𝒥𝑒𝑜𝓃 𝒥𝓊𝓃𝑔𝓀𝑜𝑜𝓀

"¿Por qué demonios no me retiré de verdad?" Pensaba en él momento en que muchos de los inversores de mi imperio pedían a gritos expandirnos hasta América Latina. Locos, estaban locos, esa era la verdad. Yo tomé una decisión hace unos meses y era darme unas vacaciones, pero bueno, pasaron cosas en mi vida personal que me impidieron hacer mi cometido.

En realidad fue Gyeong-hui.

Ha pasado mucho con ella y con él. Yo tenía todos mis planes listos para ejecutarse, quería viajar con ella a mi lado y bueno, talvez proponerle matrimonio, pero eso no pudo ser porque sorpresas no tan gratas vinieron a mi vida.

Bueno sí, me asusté y me enojé al principio, casi de verdad se acaba todo con ella pero gracias a que no soy tan imbécil pude arreglar las cosas. Gyeong-hui me avisó de su embarazo cuando ya tenia dos meses, eso es mucho. No me gustó la idea de ser padre, no quería serlo, no estaba dispuesto a renunciar a una parte de ella para compartirla con un bebé, y bueno, pasó lo inevitable. Nos separamos.

Ya se que todo fue mi culpa, yo arruine las cosas por ser tan cobarde, pero desde mi punto de vista todo era porque no estaba listo y apenas estaba recuperándome emocionalmente, sin embargo, después de que ella me dejara me sentí peor y la idea de tener un bebé empezó a gustarme un poco, solo un poco.

Le pedí perdón y le dije que solo estaba asustado pero como era de esperarse Gyeong-hui me mandó al diablo. Estuvimos así por algunos meses, hasta que la obligué a mudarse conmigo, eso fue para el quinto mes de su embarazo. Tenerla en mí casa no cambió mucho las cosas, ella no me hablaba y apenas me miraba, yo seguía un poco aturdido por mi pronta paternidad pero conforme pasaban los días, parecía enamorarme un poco más de quien crecía en el vientre de ella.

Se que Gyeong-hui aun no me perdona del todo, pero al menos las cosas van mejor, sin embargo tengo que pasar fuera de casa la mayor parte del tiempo, esto es por petición de ella, para que Gyeong-hui pueda librarse de mi presencia y lidiar con el bebé ella sola.

Sí, mi hijo ya nació. Luce exactamente como yo, en todos los aspectos y estoy seguro de que eso hace molestar a Hui pero de alguna manera calienta mi corazón y me hace querer regresar el tiempo y alegrarme por el embarazo. Fui un imbécil, eso lo sé. Hui está atontada, mi mamá y mi papá también, todos están verdaderamente felices con el bebé y si alguna vez pensé que yo no lo estaría puesta estaba muy equivocado. No puedo negarlo cada vez que veo su pálido rostro pequeño mi corazón se acelera y me hace saber que en realidad a la persona que amo más en este mundo es a Yohan.  Aun tengo que conseguir estar completamente bien con Gyeong-hui, sobre todo ahora que apenas lleva unas semanas desde que dio a luz.

Quiero mostrarle a ella todo mi apoyo por el tiempo que sea necesario, ya sea cambiando pañales o cuidándolo por la noche, porque mi hijo tiene severos problemas para dormir de noche. El doctor ha dicho que tiene el horario un poco desconfigurado, que con unas noches más él seguro que entenderá como va esto de vivir en la tierra. Gyeong-hui no duerme mucho y se que esta cansada, puedo verlo en sus ojos, a pesar de todo y sabiendo que puede simplemente quedarse en la cama y hacer nada más que descansar, ella no lo hace, porque es Gyeong-hui.

He tratado de no discutir con ella por eso, pero planeo hablar muy seriamente con ella hasta que entienda que de verdad debe descansar y que al bebé lo ne va a pasar nada si está conmigo por unas horas.

Toda esta situación de nosotros convirtiéndonos en padres ha asegurado mucho más mi decisión de no querer expandirme más, porque si lo hago se lo que significa. Ampliar mis hoteles es igual a hacer viajes interminables a los destinos donde estará cada sucursal, eso significa que tendré que perderme mucho tiempo de crecimiento de mi hijo, y la verdad yo prefería estar con él y con su madre, a pesar de que esta parece no soportarme, en lugar de viajar. Mi decisión ya está tomada.

He advertido ya en toda mi empresa que de verdad no necesitamos movernos, a nuestros hoteles les está yendo bien, justo como debe de ser, además he explicado innecesariamente que quiero dedicarme a cuidar a mi familia. Namjoon ha sugerido que pase la presidencia a alguien más mientras yo me adapto a un nuevo estilo de padre y esposo, pero me he negado en rotundo, los hoteles son míos y si no pueden comprender que estamos bien así, pues podían todos largarse.

Después de salir de la reunión lo primero que hice fue pensar en Hui, en mi hijo y en que ya quiero estar en casa. Namjoon, que ya es un poco más viejo siendo padre siempre está burlándose de mi por mis cambios, pero no me importaba en absoluto.

Salí de la oficina y fui a por mi auto para conducir a casa, a mi hogar. Era viernes y todo parecía normal, tranquilo. Conduje en silencio, relajado dispuesto a hablar con Gyeong-hui sobre algunas cosas, no quería fastidiarla pero eran temas que se debían tocar.

No me tomó mucho tiempo llegar a casa. Después del bebé compré una nueva propiedad más grande, con espacio suficiente para que Gyeong-hui pudiera estar tranquila, a ella le encantó la idea y a mi más.

Aparqué el auto y vi mi casa, todas las luces estaban apagadas y eso solo podía significar que Gyeong-hui ya estaba dormida. Abrí la puerta y encendí las luces del recibidor. Había silencio absoluto y mucha calma, me quité el abrigo y después empecé a caminar hasta mi dormitorio.

Allí estába ella y él, ambos dormían y aparentemente Gyeong-hui estaba dándole pecho pues uno de sus senos estaba fuera de su camisa. Sonreí y me aproxime a ellos, besé a Yohan en su pequeña cabeza y con mucho cuidado cubrí bien a Gyeong-hui.

En silencio fui al baño y me di una ducha, era temprano aún y me apetecía hacer de cenar, por si Gyeong-hui se levantaba en medio de la noche y tenía hambre.

Me puse pantalones flojos y sin camisa me dirigí a la cocina para empezar la cena.

°

Una hora después me serví un plato de comida y cuando estaba por dar el primer bocado, los pasos de Gyeong-hui resonaron en la casa.

— ¿Por qué no me despertaste? — preguntó con su cara de sueño.

— Estabas tranquilamente dormida — le dije — ¿Tienes hambre? — ella asintió.

Me levanté a servirle a ella pero se interpuso en mi camino.

— Puedo servirme mi propia comida — dijo entrecerrando los ojos.

— Lo sé, pero quiero hacerlo yo — hablé cerca de ella — Se que tu puedes hacer muchas cosas, un bebé ha salido de ti recientemente y si no te importa me gustaría cuidarte.

— Si me hubieras dicho eso cuando te dije que estaba embarazada nosotros no... — la detuve antes que empezara con lo mismo de siempre.

— Ya sé, lo jodi todo, pero me asusté — dije suavemente — Se que no es una excusa y que probablemente tu también estabas asustada, pero de verdad no fue algo intencional.

— Solo quiero que ames al bebé — estaba a punto de llorar, podía verlo en sus ojos.

— Amo al bebé, también te amo a ti. De no hacerlo no estaríamos aquí — parecía como si deseaba decir algo más pero se lo impedí — Escucha. Te amo Gyeong-hui, a ti y al bebé, quiero tenerlos conmigo para siempre y que no duden ni por un segundo de eso.

— Nunca lo has cargado...

— Claro que sí. Todas las noches mientras tu duermes suelo salir de la habitación con él mientras llora, para que tú puedas dormir.

— ¿Has hecho eso?

— Eso y haría mucho más — me acerqué más a ella y le di un beso en la frente — Ahora, vas a comer lo que he hecho para cenar y después hablamos de lo que tu quieras.

— ¿De lo que sea? — preguntó suavemente.

— Lo que sea.

°

Gyeong-hui y yo comimos en silencio, después de cenar y de tomar algo, bueno yo en realidad, ella fue a darse una ducha. Lavé los platos de la cena y deje la cocina limpia para seguirla hasta nuestra habitación.

La puerta del baño estaba abierta y no pude evitar entrar con ella. Había mucho vapor y mi vista se nublaba pero podía distinguir su cuerpo perfectamente.

Sonreí y me acerqué más, me quité mi pantalón y me metí con ella a la ducha.

— ¡¿Qué haces?! ¡no me mires! — gritó asustandome.

— Shhhh, vas a despertar al bebé — le dije dejando un beso en sus labios — ¿Por qué tanto escándalo?

— No quiero que me veas desnuda — la miré confundido — Estoy fea. Aún no bajo de peso y bueno... mi cuerpo ya no es el mismo.

Me sentía perdido, y en realidad no fue hasta en ese momento que me puse a analizar lo que decía. Sí, su cuerpo había cambiado pero lo que yo miraba eran unos pechos más grandes y deseables, más piernas y más trasero. Todo era ventaja. Se me hacía agua la boca con solo verla y estaba muy tentado a tocarla, incluso si llevaba ropa sobre ella, para mi era la mujer más hermosa del mundo.

— Haber, Gyeong-hui. Acabas de tener un bebé, lo tuviste por nueve meses dentro de ti, sí tu cuerpo cambió pero a mi y a mi amigo le sigue pareciendo el mejor de todos los cuerpos — le dije seguro de mis palabras — No hay nada que no haya visto antes y no hay nada que no quiera seguir viendo. Te deseo, mucho.

— No puedes... — dijo cerrando los ojos.

— ¿Qué cosa? ¿Besarte? — atrape su labio con mis dientes y tiré de él hasta que la escuché gemir — ¿Tocarte?— Pasé mis manos por sus pechos sintiendo como todo mi cuerpo reaccionaba — Todos estos días no he deseado otra cosas más que estar contigo, pero has sido cruel y me has evitado.

— Te lo mereces — dejo caer su cabeza hacia atrás y no perdí tiempo para atacar su cuello.

— Ya se, pero creo que me has castigado suficiente — le di besos húmedos por todo el cuello.

— No podemos, corro el riesgo de un nuevo embarazo — me detuve por unos segundos pero luego seguí.

— Tengo condones en las gavetas del baño.

Me alejé y la miré, sus ojos brillaban fuertemente y pude distinguir el deseo en ellos, lo sabía, ella se sentía igual que yo.

°

Después del baño ambos regresamos a la cama, estábamos exhaustos, deseosos de dormir, pero Yohan estaba despierto y listo para su comida de noche.

— Yo me encargo — le dije a Gyeong-hui cuando escuchamos el llanto de Yohan.

Me levanté de la cama y cogi al bebé, Gyeong-hui se acomodó mejor dispuesta a dormir. Salí con el bebé de la habitación y fui con el hasta mi estudio después de preparan su toma de leche.

— ¿Sabes que tienes que dejar de despertarte por las noches, verdad? — le pregunté como si él pudiera responderme. Su llanto cesó y eso me dio tranquilidad — Tu mamá está cansada.

Me senté en una silla reclinable y lo acomodé mejor para alimentarlo.

— Necesitas dormir y dejar dormir a tu mamá — él me miraba mientras succionaba la leche — Si no lo haces en el futuro no tendrás hermanos.

Solo se escucha lo fuerte que el succionaba.

— ¿Sabes que te amo, cierto? Te amo mucho, también amo mucho a tu mamá, pero creo que tu eres mi favorito — sus ojos parecían cerrarse — Es un secreto tuyo y mío.

Lo observé, tan pequeño, tan bonito, lo mejor de todo es que era mío, su mamá también era mía, mi familia.

— No sabes cuanto te amo Yohan — él acabó su leche y lo acomodé sacar sus gases — Te amo, hijo.

Después de escuchar como salían sus gases regresé con él a la habitación, lo acomodé en su lado de la cama y yo me acomodé en el mío. Abracé a Gyeong-hui por la espalda y le di un beso en el cabello.

— ¿Jungkook? — apenas y logre escuchar su voz, ya estaba por dormir, había sido un día largo — Te amo.

Escuché su pacífica voz y me sentí relajado, me pegué más a ella y me acomodé hasta poder darle un beso en la boca.

— Yo te amo más, guapa.

ℱ𝒾𝓃

°

😭
Ahora sí terminó.

De verdad, gracias por el apoyo, gracia por su amor y pos sus lindos comentarios.

Espero verlas en más historias.

Gracias a todas las que votaron, comentaron y me hicieron sentir que terminarla valía la pena, muchas gracias 💗

Psd: en mi perfil está disponible "warm-blooded" una historia de esas de lobos, ahahah. Sólo tiene el prólogo pero prontamente subiré capítulos. De ante mano, si la apoyan se los agradezco mucho.

Bye. Besitosa, amigxs💗