𝒞𝒶𝓅𝒾́𝓉𝓊𝓁𝑜 23
Empecé a perder el tiempo en mi teléfono, ya se estaba haciendo un poco más tarde.
Encontré la foto de Jungkook que había tomado hace unos días. Me fui a mi cuarto y abrí el pequeño cuarto donde tenía mi pintura y los bastidores así como mi caballete.
Saqué uno de los bastidores y lo coloqué sobre el caballete.
Saqué todas las pinturas posibles y empecé a pintar.
Empecé con el negro, el cabello de Jungkook.
Que maldición era no poder ayudarlo.
Tal vez unos reflejos rojos en el cabello lo harán especial.
Jungkook, Jeon Jungkook. Deja de estar en mi cabeza.
Inocencia y pureza, eso era lo que quería expresar en mi pintura.
Pintaba con ganas, las mismas que tenía de amar a Jungkook.
Su hermosa nariz y labios, el rosa no podía faltar.
Déjame amarte, déjame hacerlo por favor.
Su cuello, su hermoso cuello, su mandíbula y todo él parecía tallado por los mismo dioses.
¿Me amas? Yo si.
Brillo, claro, reflejos en mi pintura aún más claros.
Él brillaba todo el tiempo, aún con los ojos llenos de lágrimas lograba brillar como nadie más. Maldición Jungkook. ¿Qué me has hecho?
Empecé a sudar, no sé exactamente por qué.
Me limpié el sudor y manché mi rostro de color verde, el mismo que estaba usando para su ropa.
Para el fondo quise usar un efecto acuarela y entonces empecé, el fondo sería rosa.
¿Qué me has hecho? ¿En qué me convertiste?
Estoy sintiendo que no puedo existir si tú no estás conmigo. Empiezo a pensar que solo tú puedes hacerme feliz.
Algunas gotas de pintura por aquí y por allá, su mano, su perfecta mano sosteniendo su cabeza de una manera tan hermosa. Dios, deseaba volver a besarlo. Era una gran adicción.
Ámame Jungkook. Hazlo. De otro modo...no sabría cómo seguir viviendo.
Cuando me di cuenta de que la pintura de Jungkook ya estaba terminada sonreí de verlo ahí.
Por fin me metí a bañar para después dormirme, noche larga la que me esperaba sin él.
—Fuck.
Jungkook maldecía mientras salía del departamento de Taehyung.
—¿Por qué eres tan idiota, Jungkook?
Jungkook empezó a dejar caer unas lágrimas de sus ojos. Se odiaba por haber dejado a su TaeTae en su casa en esas condiciones.
Claro, Jungkook no lo había pensado. ¿Qué haría ahora? ¿A donde iría?
Jungkook respiró profundo y salió del edificio, estaba lloviendo, de nuevo iba a mojarse.
Empezó a correr sin ningún propósito. ¿O si lo tenia?
Estaba confundido. Le dolía. No solo le dolía haber dejado a Tae confundido sino que también le dolía todo el pecho.
Habían pasado años desde alguien lo tocara ahí. Y esa única persona había sido su padre.
El susodicho le apagaba cigarros en la piel a Jungkook a modo de castigo. Le pegaba con el cinturón e incluso lo cortaba con cuchillos.
Todo porque le gustaba hacer al pequeño niño pagar por lo que había hecho.
Pero, ¿Qué había hecho?
Jungkook jamás lo entendió. Solo sabía que había algo que jamás permitiría que su papá lo amara, jamás vivió esos momentos padre/hijo que son necesarios para un niño. Siempre estaba con su mamá.
Su mamá le decía que debían vivir con eso, después de todo ese señor era el hombre de la casa.
Jungkook sabía que su mamá estaba enferma y que no estaba bien que el señor les pegara a ambos.
"Tenemos que aguantarlo y sobrevivir Jungkookie."
—Shit. ¿Por qué a mi? Lo siento mucho Tae. —Jungkook limpió sus lágrimas antes de entrar al hospital.
Tenía que fingir estar bien, tenía que hacerlo.
Saludó a la recepcionista y se dirigió a la habitación de la señora Jeon Soo Ha.
Entró y saludó.
—Hola, mamá.
—Lamento no haber venido la vez pasada. Pero...
Era hora de decirle y Jungkook lo sabía.
—¡Hey! Oye mamá... —llamó Jungkook algo nervioso.
—Encontré a alguien. Creo que es buena persona, me gusta estar con... él. —respiró hondo. —Mamá, soy gay. Me gustan los hombres.
Jungkook tomó la mano de la señora, la mano que estaba reposando en un extremo de la cama, después se sentó en el sillón que estaba a un lado de la cama.
—¿Recuerdas al pequeño niño que conocí en el campo? Lo encontré de nuevo. Creo que él y yo... podemos ser una gran pareja.
—Me pidió ser su novio, no le he contestado. ¿Qué debería decirle? —preguntó Jungkook a su mamá, sabía que no habría respuesta pero en realidad quería pensarlo.
Su mamá seguía ahí, inmóvil, recostada sobre la cama. De repente solo se escuchó el sonido que emitía la máquina que monitoreaba el corazón de la moribunda señora. Seguía un ritmo constante. Aún.
Jungkook pudo escuchar la dulce voz de su madre. "Mientras seas feliz, yo soy feliz"
Jungkook sonrió y le dió un pequeño y tierno beso a su madre en la frente.
—Te amo, mamá.
"Cuéntame de él"
—Bueno, su nombre es Kim Taehyung. Es un estudiante de Universidad y le gusta mucho el arte. La música. Es muy atractivo y guapo. En realidad me gusta. Tiene la sonrisa más bonita que alguna vez ví. Es como un cuadrado...
Jungkook siguió platicándole a su mamá las maravillas de Taehyung.
Después de más de dos horas, Jungkook salió del hospital y decidió que era hora de pedir perdón.
¿A quien? Obviamente a su Hyung. Jin.
Empezó a caminar bajo la lluvia que aún seguía solo que con menos fuerza. Jungkook se sentía liberado, feliz de haberle dicho por fin a su mamá aquel pequeño secreto.
Siguió caminando en dirección al departamento pequeño de Jin.
Cuando se dió cuenta ya estaba frente a la puerta del departamento. Decidió llamar a la puerta antes de abrir y no ser bien recibido.
Tocó tres veces en aquella puerta. Se escucharon unos pasos y abrieron la puerta.
Un Jimin muy asombrado recibió a Jungkook.
—Kookie... pero-pero... ¿Qué?
Jimin se lanzó a abrazar a Jungkook.
—Maldición, Jeon Jungkook. ¿Dónde habías estado? Hemos estado tan preocupados.
Jungkook lo abrazó de regreso y Jimin hizo que Jungkook entrara al departamento.
—¿Quién era, Jimin? —preguntó alguien desde el pasillo que conectaba las recámaras con el resto del departamento.
Después Jungkook vió a Jin con unas grandes ojeras y el cabello despeinado.
—¿Hyung? —llamó Jungkook sorprendido, a su Hyung.
—Jungkook... ¿¿Qué haces aquí?? —preguntó seco.
—Jin... yo-
—¿Qué? ¿Tae te volvió a negar y volviste aquí para que te diga: "Te lo dije"?
—¡Jin! —regañó Jimin a Jin por su comentario.
—No, mira, solo quiero pedirte disculpas por lo de aquel día. Y no, Tae no me negó, lo amo. Me ama.
—Bueno, disculpa aceptada. La verdad es que después de que te fuiste estuve muy preocupado. —Jin limpió unas cuantas gotas de lágrimas de sus ojos.
—Hubieras visto, no durmió la primera noche. —Jimin dijo riéndose un poco.
—Si, si, suficiente información Jimin.
—Entonces... ¿Me perdonas? —preguntó Jungkook.
Jin se acercó a Jungkook y abrió sus brazos.
—Por supuesto, Kookencio. —empezó a reírse y Jungkook lo abrazó.
Después se separaron y el mayor despeinó el cabello de Jungkook.
—¿A qué se debe que vengas tan tarde? ¿Donde te habías estado quedando? —preguntó Jin mientras los tres se sentaban en la sala.
—Bueno, había estado quedándome en el departamento de Tae...
—¿Tae? —Jimin no había escuchado hablar de aquel chico.
—Cierto, Jimin. No te dije, tengo... un novio.
—¿Qué? ¿Un novio? Pero ¿Qué? —Jimin estaba algo exaltado.
—Bueno, ¿Recuerdas esa vez que te conté acerca de un niño que había conocido en el campo?
—¿Aquel que te lastimó? —preguntó Jimin haciéndose hacia adelante.
Jungkook podía ver esa expresión. La típica expresión de Jimin. Estaba asombrado y no lo podía creer. Lo conocía desde hace ocho años, obvio que sabía que se estaba empezando a enojar.
—Bueno, eso fue hace mucho. Taehyung y yo hemos cambiado y ya no somos niños. Estoy sintiendo algo por él.
—¿¿Algo por él??
Jimin se estaba enojando mucho. Jungkook sentía algo por el tal "Taehyung", ¿Cómo era posible que Jungkookie sintiera algo por un tipo cualquiera? Más bien, Jimin estaba celoso de que Jungkook nunca sintió nada por él.
—Si... —Jungkook esperaba el regaño del dos años mayor que él, Jimin.
—¡Increíble, Jungkook! Ya veo por qué te enojaste con él, Jin. —hiriente pero directo.
—¡A eso me refiero! Pero mientras nuestro pequeño Jungkookie sea feliz, nosotros también. —Jin dijo asertivamente.
Jimin estaba desesperándose, primero Yugyeom y ¿ahora este idiota?
Pasó las manos por su cabeza con desesperación y enojo, se levantó del sillón y miró a Jungkook.
—Bueno, me tengo que ir. Ya es tarde.
Dijo por último, salió del departamento azotando la puerta.
Jungkook estaba algo confundido. Para él, un mejor amigo estaría feliz por él. ¿Había algo que Jungkook no supiera de su mejor amigo?
Wow, ¿que ha pasado? ¿Jimin siente algo por Jungkook? ¿Cómo tomará Jimin la nueva noticia?
PD: Muchas gracias por leer la historia, no se olviden de seguir comentando y votando. Adoro sus comentarios, en realidad me hacen el día jaja.
También, les agradecería mucho que compartieran la historia y la recomienden si les está gustando, así más personas podrán disfrutarla.
Gracias. :D
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