❛ 𝐎𝐂𝐄𝐀𝐍 𝐄𝐘𝐄𝐒 ❜
rikki chadwick fanfiction
𝖈𝖍𝖆𝖕𝖙𝖊𝖗 𝖘𝖊𝖛𝖊𝖓: Party Girls
ESPECIAL 1K DE LEIDAS

IMPORTANTE: Este cap es un EXTRA por los 1k de leidas, y tambien van a ser los dos siguientes porque no van a ser acorde a la serie.
ACTUALIZACION: Deje de escribir hace rato pero ya estoy volviendo, tenganme paciencia y perdon por la inactividad, pasaron muchas cosas en mi vida.

ESTABA EN CASA DE EMMA, Lewis y Rikki tambien estaban aqui. Mi amigo estaba sentado en la cama, sosteniendo una libreta y una lapicera, unos frascos en el piecero que contenian liquidos como aceite vegetal.

Yo tenia mi cabeza descansando en el regazo de Rikki, mientras leia el cuarto libro de Harry Potter, ella apoyaba su espalda contra la cabecera de la cama, Emma sentada a su lado.

— A mí me parece un collar normal. — opinó Lewis luego de observar detenidamente un collar.

—  Lo que había dentro desapareció hace tiempo... — Emma contestó, el collar era de plata y el dije era un relicario que tenía una pequeña piedra preciosa que parecía ser un zafiro. — Lo hallé en el fondo del estanque. Tiene que ser importante.

—  Tal vez... Forme juego con unos aretes — se burlo Rikki. Yo cerré mi libro y extendí mi mano hacia Emma, quien sostenía el collar entre sus manos.

— ¡Estoy intentando buscar respuestas! — Emma exclamó molesta

— ¿Puedo verlo? - pregunté a lo que ella asintió y me lo entregó.

— Cálmense, chicas. — interrumpió Lewis mientras yo miraba el collar y abrí el relicario, no tenia ninguna foto ya que probablemente estuvo años bajo el agua y se deshizo con el tiempo por la humedad.

— Emma, el collar es muy bonito y... es extraño que lo hayas encontrado cerca de Mako — empece a hablar y le devolvi la joya —. Pero no creo que eso explique el porque somos... peces. Tal vez... a alguien se le cayó cuando estaba navegando y la corriente lo arrastro hasta allí, ¿Quien sabe?

— ¿Lo ves? — apuntó Rikki

— Sin embargo, Theo y yo creemos que ya descubrimos que liquidos no los convertirán en peces. — Lewis tomó uno de los frascos y sin previo aviso, rocio a Rikki con el aceite vegetal, y ahora la habitación de Emma apestaba a aceite.

— Lewis, ¿Que haces? ¿Te parece gracioso? — ella se quejo con una mueca de asco, el liquido grasoso en la piel de su brazo — ¿Que es esto? ¡Que asco, ugh!

— Es solo aceite. — sonreí, buscando un pañuelo para ella en mi mochila y se lo di.

Estaba conteniendo mi carcajada mientras ella se seguia quejando y Lewis solo observaba su reloj con atencion.

— 4, 3, 2, 1... — el miró a Rikki, esperando que algo sucediera pero nada paso.

Era solo un experimento que había estado preparando con el para saber que cosas nos convertirían en peces. Por eso habia traído los frascos con diferentes liquidos que contenían cierta cantidad de agua.

Creí que primero iriamos a avisarles que les rociariamos cosas en la piel... Pero bueno.

— Casi todo aceite vegetal, no hay cambios. — escribio el en su cuaderno mientras ella lo miraba mal, aunque volvio a sonreir cuando solte un pequeño grito y cai en el suelo con la cola de pez luego de que Lewis sin aviso previo me rociara ese aceite con olor a cebolla.

¡Que asco!

Todavia no me acostumbraba al ser un triton y... afortunadamente, por el momento no habia tenido ningun problema escondiendo mis escamas.

— ¿Secado al vapor? — ella pregunto burlona, mirando como yo seguia tirado en el suelo.

— Por favor. — suplique y ella utilizo sus poderes para secarme.

Luego de un rato, yo estaba de nuevo en mi forma humana, sentado mientras Rikki me hacia trenzas en el pelo y yo intentaba no quedarme dormido.

— Y... ¿Haras la fiesta? — pregunte con curiosidad, hoy era el cumpleaños de Emma, y cada año ella hacia una fiesta en su casa y de hecho cuando llegue a su casa, le habia regalado un vestido de dos piezas, la tela era de seda y el color era el favorito de Emma, el celeste.

Aunque no lo habia comprado... lo habia hecho yo mismo y por eso ahora tengo apositos en casi todos mis dedo a excepcion del meñique y corazon.
Cuando estaba cosiendo el vestido me pinche accidentalmente en varias ocasiones con la aguja.

— ¿Que fiesta? — Rikki pregunto con un brillo de curiosidad en sus ojos.

A veces pensaba que si ella fuera una flor... seria el girasol porque era tan radiante y hermosa como uno, y era como un rayito de sol personal para mi, ella siempre iluminaba mis dias.

Me gustaban los girasoles, y tambien me gustaba ella.

— Cada año mi mama hace una fiesta por mi cumpleaños — Emma explico. Era una lastima que no se llevara a cabo la fiesta porque yo las adoraba —. Pero este año no la quiero. Habria gente, y bebidas que se derraman, colas que aparecen...

— ¿Cuando iba a ser esa fiesta, Em? — ella insistio

— Esta noche. — le conteste y note que Rikki se veia algo decepcionada.

— ¿Esta noche? ¿Y no me invitaste? — Rikki le dijo a Emma con una decepcion notable mientras terminaba una de las tantas trenzas que tenia en mi cabello.

— Es que... no es tu estilo. — No se si Emma se excuso o tiene razon porque de todos modos la fiesta no se llevaria a cabo... Pero lo que no eran el el estilo de Rikki eran las fiestas en la piscina, recuerdo que ella lo habia mencionado.

— ¿Fiesta? ¿Yo? — la mire a Rikki con una pequeña sonrisa — ¡Son dos palabras en una!

Por una parte, es una lastima que Emma no haga la fiesta pero por otra entiendo sus razones del porque no la hara. Era demasiado arriesgado.

— No quieres que vaya. Es eso. — añadio Rikki, sus manos armando una trenza mas. Mi cabello no era muy largo pero se podian hacer trenzitas, pequeñas pero se podia.

— Claro que quiero. — la corrigio Emma

— Entonces... ¿Haras la fiesta? — dije confundido. ¿Por que ella querria que Rikki vaya a una fiesta que no se hara?

— No, no se hara. — ¿Quien te entiende, Emma?

— Lastima. Hubiera sido genial. — Rikki se encogio de hombros — Chicos, bailar... Chicos.

— No es ese tipo de fiesta. — yo conteste —. Es una fiesta de pijamas. — iba a seguir hablando cuando de repente Lewis una vez mas, nos rocio aceite de no se que cosa. Rapidamente me limpie con un pañuelo mi brazo derecho.

— Asi que... ¿Una fiesta de pijamas? — Rikki dijo sonriente — Wow. Es tan lindo. Lastima que me pinte las uñas ayer. ¡Podriamos hacerlo en la fiesta! Y luego una pelea de almohadas... trenzarnos el cabe-

Uy.

Estaba preparando las bolsas de dormir para la pijamada de Emma, al final decidió celebrarlo por lo que fui a ayudarla. Emma cargaba unas almohadas y Cleo estaba organizando las botellas.

— Em, ¿Estas segura que quieres ofrecer jugo de alfalfa y grosella? — pregunto Cleo.

— ¿Que propones? — contestó Em

No quiero ser grosero pero ese jugo es la cosa mas asquerosa que he probado en mis 17 años y medio de existencia en este planeta. Odiaba la alfalfa y grosella. La peor combinacion que pudo haber existido en los 4.500 mil millones de años que tiene el planeta Tierra.

Es un sabor raro, amargo. Ni el jugo de calabaza sabe tan feo.

Emma lo bebía porque era saludable y ella hacia natación antes de... todo esto. Por lo que le venía como anillo al dedo, pero como yo no soy Emma, no lo bebo. Solo lo hice una vez, y fue porque ella me dijo que lo probará.

— Quizás este año, como dejaste el equipo, podrías probar algo nuevo — dije yo. Si, por favor. Cambia ese jugo, cambialo...

Aceptaría hasta jugo de aceituna, y no me gusta la aceituna pero si el aceite de oliva. Al igual que no me gustaba la manzana pero sí el jugo de manzana.

— ¿Cómo qué? — Emma dejo las almohadas a un lado

— Azúcar, sal. Grasa, carbohidratos. Pizza, hamburguesa. — enumeré con los dedos.

— Claro, ¿Y por que no leche entera? ¡Eso es una locura! — dijo ella sarcásticamente y tomó una de las botellas. — ¿Segura que les gustaran? — le pregunto Emma a Cleo.

— Claro, les fascinará. Botellas individuales, a prueba de derrames. — sonrió Cleo

— Y... ¿Esto? — apuntó Emma a unas toallas.

— Ah, yo las deje allí. Por si acaso, más vale prevenir que lamentar. — dije orgulloso de mi mismo. — Di que tu mama estaba lavando la ropa y por eso los dejo allí. Se vera menos raro.

En eso, llego la mama de Emma.

— Descuiden, no me quedare. Hay sushi para empezar, hamburguesas de soja y tofu... Y seria bueno guardar esas toallas. —  Ay, bueno. Espero que las chicas no tengan algun problema con el agua. 

Ew. Sushi. 

Tenía un amor-odio por el sushi, solo me gustaba uno que era de pepino. El pescado crudo sabe horrible. Y no soy precisamente carnivoro. Al menos no de carne de peces. Seria como comer a mis amigos... y eso no es lindo.

Segundos despues, sonó el timbre de la puerta, ya habían llegado así que Emma fue a recibir a las invitadas. Yo me quede a un costado, limitandome a saludar desde lejos a las chicas. Las conocía, ya que eran amigas de Emma que ella conocio en el equipo de natacion y tambien invitó a algunas compañeras del colegio.

Me caían bien, eran agradables. Lástima que el ser sociable... no es mi especialidad, pero ya estoy mejorando en eso. El tiempo pasó, y las chicas simplemente estaban maquillándose, escuchando música... Hablando de chicos. 

— Te dije que no te gustaria. — río Emma al ver la expresion de Rikki, quien observaba al resto el como se maquillaban. 

— No se como a alguien le gusta. — admitió Rikki y yo sonreí, viendo una de las chicas, el como le aplicaban un brillo labial y pense en lo bien que le quedaria a Rikki en sus labios rosados... cuando senti mis mejillas calentarse y noté que me había sonrojado ante el mero hecho de pensar en ella.

Debo parecer un tonto.

De pronto el timbre sono y vi que estaban ¿Miriam y Zane?

— No se a cual de mis telefonos enviaste la invitacion pero se perdio. — no se perdió, no te invito. Fuera, fush.

— ¿Qué haces aquí? — dijo Rikki a la defensiva. Y yo me límite a encogerme en mi lugar. Incómodo. Sentía mis manos sudar, y como un escalofrío corrió por mi espalda. 

Por favor, no ahora. 

Senti una opresión en mi pecho, parecia como si el aire estaba siendo succionado de mis pulmones cuando vi a Zane cargando unas bandejas de pastelillos. Mi visión era borrosa y solo podía oír el latido de mi corazón en mis oídos, me sentía pequeño... Otra vez.

— C-cleo. — intenté llamar a mi hermana pero todo lo que podía salir de mi boca eran intentos vagos de comunicación, sentía impotencia y desesperación. El sonido de la musica empezó a molestarme, asi que me tape los oídos con mis manos pero empece a golpear mi cabeza con mis manos, desesperado.

Ni siquiera me pude dar cuenta de que Emma y Rikki me estaban hablando, tratando de calmarme. Solo pude sentir como una mano de alguien en quien no confiaba toco mi cabello, y eso solo hizo que lloré.

flashback

 Estaba en el baño de los chicos, en un cubículo con la puerta abierta mientras lloraba luego de que Zane y su grupo tirarán basura hacía donde yo estaba. El olor de comida, pastelillos, en un estado de putrefacción estaba impregnado en mí. En el piso, estaba mi mochila destruida, pisoteada.

Tenía 12 años. Era mas pequeño que el resto de mis compañeros. Más delgado, menos fuerte. No podía hacer nada contra ellos mas que llorar y golpear mi cabeza. Todo daba vueltas a mi alrededor, las carcajadas del grupo de Zane eran sofocantes.

— Mami... —  llore repetidas veces.

Cleo estaba junto a mi en el baño del segundo piso en casa de Emma, yo estaba contando hasta 10 mientras poco a poco me calmaba, inhalaba y exhalaba, ella me acompañaba mientras sostenía su telefono.

— Muy bien... — ella sonrió, aliviada.  — Llamaré a mama, será mejor que descanses. Hoy... hoy fue mas fuerte de lo normal. — yo solo asentí, callado. Cleo llamó a mi mama y aproximadamente unos 12 minutos despues, colgó. — Vendrá papá a buscarte. Descuida, mañana tienes turno con la doctora y faltarás a la escuela. 

— Quiero ir con la abuela. — dije yo. — No quiero estar aquí.

—... Está bien. Hablaré con mama, seguro te dejará. — ella suspiró.