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A excepción de días pasados, hoy se sentía de maravilla, su característica alegría estaba de vuelta y aquella pasión que le ayudaba a crear grandes canciones había regresado con más fuerza que nunca.

Las razones de su felicidad eran obvias, su cita con Jimin había resultado muy bien. Lograron platicar por horas enteras sin aburrirse y pasearon junto al lago como solían hacer en el pasado. Todo había salido increíble y eso lo llenaba de esperanza, finalmente las cosas comenzaban a acomodarse y tenía fe de que todo seguiría así.

-Veo que hoy estas de buen humor -Comentó Namjoon con una pequeña sonrisa, realmente lo tranquilizaba ver a su amigo bien después de semanas de haberlo visto tan deprimido-. ¿Sucedió algo que debo saber?

-¿Es muy obvio? -Respondió, despegando su mirada del papel por breves segundos-. La cita con Jimin salió perfecta, creí que nuestra química había cambiado pero ayer comprobé que no es así. Te juró que todo se sintió como antes, como si...-hizo una breve pausa, buscando las palabras correctas para expresar su sentir- fuéramos un rompecabezas que encaja a la perfección, me sentí tan bien a su lado -sonrió-. Hace tanto tiempo que no me sentía de esa forma

Kim observó a su amigo por un par de segundos, ligeramente pensativo.

-Me alegra mucho que te sientas feliz y... -señaló la agenda de Jeon- que estés componiendo nuevamente, la verdad necesitábamos de regreso tus letras -aclaró su garganta-. ¿Y como crees que se haya sentido Jimin?

-También me hacía mucha falta escribir, esta mañana cuando desperté sentía que me picaban las manos por plasmar mis emociones en el papel -volvió su mirada a su agenda, detallando la letra. Estaba escribiendo una canción para Jimin, la cuál deseaba cantarle pronto-. Creo que se sintió cómodo por primera vez conmigo, no hablo de sí mismo pero charlamos por horas sobre temas en común que tenemos -sonrió ante el recuerdo-. Hoy también saldremos

-¿Ah si? Creí que te quedarías en la grabación de esta tarde

Un importante grupo había apartado el estudio por una semana y las grabaciones comenzarían en pocas horas

-Me gustaría, pero es más importante Jimin. Hemos quedado en ir a la playa de busán

-¡¿irán hasta busán?! ¿En serio? -soltó con sorpresa y algo de molestia-. ¿Vas a conducir cuatro horas?

-Si, nos pareció buena idea ir y recordar los viejos tiempos -observó de reojo a su amigo, soltando una suave risa ante la cara que tenía-. No, he comprado los boletos de avión anoche

-Bien, pero recuerda que también tienes trabajo aquí Jungkook. Has estado muy ausente en el estudio y realmente te necesitamos, aceptó que faltes hoy también pero mañana te necesitamos sabes que a veces se complican las cosas -Se quejó, ligeramente indignado-. Yoongi y yo no podemos con todo el trabajo y sabes que Nayeon aún esta en proceso de aprender

Jungkook suspiró, entendía la molestia de su compañero. Desde el incidente él no había aportado mucho en el estudio, de hecho le sorprendía recibir aún gran parte de las ganancias después de que había estado trabajando como mucho dos horas al día.

-Lo sé y lo siento por estar tan ausente últimamente, sabes que amo nuestro trabajo pero Jimin es más importante que cualquier otra cosa. Créeme que no me importaría perder el trabajo pero si lo pierdo a él...-hizo una mueca- yo no podría ¿entiendes?

-Lo entiendo y es por eso que hemos permitido que faltes, pero las grabaciones de esta semana son realmente importantes -dejo su bolígrafo a un lado, girando completamente su cuerpo en dirección a Jungkook-. Los artistas vienen a este estudio por la fama que hemos logrado los tres y si falta uno no seria lo mismo, te necesitó enfocado en esto también

-Lo sé, prometo que volveré mañana antes de las doce -su mirada se desvío hasta el reloj que se encontraba en la pared; eran poco más de las nueve de la mañana-. Uhm, de hecho ya tengo que irme

-De acuerdo -soltó un fuerte suspiro el cuál parecía mas un chillido exasperado-. Espero que te vaya bien, por favor se puntual mañana ¿si?

-Gracias por comprender Nam -le dio un suave abrazo, para luego levantarse y comenzar a recoger sus cosas-. Lo seré, te lo prometo

Jungkook salió del estudio directamente a la casa de los Park, su avión salia a las doce y sabía muy bien lo demorado que solía ser su esposo a la hora de empacar y lo largo que era el trayecto para llegar a esa casa, por lo que deseaba ir antes para ayudarle y no retrasarse.

Al llegar le escribió un mensaje a Jimin, sin bajarse aún le auto. La verdad no quería ser recibido por el señor Park, sabía que su día se arruinaría si este abría la puerta.

Tan solo un minuto más tarde Jimin abrió la puerta, sonriendo en dirección al auto.

-Hola -saludo al tener cerca al pelinegro-. ¿Te estabas escondiendo en el auto? -se burlo, soltando una risita.

-Hola -Jungkook no podía apartar la mirada, Jimin estaba más lindo que nunca y su radiante sonrisa lo atraía como un bicho hacía la luz-. Oh no, no es eso -soltó algo avergonzado, pues realmente si se estaba escondiendo-. Solo mantengo un perfil bajo

-Si claro -volvió a reír-. Estaba por llamarte, ya tengo todo listo -señaló la pequeña maleta junto a su puerta-. Pensé que sería buena idea estar listo antes de que llegaras para evitar retrasos

Oh, eso era nuevo. No pudo evitar abrir la boca de sorpresa, sin mentir anteriormente su esposo se podía tardar todo el día empacando pues no se decidía por nada.

-No pongas esa cara de sorpresa, estuve empacando toda la madrugada -confesó-. Si empacaba hoy sería un desastre

-Eso tiene mucho más sentido para mí -comenzó a reír.

-¿Sigo tardando tanto en empacar? -soltó ahora sorprendido. Esperaba que con los años hubiera mejorado.

-Si, demasiado -Jungkook tomó la maleta de Jimin y juntos se subieron al auto-. ¿Le has avisado a tus padres?

El rubio asintió de forma rápida.

-Ahora se preocupan mucho así que debo decirles a donde iré, si no regreso en la noche se pondrán como locos

Aquello era comprensible, a pesar de que el señor y la señora Park no eran sus personas favoritas se sentía agradecido de que cuidarán a Jimin.

El viaje fue tranquilo y cómodo, pasaron el tiempo platicando y en el avión vieron una película de comedia para pasar aquella hora y media de vuelo. Al llegar al hotel cada uno se adentro a su habitación para cambiarse y dejar sus cosas, él había deseado que durmieran al menos en la misma habitación pero luego entendió que eso sería arruinar las cosas, después de todo se supone que se están empezando a conocer.

-¿Quieres ir a almorzar primero? -Preguntó Jungkook, una vez se reencontraron.

-No tengo mucha hambre, me llene con lo que nos dieron en el avión -su mirada se desvío al mar. La vista era maravillosa desde los balcones-. Me gustaría ir a la playa

-Bien, entonces vamos a la playa -sonrió y estiro su brazo para que su pareja lo tomará, por suerte lo hizo y comenzaron a avanzar con calma rumbo a la playa-. ¿Hace cuanto no visitabas busán?

-Uh, según hace dos años pero...debido a que no recuerdo los otros cinco años supongo que hace siete. Realmente no vengo muy seguido, nací aquí pero mis padres han vivido la mayoría del tiempo en las afueras de Seúl —contó—. Excepto en mi adolescencia. Mi padre trabajo aquí por un tiempo, así que solía venir

Él sabía aquel dato, pero le encantaba escuchar a Jimin hablar de ello mil veces.

-¿Y tú?...

-He perdido la cuenta pero creo que han sido ocho años, desde la pérdida de mis padres no quise volver aquí

-Ouh -se detuvo-. Espera ¿esto no te trae malos recuerdos verdad? -lo observó preocupado.

-No, no -aclaró de inmediato-. Hace mucho tenía ganas de volver y me pareció una gran idea. Si me llego a sentir mal de alguna forma te lo haré saber

Jimin suspiro aliviado y asintió, aferrándose mejor al brazo del contrario. Debía confesar que su agarre le hacía sentir tranquilo y protegido.

Al llegar a la playa caminaron con parsimonia por la orilla, sintiendo la arena colarse entre sus dedos y las olas mojar sus pies. Al encontrar una roca se sentaron, apreciando la maravillosa vista en silencio.

Ambos estaban sumidos en sus pensamientos, por un lado Jungkook recordó a sus padres y los tiempos en los cuales lo llevaban a jugar en esa playa y por otro lado Jimin no podía dejar de darle vueltas a un pensamiento y era que sentía miedo, miedo de herir a Jungkook...

-Cuando era un adolescente venía aquí cuando me sentía triste o perdido -Contó el rubio, observando fijamente las olas moverse-. No tenía amigos ni nadie con quien hablar, así que me perdía durante horas viendo al mar y preguntándole que debería hacer para sentirme feliz

Su mirada se despego del azul del mar para observar el perfil de su marido, entonces su corazón se aceleró y las mariposas comenzaron a hacerle cosquillas en el estómago. Estaba enamorado hasta los huesos de Jimin, era el hombre perfecto y desde que lo conoció cayó ante sus pies. El amor en lugar de disminuir con el tiempo crecía y crecía sin control, en ese momento pensó que no se rendiría y así las citas de esa semana no rindieran frutos él continuaría a su lado.

-¿Por qué no tenías? Eres un chico increíble, no puedo entender porque no te hablaban -preguntó con suavidad. Él ya sabía la respuesta a ello, sabía tantas cosas y a veces le picaba la lengua por soltar toda la verdad.

-A todos les parecía extraño, para los demás chicos yo era un ñoño -confesó con amargura-. Solo buscaba hacer sentir orgullosos a mis padres, hasta que me di cuenta que por ello estaba desperdiciando un poco mi juventud

Jungkook asintió de acuerdo, aquel momento había cambiado la vida de Jimin.

-¿Duro mucho tiempo?

-Uh no tanto, a los diecisiete las cosas cambiaron. Volvimos a vivir en nuestra casa a las afueras de Seúl y entre a otro colegio. Entonces mi hermana me presentó a Taehyung y bueno comencé a salir con él -aclaró su garganta sintiéndose ligeramente incómodo-. Luego conocí a Yeji y a Ryujin y todo mejoro -sonrió ante el recuerdo-. Ellas dos son mis mejores amigas, estaban siempre a mi lado y...-frunció el ceño suavemente cuando un pensamiento llego a su cabeza. Si ellas eran sus mejores amigas ¿por qué no se habían vuelto a hablar?

-¿Y?...-Jungkook lo incitó a seguir.

-Amm, bueno luego de conocerlos deje de sentirme solo y perdido. Finalmente me sentía feliz de tener a personas tan buenas en mi vida -observó al pelinegro de reojo-. Al terminar el colegio entre directamente a la universidad con Taehyung, a ambos nos apasionaba el derecho y quisimos estudiar juntos

-¿Y luego que paso?...-quizás si insistía un poco con las preguntas la memoria de Jimin comenzaría a volver-. ¿Cuando entraste a la universidad como te sentiste? -presionó, de forma disimulada. Según sus cálculos, su esposo sólo recordaba hasta ese momento.

Lo vio guardar silencio y enfocar su mirada en el mar, parecía estar buscando con desespero la respuesta a las preguntas. Los segundos pasaron y tras soltar un suave suspiro negó.

-No lo puedo recordar, yo...-cerro sus ojos, intentando buscar el último recuerdo- no lo puedo hacer, no viene nada a mi mente -murmuró con notoria frustración-. Solo recuerdo ir a la universidad y es todo, lo demás no esta, me siento igual a cuando despierto de un sueño y deseo recordarlo pero este ya se ha borrado por completo de mi memoria

Ambos suspiraron al tiempo, recuperar la memoria no sería nada fácil.

-Esta bien, en algún momento podrás recordarlo todo -su mano se deslizó por la roca hasta tomar la de Jimin-. Y si no vuelve quizás sea porque era lo mejor

-Si...-intento sonreír- quizás lo sea

Pero...

¿Realmente sería bueno para él que Jimin no recordará?

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Hi 7w7 he vuelto, espero les haya gustado el capítulo mis chiquis ♡ denle mucho love y cuéntenme en los comentarios que tal les esta pareciendo la historia :D

Sin más que decir, adiós y nos vemos pronto.

Atte:roxyuwu