Jimin se encontraba en una cafetería tomando una taza de café mientras esperaba a Tae-Min. No había visto a su amigo desde el año pasado, él había ido a visitarlo cuando cumplió la mayoría de edad y descubrió su casta de Alfa. Cuando  Tae-Min le dio la noticia de que su casta era la de un Alfa le dio mucha alegría, Tae-Min siempre había anhelado ser un Alfa dominante y lo cumplió y eso lo alegraba demasiado.

Cuando llegó a Inglaterra pudo conocer a sus dos locos amigos, Taehyung y Hoseok. Ellos lo acogieron y le ofrecieron su amistad, fueron los únicos que se acercaron a él cuando estaba nuevo en una escuela que era desconocida para él. Y no se arrepiente de haber aceptado su amistad, ellos siempre estaban para él, ayudándolo y escuchandolo cuando lo necesitaba, gracias a ellos no se sintió solo todos estos años en Inglaterra, se convirtieron en su refugio y agradecía a la madre Luna de haberlos conocido.

—. Hola precioso ¿Estas solo?— hablo un Alfa que se había acercado a la mesa de Jimin

El pelirosa lo observo con desagrado y fastidio, el Alfa sonrió y le tocó la mano, pasando sus dedos por ella, Jimin gruño y en un rápido movimiento tomó la mano del Alfa y la dobló mientras lo observaba con autoridad—. Te atreves a volver  a tocarme la mano y te la arranco— amenazó Jimin mientras soltaba un gruñido

El Alfa se quejó y trató de zafarse de su agarre pero fue en vano—. Suéltame— ordenó el Alfa con su voz de mando, Jimin río divertido y dobló aún más la mano de ese Alfa

—. Tu voz de mando es inútil conmigo— gruño Jimin usando su voz de mando, el Alfa se estremeció y cayó al suelo mientras temblaba y sentía que le faltaba el oxígeno

Todos alrededor miraron sorprendidos y tragaron grueso, en ese momento se dieron cuenta que enfrente de ellos se encontraba un Omega puro, porque no había más Omega que el Omega puro que podía hacer temblar a todos los que estaban allí con solo usar su voz de mando.

Jimin soltó su mano y lo observo con arrogancia—. Vete— ordenó Jimin, el Alfa se levantó como pudo y salió corriendo con su orgullo totalmente herido al ser dominado por un Omega

Jimin se volvió a sentar, al hacerlo se escuchó como aplaudían, el pelirosa levanto la mirada y observó a Tae-Min quién estaba aplaudiendo.

—. El Jimin de hace cinco años jamás hubiera hecho eso, que miedo das Jiminnie— dijo Tae-Min sentándose frente a él

Jimin rodó los ojos y se encogió de hombros—. En cinco años una persona cambia, y yo he cambiado Tae— dijo mientras se cruzaba de piernas y lo observaba

—. Eso veo, ahora hasta me da miedo decirte algo que no te guste—

Jimin río suavemente mientras tomaba la taza de café y bebía de ella, Tae-Min lo observó unos segundos. Su amigo había cambiado, conocía a Jimin desde que eran niños y si, si tenía un temperamento un poco agresivo, pero él Jimin que veía aquí, al frente de él, era diferente, se veía imponente, autoritario, se ve como que de un sola palabra hiciera que todo el mundo se arrodillara enfrente de él. Creo que eso era ser un Omega puro, hacían que todos se arrodillaran frente de ellos, los únicos diez Omegas puros que existían, aunque él único Omega puro que conocía era Jimin.

—. ¿Recuerdas a Jungkook, Tae-Min?— preguntó, haciendo que Tae-Min saliera de sus pensamientos

—. ¿Jungkook?— Tae-Min puso su mano en su barbilla y la froto levemente, recordando quién era—. ¿Jeon Jungkook?—

Jimin asintió levemente mientras dejaba elegantemente la taza de café, Tae-Min le sorprendía de lo elegante que podía ser, pero recordaba que solo Jimin era educado, porque si dejaba de ser elegante y educado, podría derribar fácilmente a un Alfa con un golpe.

—. ¿Que pasa con él? — pregunto Tae-Min mientras tomaba de el café helado que Jimin había pedido para él momentos atrás antes de que llegara

Jimin lo observo y suspiro—. Es difícil de explicar pero creo que ese Alfa es mi destinado—

Tae-Min casi escupe el café que estaba tomando ¿Había escuchado bien?—. ¡¿Que?!— casi grito, Jimin lo miro de mala manera y Tae-Min se calló

—. Como escuchaste, creo que Jungkook es mi destinado, pero necesito confirmarlo y tu mi querido amigo me vas a ayudar para ir a verlo— dijo con una sonrisa que para Tae-Min significaba que si no le ayudaba se iba a arrepentir toda su vida

El castaño trago grueso y asintió—. ¿Que quieres que haga?—

Jimin sonrió satisfecho y apoyo su espalda en el respaldo de la silla—. Solo quiero que me digas donde queda su empresa—

Tae-Min enarco una ceja mientras volvía a tomar de su café helado—. ¿Solo eso?—

Jimin asintió—. Si, hoy en la mañana fui al antiguo edificio donde vivía anteriormente, pero resultó que ya no vive allí desde hace dos años, así que me da pereza decirle a mi Secretario que investigue sobre Jungkook, es más fácil preguntarte a ti, ya que tú familia hace negocios con su familia. ¿Estoy en lo correcto?—

Tae-Min asintió, lo que decía su amigo era verdad, su familia a veces trabajaba ilegalmente con los Jeon para conseguir más poder, acciones para la empresa o muchas cosas más que no recuerda.

—. Bien ¿Quieres ir ya?—

Jimin bebió el último sorbo de su café y asintió con una sonrisa—. Por supuesto, vamos—

Tae-Min se levantó de la silla y observó a su mejor amigo ¿Sera que le decía sobre el casamiento de Jungkook? Bueno, tal vez Jungkook ya no se casará al ver que encontró a su destinado, y ojalá que fuera así, porque si no su amigo sufriría las consecuencias, él y su lobo.

Jimin sintió a su lobo emocionado, sentía como daba vueltas feliz ¿Eso era una buena señal, no?. Por fin volvería a ver a ese Alfa, y podría averiguar cuál es su aroma y si es su destinado, aunque las dudas de ello ya se estaban esfumando, la curiosidad lo estaba matando.

......

Jimin bajó del auto y observó la empresa frente a él. No era tonto y sabía que Industrias Jeon's, solamente era una fachada para ocultar sus negocios ilícitos y ocultar su mafia, aunque era gracioso porque básicamente todo el país sabía de verdad quienes eran los Jeon pero nunca intentaron algo contra ellos.

Tae-Min lo observó—. Ya que eres Park Jimin, te dejaran entrar en un parpadear de ojos, yo la verdad no puedo entrar sin mis padres pero te traje hasta aquí, me debes un favor Jiminnie—

Jimin sonrió y asintió—. Bueno, gracias Tae, pero si quieres puedes entrar conmigo, si me dejan pasar a mi, te dejan pasar a tí—

—. Si pero si entró les avisan a mis padres y les dicen que estoy aquí, y no quiero un regaño de ellos al entrar yo solo literalmente a la cueva de los lobos— dijo Tae-Min apoyándose en su auto

Jimin suspiro y asintió—. Como quieras entonces— dijo dándose la vuelta para caminar hacia la empresa—. Te esperaré tranquilamente aquí Jimin— dijo Tae-Min con una sonrisa

El pelirosa entró a la empresa, la mirada de los guardias y las recepcionistas se posaron en él, Jimin se dirigió hacia ellas y las observó con superioridad—. ¿Esta Jeon Jungkook?—

La recepcionista miró a su compañera y río suavemente divertida—. ¿Y quién lo busca?—

—. Park Jimin, soy el hijo de Park Hee-Sung—

La recepcionista trago grueso y su cara burlona se desvaneció, que tonta había sido, como no pudo reconocer al hijo menor de los Park—. J-Joven Park, puede subir al piso 28, allí está la Secretaría del señor Jungkook— dijo con nervios mientras sonreía nerviosamente

Jimin asintió—. Bien, gracias— dijo para dirigirse al ascensor, al subirse presionó el botón del piso 28 y espero tranquilamente que el ascensor llegará a su destino, aunque parecía tranquilo, no lo estaba ya que su lobo lo hacia poner nervioso y demasiado.

Al llegar al piso, bajó del ascensor y camino elegantemente por el pasillo, observó a una mujer sentada cerca de la gran puerta que había al frente de él, seguro esa era la Oficina de Jungkook.

—. Buenas tardes, soy Park Jimin, quisiera ver a Jeon Jungkook— dijo Jimin mientras observaba cómo la Secretaría se asombraba por su repentino aparecimiento

La Secretaría lo observó y negó—. Lo siento, pero el señor Jeon esta en una reunión, pero puede agendar una cita con él— dijo respetuosamente

Jimin gruño y la miro fijamente a los ojos—. Entonces lo esperaré dentro de su oficina— dijo con autoridad en su voz, la Secretaría se asustó un poco y volvió a negar

—. No puedo dejar que haga eso, el señor Jeon se enojara conmigo al dejar entrar a un desconocido a su Oficina—

Jimin frunció el ceño—. ¿Sabes con quién estas hablando? Te acabe de decir que soy Park Jimin, soy el hijo de Park Hee-Sung— dijo en un gruñido, su paciencia se estaba agotando

La Secretaría trago grueso—. Se quién es usted señor Park, pero perderé mi empleo si lo dejó pasar—

Jimin suspiro y la observó—. Le aseguró que eso no pasará, con su permiso o no, entraré y esperaré en la Oficina a Jeon Jungkook— dijo Jimin dirigiéndose a la puerta, ignoro los llamados de la Secretaría, de todos modos ella no podía hacer algo contra él.

Cuando entró sus fosas nasales se inundaron del aroma a Lirios, sintió como su cuerpo se estremeció y como todo su ser se dilataba y comenzaba a temblar. Dios mío ¿Este era el aroma de Jungkook? Desde que se manifestó nunca llegó a afectarle el aroma a Alfa pero con Jungkook era distinto, por primera vez desde que se manifestó se sintió vulnerable, sin fuerzas, todo en él temblaba.

Jimin tapó su nariz y trató de controlarse, sus instintos le ordenaban que inhalara el aroma y llenará sus pulmones de el, pero estaba seguro que si inhalaba mucho ese aroma iba a entrar en celo inmediatamente.

Jimin trato de no inhalar mucho el aroma y se sentó en el sofá de la Oficina de Jungkook tratando de controlarse, necesitaba controlarse urgentemente.

Mientras tanto Jungkook caminaba a su Oficina mientras a su lado estaba su prometida Sung Ae-Rin, cuando iba a pasar a su Oficina la Secretaría se puso de pie frente de él mientras hacía una reverencia

—. Señor Jeon, hay alguien esperándolo en su Oficina, yo le dije que no podía entrar y trate de detenerlo pero no pude, pido disculpas por eso— dijo la Secretaría totalmente arrepentida

Jungkook frunció el ceño y gruño suavemente—. ¿Y quién es?— preguntó con fastidio

—. E-Es Park Jimin— dijo con voz apenas audible

Jungkook se asombró al escuchar ese nombre ¿Park Jimin? Seguro era otro Park Jimin ¿No? Porque si era el Park Jimin que conocía ¿Que hacia aquí?

—. Bien, gracias Secretaría Lee—

Jungkook observo a su prometida y con voz firme y fría hablo—. ¿Puedes esperar aquí mientras resuelvo este asunto?—

Seung Ae-Rin asintió—. Solo no tardes Jungkook, necesito hablar algo importante contigo—

El pelinegro asintió y entró a su Oficina observando a la persona que tranquilamente estaba sentado en el sillón, Jimin levanto la mirada y sus miradas se encontraron en ese momento sus lobos aullaron reconociendosen mutuamente como pareja.

Jungkook frunció el ceño al oler el aroma a algodón de azúcar de Jimin, hace tanto que no olía ese aroma, ya hasta se había olvidado de el, se sintió reconfortado, como si una parte de él estuviera completa y el vacío que sentía constantemente ya no estaba.

—. ¿Jimin? — preguntó con voz confundida pero que no perdía su frialdad

Jimin trago grueso, lo había confirmado, este Alfa era su destinado, su pareja, su Alfa. Se sentía feliz, emocionado al igual que su lobo, sus padres harían una fiesta al saber esto, que había encontrado a su destinado, se sentía demasiado feliz que Jungkook sea su destinado y no otro, lo Confrontraria y haría que ese Alfa que prontamente sería suyo lo marcara y sellaría el lazo de unión con su marca, ya tenía un plan para ello.

Hola, aquí con otro capítulo, creo que habían Estado esperando el reencuentro de Jimin y Jungkook y aquí está. Espero que les guste. Gracias por leer y darle una oportunidad a esta historia.