Los rayos de luz comenzaron a incomodarle en gran medida, se reprochaba el hecho de haber llegado a casa y no verificar que sus cortinas estuviesen corridas, teniendo que despertar tan temprano un domingo por la mañana después de aquella fiesta.

Su cabeza dolía y sentía que en cualquier momento volvería el estómago si seguía recostado en su cama.

Con la mayor lentitud posible, Yoongi se intentó incorporar, alejando el sueño que lo quería mantener recostado sobre aquella cama, sin embargo, algo le detuvo. Yoongi abrió rápidamente sus ojos para observar que le impedía ponerse de pie y grande fue su sorpresa al ver un brazo sobre su pecho.

Confundido y sin poder recordar con claridad que había sucedido por la noche, Yoongi se giró a mirar a la persona que dormía a su lado, viendo un sin fin de mechones esparcidos por la blanca funda de su almohada, cubriendo unos ojos que seguían cerrados.

El pelinegro intento reconocer a la persona que dormía a su lado, sin embargo, seguía sin ubicar el rostro de aquel chico, hurgando en su mente, Yoongi intento recordar algo de lo que había sucedido por la noche, sin embargo, su mente se encontraba completamente en blanco.

—Mierda —murmuró, tensando su cuerpo al ver como el castaño se removía en la cama, acomodándose mejor y quitando el brazo que se encontraba sobre Yoongi—. ¿Qué mierda pasó anoche? —se preguntó a si mismo, saliendo de la cama para después observar al chico que aún seguía tranquilo disfrutando de su sueño reparador.

✿Kim☆Palomita✿