Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

🌻|Capítulo 19.|🌻

|𝓛𝓸𝓼 𝓖𝓮𝓶𝓮𝓵𝓸𝓼 𝓗𝔂𝓾𝓰𝓪|
Capítulo 19.
“Marcas y cicatrices”

Mientras Nami descansaba, y Rei monitoreaba su salud en la habitación, el hermano gemelo de Nami, Neji, relataba la triste historia de la pobre infancia que ambos pequeños e ingenuos niños tuvieron que vivir.

—–Hiashi-sama ha de estar sentado por ahí. Él y mi padre, Hizashi, son hermanos gemelos. Pero él nació un minuto después, y por ello, fue desterrado a la familia secundaria del clan.—masculló Neji con seriedad y molestia, recordando aquel día como solía hacerlo siempre.

El fatídico día en el que a él y Nami les fue impuesta la marca maldita del Clan, y por ello, convirtiéndose inmediatamente en aves enjauladas para siempre. Sólo con la muerte ellos podrían liberarse de aquella jaula.

Cada palabra que Neji soltaba lograba dejar a Naruto aún más confundido, y curioso por saber porqué tan extrañas costumbres y ceremonias tan peculiares.

–—Tú y tú extraño Clan, ¿para qué rayos es esa marca, por cierto? ¿Para qué tener una rama de Familia?—preguntaba, al joven Hyuga quien en su frente mostraba el sello, con tristeza y dolor, odio y furia en su mirada.

Hablar de ello para desahogarse le causaba más molestias y fastidios, y el no sentir a su hermana cerca le dolía aún más.

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

En una habitación del Clan, Hiashi-sama entrenaba a su hija, en presencia de su hermano y los hijos de Hizashi, quienes observaban sonrientes y tranquilos los frágiles movimientos de la débil niña.

La pequeña Nami deseaba poder hablar con ella alguna vez, para enseñarle una postura mejor y más fácil. Analizaba desde su lugar todos sus tropiezos, cómo podrían evitarse, y cómo modificarse para hacer de ellos una fortaleza, guardandolo todo en una memoria prodigiosa que tenía de nacimiento.

“Su patada es muy débil... Está muy insegura...”—concluyó Nami, antes de asentir y mirar a su hermano.

Hizashi, su padre, sin dejar de mirar a su sobrina, abrió la boca para llamar a sus hijos, y hacerles  una pregunta de la cuál a él le daría dolor escuchar su respuesta.

—–¿Neji, Nami? Respondan, ¿está bien?—habló, y vió cómo sus hijos voltearon a verlo con una sonrisa.—–¿Su destino está claro para ustedes? ¿Su razón de vivir?—preguntó.

Los hermanos adorable mente asistieron, y luego  sonrieron en respuesta a su padre, contesta dos de manera educada y sin esperar.

De pronto, la alegría de los gemelos se desvaneció con el siguiente acontecimiento. Neji y Nami observaron a su padre quejarse y gritar del dolor, agarrando su cabeza y retorciendose en el suelo, apretando los dientes.

–—¡Padre!—exclamó Neji, aproximándose a él.

Nami sin embargo, se  acercó a su padre lentamente y luego observó a su tío. Él había hecho una posición de manos antes de que su padre cayera en el dolor, además su marca en su frente estaba brillando. Fue entonces que ella comprendió lo poderosa que podia ser esa marca de maldición, y finalmente llevó sus manos a su frente, mientras su semblante se transformaba en uno temeroso.

“¿Cómo puede ser... Que su propio hermano... Le haya hecho eso a mi padre...?”—pensó.

Sus ojos perla se aguaron, y su mandíbula se apretó con fuerza. No podía hacer nada por su querido padre, y desgraciadamente, estaría obligada a vivir o sufrir alguna vez aquel fuerte dolor.

—–Lleven a su padre a casa. Perdonaré al tonto  por ésta vez pero sólo por ésta.—dijo, seriamente.—–Gemelos, procuren nunca olvidar su destino.—dijo antes de irse, y finalmente dejó la habitación.

“Es el instrumento para mantenernos en nuestro lugar...”

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

—–¡PADRE!—gritó despertando, sintiendo cómo, y nuevamente, las lágrimas bajaban por sus mejillas pálidas.

Se sintió mareada de inmediato, y volvió a caer sobre las sábanas, soltando después un quejido de dolor por el impacto. Su espalda y pecho dolían, y podía sentir su temperatura corporal bajar, pues sentía escalofríos.

Escuchó acercarse a su habitación pasos apresurados, y giró su cabeza hacia la puerta. Al abrirse dejó ver a la hermosa y joven mujer de vestuarios rojos, que luego se acercó apurada hacia la Hyuga.

—–¿Nami, que sucede cariño?—preguntó ella, tocando su frente.—–Tienes fiebre alta...—suspiró, y se apartó para buscar un trapo y un recipiente con agua. Luego se acercó después de remojarlo y lo colocó en la frente de Nami.

La Hyuga bajó los ojos y los dirigió hacia un punto específico en la habitación, en donde no podría mirar a su sensei. Estaba avergonzada de su frente, a pesar de que sabía muy buen que su querida maestra ya la conocía. Aún así, le daba molestia mostrarla.

Rei sonrió con dulzura, y comprensiva se sentó en una silla, quedándose cerca a Nami, preparada para cualquier emergencia.

La Hyuga por otro lado, seguía muy callada.

–—¿Te gustaría hablar de ello?—preguntó Rei, una vez rompiendo el silencio.

Nami. Volteó a verla, y debilitada y sin poder moverse, simplemente cerró los ojos y abrió la boca, preparada para desahogar todas sus penas con aquella mujer de actitud maternal hacia ella.

–—Tuve otra pesadilla...—soltó la Hyuga, en voz ronca, mientras sentía sus ojos aguante nuevamente.—–Aún recuerdo cuando... Mi tío, Hiashi-sama, hacía entrenar a Hinata contra mí hasta el cansancio. Hasta que... Una vez... Pude sentir por primera vez aquel dolor que mi padre soportó en su cabeza.—dijo.

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

—De nuevo, adelante Hinata.—ordenó fríamente Hiashi, expectante.

Hinata, cansada, volvió a levantarse del suelo, y se aproximó corriendo hacia Nami, quien estaba posicionada para defenderse.

Cuando la pequeña Hinata iba a acertar un golpe a su pecho, Nami fácilmente lo desvió y acertó un golpe en su estómago, causándole dolor a Hinata. Por un momento, le pareció cruel, quería detenerse, pero al estar rodeada de gente de la familia principal, el detenerse no era una opción.

Hinata retrocedió intentado regresar a su equilibrio, pero Nami no esperó, y en lugar de eso, aprovechó el momento de  torpeza de Hinata para acercarse a ella rápidamente, aproximándose a darle un golpe fuerte y, de manera inconsciente, activando su byakugan.

Se armó un gran escándalo al momento, pero Nami nunca logró darle ese golpe mortal al Hinata, porque en su lugar, estaba Hiashi-sama, si tío, mirándola con desaprobación al sostener su mano y liberando una leve ventisca por el choque de ambos chakras.

—–¿Qué es lo que éstas haciendo Nami?—preguntó, mirando fríamente a  su pequeña sobrina, quién contaba apenas con seis años.—–Sabes que tus acciones merecen castigo.

Los ojos de Nami inmediatamente se aguaron, y desactivó su byakugan enseguida, intentando implorar perdón.

—N-No... Hiashi-sama... Por favor no...—negó, retrocediendo dos pasos.

La pequeña Hinata se quedó observando con temor, detrás de su padre, aquella mirada de horror de su prima.

—–N...—ella no logró terminar la oración, porque a los segundos estaba sosteniendo su cabeza y mordiendo su lengua.—–¡POR... FAVOR...! ¡TÍO... HIASHI...!—gritó antes de caer al suelo y gritar desgarradoramente, mientras se veía a su marca en la frente brillar.

Neji, por otra parte, intentaba soltarse del agarre de los otros Hyuga, quienes lo forzaron a observar y a quedarse quieto, viendo el sufrir de su hermana.

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

—–Con ésta marca... Ellos nos mantienen al margen.—masculló Nami.—–Vivimos con miedo, de que algún día podamos morir de un infarto por el dolor. Pueden volvernos el cerebro jalea si eso quieren.—movió su mano derecha hacia su brazo izquierdo, y sintiendo la rabia, se preparó para comenzar a rascar su propia piel.

Rei enseguida se levantó y tomó las manos de la Hyuga, quien no pudo forcejear por lo débil que estaba. La mujer de cabello de color crema suspiró, y vendó las manos de la joven, con lentitud.

—–Cariño, no puedes hacer eso cada vez que te da ira. No puedes seguir guardandolo todo.—miró a los ojos de ella.—No es sano para ti ni para los que te rodean.—se detuvo de vendar, y llevó su mano a la frente de la Hyuga, luego sonrió.—Las lágrimas aveces son la solución, así que adelante.—asintió.

Nami observó a Rei conmovida, y no pudo aguantarse más por ello. Cubrió sus ojos y comenzó a sollozar, hasta soltar mares de lágrimas mientras sollozaba aún más fuerte. Rompió en llanto en frente de alguien que no era su hermano, y por primera vez su orgullo no pudo dominarla.

—–Rei sensei... Ellos fueron demasiado lejos cuando mataron a mi padre... ¿¡POR QUÉ TUVIERON QUE HACERLO!?—Rei en seguida se aproximó a abrazarla, y sintió el agarre de la Hyuga y sus lágrimas empapar sus ropas.—–¿¡POR QUÉ REI SENSEI!? ¿¡POR QUÉ NO PUEDO SER LIBRE SIMPLEMENTE!? ¿¡POR QUÉ TUVE QUÉ NACER EN ESE CLAN!?—se preguntó, con dolor en su corazón y con gritos soltando de su garganta.

La persona que más amó le fue arrebatada, de una manera muy cruda y cruel.

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

ೋ❀❀ೋ═══ • ═══ೋ❀❀ೋ

—–Miedo. Es la base de nuestra vida.—contó Neji, asegurando cada palabra.—–Mi  hermana y yo, todos los de la rama secundaria, vivimos con él día a día. Todo para proteger el secreto del byakugan.

Naruto escuchaba atentamente, impresionado por la sinceridad en cada una de las palabras soltadas por el Hyuga tenía en frente. ¿En serio todo era por esa tonta razón? ¿Porteger el secreto del byakugan? ¿Mantener su puesto y poder?

Al rubio no le cabía en la cabeza como una mente humana podía hacerle eso a su propia familia.

Comenzaba a entender la razón por la que, tanto Neji como Nami eran tan frívolos con el mundo que los rodeaba.

Aunque de todas formas, no era suficiente excusa.

—–Hasta que un día fuero demasiado lejos...—calló por un momento.—–Cuando mataron a nuestro padre...—soltó, recordando el fatídico día.

Fue una noche atroz, en donde un infiltrándose hábilmente logró secuestrar a la pequeña Hinata. De pronto una sonrisa cínica se vió formada en el rostro de Neji, quién seguís relatando.

—–Hiashi-sama logró atrapar y matar a ese hombre hábilmente, pero ¿quién era aquel que intentaba hacer tal acto ruin en las sombras de la noche?—musitó, antes de sonreir ladino.—–No era nada más que el jefe ninja de la aldea de la nube, aquel hombre con que la aldea había firmado un Tratado de paz.

Era más que obvio que ese hombre lo único que quería era robar el secreto del byakugan, para todos era muy claro. Pero aquel acto por parte del jefe del clan Hyuga fue rechazado por la aldea de la nube, y conmocionada reclamaban una recompensa. Las cosas se habían puesto feas, y ambas aldeas estaban a punto de irse a la guerra nuevamente.

Sin embargo, finalmente se llegó a un trato. Un crudo trato.

—–Demandaron la cabeza del hombre que mató a su jefe ninja. Y la aldea aceptó sus términos. Hiashi-sama debía morir.—la rabia poco a poco dominandolo, se mostró en él aparentando con fuerza la bandana con el símbolo de su aldea.

Porque su pasado, sus recuerdos, su triste vida, su horrible vida, le regresó a la mente aquel momento en el que vió su mundo derrumbarse frente a él.

–—Finalmente un hombre fue sacrificado...—mordió su lengua antes de continuar.—–Pero no fue Hiashi-sama...—dijo con voz quebrada.—–Mi padre, su hermano gemelo, fue sacrificado en su lugar... ¡Para proteger a la familia principal!—e inconsciente de sus acciones, activó su byakugan lleno de rabia.

Su destino, según Neji, ya estaba escrito, desde el momento en que uno nació antes que el otro. Así como el destino de Naruto y Neji estaba decidido igual, en el momento en el que el Hyuga más poderoso fue elegido para ser su contrincante. Lo mismo pasó en el momento en que Nami y Meiko fueron escogidas para enfrentarse, y fue por ello que ambas perdieron, por estar a la altura, y por cuestiones del destino.

Nami nuevamente logró mejorarse, y caminando detrás de su sensei con la mirada gacha volvió a encontrarse con su prima tirada en el suelo, a un anbu sanandola, y a su amigo el perro cabeza hueca.

Sólo necesitaba ver a Neji, sólo quería verlo ganar. Sólo quería que acabara todo.

A pesar de que muchos la despreciaban por ser de personalidad altanera y odiosa, cínica y arrogante. Ya estaba acostumbrada a estar sola.

A pesar de tener a sus compañeros y a su sensei se sentía abandonada y traicionada. Y por ello se escudaba en su arrogancia para ocultar su verdadero dolor.

Rei se giró hacia atrás y miró a Nami de reojo, suspirando bajamente. Veía con lástima el dolor de su mirada, y sentía que, aunque quería hacer mucho por ayudarla, solamente existía una persona para calmar el dolor de los gemelos.

El único que podía darles la verdad detrás de la muerte de su padre.

Nami por otro lado, mientras caminaba, levantó la mirada y observó al rubio luchar contra su hermano. Un fracasado luchando contra un Hyuga.

“Tal vez muera si hace enojar a mi hermano...”—pensó.

La frialdad en su aura podía sentirse en el aire, y algunas personas la observaban con impresión caminar por el pasillo. Neji ya había contado los acontecimientos que ambos gemelos tuvieron que pasar desde su niñez, y por ello, Nami y Neji ahora eran el centro de atención. Pero ella seguía impune, ignorando a todos.

Muchas chicas de la antigua clase de Nami la reconocieron, y la miraron con molestia por recordar las palabras groseras con las que Nami se refería hacia ellas cuando intentaban hablarle. La consideraban extraña y molesta.

Fue la arrogancia quién la apartó de la gente. Y ni Neji y Nami conocían a otro que tuvo que pasar por lo mismo.

Lo que ellos no sabían es que, aquella persona con quien tenían tanto en común, estaba en frente de uno de ellos.

En éstos momentos, Nami se preguntaba en verdad, al sentir las miradas de todos y ver que en realidad no le importa “¿Cuán fría me he vuelto?”


Hello!

Quise publicar ese cap porque capaz no publique la otra semana por ello, quise hacerlo ^^

Por cierto, el vídeo lo hice yo, sé que quedó mal pero ahí está. Es la canción de Nami, donde se expresa en verdad todo su sentir xD

Espero que disfruten, y que tengan un lindo día tarde o noche

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro