A Daryl le costo un poco recordar en donde estaba y como había llegado ahi.

Podia escuchar el murmullo a su alrededor, se sentía mareado y adolorido principalmente.

Intento abrir los ojos pero era como si no lo estuviera haciendo, no fue hasta que el fuerte olor del alcohol impacto en su nariz que pudo tener fuerza para abrir los ojos de golpe.

Tan solo vio borroso a su alrededor, la figura de alguien inclinado levemente hacia él y la luz que le hacia molestar la vista, entonces volvió a cerrarlos.

Agudizo su oído y no sabia con certeza si era parte de su imaginación o realmente estaban hablando en otro idioma.

Lo intento y nuevamente abrió los ojos solo que esta vez los mantuvo abiertos hasta que su vista se acostumbro y el mareo dejo de invadirle. Una vez que todo estuvo claro su primera reacción había sido levantarse y alejarse con desconfianza de quien sea que estuviera ahi.

No logro nada cuando el toque delicado de una mano lo sostuvo del pecho, Daryl entonces lo noto.

Era un chico, con el rostro más angelical que pudo haber visto en toda su vida, tenia unos ojos azules que destellaban calma y dulzura. Era desde luego completamente indefenso y si Daryl quería con un chasquido de sus dedos lo asesinaba y se iba de ahi. No lo hizo.

— Vous sentez-vous bien, monsieur ? Savez-vous comment il s'appelle ? [¿Se siente bien, señor? ¿Sabe cuál es su nombre] — el ceño de Daryl se frunció ante sus palabras, le miro confundido sin comprender lo que el chico le había preguntado.

— ¿Que?

— Oh — soltó el chico juntando sus cejas con sorpresa — Habla mi idioma... bien, si.. ¿Se siente bien?

El saber que el chico hablaba su idioma fue un grande alivio al recordar que se encontraba en Francia, terminando ahi por un inconveniente.
Lo que no sabia era como termino frente a ese chico.

— ¿Que hago aquí?

— Lo encontramos — respondió el chico con una sonrisa agradable — Usted se encontraba herido, las monjas pensaron que lo habían mordido pero yo pude ver que no era así, entonces lo trajimos aquí.

— ¿Monjas? — murmuró Daryl y fue entonces que hizo indicio de quererse sentar, cuando vio al chico con toda intención de quererlo ayudar el castaño lo detuvo con una mano. Él podia hacerlo solo — ¿Que es este lugar?

— Un convento — respondió el chico — Abadía de Santa Bernadette.

— ¿Y porque tú estas aquí? ¿No aceptan solo mujeres?

— Yo vine a Francia de intercambio por mis estudios, cuando todo esto brotó la hermana Jude me encontró y trajo aquí. Yo soy la única excepción.

Daryl asintió con la cabeza, aquello tenia sentido pero de cualquier forma al castaño no le interesaba completamente, él se tenia que ir de ese lugar.

— ¿Puedo saber su nombre?

— Daryl Dixon — respondió el castaño inspeccionándolo con extrañeza.

— Mi nombre es Donovan — se presento el chico de forma amigable.

Donovan tenia unos muy llamativos ojos color azul, tenia el cabello castaño claro y lacio, era demasiado pálido y sus facciones demasiado finas. Era casi angelical, Daryl no era ni la mitad de hermoso de lo que era ese chico.

De cualquier forma Daryl lo sintió familiar, como si ya lo hubiese visto en otro lado cuando no era así.

— ¿Y mis cosas? Debo irme.

— No puede — respondió Donovan — Es decir, si puede, pero no debe...

— No me interesa, ¿dónde están mis cosas?

— Se están lavando — respondió el chico con ambas manos detrás de su espalda de forma nerviosa — Lo lamento, tenia mucha sangre encima entonces lo tuvimos que cambiar.

— Mira, Donovian, no me importa, tan solo necesito mis armas para irme de aquí. No debo estar en este lugar.

— Es Donovan — corrigió el chico avergonzado — Esta bien, tan solo había sido una sugerencia.
Lo recomendable es que espere a que mejore y se pueda ir.

— Estoy bien — le gruñó Daryl en respuesta levantándose de la camilla.

Disimulo muy bien el hecho de que le dolía la cabeza, el abdomen y que desde luego se mareo por tal movimiento.

— Necesito mis... — Daryl guardo silencio de golpe cuando su cuerpo se debilito y si no hubiese sido por Donovan que lo ayudo a regresar a la cama se hubiese caído al suelo.

— Tenia una muy fuerte contusion en la cabeza, le hicieron puntadas en el abdomen y una transfusión de sangre — contó Donovan — Lo recomendable seria que se recuperara y luego se marchara.

— No puedo..

— Entiendo — asintió el chico — Es solo que es lo mejor que puede hacer. Aquí estará a salvo hasta que mejore y luego se podrá ir.

Daryl era terco pero sabia que el chico tenia razón por lo cual su silencio fue suficiente para dar a entender su respuesta.

— Bien, en una hora una de las hermanas vendrá a verificar que todo este bien con usted y sus heridas.

— ¿Y no puedes hacerlo tú? — preguntó Daryl con ironía. Realmente no le interesaba que una estricta moja desconocida viniera a verificar que estuviese bien ni mucho menos que le tocara.

— Puedo hacerlo si gusta — indicó Donovan sin captar la ironía en el mayor — Si le incomoda las personas desconocidas, aunque claro, no es como si yo no lo fuera pero..

— Ven en una hora — le interrumpió Daryl para que ya se fuera — Tú parloteo me marea.

— Lo siento — se disculpo Donovan con las mejillas rojas en vergüenza. Muchas personas no soportaban el parloteo del chico quien ya estaba acostumbrado que dijeran que era molesto, la única persona que le decía que era encantador era su padre — Lo dejo descansar. Regreso en una hora.

Daryl sintió una punzada de culpa por haber sido tan grosero con él, misma que se elimino cuando el chico abandono la habitación. Si bien le iba, mejoraría en una semana y luego no volvería a ver a ese inocente chico de nuevo.

El castaño entonces se permitió cerrar los ojos para descansar.

Daryl se despertó cuando sintió algo helado en su rostro. Su reacción fue instintiva cuando noto a una persona frente a él pero luego recordó en donde estaba y que se trataba de Donovan.

— Tiene fiebre — dijo el ojiazul — La fiebre nunca es buena.

Daryl cayó en cuenta de que el chico le estaba poniendo paños helados en el rostro para bajarle la fiebre, el tacto de lo helado en su rostro era agradable y al mismo tiempo le daba escalofríos.

— Llamare a una monja para que lo revise bien — señaló Donovan preocupado — La fiebre no ha querido bajar.

— No monjas — advirtió Daryl ocasionado que Donovan soltara un suspiro.

— Solo una — pidió el chico — Isabelle es agradable, lo prometo y ademas habla nuestro idioma. Solo ella, por favor.

— Bien. Solo ella — concedió Daryl finalmente y fue entonces que se dio cuenta que había aceptado solo por una cara bonita.

Donovan salió apresurado de la habitación y no paso mucho tiempo cuando estuvo de regreso solo que esta vez acompañado de aquella monja, era alta, de ojos azules y rubia, misma que se miraba dudosa al verle.

— La fiebre no le baja — interrumpió Donovan el silenció — Le he puesto paños de agua fría, le cambie el vendaje de sus heridas y no entiendo porque tiene fiebre. ¿Es eso normal? ¿Se esta muriendo?

— Tranquilo, Donovan — pidió la rubia acercándose a Daryl quien le miraba con desconfianza — ¿Puedo?

— No.

— Por favor, Daryl — pidió esta vez Donovan — Isabelle sabe lo que hace, puede ayudar.

Isabelle fue entonces que le reviso la herida del abdomen, las puntadas, notando que todo estaba en perfecto estado a excepción de la fiebre.

— Necesita analgésicos para la infección y el dolor — indicó la monja — Mismos que no tenemos.

— Yo podría ir por ellos.

— No es buena idea, cariño — le negó la rubia — Es peligroso.

— No iras — habló Daryl — No importa, estaré bien. Tan solo consíganme algo para el dolor de cabeza. Lo que sea.

— ¿Es porque hable mucho? ¿Crees que sea..?

— No, Donovan — respondió Isabelle — Es por el golpe que sufrió. Ahora, ven conmigo.

— ¿No estabas ocupado conmigo? — preguntó Daryl de forma hosca.

Isabelle y Donovan intercambiaron una corta mirada antes de posar ambas miradas en el castaño.

— Esta bien, no es nada, luego hablamos — dijo Isabelle — Volveré con algo para tu cabeza.

Isabelle abandono la habitación y Donovan se acerco dudoso a la orilla de la cama y comenzó a mojar el paño en el recipiente de agua fría.

— ¿Ella es... tu hermana? — preguntó Daryl.
Era muy obvio que no eran hermanos pero Daryl quería saber que era ella para él. Simple curiosidad.

— La miro así — se encogió de hombros Donovan — Me cae muy bien. Es agradable, divertida y muy hermosa persona... creo que es como de tu edad.

— ¿De mi edad? — inquirió Daryl con el ceño fruncido — ¿Eso que significa?

— Nada — respondió Donovan con rapidez, Daryl noto las mejillas rojas del chico — Tan solo que se ven de la misma edad. Muy jovenes, eh..

Daryl frunció el ceño ante sus palabras, el chico le estaba diciendo viejo y que a parte no se veía joven.

— ¿Que edad se supone que tienes tú?

— Yo creo que 23 — respondió Donovan — No estoy seguro.

Daryl podia jurar que el chico se veía de menos, le había calculado la edad de Beth y resultaba ser que era mayor que ella.

Donovan acerco el paño a la frente de Daryl y este cerro los ojos al instante cuando la sensación fue demasiado agradable.

— ¿Puedo saber como llegó a Francia?

— Por accidente — respondió Daryl — Me secuestraron y heme aquí.

— ¿Y donde estaba antes de que lo secuestraran?

— Georgia.

— ¡Vaya! Eso es muy lejos — soltó Donovan — Yo soy de Georgia. Extraño mi ciudad.

— Ahora ya no creo que sea a como lo recuerdas.

— Es muy probable que no — murmuró Donovan — ¿Puedo hacerle otra pregunta?

— Solo si dejas de hablarme tan formal — respondió Daryl con una mueca — Es extraño. Tutéame.

— Lo siento, es que siempre me a gustado hablarle así a las personas que son mayores a mi y.. no, no.. es decir, no digo que tú seas viejo o..

— Cierra la boca — pidió Daryl con enfado — Olvida tu pregunta.

— Lo siento, señ.. Daryl — se corrigió el chico — Es que tienes la edad de mi papá y no sé.. impones ese tipo de aura de persona mayor. Aunque si soy honesto no te ves mayor, de hecho te ves conservado para tu edad.

Las cejas de Daryl se alzaron ante sus palabras. Donovan no había dejado de decirle que era un viejo desde que lo conoció y lo peor de todo era que no lo decía con maldad, simplemente lo decía de forma casual.

— Ya estoy bien. Te puedes ir.

— pero aún..

— Vete.

— Lo siento, Daryl — se disculpó el chico — Que te mejores.

🥀・・・・・・・・・・・・・・🪽

Primer capitulo y empezamos con Donovan diciéndole viejo de forma indirecta a Daryl 🤣

Siguiente capitulo:
Alguien se dará un baño de una forma algo... expuesta.