Región de Kanto.

10:30 AM.

Las hierbas se movían con rapidez, esta señal para los entrenadores era una muestra de que un Pokémon salvaje se encontraba cerca pero en este caso de aquellas hierbas tan peligrosas salió una chica de cabello largo, estaba corriendo rápidamente hacia el gimnasio de aquella ciudad, últimamente había escuchado bastantes rumores acerca de que su padre andaba por ese lugar pero tal vez sería una mentira, como toda la información sobre su padre.

—Espero no llegar tan tarde...—Pensaba aquella chica mientras apresuraba su paso, la gente que se encontraba cerca la miraban con curiosidad pero esto no le importo a ella en absoluto.

Era muy grande la necesidad de encontrarlo, ya tenía tiempo que no lo veía y le hacía mucha ilusión encontrarlo... Tal vez no era un gran padre pero para ella aún era alguien muy importante en su vida.

De un momento a otro una pokeball de su equipo empezó a moverse bruscamente por lo cual decidió parar para ver qué le sucedía a su Pokémon.

Gimnasio de Ciudad Verde.

10:30 AM.

—No voy a perder, no puedo perder. ¡Este Pokémon es una prueba de que he luchado hasta ahora!—Red mostró determinación en sus palabras, estaba realmente molesto con el mayor que no mostraba interés ante el combate que estaba con el, fácilmente había derrotado a 5 de sus 6 Pokémon y se atrevió a llamarlo un "aficionado" por su leve preferencia con su inicial.

 Red recordó su último encuentro, había logrado ayudar aquellos Pokémon y los científicos que fueron secuestrados por el Team Rocket pero no pudo vencer al jefe de esa mafia aún era muy inexperto en batallas por lo tanto cometió varios errores de novato dejándolo en una gran desventaja, con la idea de ganar se preparó tomando una pose de lanzamiento.

Giovanni estaba satisfecho con los resultados, era imposible que el joven ganará el combate pero aquella sonrisa arrogante que tenia en el rostro desapareció al ver algo en particular.

—Eso es...aquella pose...

De todas las poses de lanzamiento ¿Por que había elegido específicamente esa?

—¡Cuento contigo, Charizard!—Grito el joven antes de aventar la pokeball de su compañero de aventura.

—Una forma de jugar...es como...

Pequeños pero fuertes fragmentos invadieron la cabeza de Giovanni, todos estaban conectados pero eran borrosos, era como si su propia mente los hubiera bloqueado para no sufrir.

—¡Ve!—La pokeball se abrió dejando libre al último Pokémon de Red, Charizard.

[...]

Entiendo,ahora lo recuerdo,yo también sentía esa sensación mucho tiempo atrás. Esa sensación de emoción hace que la sangre de mi cuerpo hierva por dentro.

Sonreí levemente, ver aquel joven me trajo recuerdos de mi juventud cuando no tenía ninguna preocupación, aquella pose era la misma que hacía cuando estaba dispuesto a dar lo mejor de mi en combate.

Hace mucho tiempo, cuando yo era niño y luchaba, jugaba con las pokeball así con confianza y sentimientos por mis Pokémon, yo también era apasionado con los Pokémon como este mocoso...¿Cuándo fue que pensé que los Pokémon solo son negocios?

Rápidamente negué para despejar aquellos pensamientos, estaba consciente que los Pokémon merecían el mismo respeto que nosotros los humanos pero lamentablemente no tenía la libertad de dejarlo años atrás ya que quería cumplir con el deseo de alguien importante para mí.

Quizás mis recuerdos de la niñez los fui olvidando para poder estar al mando de una mafia tan grande como la que se convirtió el Team Rocket, no mostrar un poco de humanidad ante aquellos seres que eran amigables era muy difícil pero  la vez era increíble analizar que mi amor por ella era mi mayor prioridad.

¿Realmente está era la mejor opción?

Aventé la pokeball de uno de mis mejores Pokémon, estoy seguro que este combate será un verdadero desafío.

—¡Ve Rhydon!

Siento que fui como este chico hace mucho tiempo...

—¡Vamos chico! ¡Está será nuestra última pelea!

Pero conocí a la persona equivocada y caí en un abismo para provocar mi propia destrucción, mi gran error fue querer darle mi amor incondicional pero no me di cuenta que la estaba matando lentamente a mi lado.

Me hubiera gustado poder haberte ayudado cuando apenas iniciaba.

Me hubiera gustado haberte amado...

[...]

_____ por fin estaba frente al gimnasio de Ciudad Verde, su respiración era muy agitada ya que no había tomado ningún descanso hasta el momento y se había atrasado por lo sucedido con su Pokémon.

La chica de cabello c/c entro al gimnasio azotando las puerta y llamando la atención de todos los presentes, los reclutas se pusieron a la defensiva creyendo que era alguien de la policía o quizás un entrenador cualquiera pero al ver que era la hija de su jefe hicieron una reverencia sin decir nada, esto le provocó muchas dudas a Red quien observo a la chica que entró.

Por otro lado Giovanni no le tomó mucha importancia a la llegada de su hija y prosiguió con su orden.

—Dile a todos los periódicos que a partir de hoy el Team rocket se deshace.

—¡Señor Giovanni!/ ¡Jefe!—Exclamaron los reclutas con cierta inseguridad ante tal orden, era muy apresurado todo.

—Dile a todos nuestros representantes "Buen Trabajo" —Giovanni sonrió, los dos reclutas no quisieron seguir insistiendo porque era en vano, hicieron una reverencia hacia su antiguo jefe por respeto y salieron del gimnasio.

Algunos creyeron que se había puesto sentimental por el combate pero pensar que aquel hombre de aura imponente estaba dejándose llevar por sus emociones era difícil de imaginar pero realmente eso estaba pasando.

_____ y Red estaban sorprendidos ante la orden que mandó Giovanni, eran muy buenas noticias para ser realidad.

—Ahora bien, esta medalla no te la entrego como el Líder del team rocket,si no como el Líder de gimnasio de ciudad verde, realmente... Fue una buena pelea.

Red sonrío y tomó su octava medalla, lo había logrado gracias a su equipo Pokémon.

—Ahora que ya tienes todas las medallas supongo que aspiras a más, ¿No?, tienes que volverte más fuerte porque a partir de ahora te enfrentarás a Pokémon bastante fuertes... Por lo menos debes de estar al nivel del campeón de la liga Pokémon o te será muy difícil.

Mientras ambos hombres tenían su plática ______ estaba analizando la situación, era imposible que por un combate contra un entrenador decidiera disolver el Team Rocket así que rápidamente se acercó.

—¿Por fin dejaras de ver a los Pokémon como un negocio? ¿Realmente vas a dejar todo esto por este combate?

—¿Qué te hace creer que no estoy hablando en serio?

—No eres serio y no mantienes tu palabra para todas las cosas.—La chica bajo su mirada triste, Giovanni al ver a su hija siendo lastimada por sus actos le dolía, era muy cierto que nadie esta preparado para ser un buen padre y él no era la excepción.

Aquello que lo mantenía alejado de la joven era una promesa especial. Las promesas son tan fáciles de hacer pero no de cumplir ya que en varias ocasiones son imposibles de realizarlas o se olvidan.

—Aún a estas alturas logras hacerme sentir mal, algún día ve a la casa y resolveré tus dudas, pequeña.—Giovanni despeinó a su hija con delicadeza para no lastimarla pero fue lo suficientemente fuerte para alborotar sus cabellos.

Alejo su mano de su hija y empezó a dirigirse a la salida del gimnasio junto con los demás miembros del antiguo Team Rocket que restaban y fueron espectadores.

—Buena suerte a ambos.— Se despidió sin mirar a los dos jóvenes, había mucho que hablar pero no era el momento adecuado para ello, necesitaba estar a solas para reflexionar sobre su vida.

______ estaba perdida en sus pensamientos pero trató de no dar más vueltas al asunto y solo soltó un suspiró largo.

—Eh... ¿Estás bien?

—¿Ah? Claro.—Volteo a mirar a Red de frente, el chico la miro atento— Disculpa por no haberme presentado aún, soy ______, ¿y tú?

—Me llamo Red.

—Lindo nombre.— ____ sonrió — Por lo que ha dicho mi padre parece que irás a retar la liga, ¿verdad?

— Si, quiero convertirme el campeón de mi región... Espera... ¿Dijiste "padre"?—Red miro a ______ bastante confundido, era absurdo ya que estuvo presente en su encuentro pero necesitaba que se lo confirmarán.

— Si, el antiguo líder del team rocket,  Giovanni es mi padre, a pesar de como se ha comportado con los Pokémon no ha dejado de serlo para mi, siempre se ha preocupado y me cuida.— Empezo a observar su pulsera mientras recordaba aquellos momentos.

Ahora Red entendía porque los reclutas hicieron reverencia cuando se dieron cuenta que era la hija de su jefe, era también una estimación ante la jovén.

— En su mirada pude notar que eres demasiado importante para él.— Soltó el comentario inconscientemente.

— Ohhh... ¿De verdad?—Red solo asintió con la cabeza un poco inseguro— ¡Gracias por notarlo!— La peli c/c abrazo al entrenador con entusiasmo.

Red se sorprendió ante tal acto, realmente no había tenido ningún contacto tan cercano con alguna mujer aparte de su madre y Green le hacía burla con eso así que tímidamente decidió corresponder al afecto.

—Bueno, como te diriges a la liga me preguntaba si... ¿Podría ir contigo?—Menciono la peli c/c evitando el contacto visual por si Red la rechazaba ya que sería demasiado vergonzoso.

—¡Claro! pero... ¿Cómo vas a pasar a la liga?—Red dejo de sonreír y se puso pensativo ideando algún plan para pasar con la chica ya que la liga no permitía el paso a los entrenadores que no tuvieran las 8 medallas.

—Yo también soy una entrenadora.—De su mochila saca un estuche con todas las medallas de la región.— Asi que eso no será un problema.— Red volvió a sonreír y se acercó a _____.

—¡Entonces vamos!— En esos momentos agarró la mano de _____ quién estaba ahora sorprendida por el acto y se fueron corriendo rumbo a la liga Pokémon.

Tal vez... por esta ocasión... _____ podría volver a ser feliz al lado de Red...