El pequeño pelirosa subía por aquellas escaleras hechas de cuerda, en la cima estaba el mirador donde Yunho hacia su trabajo, Mingi se había tomado un descanso así que tomó su lugar, al llegar se encontró con el pirata y de inmediato se colocó junto a él, este estaba concentrado con su catalejo viendo hacia el mar. El catalejo era una herramienta náutica demasiado conocida ya que con esta los marineros podían ver las cosas desde lejos.

—No te ví venir, hola Wooyooung... —

—Hola Yunho, solo tenía curiosidad de saber cómo se ve el mar desde lo más alto... —sus ojitos celestes brillaban viendo el paisaje, el mar desde arriba también era hermoso. — ¿Puedo ver el mar por medio de ese objeto extraño? —Señaló el catalejo y Yunho asintió.

—Ten, te prestare este, es un poco más pequeño pero igual se puede ver todo el mar... —el pirata sacó de uno de aquellos objetos este era de tamaño mediano, entregándoselo a Wooyoung. —Colocas uno de tus ojos en este vidrio y cierras el otro... —Explicó.

Wooyoung hizo lo que Yunho le indicó y su boquita se abrió, estaba sorprendido, aquel objeto era mágico, podía ver desde muy lejos, los objetos de los humanos le parecían misteriosos y sorprendentes. Los oídos del tritón reconocieron una voz, sonrió y dirigió el catalejo hacia donde estaba la cubierta, pudiendo divisar a San que estaba junto a Hongjoong discutiendo sobre algo.

—Wooyoung el mar está frente a ti. —Yunho se dio cuenta que el Tritón se había distraído por unos minutos.

—Estoy viendo el mar... —

—Estás viendo a San... —El pirata sonrió divertido.

—San es mi mar... —

— Eres un cursi ¿San te gusta mucho, verdad? —

Wooyoung dejó lo que estaba haciendo y giró a ver a Yunho. —Me gusta demasiado, lo quiero, incluso más que eso... —

—Gracias por hacer que San vuelva a sonreír, sabes él antes era muy alegre y a la vez serio, pero desde que pasó aquel accidente tuvo un cambio drástico, todos estábamos preocupados por su comportamiento, ya no era aquel capitán que todos respetábamos y admirábamos, se volvió completamente diferente. —Yunho recordaba aquellos días en los que San se mantenía encerrado en su camarote por días, sin dirigirle la palabra a nadie. —Desde que llegaste vi que sus ojos empezaban a brillar nuevamente, tal vez en un futuro vuelva a ser nuestro capitán. —

—Yo cuidare mucho de él, un Tritón solo ama una vez y yo estoy enamorado de San, será al único al cual amaré... —Wooyoung seguía con su vista fija en su bello pirata. — ¡San! —gritó llamando la atención del pelinegro, agitando su mano.

San escucho aquella dulce vocecita y levanto la cabeza, dándose cuenta que Wooyoung lo saludaba desde arriba, así que también agitó su mano y le sonrió.

—El amor cambia a las personas... —Habló el capitán. —Ahora escucha con atención pirata enamorado... —

—Este celoso de mi, Seonghwa te tiene en abstinencia y ni siquiera te da un beso, en cambio yo recibo cariño por parte de mi caramelito. —San dio una risa nasal al ver el ceño fruncido de su amigo.

—Odio que digas la verdad... —San había dado justo en el punto. —Pero ahora sigamos hablando del plan. —

—Entonces, la última joya mágica se encuentra en la isla Butterfly... —continuó hablando. — ¿Porqué quieres que vaya, no puede ir otro? —

—Si envió a otro arruinaría el plan, la Joya ahora es un colgante que fue heredado a la primera hija del gobernante de la isla, tienes que acercarte a ella, "enamórala" con tus encantos, llevarla a un lugar lejano, dormirla y quitarle la cadena, es fácil... —

—Si es fácil entonces ve tú. —

—Yo estaré con el barco listo, no puedo dejarlo solo, no se sabe si alguien puede atacarnos... —

—Solo lo haré porque esas joyas protegerán a Wooyoung a la hora de abrir el portal... —aceptó ir a la isla.

Hongjoong había investigado mucho, no quería que otro ser del mar saliera lastimado, así que encontró algo sobre las tres piedras mágicas que al unirlas brindaban un tipo de protección para que cuando el portal se abriera el Tritón o la sirena no corrieran peligro y la última piedra se encontraba en la isla Butterfly.

—También es porque eres el mejor en eso de robar los tesoros, el espía que tenía en la isla Illusion me consiguió una invitación a la fiesta, el vestuario esta en tu camarote, tendrás que comportarte como alguien adinerado. —

—Estoy empezando a odiar tu idea. —San dio un pequeño gruñido. —Espero poder engañar a esa chica. —

— ¿Qué chica? —los dos presentes dieron un salto en su lugar al escuchar la voz de Wooyoung.

—San tiene que enamorar a una chica y robarle una joya. —Hong pensó que era hora de vengarse de San.

— ¡Hong! No lo digas de esa forma, Woo puede malinterpretarlo... —

—S-san ¿ya no me quieres? —los ojitos de Wooyoung empezaron a llenarse de lágrimas.

—No es eso, claro que te quiero mucho... —

—P-pero tendrás que enamorar a una chica, eso quiere decir que tú ya no me quieres y deje de gustarte. —lo próximo que se escucho fue el llanto de Wooyoung y un preocupado San trataba de calmarlo.

—Los dejó solos... —El capitán se fue de ahí dando una carcajada, San se lo merecía, por burlarse de él y su relación con Hwa.

— ¡Ves lo que haces Hongjoong! —pero fue totalmente ignorado por el Capitán, así que siguió tranquilizando a su pareja. —Wooyoung, no llores, solo es un plan para robar la joya, yo te quiero a ti y me gustas mucho. —

— ¿N-no me estas mintiendo? —calmó su llanto.

—No te miento, caramelito hermoso. —

—Eres mío San, no te daré a nadie. —abrazo con fuerza el cuerpo del pirata. —Quiero que solo me veas a mí... —

—Uh, alguien estas celoso... —San bromeó un poco.

—Eres muy lindo, enamorarías a cualquiera... —puchereo.

—Yo solo tengo ojos para un lindo chico pelirosa, tierno y celoso... —San puso un rostro pensativo. — ¿Quién será ese chico el cual se está volviendo dueño de mi corazón? —

—Por supuesto que soy yo... —respondió orgulloso. —Tú corazón será mío. —

—Exacto... —San besó la frente de su menor. —Así que todo está resuelto, solo fue una broma del capitán, yo te quiero mucho caramelito. —

—Yo te quiero mucho más Sannie... —con sus brazos rodeó la cintura del mayor, escondiendo su rostro en la curvatura del cuello de San.

Wooyoung realmente quería decir un "te amo Sannie" pero se contuvo, en un futuro se lo diría, pero quería asegurarse y esperar de que San sintiera lo mismo por él. 

            La tarde había llegado el sol casi se ocultaba, en la cubierta estaba un bien vestido San, llevaba un traje beige que se ajustaba perfecto a su cuerpo, el cabello oscuro peinado un poco formal, se veía como si fuera un chico adinerado, Seonghwa se había encargado de arreglar al pelinegro y estaba orgulloso de su trabajo, San se veía demasiado atractivo.

Wooyoung estaba sorprendió de ver a San con un vestuario diferente, sus ojitos estaban fijos en el pirata y sus mejillas sonrojadas.

—Cierra la boca Wooyoung, se te meterá una mosca... —Bromeó Seonghwa.

—Déjalo, hasta yo estoy sorprendió, San se ve muy bien. —Habló Yeosang, este estaba junto al Tritón.

—Me iré ahora. —Guardo aquella invitación en uno de sus bolsillos. —Vamos Jongho... —

—Claro... —Jongho se encargaría de vigilar el área, si algo pasaba él ayudaría a San de inmediato.

—J-jongho... —un sonrojado Yeosang tomo por la mano al mencionado. —Ve con cuidado... —

—Gracias, regresare pronto Yeo... —dejo un pequeño beso en los labios de su reciente pareja.

—Cuídate mucho Sannie, regresa sano, por favor... —

—Regresaré sano y salvó bebé... —San le sonrió a su pareja. —Esta vez no salgas del barco, este lugar es más peligroso. —

—No saldré, aquella vez que salí me asuste mucho, te esperare aquí... —

San y Jongho continuaron su camino, Wooyoung y Yeosang estuvieron viéndolos hasta que ambos desaparecieron de su vista.

[ ⚓ ]

         Entrar había sido nada difícil, la seguridad no era tan buena como se la imaginaron y para San entablar una conversación con aquella chica fue incluso mas fácil, en ese momento estaba usando sus encantos con ella, pero sus ojos estaban fijos en la cadena, aquella joya azul brillaba, esa era la cual tenía que robar. El pirata admitía que esa mujer era hermosa, con un cabello largo y castaño, piel de porcelana labios delgados, unos lindos ojos Celestes y aquel precioso vestido color cielo le quedaba bien.

Pero para San los únicos bellos ojos celestes y el chico más precioso era su Wooyoung, su belleza era incomparable, en ese momento aquel bello tritón llenaba sus pensamientos.

—Aquí hay muchas personas... —La chica se acerco a San y le susurro algo sus en la oreja. —Salgamos al balcón ese lugar está solo, podemos sentarnos y tomar una copa con vino... —la castaña solo quería pasar más tiempo con aquel guapo y misterioso chico de ojos bicolor.

—Claro, lo que tú digas, linda. —sonrió, ahora sería más fácil arrebatarle la joya.

Los dos salieron con una copa en sus manos, la vista desde ese lugar era bella se podía ver la playa en su mayor parte. Mientras tomaban el vino y conversaban, San ya estaba planeando el cómo llevarse aquella joya, así que en un descuido de la castaña San colocó un paño húmedo en la nariz, esta se resistió pero en el poco tiempo cayó desmayada; San agradecía que todos estaban concentrados en el baile y la música era un poco alta, con cuidado cargo a la chica y la recosto con delicadeza en un gran sofá que estaba ahí.

—Lo siento linda, pero tendré que llevarme esto. —Desabrocho la cadena y la guardo en uno de sus bolsillos, con toda la naturalidad empezó a caminar hacia la salida de aquella gran casa, a lo lejos vio a Jongho y le hizo una señal para darle entender que tenían que irse de inmediato de ahí, ambos salieron por la puerta principal pasando desapercibidos por los guardias.

Al estar más alejados, se adentraron a un pequeño atajo y empezaron a correr hacia el barco, sabían que en cualquier momento se darían cuenta del robo, ambos sonrieron cuando divisaron el navío. Seonghwa que estaba en la cubierta al darse cuenta del regreso de sus dos compañeros abrió la compuerta para que los dos abordaran y Hongjoong empezó a movilizar el barco.

San al estar en la cubierta pudo respirar en paz, lo primero que hizo fue entregarle la joya al capitán, para luego ir directo a su camarote, quería tomar un baño y quitarse aquella ridícula ropa que usaban los burgueses, además, anhelaba ver a su menor, dedujo que para esa hora él ya estaba durmiendo.

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           Wooyoung sintió la calidez de alguien, aquellas caricias dejadas en su cabeza lo relajaban y conocía demasiado bien aquel aroma a cítricos, así que abrió sus ojos encontrándose con San.

—Perdón si interrumpí tus sueños. —San después de salir de la ducha, se había acostado junto a Wooyoung, analizando el precioso rostro del menor.

—No podía dormir bien, pero ahora que estas de regreso estoy más tranquilo... —se removió de la cama. —Hoy te veías muy guapo... —

— ¿En serio? —

—Sí, te veías bien en esa ropa, pero te ves más guapo cuando estas vestido con ropa de pirata y tu cabello esta alborotado gracias al viento, todo es más natural, es el verdadero tú... —bostezo y restregó con su puño uno de sus ojos.

—Gracias, ahora te dejare dormir, ten dulces sueños Caramelito. —besó la cálida mejilla del pelirrosa, se levanto pero fue detenido.

— ¿A dónde vas? —

—Iré a dormir... —

—Quédate conmigo, la cama es grande, creo que no es justo que duermas en el suelo. —puchereo. —Desde hoy dormiremos juntos. —jaló del brazo de San haciendo que este cayera acostado en la cama, se abrazo a la cintura y recostó su cabeza en el pecho del pirata. —Eres cálido... —

—Está bien, ahora tendré a quien abrazar por las noches... —paso su brazo por la cintura de Wooyoung y dejo caricias en la espalda. —Tú también eres cálido. —

"Me estas enseñando lo que es el amor en este severo mundo, tu cálida sonrisa alegra mis días, soy feliz con solo tenerte a mi lado, amarte no será tan difícil como pensé. "

Nuevo capítulo!!! ✨
Perdón por la tardanza...

Esto es un catalejo...

Espero se encuentren bien,
Les envió besitos😽❤
Gracias por leer ♥