedó observándolo por unos segundos.

-Espero algún día atender un embarazo tuyo, el tiempo pasa muy rápido.

Las palabras hicieron que el rubio se incomodara e intentó sonreír en lo que tomaba las fotos y se despedía del médico.
Debía pedir un taxi hasta el lugar, la casa se encontraba a unos 45 minutos en una de las zonas más lujosas de Seúl, la primera pareja que acudió a él vivía por ese tipo de calles, todas con una estructura tan bonita.

Cuando había llegado se quedó con la boca abierta mientras miraba la estructura que tenía al frente, era bellísima, con un pequeño jardín al frente y decorada como si fuera un lugar de hadas además de un auto rojo moderno estacionado afuera. Jisung estaba pensando en si podría dejar las fotos en el buzón de voz pero quizás la pareja necesitaba saber algo de información por lo que con toda la confianza del mundo empujo ligeramente una de las puertas dándose cuenta que estaba abierto. Camino con timidez hasta la entrada principal a aquella casa colocando un dedo cerca del timbre pero sus oídos podían captar voces fuertes dentro de la casa y no parecían felices. Trago saliva volviendo a poner un dedo en aquel timbre cuando la puerta se abrió de manera abrupta viendo a la mujer con un rostro arruinado por el llanto y un alfa enojado.

-Ah... yo vine por...- Jisung algo nervioso sin entender.

La mujer dio media vuelta para mirar a su pareja pero este solo le lanzó una mirada más molesta.

-¡Adiós!- Gritó señalándo la puerta.

La escena parecía crítica, la modelo salió llorando rumbo al auto y desapareciendo de aquella casa mientras dejaba a una persona confundida y a otro super enojado.

-Creo que debería venir en otro momento-

-¡No!- El alfa intentó calmarse mientras controlaba su respiración -¿Has traído las fotos verdad? Quiero verlas-

Jisung bajó un poco la mirada ingresando despacio a la casa sin cerrar por completo la puerta. Adentro el lugar era magnífico pero con algunas cosas destruidas en el suelo, especialmente un gran cuadro de la pareja. Con algo de miedo el rubio entregó el sobre para aquel pelimarron y esperó a que observe las imágenes, sin embargo lo que no esperó es que el alfa derrame algunas lágrimas.

El omega no entendía nada y estaba preocupado pero a la vez no sabía si era de su incumbencia preguntar en estos momentos. Solo estaba de pie observando a un alfa desmoronarse, Jisung necesitaba distraerse mirando por todos los lugares y sus ojos encontraron fotos derramadas en el suelo, una imagen donde se apreciaba a la bella modelo en brazos de alguien diferente a su esposo.

-Ella me engañó.

La confesión fue soltada sin previo aviso dejando a Jisung sorprendido.

-Tuve mis sospechas por un tiempo pero me negué completamente, especialmente cuando ella accedió a buscarte para que ayudes a que tengamos una familia.

Las fotos eran evidentes, Jisung solo observó dos de ellas para darse cuenta que el alfa apuesto que estaba con aquella mujer no era el chef famoso que tenía al frente. Un ligero recuerdo paso por su mente haciendo que la sangre le corra con más fuerza, si algo no puede tolerar en su vida es el engaño, conocía en carne propia eso que sientes cuando alguien traiciona tu confianza y destruye una relación.

-Lo siento mucho Jisung, debes sentirte decepcionado de esto pero no te preocupes. Yo prometo seguir pagando todo lo que necesites y haré todo lo posible para que ese cachorro quede bajo mi custodia.

Jisung se acomodó el cabello, un tic que tenía cuando los nervios se apretaban de él. En definitiva esta sería la última vez que hace un trabajo así, no le agradaba la idea de dejar a un bebé en una familia monoparental.

-Supongo que no puedo hacer nada, entiendo completamente tu molestia y estas en todo el derecho, es solo que hubiera preferido una familia completa para él o ella.

-No le faltará nada, tendrá todo lo que necesite y el amor que desea.

El rubio asintió bajando la mirada para pensarlo por unos segundos antes de abandonar el lugar.

-Supongo que me tendré que comunicar contigo desde ahora ¿verdad?.

-Ire a todas tus citas médicas, pagaré lo que necesites, pero por favor déjame esperar por ese cachorro.

Y al omega no le quedó más remedio que asentir dejando por fin aquella casa mientras sentía compasión de aquel alfa. Tener un corazón roto es una de las peores cosas que alguien puede sentir.