—¡Sehyung! —gritó al entrar, caminando con determinación y muy molesta, apenas siendo detenida por su esposo para no lanzarse a golpear al líder— ¡quiero una explicación ahora mismo!, ¡¿qué demonios es eso que está diciendo esa chiquilla?!

—Estoy averiguando al respecto.

—¿Averiguando?, ¿no deberías tener la maldita certeza de que es falso?, ¡¿cómo que mi hijo va a compartir a su esposo?! —golpeó la pared, rompiendo un poco de la madera.

—Sabes lo que significa para nuestro hijo, ¿no? —habló Sik.

—Soy consciente de eso y no saben cuanto lo siento…

—Todavía no lo sientes, dónde todos esos idiotas se atrevan a ver mal a mi hijo no me contendre de venir a golpearte por invitar a un forastero a nuestras tradiciones sin tener la prevención de comprobar que no es de esos coleccionistas de esposos —advirtió la mujer y salió, Sik vio acongojado a Sehyung antes de darle la espalda.

—La unión fue bendecida y todos lo presenciamos, así que no permitiré que se hable de tu hijo.

—Eso espero —dijo antes de salir.

Dejando una terrible sensación de culpa en el líder, había herido a su mano derecha, confidente y mejor amigo.

Y eso no se lo podría perdonar nunca.

—¿De donde sacas esas tonterías?, deja de estar esparciendo esa mentira o mi puño te hará lamentarlo —amenazó Ji Eun.

—Yo lo escuché cuando fui a recoger la charola, no es ninguna mentira.

—¿Estabas espiando?, tu trabajo solo es recoger la comida y dejárselas, no husmear —regañó.

—Estaban gritando, no pude evitar escuchar y es algo que tenía que avisar para ver qué podemos hacer.

—¿Y para eso se lo tenías que decir a medio Clan? —cuestionó Tae bufando— ¿por qué fuiste tú en primer lugar?

—Yo sólo…

—Yo le pedí que fuera, no me sentía bien —mencionó Ji Eun.

—Pues ahora tienes que arreglar esto, solo a ti se te ocurrió mandar a Chowon sabiendo lo metiche y mentirosa que es.

—¡No es mentira! —insistió molesta.

—Tú vas a ir con todos y decir que escuchaste mal sino quieres que te arranque la maldita lengua —dijo tras de ella la madre de Jimin— no voy a permitir que el nombre de mi hijo se manche por culpa de una chismosa como tu y por tu bien espero que lo hagas ahora mismo.

—¡Yo no escuche mal! —habló molesta.

—En ese caso… —sacó una daga de su bolsillo y la apuntó.

—Yo me encargo de hacerlo —mencionó Ji Eun— el brillo que todos vimos debe ser suficiente para convencerlos de que ella miente, mañana Jimin recibirá su bienvenida como debe ser.

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Jungkook estaba muy confundido, el castaño no lo dejaba acercarse como antes, lucía demasiado serio y cabizbajo, lo que sólo lo hacía sentir impotente por no saber qué hacer.

—Jimin…

—Es hora de irnos.

—Primero quiero estar seguro de que estamos bien, te aseguro que es lo único que olvide decir, no hay nada más oculto.

—Bien, ahora hay que irnos —acomodó su katana y cargó las maletas, sin dejar convencido al pelinegro pero imitó su acción y cargó las que faltaban, tomando la mano de Jimin para regresar.

Del otro lado del camino estaban los padres y amigos de Jimin, que les sonrieron pero no con el mismo entusiasmo de antes, el líder llegó poco después así que dejó ir a su esposo con sus padres mientras él se acercaba al líder en busca de respuestas.

—Cariño… —Lo abrazó su madre.

—Lo siento, les fallé —habló sin poder responder al abrazo, con una lágrima bajando por su mejilla.

—No Jimin, no lo hiciste —aseguró su padre limpiando la lágrima y besando su frente.

—¿Ya saben que…?

—Si y estoy segura de que después de tenerte, se deshará de esos dos, eres un digno Park perteneciente al clan Dal, solo debes esperar, Ishtar no se equivoca y ese brillo lo respalda.

—Así es, nunca había brillado de esa forma —apoyó Ji Eun.

—Ya nos encargamos de decir que era mentira ese rumor de Kook, no debería de haber problema, recuerda que lo indignante es que después de su unión tu pareja consiga a alguien más —recordó Tae— y ese no es tu caso, desde que te vio quedó flechado por ti, no habría regresado y esperado este enfrentamiento teniendo opciones más fáciles.

Jimin sintió un poco de peso menos en su pecho por las palabras de ánimo.

—Jungkook, hay algo que necesito hablar contigo.

—También yo señor, creo que… el hecho de que tengo a otros esposos hizo enojar mucho a Jimin y no precisamente por olvidar decirlo, creo que es por tenerlos.

—Entonces es cierto… —murmuró con pesar.

—¿Cuál es el problema?, son conscientes de que es algo normal, ¿no?, hay quienes tienen más de seis, tampoco es como que yo sea alguien que busca llenarse de parejas de ese modo, con Jimin son tres.

—Lo somos y entiendo, la culpa ha sido mía, fui yo quién quiso hacerte parte de la tradición del Clan sin asegurarme de que fueras soltero, verás… sabemos que es algo normal para ustedes pero aquí somos exclusivos en ese aspecto, como seguidores de Ishtar nosotros… no tenemos el carácter para compartir.

—¿Qué se supone que haga entonces?, no quiero incomodar a Jimin.

—No se puede hacer nada, ganaste el reto y su familia aceptó cuando se realizó, además de que ustedes… ya estuvieron juntos, tendría que haber otro duelo.

—¿Otro duelo? —cuestionó— ¿para deshacerse la unión?

—Si, pero…

—No —cortó de inmediato— no quiero separarme de Jimin.

—Entonces tendrás que tenerle paciencia para ver si se adapta y si eso no funciona la otra opción es…

—¿Qué?

—Somos exclusivos Jungkook, esa sería la otra opción —mencionó haciendo pensar al pelinegro, notó a la madre de Jimin acercarse a ellos.

—Deberían desayunar antes de irse, ¿por qué no pasan a nuestra casa?

—Si Jimin esta de acuerdo entonces no tendré ningún problema.

—Perfecto, entonces andando, es un viaje largo y haré para que lleven para el camino —avisó dando la vuelta para caminar a su casa con los demás detrás.

—Piensa en lo que hablamos, por favor tenle paciencia y comprende su actitud, la culpa de esto es mía, debo irme.

—Esta bien —dijo y enseguida fue detrás de Jimin, volviendo a tomar su mano.

—¿Cómo les fue con mi petición de los nietos?, espero que pronto tenga noticias de que mi hijo está en espera de un precioso bebé —mencionó la mujer al llegar a la casa.

—Es probable, aunque para mayor seguridad seguiremos intentando —mencionó besando la mano de Jimin, que se mantuvo en silencio.

—Es una buena idea, no dejen de intentar, eso hice con Hoseok y ya estamos en espera de nuestro primer bebé —dijo con emoción y Jimin la miró con sorpresa.

—¿Ya estás esperando un bebé?, ¿por qué no me habías dicho?

—Estabas con tu esposo, me enteré después de tu boda, por eso no fui yo quién recogió la charola, no me sentía bien —explicó con culpa.

—Felicidades, deben estar muy felices —mencionó sin rencor.

—Lo estamos y nada me daría más felicidad que saber que pronto lo estés tú también.

—Eso todavía no es seguro, recuerda que el lazo debe ser especial.

—Yo creo que es un hecho eso, pero sólo Ishtar sabe eso, solo nos queda esperar —habló Tae.

—La comida está lista —avisó Sik, quién se había mantenido callado.

Luego de un desayuno que fue un poco ameno por las conversaciones de sus amigos y madre, llegó la hora de partir, Jimin  tuvo que respirar hondo al no sentirse listo para su nueva realidad.

Así como tampoco estaba seguro de poder seguir los consejos que le habían dado.

—Espero poder verlos para cuando mi bebé nazca.

—Haremos lo posible por que así sea, cuídate —habló Jungkook.

Jimin abrazo a su padre, madre, Tae y por último a su amiga, la cuál le dio un frasco en la mano mientras murmuraba para él.

—Sólo es otra opción para que seas el único —se separó y lo vio decidida.

—¿Esto es…?

—Si, así que sé discreto.

Jungkook terminó de colocar las maletas en los caballos y espero con paciencia a Jimin, dejando que se despidiera tomando su tiempo ya que sería complicado realizar visitas seguidas.

Por el contrario, Jimin no estaba seguro de volver…

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—No vamos a hacer nada más que dormir estando a mitad de la nada —declaró alejándose de Kook.

—¿Por qué no?, nadie nos verá, ya es de noche y no es un camino que suela ser usado.

—¿Cómo sabes eso?, ¿ya lo hiciste con esos otros aquí? —preguntó molesto.

—Claro que no, pero suelo viajar mucho, ¿recuerdas? Y me gusta quedarme a dormir por aquí debido a eso.

—No tengo ganas de hacer nada más que dormir —se acomodó en la improvisada cama.

—Aún… —murmuró copiando la acción pero abrazándolo por la espalda, rozando su entrepierna con el trasero de Jimin así como respirando en su cuello.

—Jungkook, te dije que… solo dormiremos —mencionó sintiendo como su cuerpo empezaba a calentarse, detestaba tener esa reacción en cuanto era tocado por el pelinegro, era como un intenso fuego que lo calentaba sin ningún problema.

—Te escuché, solo me acomode para dormir —respondió inocente, pasando sus manos por el pecho, rozando a propósito sus pezones y pelvis, conociendo ya que esas zonas eran la debilidad de su esposo.

—No podré dormir si estas así —mordió su labio para evitar hacer algún ruido y reteniendo las ganas de moverse para obtener más caricias, lo que sólo agitó su respiración, Jungkook sonrió y se movió de nuevo, esta vez besando detrás de la oreja del castaño.

Provocando que Jimin no aguantara más y soltara un gemido mientras se movía más a la entrepierna de Jungkook.

—¿Ahora si podemos hacerlo?

—Ahora te voy a golpear si no lo hacemos.

Dijo molesto y Jungkook no perdió el tiempo en moverse al quitar la ropa de Jimin para tocar mejor.

“—Hazlo con él en cada oportunidad, muestrale lo apasionados que somos en el Clan Dal, la razón de nuestra exclusividad ya que somos capaces de satisfacer a cualquiera y hacerlos adictos a nosotros, nunca sentirá necesidad de tocar a esos dos de nuevo ya que en su mente estarás solo tú”.

Había dicho convencida su madre, tenía que ser atrevido y coqueto, cosas que no le costarían mostrar antes de enterarse que tenía a esos dos, pero si lo veía como una competencia…

Quizá de esa forma su orgullo lo haría hacerlo.

Así que con eso en mente tomó el rostro de su pareja y lo acercó para un beso intenso entre las estocadas que le daba, rozando su lengua en los labios del pelinegro y alejándose al sentirlo acercarse por más hasta escucharlo gruñir por esa acción y juntar sus bocas de nuevo para continuar, introduciendo ahora si su lengua.

Lo dejó dominar lo en el beso unos segundos antes de volver a separarse sin permitir volver a juntar sus labios.

—Maldita sea Jimin —se quejó pero no pudo decir más ya que fue puesto bajo el cuerpo del castaño que sonrió, dejando solo un casto beso en su labio inferior antes de empezar a moverse arriba y abajo.

Acariciando el pecho de Jungkook y usando de palanca uno de los hombros de él para acelerar sus movimientos mientras con la otra mano se tocaba sin contener sus gemidos.

—Ah… Kook… —murmuró.

—Vas a matarme… —mordió su labio por la vista— eres el mismo pecado en persona —dijo antes de poner ambas manos en las caderas del castaño, subir sus piernas y empezar a embestir más fuerte y rápido.

—¡Ah, joder! —gimió— ¡no te detengas! —ordenó al sentir que estaba apunto de correrse y lo hizo poco después al ser nalgueado por sorpresa, manchando el pecho y un poco del rostro de Jungkook, que no detuvo sus embestidas hasta que también enyaculo dentro de Jimin.

Se dejó caer a un costado del pelinegro para recuperar el aliento, avergonzado de sentir como el semen se deslizaba por su trasero.

“—Quizá sea difícil pero tendrás que ser lo más empalagoso posible, sin llegar a ser molesto, pero debes demostrar a todos que eres el favorito, dispuesto a complacer siempre a su pareja y satisfacerlo en todos los aspectos”.

Recordó sin estar convencido de hacerlo, en su lugar se empezó a levantar para buscar con que limpiarse, haciendo a Jungkook abrir los ojos y verlo.

—¿A dónde crees que vas?

—A limpiarme.

—Todavía no —se sentó y lo jaló hacia él, llevando una mano a su manchada mejilla por el semen de Jimin y llevándola a su boca— aún no tengo suficiente de ti —llevo uno de los pezones a su boca y empezó a lamer y succionar— y para ser honesto… dudo llegar a hacerlo.

Espero que no sea muy incómodo para ustedes leer algunos capítulos con guión largo y otros con el corto, por más que lo cambie, wattpad lo vuelve a modificar 😤