Jimin había bajado de ese pequeño escenario con los sentimientos a flor de piel, un escalofrío le recorría su cuerpo agitado después de bailar.

     —¿Mochi estas bien? —Agust estaba anonadado y  sumamente admirado por la belleza que acababa de ver. Era algo hermoso.

Nunca jamás vio a una persona bailar de aquella manera, exponiendo una vulnerabilidad extraordinaria y una fuerza rapaz al hacerlo.

Jimin era una persona completamente distinta cuando estaba arriba del escenario.

El chico del cabello rosa asintió tímido porque habían muchas personas observandole.

     —Sólo me emocioné —Dijo rápidamente.

Los presentes ahí en el club  se  quedaron fascinados con él.

Jin  grabó  el baile y ese mismo iba a ser enviado a varias empresas de espectáculos.

Agust sostenía a Jimin por los hombros y lo felicitaba.

     —Fue sorprendente lo que hiciste Mochi no había visto bailar a alguien con tanta pasión como tú.

La única que no lo felicitaba era Jiyu, estaba en el rincón con los brazos cruzados. Tal vez el hecho de que  Agust nunca la hubiese felicitado como lo hacía con Jimin le molestaba mucho.

Pero Jimin se sentía extraño, bailar esa canción le causó algo  directo en  el pecho y no entendía por qué lo hizo sentir tan nostálgico.

Sus pensamientos mientras bailaban iban y venían entre Agust y Yoongi.

Vamos,   debía aceptar que ese par de chicos causaba en él más de lo que quisiera admitir, lo único malo era que no debía. O no sentía que fuera lo correcto. O sea Jimin no era una Zorrita como lo habían tachado en la escuela allá en Busan.

Pero sentía que sus sentimientos estaban siendo más que invadidos por dos personas distintas y no podia evitarlo 

     —¿Jimin, en que estas pensando?

El peli-rosa había estando divagando demasiado mientras iban de regreso a su casa.

Agust lo invitó a ir con sus amigos luego de ir al club pero ciertamente Jimin no se sentía con ánimo. Seguía pensando en Yoongi por alguna razón. Pero claro eso no se lo diría a Agust.

     —Nada malo si es lo que crees.

     —No diría que creo que pienses en cosas malas, mejor haz cosas malas  —Agust guiñó un ojo y Jimin no pudo evitar sonreír. Entendió el tono sugestivo de su mayor.

Cuando llegaron al edificio no pudieron estar más solos porque la madre de Los hermanos Min había vuelto y en su casa estaba su madre y su hermana. Así que no le quedó más remedio que despedirse de Agust.

El castaño le dijo que iría a beber un poco con sus amigos y volvería luego.  Así Jimin se quedó más tranquilo.

A las ocho de la noche miraba su celular repetidamente. Ningún mensaje hasta ahora de Agust. Pero, había otro de un número desconocido.

8:05 PM
Número desconocido

"Hola Jimin ¿me recuerdas?, ¿te haz olvidado de mi tan pronto?

Jimin leyó y releyo el mensaje. Era de un número del país, entonces no podía ser quien estaba pensando o si?

Es decir ¿Que haria Jungkook en Norteamérica?

Se levantó inquieto y salió al balcón, la luna estaba brillando perfecta en el cielo. Miró hacia arriba pero no vio a Yoongi y su corazón de alguna manera se sintió triste.

De ahí se le ocurrió ir a las escaleras del edificio. Nadie las usaba nunca mientras el elevador estuviera funcionando, nadie excepto...

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Yoongi miraba una y otra vez su reflejo en el retrovisor del carro de su amigo Hoseok.

Su amigo lo miraba de reojo.

     —Estas muy bien hermano, sabes que cualquier color te luce. Personalmente me gustó mucho el rojo de la vez anterior pero, dime ¿Por qué cambiaste el color de nuevo? Dijiste que no lo harías más.

Yoongi apretó los labios. Si le decía a Hoseok que lo había hecho por recomendación de un chico no lo dejaría en paz.

     —Lo cambié porque quise...

     —OK ya esta bien si no me quieres contar,  pero te recuerdo el auto  es mío,  quiero ir a ver una película,  tu no quisiste, simplemente puedo cerrar las puertas y llevarte a la fuerza no se tu decides.

Yoongi suspiró frustrado  a veces su mejor amigo era exasperante.

     —La película que quieres ver ya la vi, no tiene sentido ir dos veces a verla... y  Si te digo te quedas callado ¿Ok?

Hoseok se pasó los dedos índice y pulgar por los labios simulando cerrarlos.

     —Conocí a un chico que... —Yoongi ni sinquiera terminó de hablar, los gritos de Hoseok lo interrumpieron.

A Hoseok parecía en verdad que iba a darle un ataque.

     —Hobi cálmate o te bajas del auto.

El chico moreno dejó de reír convirtiendo la expresión de su cara en una de "no es gracioso" —El auto es mío,  en todo caso quien se baja eres tú.

     —Ni loco me bajo, esta lloviendo. —Se quejó el ahora Yoongi peli mentita.

      —¿Entonces esto se trata de un chico? ¿Cómo se llama? ¿Es de la universidad? ¿Es guapo?

Demasiadas preguntas para Yoongi.

     —Hey, cálmate idiota, me fastidia que me ataques a preguntas.

     —Ok ya me calmo  —Hobi levantó sus manos manos señal de rendición mientras la luz roja estaba puesta—. Pero si sabes como soy pa' que me cuentas...

     —Yo no quería contarte, amenazaste con secuestrarme —Hobi hizo su cara de Inocencia fingida mientras seguía conduciendo y Yoongi bufó. 

Finalmente el auto de Hobi se parqueo frente al edificio de Yoongi.

     —¿Entonces te le vas a declarar?

Yoongi no pudo más que reír amargamente dejando caer su cabeza al respaldo del asiento. Su amigo no tenía ni una sola pizca de idea de lo complicado que era todo eso.

No era algo tan fácil como llegar y decir: ¡Hola Jimin me gustas  salgamos!

Por qué sí, había pasado días negándose a admitirlo pero ya que más daba ¿no? Estaba enamorado del chico de cabello rosa, labios carnosos y suaves y sonrisa linda.

Pero no era tan sencillo como eso, es que no era cualquier cosa que el chico que te gusta esté con otra persona.  Y menos con  tu propia sangre. 

     —¿Cuál es la gracia? A ver me perdí de algo ¿no? —Hoseok había estado observando a su amigo en silencio.

Yoongi se incorporó en su lugar. Tal vez su amigo tenía una idea de cómo descomplicar un poco su vida.

     —No es tan simple Hobi, si supieras...

     —Pues si me contaras —Hoseok se encogió de hombros.

     —Si, Jimin es un chico lindo, pero está con alguien más.

Fue el turno de Hoseok de reírse ahora.

     —A ver... y eso te detiene? ¿A TI? ¿A MIN YOONGI? Hermano te conozco de años y se que una cosa como esa no te detendría. ¿Recuerdas la vez que querías tanto el autógrafo de aquella pianista? ¿Y cuando la esperabas en la fila para firmas ya no pudiste alcanzar?

     —Si, luego la espere al terminar una presentación y no me dejaron acercarme  —Sonrió.

     —¿Ajá y que hiciste después? Esperaste que saliera en la mañana a trotar, chocaste "accidentalmente" con ella y aprovechaste que su guardaespaldas estaba resagado para pedirle su autógrafo.

Yoongi recordó aquel episodio, se había levantado temprano solo para eso, es que que verdad admiraba a esa pianista. Él no tocaba piano, pero amaba ir a ver las interpretaciones.

     —Si, y casualmente yo llevaba pluma y cuaderno en mi ropa de deporte —Ambos comenzaron a reír.

     —El punto es que no te rendiste, ¿Cuál sería la diferencia ahora?

     —Que ahora no se trata de autógrafos ni pianistas Hoba, Jimin   me gusta pero  es la nueva conquista de mi hermano ¿Algo más complicado que eso?

A Hoseok parecía irsele el habla escuchando las palabras de su amigo.

     —Carajo... estas  JO-DI-DO Yoongi. —Enfatizó la palabra.

Yoongi asintió.

     —Pero, sabes como es Agust ¿no? Nunca va en serio con sus "Novias o Novios"

     —Ese es el problema Hobi, no soportaría que le rompa el corazón. Y si lo hace no quiero saber que pasaría conmigo, es mi hermano pero por Jimin... no se, me volvería loco.

Los dos amigos se quedaron en silencio. Al final Hobi concluyó que si era algo delicado pero que alguna solución encontraría.

Y mientras Yoongi iba subiendo las escaleras se topó precisamente con el motivo de su incertidumbre.

     —Jimin...

El chico se había quedado... embobado, esa era la palabra, al ver a Yoongi con su cabello color menta.

     —Hyung, se mira muy bien  —Dijo algo sonrojado causando que Yoongi también se ronrojase.

     —Hice caso a tu recomendación, así no podrás confundirnos.

Jimin se hizo pequeño en su lugar, aun no superaba aquel suceso, agradecía enormemente no haber dicho ese día en voz alta  "Follame aquí" con lo acalorada de la situación si no se sentiría más estúpido. No podría ver a la cara a Yoongi. 

     —Aún así ese color lo hace ver más genial.

Yoongi contuvo la respiración, ¿Así que para Jimin él era Genial?

     —Ven conmigo —Yoongi lo sorprendió tomándolo de la mano.

Jimin dudó un poco pero finalmente dejó ser llevado hacia algún lugar por Yoongi.