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Su mirada se mantenía fija en el cielo nocturno, detallando profundamente cada estrella que brillaba en lo alto.

Necesitaba distraer su mente, miles de pensamientos lo habían estado atormentando durante las últimas horas, causándole una molesta sensación de ansiedad y miedo. Quiso enfocarse en el presente, en el momento que estaba viviendo justo ahora y salir de su cabeza de una vez por todas.

Observar el cielo le había ayudado a que sus manos dejaran de temblar y que aquella opresión en su pecho se desvaneciera, sin embargo los pensamientos intrusivos seguían colándose a su mente, haciéndole más complicado el relajarse por completo.

Se sentía así desde la noche anterior, la idea de tener una cita con Jimin lo aterraba de muchas formas. Por un lado se sentía nervioso, ilusionado y deseoso de que el plan funcionara y las cosas comenzarán a marchar por el camino correcto y por otro lado, los pensamientos negativos y los miedos le hicieron pensar en las múltiples posibilidades que habían de que todo finalmente terminará al no funcionar.

Siempre tuvo esa mala costumbre de sobre pensar todo, intento superarlo, pero esto empeoró a sus diecinueve y por más mínimo  que fuera cualquier asunto, él solía darle mil vueltas y  hacerse mil ideas, especialmente con situaciones como esa.

El sonido de tres suaves golpes en la ventana lo hicieron voltear rápidamente, conectando su mirada de forma inmediata con la de Jimin.

Solo basto una mirada para sentirse tranquilo, el azul de sus ojos calmo su corazón y callo las voces negativas que lo tenían al borde del colapso.

En segundos se encontraba junto a Jimin, abriendo la puerta para él.

—Lo lamento, estaba algo distraído

—Lo pude notar —Jimin dejo escapar una suave risa para luego subirse al auto, espero a que el pelinegro hiciera lo mismo para volver a hablar–. Lamento haber tardado, a última hora mis padres me pidieron que les hiciera el favor de ir a ver flores con mi hermana y termine llegando tarde a casa

Que casualidad. Pensó Jungkook, intentando con todas sus fuerzas no demostrar cuanto le molestaba ese tipo de actos. Las intenciones de los padres de Jimin era demasiado obvias, lo quería alejar a toda costa de su esposo.

—No te preocupes, lo entiendo. Deben estar muy ocupados con los últimos preparativos de la boda

—Demasiado, mi hermana quiere que todo salga perfecto —Jimin abrocho su cinturón de seguridad y miro a Jungkook, sintiendo una extraña sensación invadirlo. Frunció el ceño confuso y rápidamente desvío la mirada—. ¿A donde iremos?

—Te llevaré a cenar, he encontrado un restaurante con una vista maravillosa —Sonrió de lado, comenzando a conducir—. Luego podríamos ir a caminar junto al lago o si gustas ir al cine

—Me encantaría ir al lago, siempre he disfrutado de la naturaleza

—Perfecto —Sonrió, fingiendo no conocer aquel dato. Esa noche haría las cosas diferentes, se olvidaría por completo del accidente y todo lo ocurrido años antes, él pretendería que está realmente era su primer cita y la disfrutaría al máximo como lo hizo años atrás.

Al llegar al restaurante Jungkook se adelanto para abrirle la puerta a Jimin y ayudarle a salir, tras tomar suavemente su brazo lo guió al restaurante.

—Espero sea de tu agrado, considere que era un lugar muy lindo —dijo, para luego tomar asiento frente a Jimin—. Me hace realmente feliz tener una cita contigo  —confesó, a pesar de que la situación no era la mejor se sentía a gusto compartiendo tiempo con su pareja. Su relación desde el día uno siempre fue maravillosa, en muy pocas ocasiones tuvieron conflictos o discusiones fuertes, y cuando sucedía se tomaban el tiempo para solucionar las cosas; ambos tenían la regla de no irse a dormir enojados. Ahora que las cosas habían cambiado y debían empezar literalmente de cero, él se esforzaría el doble para hacer que las cosas funcionarán igual de bien.

Jimin sonrió de lado, mostrándose tímido y ligeramente avergonzado.

—Me encanta el lugar, parece que estamos en una cabaña en medio del bosque —su mirada recorrió el lugar, detallando cada pequeño objeto—. Me encanta, muchas gracias por traerme aquí Jungkook —su mirada está vez se enfocó en el pelinegro–. Es lindo todo esto, todo lo que haces por mí realmente me hace sentir bien y estoy agradecido contigo

—No tienes porque agradecer —se encogió de hombros—. Solo deseo poder conocerte y dejar que las cosas fluyan entre nosotros de forma natural, sin forzar nada. Solo...dejemos que nuestros corazones nos guíen por el camino correcto, estoy seguro que el destino sabe como hacer las cosas y si tú y yo debemos estar juntos así será

—¿Y si no? —Su ceño se frunció levemente ante el pensamiento–. ¿Que pasará si esto no funciona?

La pregunta revolvió ligeramente su estómago, siempre había la opción de que las cosas no volvieran a ser como antes y todo terminará, pero se negaba a aceptarlo y no deseaba volver a sobre pensar en que pasaría si eso sucedía.

—Si no...—levantó su mirada, apreciando con detalle el rostro de Jimin– te dejaré ir y ambos seguiremos con nuestras vidas

Jimin permaneció en silencio por varios segundos hasta soltar un fuerte suspiro y tomar la carta.

—De acuerdo, dejemos ese tema de lado, creo que no aporta nada a nuestra cena —soltó una pequeña risita, intentando que el ambiente no se tornará incómodo—. Y bien Jungkook ¿Que vas a ordenar?

Ignorando aquel sentimiento de miedo en su pecho, decidió sonreír y seguir disfrutando.

—Déjame decirte que soy un gran fanático de las brochetas de cordero y del Bulgogi —contó, con una pequeña sonrisa—. Solo de pensarlo ya estoy babeando —lamio sus labios de forma graciosa, haciendo reír de inmediato al contrario.

—Oh, así que tanto te gusta —observó de vuelta la carta, leyendo cada uno de los platillos—. Creo que pediré un plato de Bibimbap y puede que te robe un poco de tus brochetas

—No será necesario que lo robes, con gusto te compartiré –sonrió, tras pedir sus respectivos platillos se sumergieron en un cómodo silencio, mientras observaban a lo lejos el lago; el cual brillaba por la luz de la luna.

—Me gustaría saber más de ti

Hablo repentinamente el rubio, aún sin despegar su mirada del paisaje. Jungkook por el contrario volvió a mirarlo, aquello le había recordado realmente a su primera cita.

—¿Quieres que sea de esas personas básicas que responden a esta pregunta con su edad y lugar de nacimiento? para luego quedarse en silencio y pensar oh, ¿pero quien rayos soy?

Jimin no pudo contener la risa y volteó a verlo con diversión.

—Oh por Dios —cubrió su boca al reír, debía confesar que Jungkook era un tipo gracioso–. No, por favor ve más allá.  Si me respondes de esa forma creo que esto realmente no va a funcionar —dijo, entre suaves risas.

–Bien, sin embargo tengo que decirte que nací en el distrito Mandeok Dong en Busán, mi padre era ingeniero y mi madre doctora, sin embargo ella siempre quiso estudiar bellas artes y me educó con la ideología de luchar por mis sueños y no dejarlos tirados por el que dirán como le sucedió a ella —una pequeña mueca de tristeza se dibujó en su rostro ante el recuerdo de su madre, ella siempre se había encargado de motivarlo cuando perdía las esperanzas de estudiar producción musical.

Para Jimin no paso por desapercibido aquello y tampoco el hecho de que hablaba de sus padres en tiempo pasado. Abrió la boca para preguntar, cerrándola de inmediato, preguntaría luego.

—Desde niño sentí una gran pasión por la música, me fascinaba cantar y comencé a aprender a tocar guitarra a los nueve años. Con el tiempo este amor por la música comenzó a aumentar, cada día que pasaba tocando o cantando sentía que ese era mi único propósito en la vida; sin embargo al entrar a la secundaria mis profesores se encargaron de hacerme ver ese sueño como algo imposible

—Oh no, no me digas que eran de esos profesores que abusan de su poder y creen tener la razón en todo  —chilló Jimin, sumergido en la historia.

—Desearía decirte que no eran así pero estaría mintiendo, ellos poco a poco comenzaron a bajarme el ánimo y las ilusiones de ser productor musical. Durante un tiempo desistí por completo de la idea de estudiar lo que me apasionaba y quise estudiar arquitectura como mi padre, pero mi madre se terminó enterando de eso y me cambio de secundaria de inmediato, en esta tuve la suerte de aprender mucho más sobre las cosas que me gustaban —su corazón se encogió ante los recuerdos y la nostalgia invadió su cuerpo de inmediato, haciéndole sentir triste y sensible, hablar de ello era complicado para él—. Años más tarde, cuando llevaba tres semestres de carrera sucedió algo que me afecto demasiado —guardo silencio por un momento, reuniendo la fuerza para hablar—. Una noche mis padres habían decidido salir, hace mucho no tenían tiempo de una cita y...—se detuvo y trago grueso, sintiendo un nudo formarse en su garganta.

Jimin de inmediato tomo su mano, apretando esta con suavidad.

—Jungkook no es necesario que hables de ello, es un tema delicado y no quiero que te sientas mal solo por contarme —su mirada preocupada estudio todo el rostro del contrario, sintiéndose culpable por haberle traído malos recuerdos.

Jeon negó rápidamente y tras beber un poco de agua, respiro profundamente para recomponerse.

—No, no esta bien. Aún es algo que me cuesta hablar pero deseo que lo sepas –su cuerpo enteró se relajo al tener la pequeña mano de Jimin sosteniendolo—. Mis padres fallecieron a manos de un grupo de ladrones, les arrebataron la vida para poder llevarse el auto y...—suspiró— ese día todo cambio para mi, deje temporalmente la universidad y me hundí en una fuerte depresión de la cuál llegué a pensar que no saldría

—Lo lamento mucho, debió haber sido horrible —murmuró de forma sincera, no quería ni imaginar cuanto había sufrido Jungkook—. ¿Cómo lograste superarlo? —se atrevió a preguntar, aún sin soltar su mano. Sentía que con ello le estaba dando un poco de apoyo.

—Recordando todo lo que me decían mis padres, a pesar de que mi papá no era un gran fanático de mi carrera él siempre me apoyó y me repetía que debía ser feliz, por otro lado a mi madre le juré que seguiría mis sueños y que jamás me rendiría, pase lo que pase. Así que lo hice...—una vez más tuvo que beber agua, su garganta seguía sintiéndose apretada— seguí adelante por ellos

—Eres muy fuerte, demasiado yo...simplemente habría perdido el rumbo. Supiste seguir adelante sin importar que tan complicado fuera, realmente es algo de admirar —volvió a darle un suave apretón para luego soltar su mano—. ¿Y que paso después?

—Me fui de busán, entre a otra universidad y comencé mi vida de cero. Con el dinero que me dejaron mis padres pude subsistir por un largo tiempo, luego comencé a trabajar de medio tiempo en un estudio pequeño y simultáneamente estudiaba, solía hacerlo en cafetería ya que si te soy sincero detesto la soledad

—Y...así nos conocimos

—Si, así fue como te conocí y llegaste a darle luz a mi vida —volvió a tomar su pequeña mano—. Y no sabes lo agradecido que estoy por ello

Jimin le sonrió de forma sincera, para luego entrelazar sus dedos de forma lenta. Su corazón dejó de doler, siendo invadido por un sentimiento de tranquilidad y calma. Con Jimin en su vida todo estaba bien.

—Por favor no me lo agradezcas, me siento muy halagado y ahora que te conozco más entiendo las razones por las cuales estábamos juntos. Todo comienza a tener más sentido para mí –una vez más se soltó del agarré de Jeon, al notar que el mesero se acercaba con sus platillos—. Bien, ahora disfrutemos de esas deliciosas brochetas de cordero —dijo, haciendo reír al pelinegro.

El destino sabe como hace las cosas y solo el entiende porque pasa todo...

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Holaa mis chiquis 🤗 en este capítulo conocieron un poco más sobre la historia de Jungkook, él no ha tenido una vida fácil, sin embargo hace todo por ser feliz como le prometió a sus padres😭

Espero hayan disfrutado del capítulo, no se olviden de votar y compartir con más Jikukas ♡ por cierto, siento la tardanza jeje andaba en modo depre y sin inspiración pero aquí estoy, las amooo. No se olviden de que tengo un grupo en WhatsApp por si quieren unirse.

Hasta la próxima ♡

Atte:roxyuwu