Único
La gran ciudad de Seúl... Un buen lugar para vivir, un trabajo de rango alto y máxima seriedad al realizarlo, así era la vida de Kim Namjoon y para él no había más pasión que su trabajo, aunque también hay momentos de estrés, todo el tiempo llegan noticias de búsquedas en los barrios más peligrosos o solitarios con una sola aliada, la noche, donde todo podía pasar desde autos estrellados hasta masacres.
Así era todos los días, levantarse, ducharse, vestirse, desayunar e ir a su trabajo, aunque no se sabía con exactitud lo que hacía y él lo define como ayudar a la gente, a veces como abogado otras como detective privado y otras como un investigador de hechos, pero todas siempre dan con lo mismo, un gran crimen que debe ser castigado.
En algún lugar de Seúl
Kim Seokjin, 23 años, modelo y actual embajador de Louis Vuitton, muy aclamado no solo por sus proporciones de un rostro perfecto, piel de porcelana, ojos grandes, con un doble párpado volviéndolos más profundos, nariz recta y ligeramente redonda al final, labios gruesos y pomposos, color rosa, cabello rubio, una figura de envidiar por sus hombros anchos, lo que más resalta en sus pasarelas. En esos momentos estaba realizando su mudanza hacia su nueva estadía en el centro de Seúl para estar cerca de su trabajo, cuando ya tenía todo listo llamó a uno de sus más grandes amigos para que le ayudara a llevar todo al nuevo departamento, y es que se llevaban muy bien desde niños por eso hay tanta confianza, Ha ken, aunque él quería algo más con el guapo modelo desde hace mucho y se lo diría esa misma noche.
Ambos chicos recogieron y dejaron todo en el nuevo departamento donde lo único que armaron fue la cama para que pudiera dormir en la noche y al día siguiente ordenar su nueva casa.
-Wow, se nos fue el día, estoy cansado ¿Quieres ir a comer algo?
-Sí, porque no, mañana ya ordenaré todo esto.
Ambos se dirigieron a un restaurante promedio y cuando acabaron de comer lo dijo todo.
-Oye Jin, tengo algo importante que decirte- Jugaba con sus manos que ya estaban sudando.
-Claro, cuéntame.
-Jin eres mi mejor amigo desde hace mucho y te quiero y aprecio eso, pero no aguanto más, ya no puedo verte como un amigo y quería decirte que... si... ¿Quieres salir conmigo?
Un silencio se instaló en la mesa y no era para nada acogedor precisamente Seokjin no podía con esas palabras, el nerviosismo se apoderó de él, eso no podía ser, no su mejor amigo, no había ninguna muestra de afecto más allá del cariño como amigos.
-Y-yo aprecio que me hayas dicho eso y también te quiero, sabes que cuentas conmigo para lo que necesites, pero la verdad yo solo te veo como un buen amigo que comprende y valora, lamento no corresponder tus sentimientos.
-P-pero yo pensé que sentías lo mismo que yo, se supone que así debe ser, hemos pasado por muchas cosas juntos y ¿así es como termina?- dijo exaltado, un rechazo no era lo que esperaba.
-Cálmate, en serio lo siento, pero creo que el destino te tiene algo mejor que yo.
-¡No!, se supone que debes estar conmigo, pensé que debías estar conmigo, pero grábate bien mis palabras -lo tomo del mentón- si no eres mío, ¡no vas a ser de nadie, nunca!
Y con esas palabras, salió del restaurante lleno de furia, Seokjin quedó estático, pidió la cuenta, pagó y salió de ahí muy inseguro de si iba a su casa o no, por lo cual decidió ir con sus amigos recién casados, Kim Taehyung y Jeon Jungkook, el primero era uno de sus compañeros de modelaje y el segundo era un famoso director y fotógrafo de Seúl, se conocieron en una sesión fotográfica para Gucci y luego una cosa llevó a la otra, son conocidos como la pareja perfecta.
Al llegar tocó la puerta y esperar, hasta que se escuchó que algo se cayó, se asustó cuando la puerta se abrió.
-Hola Jin hyung-dice algo agitado.
-Hola Kookie ¿cómo estás?
-Bien, pero pasa-terminando de abrir la puerta y dejando que el castaño entrara cuando una tercera voz interrumpe.
-¡Kim Jungkook, ni creas que quedaras así, esta noche no caminarás por una semana!
-¡Cállate! Tenemos invitados.
-¡¿Cómo?!, lo siento de verdad-dice algo sobresaltado por la visita inesperada.
-Sí, también me da gusto verte Tae.
-S-si Hyung, igual-sus mejillas rojas como tomates delataban su gran vergüenza.
-Ya, actúa normal o te dejo en abstinencia por un mes.
-¡¿Q-qué?!-hace un puchero que luego es besado restandole importancia - ¿Y cómo has estado?
-Bien, pero tuve una pelea con Ha ken, no sabía que se me iba a declarar y lo rechacé, no lo tomó de la mejor manera y me amenazó, tengo miedo de que haga algo muy malo, no saben hasta dónde puede llegar, es algo... compulsivo.
Y es que cuando dicen compulsivo lo es si le llegaban malos comentarios de su trabajo, averiguaba de quién se trataba y lo golpeaba o cuando veía a gente que no estaba de acuerdo con sus principios, hacía lo mismo o simplemente iba y lo gritaba, Seokjin le reclamaba su comportamiento, pero simplemente él no le hacía caso.
-Tengo miedo de que me haga algo.
-Tranquilo Hyung, quédate con nosotros el tiempo que necesites, no es seguro que te quedes solo, mañana iremos a tu apartamento para recoger ropa y demás.
-Gracias, en serio chicos.
-Hyung, si quieres podemos buscar protección y conozco a alguien perfecto para el trabajo, se llama Kim Namjoon y me ayudó con un acosador que tenía en la empresa
-Gracias, pero vamos mañana ahora estoy muy cansado por todo lo que pasó.-Tranquilo Hyung mañana vamos, por ahora ve al cuarto de huéspedes y descansa.
Al día siguiente
Seokjin salió temprano del departamento de la pareja y se dirigió a la dirección que Taehyung le había anotado, al llegar al edificio, se adentró en una oficina donde había dos sillones marrón, a los lados unas plantas y un cuadro de un hombre viendo al mar "relajador tal vez" y un escritorio pequeño con una chica pelinegra anotando unas cosas en su computador.
-Buenos días señor Kim Seokjin lo estaba esperando, el señor Kim Namjoon ya lo atenderá tome asiento por favor -dijo la secretaria mientras escribía en su computador.
-Gracias.
Pasaron unos minutos hasta que una voz masculina de pronto interrumpió el silencio
-¿Kim Seokjin?
-Sí, soy yo.
-Pase, por favor.
Seokjin se sobresaltó un poco el ver al dueño de aquella voz tan masculina y ¿sexy?, pero al verlo fue aún más y su corazón empezaba a acelerarse, pero no tenía muy claro si era por la situación que lo llevó a aquella oficina o por aquel hombre sentado en esa silla de cuero tomando su caso.
Un hombre de tez morena, cabello castaño corto, unos ojos grandes cubiertos por unos lentes que hacían que se pudiera apreciar sus largas pestañas por el aumento y unos labios no tan gruesos al natural estaba bien concentrado leyendo la petición - bien, podríamos estar hablando de un psicópata y tengo entendido que necesita un guardaespaldas.
-Sí, pero la verdad no me sentiría muy cómodo con ello, usan traje y gafas todo el tiempo, se verían mejor que yo.
El castaño soltó una pequeña risa ante aquel comentario, algo que hizo que Seokjin se sonrojara poco a poco.
-Lo que le puedo ofrecer señor Kim es serlo pero bajo sus condiciones, y sería a tiempo completo, aquí hay un contrato con todas las cláusulas necesarias por si tiene dudas de mi servicio.
- Gracias, las leeré y mañana vendré con la respuesta.
Después de toda una noche de leer ese contrato y discutirlo con sus amigos llegaron a la decisión de contratarlo y ese mismo día empezar a trabajar, Seokjin no había vuelto a su apartamento porque sus amigos le regalaron y compraron todo lo necesario para que estuviera con ellos, los días pasaban y en vez de ser guardaespaldas y protegido; su relación se había vuelto más de amigos que se cuidaban entre ellos, hasta que un día tuvieron que ir al apartamento por unos papeles de trabajo de Seokjin para una nueva colección de Gucci, pero lo que verían no sería nada lindo.
-Oh señor Kim hace mucho que no lo veíamos por aquí, veo que ha encontrado novio, es muy guapo.
-N-no, él no es mi novio, es solo un amigo.
De ahí se vio un Namjoon un tanto sonrojado por aquellas palabras y es que para él no era mala idea salir con aquel guapo y sexy modelo y mientras iban en el elevador Namjoon decidió hablar primero, y algo nervioso.
-O-oye, ¿te gustaría ir conmigo a algún lugar luego de salir de aquí?
-S-sí p-porque no...-¡¿Me invitó a salir?!
Y al entrar en el departamento todo parecía normal hasta que el frío los sobresaltó, Seokjin no recordaba haber dejado el aire acondicionado encendido, pero los sobresaltó aún más ver un charco de sangre y un cuerpo en medio del comedor.
-¿Q-qué? ¡Pero si es Ha Ken!
Y sí, el joven estaba muerto con un cuchillo clavado en su espalda y todo mojado.
Luego de ver tan fatal escena, la policía llegó tomando nota y examinando cada parte del crimen con más preguntas que respuestas, como: ¿Por qué el aire acondicionado estaba encendido? Oh, ¿por qué estaba mojado? ¿Asesinato o suicidio? Muchas preguntas y solo tenían de culpable al dueño del apartamento Seokjin, por lo cual lo llevaron a la estación de policía para que diera su testimonio de que había ocurrido, pero él decía que no tenía idea de qué había pasado, aquel que ahora estaba muerto era su ex-mejor amigo y a la vez pretendiente tóxico, una semana en investigación y lo mantuvieron encerrado en la estación, ya que sus huellas dactilares se encontraron en el cuchillo, Namjoon sería su abogado porque él pensaba que aquel castaño de hermoso rostro no había ido con él por nada, él cree en su inocencia y lo iba a demostrar, sacarlo de aquel lugar que para Seokjin era el mismo infierno, y tal vez después pedirle una cita y más adelante formar una relación, porque sí, él estaba enamorado y lo pudo confirmar cuando ya tuvieron cierto tiempo viviendo juntos y también con querer estar con él y protegerlo.
Días después en la corte
-Todos de pie, el juez está entrando.
-Bueno, en vista de los indicios presentados por la Fiscalía General de la Nación, y las pruebas presentadas, este despacho declara al acusado Kim Seokjin culpable por homicidio agravado, por lo tanto, será condenado a 20 años de prisión los cuales cumplirá a partir de hoy en un centro de reclusión-Toca el martillo-Esta audiencia fue grabada en audio y vídeo el día 25 de septiembre del año en curso, se termina la sesión.
Y así fue como un inocente terminó en prisión, para él las autoridades eran muy incompetentes, a pesar de que lo escucharon, nada estaba planeado, él nunca hizo nada, solo rechazó a su mejor amigo enamorado y ¿qué hizo este?, enfermarse, pero no físicamente, sino psicológicamente en un amor absurdo, porque en este mundo hay más de mil personas, hombres y mujeres que esperan por encontrar el amor, ser felices, formar una familia y ese sueño, esa luz que veía poco a poco en Namjoon de lograr todo eso se perdió por un tonto enfermo que llamó "amigo".
Apenas llegó lo revisaron de pies a cabeza, sentir la humillación al desnudarse en frente de tantos ojos para ver que no tuviera nada, dejar apenas su ropa y un reloj en una caja para cambiarla por otra con ropa naranja y una camiseta blanca, al salir lo ubicaron en el pabellón 2 donde su bienvenida no fue nada grata.
A medida que iba caminando escoltado a su celda, los comentarios, silbidos y burlas no dejaban de sonar por el resto de celdas.
-¡Nueva princesa, bienvenida!
-Hermoso pásate luego por aquí y la pasaremos bien.
-¿No es ese modelucho de cuarta?
-¿Así que te gusta matar por diversión? Ven aquí y te enseñaré la verdadera diversión.
No lo soportaba, no lo hacía, esas personas no sabían nada, pero al igual no le creían, no dijo nada, en su celda gracias a Dios y quedó solo, pensando y esperando
-¿Por qué yo?, siempre traté de ser bueno contigo, ¿¡por qué, no lo fuiste conmigo!? - Y así terminó en lágrimas hasta la noche.
Los meses y días pasaban, pero Seokjin los sentía eternos e iguales siempre era lo mismo, maltratos físicos y verbales, lo hacían lavar la ropa de otros reclusos, lo dejaban lavando y tallando los pisos, solo porque decían, "la princesita debe ser sirvienta", si no recibía muchos golpes que luego de cierto punto dejaban de doler.
Sus amigos le mandaban dinero para el mes, para comprar comida más que otra cosa, porque sí, aunque estuviera en prisión aún debía sobrevivir.
-¡Ey, princesa esto no está brillante!
-Sí, lo está
- ¿Acaso cuestionas mi ojo?
-Eso no es mi cul-un golpe en su mejilla resonó en los baños-déjate de estupideces y haz todo de nuevo.
Pensaba en llorar, pero no lo hizo, simplemente cogió un cepillo y arrodillado empezó a restregar.
-¿Sabes? viéndote así, princesita servirías para otra cosa - se acercó y acarició sus caderas levemente. Seokjin solo se alejó.
-N-No te atrevas.
-¿O qué? Ya verás que la pasaremos bien.
-¿Qué está pasando aquí? -dice un guardia
-Nada jefe aquí divirtiéndonos un rato.
-Sí claro, Kim tienes visita, andando.
Las visitas eran reducidas solo iban Jungkook, Taehyung, y Namjoon, sus padres nunca lo fueron a ver, para ellos era una vergüenza en la ciudad por eso nunca aparecieron.
-Tranquilo, todo está bien he encontrado algo nuevo y por eso llamaremos a una nueva audiencia.
-¿Eso me garantiza salir de aquí? -dijo con la mirada perdida.
Seokjin ya ni recordaba que día o mes era, ya no reía ni lloraba, solo estaba ido, como si su luz de ánimo se hubiera ido a algún lado pensando en cómo acabó todo.
-Lo más probable es que si.
- No me digas eso, quiero irme a tratar de rehacer mi vida... Si me dices un "probable", entonces es un no para mí. Igual, gracias por decírmelo, ahora vete.
-No, espera quiero saber ¿cómo estás?, ¿cómo te sientes?
-Mal, pero aquí he aprendido que el que llora y es inocente muere, por eso he cambiado mi manera de ser, y si algún día salgo de esta fosa iré a los mejores médicos lejos de este lugar- y salió de la sala sin decir más, dejando un Namjoon con el corazón hecho pedazos.
-Pero, si te digo que puedo ser tu luz ¿me creerás?, ¿estarás conmigo?, podremos ser felices, sin que esta pesadilla nos interrumpa en los planes? O tal vez solo soy yo el que se arma fantasías de amor, uno en el que te cuido y te doy el amor que estás necesitando- No lo supo porque una silla vacía no puede contestar por alguien más, pero hizo todo en sus manos y al fin la nueva audiencia llegó.
-Todos de pie, el juez entra en la sala.
-Continuamos con el caso del señor Kim Seokjin gracias a nuevas evidencias
-Abogado, puede hablar.
-Su Señoría, en primer lugar quiero decir que volví al lugar de los hechos junto con la fiscalía buscando indicios; y algo muy curioso que encontré mientras revisaba la escena del crimen fue una pequeña olla tirada detrás del sofá de la sala que conecta con el comedor en donde se encontró al sujeto muerto, vi que esta tenía un poco de agua, esto del por qué el sujeto estaba mojado, pero ¿cómo hizo con el cuchillo?
Bueno me dediqué a buscar más indicios y vi que en la nevera el congelador no estaba del todo cerrado, había otra olla y en ella un cuchillo con moras, esto apunta a que fue un suicidio, y que esas moras eran prueba de lo que iba a hacer el sujeto.
-¿La fiscalía está de acuerdo con estas pruebas?
-Eso es correcto, nuestro cuerpo de investigación inspeccionó sus actos.
-Prosiguiendo se le hicieron análisis de búsqueda de huellas a los instrumentos que había en la cocina y en el sujeto y las huellas de mi cliente no se encontraron en ninguno de los mencionados, aquí están los resultados de laboratorio- le entrega un sobre blanco -por mí no hay ningún problema en que los quiera volver a hacer, y si volvemos a analizar la escena del crimen mirando los ángulos de la silla del comedor que había enfrente del sujeto, la olla y la calefacción en frío esta es la situación, pero pediría hacer la demostración en el mismo lugar, eso es todo, gracias.
-La sesión se toma diez minutos para definir la situación con las nuevas pruebas presentadas, se levanta la sesión.
-Nam...
-¿Sí?
-¿Estaré libre?- dijo con unos ojos que estaban al borde de las lágrimas.
-Es lo más probable y sobre todo eres inocente, yo losé y sé que recuperarás tu vida normal y tendrás tu familia y lo que necesites -dijo un poco afligido, ya que pensaba que después de esto él no estaría en esos planes.
- ¿Y si es así, tendremos la cita que me debes? - Se sorprendió un poco porque no se esperaba para nada eso.
-S-si
-Bueno, entonces tendré listas mis mejores galas-suelta una leve risa- Hace mucho que no te escucho reír.
-Eso es porque me devolviste algo de luz en todo este caos, gracias- y le dio un corto pero reparador abrazo.
-Vamos, hay que volver - mientras Seokjin ya iba de regreso Namjoon quedó un poco pensativo.
-Sere tu luz, así como tú te volviste la mía.
Entraron y todo mundo se puso de pie esperando un nuevo veredicto, y si Jin por fin quedaba libre y limpio de un error que nunca provocó.
-Bueno en vista de todas estas nuevas pruebas presentadas y la petición del abogado defensor, este despacho aprueba esa petición, la cual se realizará mañana mismo en compañía de la Fiscalía.
Al día siguiente se hizo la prueba mostrando paso a paso el homicidio perfecto.
Primero metiendo el cuchillo en una olla con hielo, la parte metálica metida en el hielo y la parte del mango al aire metido en el congelador dejando la puerta de este mismo abierta.
Segundo prender el aire acondicionado y dejarlo en frío para que nada se descongelara tan rápido, luego la olla se puso en una de las sillas del comedor oprimiendo el control remoto haciendo que el aire acondicionado cambiara a caliente,el muñeco de prueba se puso boca abajo en la alfombra, así, al empujar la silla con la fuerza de una patada, la olla por impulso cayó en la espalda del muñeco, derritiéndose en cuestión de horas, y así el cuchillo se enterró en su espalda y dando el porqué de estar todo empapado.
Todo fue demostrado y una nueva audiencia se programó al día siguiente.
-Se demostró en la recopilación del crimen y las nuevas evidencias para este caso, es por eso que este despacho declara al acusado Kim Seokjin como inocente por los cargos y se le concede la libertad inmediata.
Seokjin no pudo estar más agradecido que terminó llorando en silencio y aunque tuvo que volver por sus pocas cosas allí al salir se sintió en paz, la pesadilla acabó, encontró la luz que pensó había perdido; con algunas cámaras encima y sus dos amigos llorando a la par felices de verlo con un pastel de tofu.
-¡Hyung! Vamos a celebrar.
-Sí, chicos, pero aún espero a... ¡Nam!-se lanzó a abrazarlo y a su vez derramó pequeñas lágrimas que poco a poco empezaron a mojar su abrigo.
-G-gracias
-Tranquilo, si te dije que te ayudaría a salir de aquí es porque lo haría y así fue, ahora puedes hacer lo que quieras, empezar tu nueva vida.
-S-sí, estoy feliz por eso, p-pero necesito que te quedes a mi lado, tal vez sueno egoísta, pero ¿lo harías?
-Sí, sabes que siempre tendrás mi apoyo, el de Tae y Jungkook, para eso están los amigos, ¿no?
-Y-yo sé que ellos siempre me apoyarán... P-pero lo que quiero es que tú estés conmigo en las buenas y en las malas, tal vez suene algo loco p-pero, todo el tiempo que he estado contigo me he sentido bien y protegido, por eso quiero decir que quiero más que tu amistad, quiero tu amor, te amo Kim Namjoon y me gustaría estar contigo por el resto de mi vida.
Acaso era verdad lo que sus oídos escucharon, lo ama en verdad y ahora le está diciendo que quiere estar con él y nada le hizo más feliz que juntar sus labios con aquel chico de hermoso rostro del cual estaba cien por ciento enamorado luego de ese beso.
Ese mismo día empezaron oficialmente su relación, aunque decidió dejar de lado su carrera como modelo, luego de esta horrible pesadilla que gracias a Dios ya había terminado, decidió empezar su tratamiento psicológico para quitar todo aquello que vivió en prisión y estudiar negocios internacionales en los próximos cinco años, lo logró con mucho esfuerzo y en menos de nada ya se encontraba graduando esa noche su novio le tenía el mejor regalo de todos.
-Mi amor, hemos pasado por muchas cosas juntos, la forma en la que nos conocimos empezó siendo laboral, nunca me había enamorado de un cliente hasta que te conocí y quiero seguirte conociendo, estar contigo e ir de la mano como tu gran apoyo, es por eso que -se arrodilló mientras extendía una cajita de terciopelo roja- Kim Seokjin, ¿te casarías conmigo?
Y la pregunta fue muy obvia, aunque la respuesta lo fue aún más.
-¡Sí! -decía abrazando y besando al otro con amor y algo de pasión.
Un año después
-Todo está listo, solo faltan los novios.
-Kookie, me acordé de cuando nos casamos- suelta un suspiro algo nostálgico.
-Yo también, parece como si hubiera sido ayer-lo enfrenta y le da un beso.
-Deberíamos ir a ver como están, ¿no crees?
-Sí, tú ve a ver a Jin yo iré con Namjoon
Y en una de las habitaciones de la gran mansión hay un Seokjin muriendo de los nervios vistiendo un traje blanco con pequeños adornos color crema en sus mangas camisa blanca, un corbatín a juego, mocasines blancos y su cabello bien peinado que ahora era rubio.
-¿Ya estás listo Hyung?
-S-sí, creo, supongo, jamás me había sentido así.
-Tranquilo Hyung, yo también estaba así el día que me casé, pero es parte del momento, estoy seguro de que harán una linda familia, ya después verán si quieren niños o no, lo importante es la comunicación, confianza y que nunca dejen de lado el amor -dijo dándole un abrazo que lo reconfortó y le quitó un poco de los nervios que traía.
-C-creo que me siento mejor, Gracias Kookie.
En ese momento Taehyung entró a la pequeña sala donde se encontraba su esposo con Jin para no hacer más largas a un Namjoon que estaba muy asustado en su traje negro pegado al cuerpo usando un mono color azul marino (a petición de Jin) que ya se encontraba en el altar.
-Todo listo y solo faltas tú, Jin Hyung.
- Vamos- y tomando aquel ramo de rosas blancas y azules mientras caminaba con un poco de nervios, pero al llegar y ver a Namjoon todo desapareció, iban a ser uno solo, en sus ojos llenos de amor, lo veía.
Y así, la marcha nupcial empezó a tocar y un acepto que marcó el comienzo de una nueva vida juntos.
𝓕𝓘𝓝
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro