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¿Divorcio?

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Se escucha una fuerte carcajada por todo el estudio, ocasionando que la misma Suran se quede paralizada al igual que su primo escuchando detrás de la puerta.

— ¡¿Qué es lo gracioso?!.- lo pregunta y grita una Suran furiosa.

¿Acaso se esta riendo de ella?.

— Tú - se lo responde simplemente al seguir riendo, demostrándole que ella le causa gracia.

No entiende, ¿Qué es lo que le sucede a Yoongi?, ¿Cómo puede burlarse de esa manera de Suran?, ¿acaso no la ama? ¿Qué pasa?

— Ahora si eres tan amable de irte de mi casa- lo dice el propio pelinegro sin dejar desaparecer esa sonrisa burlona de sus labios.

— ¡¿Y dejarte con ese?!.- se lo pregunta histérica.

— Es mi esposo y debes comenzar a comprenderlo.- se lo hace saber algo ya molesto.

¿Cómo puede aparecer después de cuatro años y decirle simplemente que ya quiere casarse con él? . Esa mujer esta loca, ahora que tiene prestigio decide retomar de nuevo su relación, pero ahora se equivoca, se ha dado cuenta en ese tiempo que un pequeño peliazul se ha encargado de llenar una parte muy importante de su vida y corazón, algo que puede comenzar ya a definirlo como amor.

— ¡Divorciate de él!.- lo grita furiosa perdiendo los estribos.

— No lo haré - se lo responde con esa voz seca.

— ¡Tienes que hacerlo!.- lo grita de nuevo Suran, como si eso fuera tan importante.

— Lárgate o te sacaré a la fuerza y créeme, no querrás caer en el barro.- advierte secamente con esa cara de pocos amigos, ya terminaron los chistes y debe de deshacerse de esa mujer antes de que su Jimin baje.

— ¡No lo harías!.- chilla, como si no creyera que Yoongi es capaz de ello.

— Claro que sí, así que desaparece.- se lo responde simplemente al dar un paso el cual la mujer retrocede.

— M-me iré, p-pero seguiremos e-esto en otra ocasión.- logra decir balbuceando un poco al retroceder lo necesario para pegarse con la puerta.

— Estas perdiendo tu tiempo.- escucha las palabras graves de su esposo acercarse hacia la puerta a lo cual debe de pensar o actuar rápido para que no sepa que los ha estado espiando, así que decide subir las escaleras, para quedarse a la mitad, al abrirse la puerta y girarse al fingir que apenas va bajando.

— Vaya, vaya pero si es mi adorado primo.- lo dice cínicamente Suran al salir del despacho y ver a Jimin, con aquel porte, llevando consigo al heredero de la fortuna de los Min y Park.

— ¿Qué ha...

— Ya te vas Suran. - lo interrumpe Yoongi al caminar en dirección donde esta Jimin para esperarlo debajo de las escaleras, observando como este baja con cuidado, debido al peso de su bebé.

— Pero...

— Adiós - interrumpe Min, al tomar la mano de su esposo, puede ver a ambos tan parecidos pero tan diferentes, tal vez ahora se da cuenta que algo en él culpaba a Jimin por la pérdida de Suran, por ese parecido de primos que ambos tienen, pero ahora que Suran volvió se ha dado cuenta que todo fue una ilusión, que ahora su corazón realmente esta cautivado y no su orgullo.

Ve como su prima da un golpe en el suelo con sus tacones, como si con ello fuera a tener de nuevo la atención de Yoongi, pero ahora este está en claro que lo esta atendiendo a él y omite a su prima.

— Yoongi.

— Lo siento Shin, pero mi esposo y yo tenemos que salir.- lo anuncia al caminar hacia la puerta con un Jimin a su lado tan radiante, dejando atrás a su prima furiosa- Anda cariño nos espera el jeep.- se lo informa para tomar una gabardina del lugar donde se colocan estas, tal vez volverían algo tarde y parece ser que se hará el aire algo fresco.

Comienzan a bajar las escaleras del lugar para dirigirse al jeep, con una Suran siguiéndoles al murmurar palabras ofensivas como si con ello arreglara todo.

— ¡Tenemos que terminar nuestra conversación Yoongi!.- lo grita furiosa Suran al tomar la atención de ambos.

— No hay nada que seguir discutiendo.- lo dice simplemente el pelinegro al abrir la puerta del jeep para ayudar a subir a Jimin, cosa que con algo de dificultad lo logra- ¿Estás cómodo cariño?.- pregunta tiernamente al ignorar cualquier reclamación de esa mujer.

Asiente un sí con la cabeza, no puede hablar al sentirse así en el paraíso, Yoongi lo ha escogido por encima de su prima y eso le causa tanta felicidad que desea besar a su esposo, pero no se atreve así que solo enfoca su vista a los sensuales labios de Yoongi.

Min ve los ojos de Jimin brillar de esa forma sensual, haciéndolo sonreír al saber que desea su esposo, desde que lo conoce sus ojos verdosos expresan lo que realmente siente en esos momentos y puede adivinarlo, quiere besarlo.

Se escucha un chillido, llamando la atención de algunos de los trabajadores a sus alrededores para ver a la señorita vestida, de un vestido rojo sensual, para seguir enfocando su vista en la pareja de enfrente, sus patrones. Ambos unidos en un dulce beso, donde el joven esta situado encima del jeep, para irse a los pastizales más hacia el norte del rancho, pero el señor sin ninguna dificultad logra besarlo en ese estado.

Suelta un sonoro suspira al separarse de los labios de su esposo sin atreverse abrir sus ojos, sintiéndose un chiquillo en la plena adolescencia como si Yoongi fuera su primer amor, o más bien lo es.

-—Anda cariño tenemos que ir, Lysook ya nos dejó algo para el almuerzo.- habla para darle la vuelta al jeep verde y fijar su vista en la canasta que hay en la parte trasera.

— ¿¡Y yo que voy hacer?!.- lo grita y reprocha la misma Suran con aire furioso.

— ¡Desaparecer!.- lo responde triunfante Yoongi al encender el jeep e irse del lugar.

Apenas es capaz de creer lo que le ha hecho Yoongi a ella, a ¡Shin Suran!, ella que fue una gran conquista para ese hombre, ¿Cómo puede despreciarla de esa manera?.

Ya verá, esto no se queda así, no pensaba acudir a eso pero así será y se las pagará Yoongi por humillarla de esa forma, además de que su primo también sufrirá por robarle a ese hombre.

Min Yoongi se divorciará de Park Jimin.

Con ese pensamiento sube a su convertible rojo para salir del lugar, pero a su vez saca el celular del mismo tono para marcar algunos números y con una sonrisa malévola decir un:

— Bueno, ¿tío Heeso?.




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Se siente tan agotado en esos momentos que ha dejado que Yoongi lo mime todo el tiempo, lo acaba de sacar de bañar, por estar tan pesado lo había dejado un rato en el jacuzzi mientras él mismo salía por su pijama y la cena, el camisón él mismo se lo puso, para cambiarlo en la cama y ahora dándole de comer la cena que ha preparado Hyuna.

— ¿Te sientes bien?.- lo pregunta Yoongi al darle un trozo de pan dulce.

Asiente un sí levemente tratando de controlar esas ganas de quedarse dormido, pero le es tan imposible; el baño lo ha relajado hasta terminar por querer dormir en la cama suave y al lado de Yoongi.

Ve como su esposo comienza a dormitar un poco al tomar el vaso de leche, y retira con cuidado todo para dejarlo en la mesita de a lado y acomodar a Jimin cómodamente en la cama, al susurrarle un buenas noches y besarlo en la frente cierra sus ojos para perderse en el mundo de los sueños, dejando que su esposo comience a observarlo.

¿Podría sobrevivir sin ese chico?.

La respuesta es no.

No puede ver su futuro sin él, ahora es cuando se da cuenta que Jimin es muy importante para su vida y Suran pertenece a un pasado donde solo su orgullo era el que regía toda sus acciones.

Por lo menos Jimin ese día lo gozó, se la paso en el jeep vigilando las reces y los borregos a su alrededor, algunos que corren por ser primavera y desean el poder tener la mejor porción de pasto nutritivo.

Todavía recuerda la sonrisa y risa de su pequeño en aquel lugar, tuvieron que quedarse a comer ahí debajo de uno de los grandes árboles del racho pero lo disfruto tanto que era tan capaz de hacerle el amor en esos momento a la luz de todos los animales, aunque todavía lo desea, pero tal vez cuando su pequeño haya nacido llevaría a Jimin a un paseo nocturno, donde le podría hacer el amor hasta saciarse debajo de las estrellas.

Con su mano retira un mechón del cabello azulado de Jimin que cae en su rostro, para pasarlo por detrás de su oreja donde gracias al largo de su cabello puede sostenerse sin ningún problema.

— Yoonie... - lo suspira de forma tierna Jimin entre sueños.

— Mi pequeño Jiminie...- lo susurra suavemente el mismo pelinegro con las mejillas rosadas gracias al apodo, con lentitud se inclina a besar suavemente aquellos gruesos y apetitosos labios, solo rozarlos para recordar su textura, la misma que tanto adora, una misma droga para él, Min Yoongi.

Ahora debe de llevar todo para poder declararse con ese dulce doncel, ya dentro de unos días, tal vez en él día de su cumpleaños que esta próximo podría decirle a Jimin que se ha enamorado de él.

Y el mejor regalo que podría tener ese día es que su chico le corresponda con el mismo amor que siente él ahora.






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Se mueve un poco, todavía se siente algo cansado, pero algo lo mantiene rodeado haciéndolo sentir seguro, no puede ser Yoongi él debe de encontrarse trabajando en el rancho a esas horas de la mañana, y puede saberlo por que la luz del sol penetra fuertemente en la habitación.

— ¿Cómo has dormido?.- lo pregunta una voz masculina como si apenas estuviera vocalizando sus cuerdas vocales.

Mueve su rostro hacia el otro lado, solo para descubrir a la persona a su lado.

Yoongi.

— ¿Qué haces aquí?.- le pregunta un Jimin todavía algo dormido.

— Es mi habitación.- se lo responde algo confuso el propio pelinegro.

— Lo sé, pero ¿No debes de estar trabajando?.- lo concluye preguntando Jimin al sentirse confuso, raras veces se despierta con el pálido a su lado, la mayoría de las veces es solo, mas bien todas las veces desde hace meses, ¿Por qué ahora se queda con él?

— ¿Ya tan rápido quieres deshacerte de mi?.- lo pregunta en un tono complemente fingido Yoongi, al seguir abrazando a su esposo.

— No, claro que no.- responde sin llegar a pensar su respuesta, solo la recapacita cuando ya puede ver la sonrisa en los labios de Yoongi, haciéndolo sentir tan vulnerable.

— Perfecto...- lo murmura suavemente Min al mover una de sus manos por todo el vientre de su chico, sintiendo unas pequeñas pulsadas en el lugar maravillándose por las reacciones de su pequeño.

— Se esta haciendo notar.- lo dice dulcemente Jimin al sentir como el bebé de ambos reacciona ante las caricias de su padre.

— ¿Crees que tenga tus ojos?.- lo pregunta Yoongi al acomodarse sobre su codo y seguir recorriendo con la mano libre el vientre hinchado de su esposo.

¿Qué si iba a tener sus ojos?, ¡bah!, esta mas seguro de que su bebé se parecerá a Yoongi.

— ¿Por qué no?.- se lo pregunta al ver negar a su esposo con la cabeza.

— Dicen que los varones se parecen mas al padre y las niñas se parecen mas al doncel o a la madre.- informa con una sonrisa al sentir dos golpecitos juntos.

— Entonces tendremos que tener una niña más adelante.- se lo hace saber con una sonrisa Yoongi al fijar sus ojos en los ojos de Jimin, como si con ello quisiera darle entender algo.

— ¿Niña?.- lo murmura preguntando algo sorprendido, ¿Quiere Yoongi una niña?.

— Podría ser el primero de los Min que tiene una nena.- se lo hace saber con esa sonrisa al seguir acariciando el cuerpo de su esposo, dejando el vientre para dar círculos en los ahora voluminosos pechos.

— ¿No te molestaría?.- pregunta al no estar tan conciente ya de la conversación, al sentir esas caricias en sus pechos estos comienzan a ponerse duros e inflamados al igual que su cuerpo.

— En absoluto.- se lo dice a Jimin, mira con ojos brillantes lo que ocasionan sus caricias en el cuerpo de su esposo.

— Ah - ese quejido sale de los labios de Jimin al cerrar sus ojos y poder arquear su cuerpo para seguir sintiendo los dedos de Yoongi deslizarse por todo su cuerpo.

Disfruta de las reacciones del cuerpo del peliazul, desea tanto desnudarlo e introducirse en él que su cuerpo ya comienza a reaccionar de una manera tan calurosa que lo asfixia.

— Yoon - lo gime al sentir como la mano entera de Yoongi se posa encima de su pecho.

¡Mierda! si no lo tiene ahora podría explotar o tendría que tomarse una ducha de agua en hielos.

— Dime - lo hace saber con aquella voz tan ronca y profunda que ocasiona que la sangre de Jimin comience a recorrer todo su cuerpo de una manera tan calurosa.

— Yo... bésame.- lo concluye con esa voz que apenas se escucha, al seguir un gemido salir de sus labios.

¡Ese chico lo vuelve loco!.

Siente como Jimin ladea su cabeza para buscar sus labios lo cual el mismo permite que sus labios se junten, pero primero atrapa con sus dientes el labio superior de Jimin jugando con el de una manera tan sensual que logra que su mismo sexo se levante hasta el punto de querer explotar y liberarse de esa tensión, pero lo hará cuando este dentro de Jimin.

Suspira al mismo tiempo que un gemido sale de sus labios, es como si los labios de Yoongi estuvieran tan exigentes, tan sensuales que todo su cuerpo arde, su sexo se encuentra duro y su ano tan dilatado que puede sentir como el liquido sale de el, al mismo tiempo que las manos de Yoongi desabrochan los tres botones de su camisón.

— ¡Oh! - escucha a los lejos la voz ronca de Yoongi, tan sensual al tiempo que las manos de su esposo se posan en sus costados donde la cintura esta perdida.

— Jimin tengo... que hacerte m-mío.- lo jadea Yoongi al inclinarse y seguir besando sus labios.

Esa es su maldita droga.

Su respuesta no la da en palabras más bien en acciones al separar sus piernas y dejar que poco a poco Yoongi suba en él para quitarse los pantalones.

— Tratare de ser amable...- lo susurra la voz ronca de Yoongi al estar arriba de Jimin al soportar su peso con sus brazos estirados para no hacerle daño al bebé.

Asiente un sí con sus pupilas tan dilatadas de ese calor que lo recorre, que es capaz de desear con toda la lujuria del mundo a su marido.

Los labios de Yoongi se inclinan a capturar esos pezones algo oscuros, ¡tan deliciosos!, que apenas es capaz de sentir como sus brazos consiguen flexionarse solo un poco para degustar aquel sabor, si su hijo tendrá que mamar más a delante sería capaz de dejar el trabajo para ver el placer de hacer aquello.

Apenas es capaz de sentir como Yoongi lo toma en sus brazos, logrando incorporarlo para quitarle el camisón y dejarlo en el suelo junto con sus boxers, avergonzándose un poco por su apariencia, pero parece ser que a Yoongi aquello no llega a importarle por que vuelve a recostarlo para seguir lamiendo su cuello y continuar con sus pechos.

— La luna es testigo de como deseo esperar, pero no puedo - lo dice jadeando y gimiendo el mismo Yoongi al sentir las suaves manos de Jimin sobre su pecho,

¡Mierda!

— No esperes - lo gime Jimin al saber que también él desea estar unido de esa forma con su esposo.

Se escucha un fuerte gruñido, para saber que Yoongi ya se encuentra dentro de Jimin, sintiendo como las paredes de este lo acogen en ese lugar, tal vez él lugar donde esta su hijo sea el impedimento para que él mismo desate toda esa pasión y la imaginación sexual, pero está claro que cuando Jimin se recupere podrá hacer que esa imaginación vuele hasta el mismo cielo.

Mueve sus caderas conforme a la aceleración de Yoongi abrazándolo por lo menos para juntar sus cuerpos, apenas es consiente de que su mente se encuentra en otro lado ya que se encuentra ahora vacío, y su alma tan unida a Yoongi que le duele.

¡Mierda!

Los movimientos siguen con ambos, gime profundamente al sentir como las uñas de su esposo se clavan en su espalda convirtiendo eso en un deseo sexual tan solicitado, deja que él mismo lo muerda.

Explota dentro de Jimin atrapando entre sus brazos el cuerpo convulsionado de su esposo, para por fin sentir como ambos se relajan hasta el punto de perder la conciencia, cayendo el mismo a lado de su esposo al separarse.

Da un suspiro para tratar de mantener tranquila su espiración, pero aquello le es inútil ya que se siente tan tembloroso que es incapaz de ponerse de pie sin caerse.

Por su parte Jimin siente lo mismo, cerrando sus ojos para dejar ver esa sonrisa, las anteriores veces no había sentido eso, tanto deseo sexual y tanta ternura, tal vez por que no había reconocido antes que amaba a Yoongi, y por ello ahora fue diferente.

Envuelve con sus brazos el cuerpo de Jimin dejando que comience a acorrucarse a su lado como un gatito mimado.

— Yoonie... - lo susurra apenas audible Jimin, suspirando para quedarse dormido, plenamente en los brazos de su esposo.

¿Esto es lo que se siente al estar enamorado?, un deseo de paz infinito.

Eso quiere decir que ama a Jimin.

Lo ama.






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Se estira perezosamente en la cama, manteniendo esa sonrisa en sus labios sin querer abrir sus ojos, pero algo le hace sentir tan feliz, algo en su mismo ser que no es capaz de expresarlo con palabras.

Comienza a oler un rico aroma en la habitación, como jugo de naranja, beicon y algo de pan tostado, haciendo que su estomago cruja ante ello.

Se incorpora al abrir sus ojos, observando en la habitación que se encuentra solo, ¿Yoongi?, se pregunta, ¿acaso lo ha dejado solo?.

Fija su vista en su cuerpo y lo nota desnudo, rojo e hinchado como expresadole lo que acaba de sucederle horas atrás, para sentir cosquillas por todo su cuerpo.

Se sienta en la cama para contemplar el desayuno que esta situado en la mesita de noche, se ve tan delicioso que su cuerpo exige que lo pruebe pero antes desea vestirse o por lo menos ponerse algo, y podría ser algo de su esposo ¿Por qué no?.

Así que se encamina desnudo hacia los cajones de Yoongi tomando una de las camisetas para cubrirse la parte de arriba con su vientre, para abrir los cajones donde esta uno de los pantalones que usa de deporte, los cuales le quedan perfectamente gracias a su vientre abultado.

— ¿Así que ya despertaste?.- pregunta una voz masculina a la entrada de la habitación, ocasionando que Jimin se gire y se le iluminen esos ojos verdosos al ver al hombre de sus sueños.

Asiente un sí con la cabeza sonrojándose al verlo por completo, debidamente vestido con lo de siempre; unos vaqueros, una camisa de cuadros, las botas, esa chamarra de cuero y el sombrero que ahora comienza a quitárselo para lanzar lo hacia donde esta la silla.

— Veo que estas cómodo- lo menciona Yoongi devorando a su esposo con la mira.

— ¿No te importa verdad?.- se lo pregunta algo inseguro Jimin al ver su vestimenta.

— Por supuesto que no...- se lo hace saber con esa voz ronca, sintiéndose enteramente lleno con ese doncel, con su ropa se ve tan exquisito que desea volver a devorarlo.

— Voy a desayunar, ¿Quieres un poco?.- se lo informa y termina preguntando Jimin al caminar hacia donde esta su bandeja de comida.

— Come tú, yo ya he desayunado.- lo informa al caminar hacia donde esta su esposo y ver como toma del vaso del jugo de naranja.

— ¿Sucede algo?.- se lo pregunta Jimin a Yoongi al verlo tan serio y solo le mantiene la mirada en él.

¿Qué si sucede algo?.

¡Oh claro que si!.

Y eso es por que desea todavía a ese chico de cabellos azules, desea fundirse en él de nuevo, desea hacerle el amor hasta agotarlo y dejarlo inconsciente entre sus brazos, pero sabe que eso no es posible por que Mark se lo acaba de prohibir.

Mugre Mark.

"Tu deseo carnal en estos momentos debe pasar a segundo grado, si haces el amor con él debe de ser una vez por día, no puedes agotarlo a él y al niño."

Malditas palabras.

— ¿Yoongi?.- lo pregunta Jimin al llevarse un trozo de beicon a su boca.

Mueve la cabeza como si sus pensamientos fueran tan pervertidos que desea alejarlos, pero ¿Cómo alejarlos cuando tiene al chico mas sexy delante suyo?.

¡Es una tortura!.

— Iré a recorrer el rancho, tu hermana viene conmigo al igual que Hyuna y Lysook, mi madre no tarda en subir para hacerte compañía.- se lo informa Yoongi al ver el opaco color en los ojos de Jimin de decepción por que él mismo desea recorrer el rancho con él.

— Te llevaría con gusto, pero no puedo cariño. Son ordenes de Mark...- se lo explica al tomar la barbilla de Jimin entre sus dedos para obligarlo a mirarlo- Tenemos que tener cuidado cariño, por ello necesito estar al pendiente de ti en todo.- lo dice al inclinarse a besar los labios de Jimin, resistiéndose a la tentación de tumbarlo y saciarse por completo de él aunque cree que eso sería imposible.

Se deja llevar por los labios de Yoongi, sabiendo bien que su corazón y mente solo desean gritar una cosa:

Te amo.





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— ¡Así que esa arpía ha estado en la casa de nuevo!.- lo exclama furiosa Sammy al estar sentada en la cama con su yerno- Ay querido lo siento, sé que es tu pariente, pero no es bien recibida en esta casa, lo siento.- se disculpa al ver a Jimin, apenas se ha enterado de ello, ¿Cómo dos primos pueden tener un parentesco físico como hermanos cuando interiormente son tan diferentes?.

— No se preocupe.- se lo hace saber el ojiverde, algo avergonzado de saber que Suran es su prima.

— Tú no tienes la culpa cariño, es esa mujer, la detesto por lo que le hizo a mi Yoongi.- se lo informa sin darse a parar que Jimin no sabe la verdad.

— ¿Por eso no quiere que ella aparezca por aquí?.- lo pregunta Jimin, como haciéndose el que sabe de todo lo que paso.

— ¿Qué madre es capaz de perdonar a la mujer que estaba apunto de casarse con su hijo, cuando lo dejaron plantando el día que se iba a anunciar el compromiso?.- se lo pregunta con toda esa información, como si realmente ninguna madre es capaz de perdonar a esa mujer.

El corazón de Jimin se detiene al escuchar "anunciar el compromiso"

¿Yoongi se iba a casar antes con su prima?.

— Bueno, la verdad es que Suran estaba interesada en que Yoongi le pidiera matrimonio e iba hacerlo, claro que a mi no me agradó la idea, desde que conocí a esa mujer no me gusto en absoluto.- comienza a decirlo distraídamente Sammy- Pero la noche que se celebra el aniversario del rancho, Yoongi tenía todo preparado para darle la sorpresa a esa, pero resulta que esa dejó plantado a mi hijo como pareja solo por que encontró a otro hombre con mas dinero, ¿puedes creerlo?.- se lo pregunta como si aquello fuera tan imposible- y lo peor es que fuimos el hazme reír de toda la sociedad, por que esa arpía dejo a mi Yoongi por otro hombre, esa noche estuve apunto de matarla.- se lo termina concluyendo la misma Sammy furiosa con el simple hecho de recordarlo.

— Oh...- es la única respuesta de Jimin, ¿Qué puede decir?, todo lo tiene impresionado.

— Ahora me alegro que mi hijo encontrara a un esposo como tu.- se lo hace saber la misma Sammy al ver a su yerno embarazado de su segundo nieto.

— Gracias. - lo murmura, y él esta agradecido de que su padre lo haya vendido a Yoongi y no a otro.

— Solo espero que esa arpía no se le ocurra volver, o seré yo la que tome cartas en el asunto.- lo amenaza Sammy al ver a su yerno, los dos están tejiendo algo para el bebé.

Desde que conoce a su prima, sabe que ella es capaz de todo por conseguir lo que realmente desea y lo que desea es a Yoongi, su esposo.

¿De que será capaz Shin Suran?.






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El teléfono comienza a sonar... lo cual parece que nadie puede contestarlo, apenas logra escuchar la regadera, parece ser que Yoongi se esta dando un baño, él se había quedado dormido poco después de que Lisa fue a verlo, platicándole de cosas agradables.

"¿Se mueve ya?"

La primera pregunta de Lisa al posar su manita en su vientre y como su respuesta fue un sí su hermana grito de emoción.

Le da tanta pereza moverse, que el teléfono es tan molesto que debe de contestar, alargando su mano al escuchar como la ducha se acaba en el baño.

— ¿Bueno?.- lo pregunta soñoliento Jimin.

— Me alegro que contestes tu... hijo - lo concluye una voz masculina bastante familiar.

— ¿Papá?.- lo pregunta Jimin, al abrir sus ojos enormemente.

— Claro que si, ¿Quién mas podría ser?.- se lo hace saber el hombre para preguntarlo como si esa pregunta fuera estúpida.

— Nadie...- lo balbucea débilmente al sentirse sin fuerzas.

— Te hablo para pedirte algo.- se lo comienza a decir Hesoo al soltar de una vez por todas por que hizo esa maldita llamada.

— No tengo nada de valor.- responde automáticamente Jimin.

— Tu no, pero Yoongi si.- se lo hace saber simplemente.

— ¡No!.- lo grita un Jimin angustiado, conoce a su padre y bien sabe que desea dinero, ¿acaso no le bastaron el millón de Won que pido por él?.

— Nada de no Jimin, solo deseo algo de dinero, hice una mala inversión y no tengo nada.- lo explica el mismo Hesoo.

— No puedo...- lo murmura débilmente Jimin.

— Sí puedes, sé que puedes, ese Min esta enamorado de ti, solo debes de pedírselo.- se lo hace saber sin escrúpulos.

¿Enamorado?, ya quisiera que Yoongi estuviera enamorado de él.

— No puedo...- lo murmura débilmente como si las lagrimas fueran a salirse.

— Tendrás que hacerlo, o bien puedo decirle a Taemin que vaya allá pero en lugar de pelear con tu esposo cuerpo a cuerpo, ¿te parece una arma?.- lo amenaza su propio padre.

— ¡No te atrevas!.- lo grita agitadamente Jimin, sintiendo como todo su cuerpo comienza a volverse tan pesado.

— Lo haré si no me dan el dinero, solo ocupo medio millón de Wones.- se lo concluye al soltarle la cifra.

— No...

Apenas siente como Yoongi le arrebata el teléfono, mostrándose tan molesto que es capaz de partirle la cara a alguien.

— ¡No se atreva a volver a llamar!.- escucha como Yoongi grita furioso, antes de colgar el teléfono.

Voltea a ver a su esposo ahora pálido sentado en la cama respirando con dificultad, apenas lleva los pantalones puestos, por ello se retrasó, ese imbécil de Hesoo.

— Tranquilo cielo, nada ha pasado - lo susurra tiernamente Yoongi al abrazar a Jimin que suelta en sus brazos a llorar.

Ese maldito de Hesoo, ya vera que tendrá que hacer para que legalmente ese ser despreciable se aleje de Jimin.






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— ¿Dónde esta Yoongi nana?.- lo pregunta Jimin hacia Hyuna la cual esta sentada en la cocina.

— En su despacho.- responde al seguir cortando las papas para comer.

— Bien...- se lo dice sonriente al inclinarse y besar la mejilla de su nana y salir del lugar.

Se dirige hacia el despacho de Yoongi, con entusiasmo hoy deben de ir a ver a Mark para que sigan con el ultrasonido y desea ver a su pequeño como ha progresado.

— ¡Ya te dije que si!.- escucha como su esposo grita algo furioso.

Pero si no hay nadie, no escucha la voz de nadie, ¿estará hablando por teléfono?.

— Ya relájate Suran, ya te dije que si, después de que nazca mi hijo me divorciare de Jimin.- lo dice ahora más calmado, haber si con esa mentira puede ganar tiempo antes de que le revele a Jimin la verdad de su nacimiento y en estos momentos no es lo prudente, según Mark ya mucha impresión es demasiada para su salud.

" Perfecto, entonces hasta dentro de dos meses cariño " se lo dice Suran melosamente por el otro lado de la línea.

¡Ahg! Esa mujer está loca, por nada del mundo dejará a su esposo, ya cuando llegue el momento le destrozará sus ilusiones, sin embargo no fue consciente de que rompía las ilusiones de alguien más.

¿Yoongi se va a divorciar de él?

Sus ojos comienzan a llenarse de lágrimas, su vista tan borrosa que apenas ve las manchas cafés de la puerta.

Yoongi se divorciará de él...




















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Min.

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