-02-
Nakajima Atsushi e Izumi Kyouka estaban en su casa, no tuvo otra opción más que dejarlos entrar.
—¿Aún no tiene noticias de Ranpo-san? —pregunto el albino levantando su ceja. Con una expresión preocupada.
—No... No he sabido nada de Ranpo. —dijo con firmeza, aunque sabía que su expresión nerviosa lo delataba.
—Espero que Ranpo-san regrese pronto, yo, aún tengo esperanza...
La niña Kyouka permanecía callada, ella sabía algo y él estaba seguro de ello. Solo esperaban a qué él confesara. Pero no lo haría, no confesaria su crimen por nada del mundo. Sólo él y el gato sabían lo que ocurrió.
—Bueno, al menos aquí hay alguien que se preocupa por mí.
Volteo con susto al reconocer esa voz que le reclamaba, vio a Ranpo sentado en su sofá.
—¡Poe-san! —exclamo Atsushi, volteando a ver a Ranpo que balanceaba las piernas sonriendo sin abrir los ojos—. No sabía que usted había adoptado a un gato.
Parpadeó múltiples veces, solo para ver a Atsushi jugando con ese gato negro.
—Él llegó aquí ayer...
—Es un muy lindo gatito, cuidelo mucho Poe-san, a Ranpo-san le agradará saber que tienen un nuevo integrante en su familia.
Ese gato había lamido la sangre de Ranpo en sus manos, era su cómplice y sabía lo que había hecho. Claramente era un integrante más de su familia, una familia de asesinos.
—Lo haré...
—Bueno Poe-san lo dejamos, debemos cumplir con nuestro trabajo y seguir buscando a Ranpo-san
El escritor solo asintió, y encamino a los detectives a la puerta, ahora sí podía irse a dormir, luego de que su mente confundiera al felino con su prometido sabía que necesitaba unas buenas horas de descanso.
Cuando llegó a su habitación y se recostó en la cama supo que debajo suyo estaba el detective al que buscaban Atsushi y Kyouka, cerro los ojos con fuerza y comenzó a llorar, hasta que finalmente termino por rendirse ante el sueño, con su cómplice felino recostado sobre su pecho, lamiendo sus saladas lágrimas.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro