Volvemos a nuestra habitacion junto con Connor. Mi corazón todavía late con fuerza. Casi vuelvo a verla.

Damon se está tomando demasiadas confianzas. Quizas porque Connor es agradable, pero aun asi no deberia confiar en nadie, al menos por ahora.

-En la sala de estar tenéis un teléfono fijo que podéis usar para llamar. Cuidado, porque Áxel puede ver el registro de llamadas desde su ordenador - nos advierte Connor.

Asentimos con la cabeza.
-Esta noche, se os hará una bienvenida - añade él - a las 00:00

Se marcha, pero antes de cruzar el alfeizar de la puerta añade:

-No lleguéis tarde

Narra Lucas.

Por fin encuentro la llave. La pongo en el pomo de la puerta y doy dos vueltas.
Esta se abre haciendo un "clic" y entro.
La entrada está como la dejó , bueno, la dejamos. Damon y yo limpiamos un poco el gran desastre que dejaron.

Doy pasos hacia la cocina. Todo está patas arriba. ¿Qué ha pasado?
Voy a la habitación de Blair y está similar a la cocina. Papeles por los suelos, cajones abiertos y armarios vacíos.
El baño está idéntico.
Me acerco a la sala con un cuchillo en la mano por si acaso y me horrorizo.
Sudor frío recorre mi cuerpo. Mis manos sueltan el cuchillo. Trago saliva.
Me acerco a la pared para poder leer mejor lo escrito.

"TEMBLAD, VUESTRO FIN SE ACERCA"

A su lado hay un cinco pintado con un circulo a su alrededor.
¿5?

Al ver que no hay nadie en la casa llamo a Blair rápidamente. Al quinto toque lo cogen.

-Blair, tenemos un problema - digo

-Ah, es para el idiota- susurra alguien y gritan el nombre de Blair

-Tienes una llamada- oigo al otro lado. ¿Pero no es el movil de Blair?

-¿Diga? - contesta una voz muy familiar.

-Blair, ¿Y tu teléfono? - pregunto frenético.

-Está pinchado con este seguramente, o habrán desviado las llamadas aquí - contesta.

-He ido a tu casa y alguien ha estado aquí - digo mirando al rededor.

Narra Blair

-¿Como que han estado alli? - pregunto preocupado.

-He entrado para limpiar y me he encontrado todo patas arriba y en la pared de la sala de estar, un mensaje - me dice el frenético.

-¿Qué dice el mensaje?

-Temblad, vuestro fin se acerca- lee él - y hay un cinco con un circulo a su alrededor - añade.

-¿Qué? ¿Un cinco? - pregunto atónito.

-Si

-Se acaba el tiempo chico-me dice Look intentando arrebatarme el teléfono.

-Volveré a llamarte estate atento y no t preocupes por... - mis palabras quedan en el aire después de que Look le haya dado al botón de colgar.

-Te lo avisé - me dice y se va.

Mierda. Me siento en el sofá con las manos en la cabeza. ¿Y si es Sagunto? Nadie mas que él podria haberlo hecho.

-Problemas ¿Eh? - oigo una voz delante mio.
Áxel está apoyado con el hombro en la puerta.

-Dijiste que los protegerías - le espeto.

-Y lo he hecho- me contesta - ¿Estan muertos? - pregunta sarcástico.
Niego. Sonríe.

-Pero estan amenazados- contesto.

-¿Sagunto? - pregunta él mirándome.

-No lo sé, pero seguro que si- contesto mirándolo igualmente.

-"Temblad, vuestro fin se acerca"
¿Verdad? - recita las palabras exactas.

-¿Como lo sabes? - pregunto saliendo de mi asombro. Imposible que lo haya oído.

- Los ayudaré - me dice sin contestar a mi pregunta. -Pero a distancia no puedo- añade.

Joder

-¿Entonces? - pregunto aun que ya se la respuesta.

-Tienen que venir todos aquí - confirma mi miedo- Los que vivan en Washington - añade.

-¿Hay sitio para todos? - pregunto preocupado. Quizas sea una trampa

-Hay de sobra- contesta él. - Llamalos y diles que vengan - añade.

-¿Por qué haces todo esto? Quiero decir, eres un tipo frío, no me cuadran las cosas- dice Damon detras de él.

¿En qué momento llegó alli?
Pero la pregunta es cierta, yo quiero saber eso tambien.

-Porque mi hermano ya se ha equivocado muchas veces, no quiero que lo haga más

Narra Rebeca

Me despierto tras mi largo sueño. La luz del sol da justo en mi cara.
No es justo que me despierte.

Miro la habitación. Es la misma de siempre.

La noche anterior Axel me dijo que iban a venir nuevos miembros. Supongo que tendré que presentarme. Me levanto de la cama y voy hacia mi armario. Escojo lo primero que veo y me visto.
Primero el pantalón y antes de que me ponga la camiseta se abre la puerta y entra Áxel.

Me quedo mirándolo y el a mí. No reacciona.

-Buenos dias, ven a saludar- me dice y se va.

Me pongo la camiseta. ¿Tan fea soy que no hace nada al verme asi?

Salgo de la habitación y camino hacia la sala de estar. Veo a Áxel, al chico del otro día y a uno nuevo.

-Ya está aquí - dice Áxel y todos me miran. - Rebeca, este es Damon. Damon, esta es Rebeca - el chico de ojos verdes se levanta apretando la mandíbula y me da un apretón de manos.

-Encantado- me dice él. Parece que le cuesta dejar salir las palabras. ¿Qué le pasa a todo el mundo conmigo?

-Igualmente- contesto.

-Y a Blair ya lo conoces de antes- me dice Áxel. Asiento. Nos estrechamos las manos. Las tiene sudando. Me mira a los ojos y visualizo una imagen.

Un chico riéndose mientras me habla y me abraza. ¿Áxel?

-¿Rebeca? - escucho que me llaman. Miro a Áxel - Te he dicho tres veces si quieres desayunar- añade.

-Perdona, estaba... - miro a Blair- distraída. Vuestro parecido es impresionante - añado tratando de ocultar la imagen en mi memoria.

-Cierto- dice el otro chico sentado al lado de Blair. Damon.

-Vamos a desayunar- dice Áxel. Los tres salimos detras de él.

Cuando estamos llegando al comedor, Blair y Áxel se detienen. Nos dicen a Damon y a mi que nos vayamos ya a desayunar.

Damon no deja de mirarme.

Narra Blair.

Esperamos a que Damon y Rebeca desaparezcan para hablar.

-¿Qué quieres saber? - pregunta Áxel mirándome. Se le ha quitado la mascara que llevaba.

-Cuando dijiste que nos ayudabas por que tu hermano ya se había equivocado muchas veces... ¿A que te referías exactamente? - pregunto tratando que no suene muy brusco.

El sonríe

-Se equivocó conmigo, al igual que se está equivocando con vosotros. Pero sobre todo contigo - contesta.

-¿Por qué? - pregunto.

-Eres tan parecido a mi, que te quiere hacer sufrir. Y ahora que sabe que esta conmigo, aun mas. - explica.

-¿Pero qué te hizo para equivocarse contigo? - mi curiosidad puede mas que mi prudencia.

-Se vengó de mi por algo que yo no había hecho- me dice él.

-¿Qué hizo? - pregunto aun con mas curiosidad

Me mira directamente a los ojos. Un silencio nos inunda y un sudor recorre mi cuerpo.

-Mató a mi mujer