DEJEN SUS OPINIONES
SOLO QUEDAN
5 CAPÍTULOS + EPÍLOGO 😢

♡♡♡

Capitulo 60

Stanley

Despertar a su lado siempre es una hermosa fantasía. Su cuerpo desprende una calidez que me hace enloquecer. Me encanta la forma en que nuestros cuerpos encajan juntos; como si hubieran sido creados para estar unidos. Siento mi cuerpo adolorido, por haber dormido en la alfombra junto a ella. Ni siquiera recuerdo en que momento nos quedamos dormidos abrazados. Su cabeza descansa en mi pecho y una de sus manos en mi estómago. Giro mi cabeza a un lado para detallarla; algo que nunca me cansaré de hacer. Aun con todos sus grietas sigue siendo hermosa. No se como pudo pensar que ella no era para mi.

¡Joder!. Ella es mía y yo soy suyo, fuimos creados para estar juntos, de eso estoy seguro. Deslizo mis dedos por su rostro, acariciando sus perfectas facciones. Coloco un mechón rebelde que cae por su frente detrás de su oreja para tener una mejor visión de su rostro. Es tan hermosa. Su piel es tan suave y delicada, pareciera hecha de cristal. Siempre me ha cautivado su belleza, la forma en que me mira descaradamente o la capacidad que tiene para hablar directamente sin ningún tipo de vergüenza. Ella es...tan diferente al resto. Cualquier cosa persona en su sano juicio la odiaría por ser como es pero yo, en cambio, amo cada una de sus facetas. Unas mas locas que otras, pero me encantan.

A veces solo necesitamos a alguien que nos quiera con todas nuestras rarezas, sin restricciones. Que vea más allá de nuestra apariencia, que sea capaz de ver los verdaderos anhelos del corazón, que ame cada una de tus contradicciones, que te quiera siempre aunque estés jodido.

Sonrío ante mis pensamientos y me acerco a su rostro para besar su frente, luego su nariz, su mandíbula, sus mejillas, tratando de despertarla de una forma agradable. Ella se remueve y gruñe sonriendo.

-¿Qué haces?

-Despertándote.

-¿A besos?

Sonrío y beso sus labios.

-¿Quieres que lo haga de otra forma?

Sugiero divertido y sus ojos se encuentran con los míos.

-¿Lo harías?. -levanta una ceja con una sonrisa.

-Lo haría.

Afirmo con seguridad.

-¿Qué propones?

-Una ducha, agua, jabón...

-¿Estás queriendo decirme que quieres ducharte conmigo?

Me encojo de hombros y le sonrío con picardía. Algo que he aprendido de ella.

-Tal vez.

Ella se coloca sobre mi en la alfombra haciéndome reír. Sujeta mis manos por encima de mi cabeza haciendo que me excite al instante al sentir el roce de su sexo. Se acerca a mi boca y me da un beso corto en los labios para después susurrarme:

-Deseo concedido.

-¿Prometes no violarme?

Ella chasquea la lengua divertida.

-No puedo hacer promesas que estoy segura que no cumpliré.

♡♡♡

Después de dejar a Nicolle en casa de Camilla y que ella dejara un beso en mis labios antes de bajarse - algo que me tomó desprevenido y que me llenó el corazón - me vine directo al instituto. Faltan solo semanas para la graduación. El profesor Nicholas me eligió para decir una palabras ese día como despedida. Hablar delante de todo el instituto será un gran reto para mi, ya que nunca lo he hecho. Pero de igual forma le dije que lo haría, ahora solo debo pensar en el discurso.

Nicolle dijo que no vendría al instituto, se sentía cansada emocionalmente y quería despejar su mente por un rato. Bueno, me dijo que seguiría durmiendo y yo sonreí por ello.

Salgo de la dirección, después de hablar con el Profesor Nicholas, y camino por los pasillos hacia mi primera clase, Literatura.

Algunos estudiantes se me quedan viendo sin descaro alguno, pero ya sus miradas no me molestan. Me siento tan feliz en este instante que sus miradas ridículas no van a lograr que se me borre la sonrisa del rostro. Sigo mi camino hasta llegar al salón de Literatura, tomo mi respectivo asiento por separado y saco mi libreta donde había escrito mi poema. Vuelvo a darle una ojeada, leyéndolo con detenimiento. Cada que vez lo leo, me suena un poco cursi, pero ya que, da igual. Es solo un poema...

Un poema que escribí inspirándome en ella.

Sonrío ante mi pensamiento. La profesora pronuncia mi nombre y me pide que pase al frente para leer mi poema. Paso saliva y nervioso me levanto. Todas las miradas se posan sobre mi y yo me tenso al instante. Sostengo el poema entre mis manos bajo la mirada atenta de todos los presentes. Me aclaro la garganta.

-Yo...bueno. -Titubeo nervioso. -No soy muy bueno escribiendo, pero escribí esto para una persona muy especial. -Hago una pausa y suspiro. -Así que...aquí voy.

Empiezo a recitar mi poema lentamente:

"Me sentía triste y solo hasta que llegaste tu, con tu mirada penetrante me inundaste con tu luz.

Me perdí en tu sonrisa y no lo pude evitar era como un arcoíris brillando, a lo lejos del mar.

Tus maravillosos ojos, me encantaron desde un principio; tan hipnóticos, que en mi vida, es lo más hermoso que he visto.

Tus labios me enloquecen y me hacen suspirar son la dulce fantasía que anhelo poder saborear.

Te quiero así; tan simple, tan natural, con tu bonita manera de amar. Simplemente eres lo quiero y no lo puedo ocultar.

Por eso te quiero en mi vida hoy, mañana y siempre, mi corazón latirá por ti hasta que llegue mi muerte.

Te dejaré de querer el día que el sol se apague y la luna deje de brillar, mi corazón deje de latir y ya no pueda respirar.

Con estas palabras te expreso, lo que me encanta de ti, yo lo único que te pido es que nunca te alejes de mi..."

Termino de leer y levanto la vista. Todos permanecen en silencio y yo paso saliva. De seguro no les agradó. Abro mi boca para decir algo pero vuelvo a cerrarla cuando empiezan a aplaudir. Eso, sin embargo, me toma desprevenido. Unas cuantas chicas se limpian los ojos como si estuvieran, ¿llorando?. Vaya, eso si que es inesperado. Rasco mi nuca incómodo por la situación e intento sonreir. La profesora llega a mi lado, parece sorprendida. Lleva una mano puesta en su pecho de forma dramática y yo la observo sin saber que decir.

-Eso fue, verdaderamente, romántico. -se acomoda las gafas sobre el puente de la nariz aun con una sonrisa. -Wow, de verdad fue sorprendente, Stanley.

Fuerzo una sonrisa.

-Vaya, gracias.

-Deberías dedicarte a ello.

-¿A la poesía?

-No solo a la poesía, sino en todos los aspectos de la Literatura. -me quedo en silencio mientras los demás nos escuchan. -Serías un gran poeta.

Le sonrío amablemente.

-Lo tomare en cuenta.

Ella me pide que vaya de nuevo a mi asiento y yo lo hago. Cuando llego a mi silla escucho cuchicheos detrás de mi. Unas chicas hablan en susurros.

-Eso fue lindo, ¿Verdad?. -dice una de las chicas. -Me pregunto quien será esa persona especial, se nota que está enamorado hasta el culo.

Yo sonrío disimuladamente observando siempre al frente.

-¿No lo sabes?

Cuestiona la otra.

-¿Saber qué?.

-Stanley anda con la Nicolle.

-¿Con ella?. -dice sorprendida, pero horrorizada a la vez. Paso saliva con fuerza.

-Si. Eso he escuchado decir, también los he visto juntos en una revista.

-Pero...¡¿Es que no sabe que esta jugando con él?!

Me tenso mientras mi corazón late apresuradamente en mi pecho.

-Lo mismo digo. Él es lindo, pero ella...es una rompecorazones. Después de lo que Ian le hizo se convirtió en otra persona.

Contengo las ganas de girarme y gritarles a la cara.

-A lo mejor solo está con él por su dinero. Eso decía la revista que leí. Y, ¿Sabes que? No me sorprendería viniendo de una persona como ella.

Me levanto hecho una furia y salgo del salón rápidamente. Ellas no saben lo que dicen, no la conocen como yo. ¿Por qué la juzgan de esa manera? Odio cuando se refieren a ella como el ser más despreciable del mundo. Nicolle me ha demostrado ser una persona sincera y honesta. Yo confío en ella.

No me importaría que rompiera mi corazón. Al final de cuentas será mi culpa, ella me dijo que rompería mi corazón y yo no hice caso a su advertencia.

Ella dijo que me quiere y yo le creo.

Pero si hay una persona a la que dejaría que rompiera mi corazón en mil pedazos, esa sería Nicolle.

♡♡♡

-¡Stanley!

Escucho que me llaman a mis espaldas. Sigo mi camino al reconocer la voz. No quiero hablar con él. Desde que peleamos aquel día no he vuelto a hablar con el. Finjo que no escucho sus llamados y sigo mi camino hacia la cafetería. Pero, sus gritos se vuelven más fuertes. Gruño con molestia y me detengo en seco. Me giro para enfrentarlo. El llega frente a mi, agitado. Lo fulmino con la mirada mientras me cruzo de brazos.

-¿Que quieres, Gerson?.

Su pecho sube y baja frenéticamente. Descansa sus manos en sus rodillas unos instantes y suspira. Se endereza y me mira fijamente.

-Odio correr.

Me reiría pero estoy molesto con él.

-Ya me di cuenta. -le digo secamente. -no tengo tiempo para tonterías, Gerson. ¿Vas a decirme que quieres o no?. Si crees que voy a disculparme contigo por partirte la cara, olvidalo.

El se rasca la nuca divertido.

-Si, casi me dejas sin nariz como Voldemort. -bromea pero yo me mantengo mortalmente serio. El deja de sonreir al ver que su intento de chiste no me causó ninguna gracia. Aunque sí lo hizo.

Desde que lo conozco he odiado su forma de decir chistes en momentos serios. A el todo suele divertirle, pero a mi no.

-Bueno, yo...solo quería disculparme por lo que pasó, Stan. Somos amigos desde hace tiempo, eres mi mejor amigo, y no quiero perder tu amistad solo por una simple chica.

-¿Una simple chica?. -repito indignado levantando la voz. -¡Nicolle no es una simple chica!

-Vale, vale, lo siento. No quería referirme a ella de esa manera, Stan. El punto es que no quería ofenderla.

Intento controlar las ganas de estampar de nuevo mi puño en su rostro. Suelto un suspiro y me giro para seguir mi camino por el pasillo, el se posiciona a mi lado. Llegamos a la salida y nos detenemos justo donde esta estacionado mi auto.

-Entonces...

-¿Entonces qué?.

-¿Vas a disculparme o no?. Entienderé si ya no quieres seguir siendo mi amigo. Yo solo quería disculparme.

-Todo esto empezó por tu culpa, Gerson. -protesto con enfado. -Tu fuiste quien me acercó a ella.

-Lo se. -suspira con pesar.

-Ella me gusta, me hace sentir bien y quiero estar con ella, Gerson. Si rompe mi corazón la verdad no me importaría.

El me mira como si no pudiera creer mis palabras. Continúo:

-Se que soy un estúpido por haberme fijado en ella, cuando no debí hacerlo. Pero caí, me enamoré de cada uno de sus errores y volvería a hacerlo de nuevo una y otra vez.

-Vaya.

Es lo único que dice impresionado.

-No puedes juzgar a una persona sin conocerla, Gerson. Y mucho menos si se trata de Nicolle. No la conoces, no sabes por toda la mierda que ha pasado, nadie lo sabe. Pero yo la conozco, yo se quien es y no me importa lo que los demás digan de ella, la voy a seguir queriendo igual.

-Yo...

Empieza, sin saber que decir y rasca su nuca. Lo que hace cuando se siente incómodo o nervioso.

-Es la primera vez que siento algo así de fuerte por alguien, y lo sabes.

El asiente estando de acuerdo.

-Creo que le debes una disculpa.

-¿Qué?.

-Si quieres que volvamos a ser amigos, primero debes disculparte con ella, Gerson.

El pone los ojos en blanco con astio.

-Bien.

Le doy la espalda y abro la puerta del auto.

-¿Y tu no piensas disculparte?.

-No.

-¡Me rompiste la nariz!

-Porque te lo merecías, Gerson.

Subo al auto y me obligo mentalmente a no reirme en su cara.

-La próxima vez, te devolveré el golpe.

Me dice antes de cerrar la puerta. Bajo la ventanilla del auto mientras el permanece parado cruzado de brazos.

-Eso ya lo veremos, pecoso.

El me fulmina con la mirada y yo le sonrío. Gerson puede parecer una mala persona, pero no lo es. Es solo que a veces se pasa de idiota. Lo conozco de hace bastante tiempo, se que sus intenciones no son mala. Pero cuando se trata de Nicolle actúo a la defensiva, no quiero que se metan con ella.

Ella me importa demasiado, mas que amistad con Gerson. Y si tuviera que elegir entre: Una amistad de varios años y un amor de varios meses, escogería la segunda opción siempre. No se si eso me hace mal amigo, pero solo hago lo que dicta mi corazón. Quizás me esté equivocando respecto a ella, quizás no. Pero, en la vida hay que tomar riesgos. Porque de que sirve tener un corazón sino te dejas llevar por el.

Enciendo el auto y salgo a la autopista dejando a Gerson atrás.

♡♡♡

Mientras conduzco entra un mensaje en mi celular. Reduzco la velocidad y observo la pantalla, sonrío divertido al ver el sobrenombre La insoportable . Había olvidado cambiarlo. Ni siquiera me doy cuenta cuando mi corazón empieza a acelerarse. Me sorprende la capacidad que tiene para alterarme hasta la mas pequeña de las neuronas. Leo el mensaje y alterno la vista entre la carretera y el celular, no quiero sufrir un accidente de tránsito.

"Quiero verte"

Sonrío mientras mi corazón salta con furia en mi pecho. Le respondo rápidamente:

¿Extrañándome, Morrison?

Muerdo mi labio inferior esperando su respuesta. Al cabo de unos segundos llega su respuesta:

"Mas de lo que debería, Einstein"

Paso saliva y tecleo una respuesta:

"También te extraño, Morrison, no dejo de pensar en ti..."

Lo envío. Me arrepiento al instante el haberle enviado tal estupidez. Cuando quiero borrarlo, ya es imposible. Ella me ha respondido. Freno en seco al leer su mensaje. Siento que voy a sufrir un infarto en plena vía.

"También me pasa lo mismo, Stanley. Te necesito..."

¡Joder!. El corazón me late frenéticamente en el pecho y me odio por ello. La imagino a ella susurrándome esas mismas palabras al oído. Me estremezco al instante, solo de pensarlo.

Dejo el celular sobre el asiento del copiloto y conduzco a toda velocidad hacia la casa de Camilla.

Quince minutos después, llego a mi destino. El vecindario parece tranquilo, las casas son pequeñas pero elegantes y acogedoras. Estaciono el auto frente a una pequeña casa de color crema con un bonito jardín. Me bajo del auto y me traigo conmigo la hoja de papel donde escribí el poema. Doblo el papel en varias partes haciendo un pequeño avioncito de papel. Cuando era pequeño solía hacerlo y aun lo recuerdo claramente. Cuando termino de fabricarlo, me acerco más a una de las ventanas de las habitaciones. Tomo impulso y lo lanzo. Este entra por la ventana abierta y sonrío victorioso. Aun tengo buena puntería. Me recuesto en el auto y me cruzo de brazos.

Solo espero que Nicolle pueda leerlo.

♡♡♡

Nicolle

Termino de vestirme después de haber dormido bien y haber tomado una ducha. Seco mi cabello con una toalla, mientras la brisa fresca entra por la ventana de la habitación de Camilla. Tarareo una canción que suena a través de mi celular. Arrugo las cejas cuando algo entra volando por la ventana. Dejo la toalla sobre el tocador y me acerco al papel que yace tirado en el piso. Es un pequeño avión de papel. Lo desdoblo y reconozco la letra al instante, es la de Stanley. El papel está un poco arrugado pero puedo leer su contenido perfectamente.
Lo primera frase que leo, me deja perpleja: Lo que me encanta de ti.
Parece un poema, y ese es el título. ¿Lo escribió para mi?.
Cuando termino de leerlo, mi corazón late con fuerza ante cada una de sus palabras. Con el papel entre mis manos me acerco a la ventana, entonces veo su lamborghini rojo y a él recostado sobre la puerta con los brazos cruzados. Sonrío y entonces el levanta la mirada. Su ojos se encuentran con los míos y me sonríe de lado. Esa simple sonrisa causa estragos en todo mi cuerpo. Me apoyo en el marco de la ventana y cruzo mis brazos.

-¿Es cierto?.

Le pregunto y el me mira aun con una sonrisa manteniendo su pose.

-¿El qué?.

Levanto el papel entre mis manos y se lo muestro.

-Todo esto.

El moja sus labios divertido.

-Porque no bajas y me lo preguntas a la cara. Debes averiguarlo por ti misma, Morrison.

Me estas desafiando, ¿Eh?.

Muerdo mi labio inferior y me aparto de la ventana para salir corriendo de la habitación. Bajo las escaleras y salgo fuera sin importar mis fachas. Bajo los escalones hasta llegar frente a él. El me mira con esa intensidad tan característica de él; como si quisiera descifrar mi alma. Me posiciono frente a él, aguantando las ganas de estampar mi boca sobre la suya.

El me mira descaradamente.

-Bonito pijama, Morrison.

Se burla y yo suelto una risita. Ni siquiera pude cambiar mi pijama de bananas por algo mas decente.

-Idiota.

Da unos pasos hacia mi hasta acortar los escasos centímetros que nos separan. Rodea mi cintura con sus manos y me mira fijamente. Mi desastroso cabello cae por mis hombros y mi frente. Aun está mojado, pero no me importa. En lo único que me concentro es en su boca, en lo rosada y exquisita que se ve. Levanto la vista de nuevo a sus ojos.

-También te necesito, Nicolle.

Paso saliva con fuerza ante sus palabras. Nos miramos fijamente y todo a nuestro alrededor se esfuma. Nos sumergimos en nuestra propia burbuja, solo él y yo, y nuestros corazones latiendo a un ritmo ensordecedor.

-Cada palabra.

Lo escucho decir mientras yo aun me mantengo ensimismada, con la mente nublada.

-¿Eh?

El sonríe.

-El poema.

Oh. Claro el poema. A eso se refiere. Tenso mis labios para no reirme de mi idiotez.

-Lo siento, es que me tienes desconcentrada.

-¿Ah si?.

-Por supuesto. Podrías desconcentrar a cualquier chica con tanta belleza.

Él sonríe divertido.

-Tonta.

-Lo decía enserio, Einstein.

Sus ojos brillan suspicaces, acaricia mi mejilla con su pulgar.

-También yo en mi poema.

Sonrío de lado.

-¿Entonces te encanto?.

Se acerca a mi boca y siento su aliento acariciar mis labios. Mi piel se eriza ante el contacto.

-Me encanta todo de ti, Morrison.

Rodeo mis brazos en su cuello.

-¿Hasta lo peor de mi?

-No.

-¿No?.

-No. Lo peor de ti, me encanta aun más.

Presiono sus labios sobre los míos y lo beso con ferocidad, deleitándome con el sabor de su boca. Mi respiración se vuelve errática recordándome así, lo perdidamente loca que estoy por él.

Porque no lo pude evitar, me enamoré de él.

Solo espero que sea lo correcto.

============》♡《===========

Nota deAutora

No es por exagerar, pero creo que en mi otra vida fui poeta ❤😍
¿Que les pareció el poema de Stanley?
Amo la poesía💘
¿Y ustedes?

Diganmeeee
¿Que les pareció el capitulo?
Dejen sus opiniones.

Siganme en Instagram:
@patrixia_escritora
Allí subo spoilers y cositas de mis libros.
Ya saben que los quiero un montón.
Gracias por estar aqui.
Nos leemos pronto.

Patrixia G💘