El Sendero que teníamos era tan estrecho y oscuro que teníamos que caminar uno detrás de otro, como patos salidos de un estanque.

Jackson, Agatha y Tedros apuntaban con su dedo encendido de color dorado a la Princesa Uma que iba delante.

Tedros estaba enfrente de mí y volteaba a cada rato para ver si estaba bien

— Gracias por preocuparte, pero estoy bien. No es necesario que me mires a cada rato

— ¿Estás segura?

— Sí - le respondí

— Entonces, ¿por qué no enciendes tu dedo? - me pregunto mirándome fijamente

— Si todos encendemos nuestros dedos, vamos a llamar mucho la atención, además puedo ver bien - él solo me miró fijamente y después de unos segundos se volteó.

En cierta parte era verdad, pero no del todo. Desde que habíamos regresado no pude hacer nada de magia, desde que yo... Solo sería algo pasajero, debía de serlo.

Mientras más caminaba, más me perdía en mis pensamientos, Rafal había vuelto y ahora Sophie estaba de su lado, ciertamente no sabía cómo disculparme con ella, ambas cometimos errores...

Y no quería para enfrentar a Rafal, la última vez que lo enfrentamos apenas pudimos salir con vida y tenía magia, ahora ni siquiera tenía eso.

— Yo rescataré a Sophie cuando la encontremos - murmuro Tedros como si hubiera descifrado que pensaba - Tenemos un buen vínculo

— ¿Tú? ¿A solas con Sophie? No lo creo - Volteo a decir Agatha - Tenemos que ir nosotras

— ¿Por? - la fulmino con la mirada Tedros

— Es nuestra mejor amiga – contesté

— Miren, es mejor si lo hago yo - replico Tedros - Ustedes tres tienen graves problemas de comunicación

— ¿Y ustedes dos no los tienen? - le respondió Agatha

— Ustedes tres se las pasan peleando y planeando matarse

— Muchas veces estuviste en medio de eso y que yo sepa, no deberías de estar con ellas a solas - apresuro su paso Aggie

— ¿Por?

— Porque la última vez que los encontramos a solas se estaban besando cuando ella era Filip

— Eso fue un error, nunca volverá a suceder, nunca. — dijo Tedros avergonzado, desde que paso eso, no paro de disculparse todos los días.

— Me gustaría que caminaran en silencio - sentenció la Princesa Uma

Las tres horas siguientes nos pasamos caminando, excepto cuando alguien tenía que ir al baño (casi siempre era Tedros) o cuando Jackson y yo nos tropezábamos con algo.

Siempre Agatha intentaba de preguntar sobre el Cuartel, la Liga y nuestras madres, pero nuestra antigua profesora siempre nos respondía que ya habría tiempos para preguntas cuando lleguemos al Cuartel General de la Liga.

— ¿Al Cuartel General de la Liga? Creí que iríamos a la escuela - dijo Jackson

— ¿Y quién nos hará entrar a la escuela? Si lo intentan por su cuenta, morirán antes de poder pasar las rejas. Además, esta noche estarán a salvo en el Cuartel. No durarán ni un minuto solos en el bosque después de que oscurezca.

— ¿Has visto a otro villano resucitado? - pregunto con curiosidad Agatha

— Por suerte, no. Ahora permanezcan en silencio.

Seguimos avanzando en silencio.

Pensaba en mi madre... tal vez había una forma en la que ella estuviera con la Liga... tal vez solo fue un hechizo lo que vi y ella siguiera... viva...

Las ramas encima de mí eran delgadas y nudosas... como las manecillas del reloj de mi madre. — ¿Cuándo hará más calor? - tartamudeo Jackson que se moría de frío.

Todo el bosque parecía haber perdido todo lo mágico de él, en cada árbol había esqueletos de ardillas o de cuervos.

— Vi, mira - Tedros me señaló unas ruinas colosales de enredaderas, árboles y cristal a unos treinta metros del sendero. Los pétalos y hojas estaban marchitos y salpicaban mugre entre ranas azules y putrefactas.

Me acerqué más y limpié un viejo cartel de madera con letras talladas que decía "Línea Hibisco"

— Es un tren del Metro Floral - observó Tedros - Todo el bosque parece estar muriéndose...

— ¿Por qué el sol está más débil que antes?

Ambos nos miramos y seguimos a los demás que estaban muy adelante.

No paramos de caminar, excepto cuando era el momento de comer algunos gusanos mortuorios fangosos, excepto nuestra profesora, porque decía que era una grosería comerse a sus amigos, después que digiera eso, yo solo pude comer uno, por la necesidad. También parábamos cuando le pedíamos ayuda a una ardilla o ave para que nos indique donde estaban el estanque más cercano, ahí pude practicar mucho más mi comunicación con los animales, la profesora me enseñaba cada vez que podía. Para nuestra suerte, aún no encontrábamos a otro villano.

Cuando pasamos por Foxwood la profesora se notó mucho más relajada, como si estuviera más segura.

— El reino más antiguo de los Siempres - suspiro la princesa

Hacia el oeste, se encontraba un castillo dorado con delgadas torres hermosas, sin embargo, la profesora nos condujo hacia el este, por senderos más densos

— Evitaremos las calles y transitaremos por las cañadas Por el momento es mejor que no se crucen con un Siempre

— ¿Por qué? - quiso saber Tedros, pero nuestra profesora se distrajo hablando con una abeja que pasaba por allí

Hacia el final de la tarde nos encontramos con un enorme aljibe de piedra que decía:

"Cabaña de Blancanieves

1.6 kilómetros

Recorridos del Museo todos los días

Prohibido la entrada de Nuncas"

— El Cuartel General de la Liga está aproximadamente a una hora de caminata desde aquí, asique llegaremos antes del crepúsculo - en eso una paloma se puso a hablar con ella - Dice que, con el retorno del Director, los Siempre se mantienen alejados del bosque. Pero sabía que yo vendría para ver cómo estaban mis amigos.

La paloma nos miró a los cuatro con algunos gorjeos interrogantes.

— Sí, querida, son ellos - asintió Uma y acaricio a la linda paloma mientras esta seguía mirándonos, y agregó algunas piadas en un murmullo - Ha oído que son los Siempres destinados a vencer al Director - Uma contuvo una sonrisa - Y que sus hijos tendrían un aspecto muy interesante...

Tedros y Jackson se echaron a reír mientras que Agatha se sonrojó, yo solo me quede pensando...

— Podría enseñarles la casa de Blanca a lo largo del camino, yo ahí tenía tantos amigos - recordó la Princesa Uma.

Tedros se acercó mucho más a mí y me sujeto de la mano.

— Mira, los dos sabemos que tú eres una de sus mejores amigas. Y sabes que Sophie solo busca ser amadas, está dispuesta a aceptar el Mal más siniestro para no estar sola. Sé cuánto dolor guarda en su interior porque me lo ha contado. Quiero mostrarle que puede encontrar el amor, como yo lo hice al encontrar a la chica más bella, hermosa, suave, inteligente, divertida y... — sonrió mientras me miraba mis ojos - Puedo mostrarle que puede ser amada, como yo te amo a ti.

Yo solo lo miré, pero no me sentía como antes... no estaba confundida, muy confundida con mis sentimientos.

Me sentía culpable en cierta parte, al estar conmigo siempre tenía que estar implicado en los desastres de mi vida... merecía tener a una chica lo suficientemente buena para él, una princesa que sea valiente y que siempre lo apoye y lo ame, no yo...

— Será... será mejor que yo hable con ella - suspire y me fui a caminar junto a la Princesa Uma. Antes de hablar con ella, lo vi maldiciéndose a sí mismo en susurros...

— ¿No es fácil verdad? Los "Felices Para Siempre" lucen tan perfectos y no siempre es lo que parecen ni queremos

— A veces siento que él necesita una princesa de verdad... — suspire - Nunca puedo hacer lo que una princesa debe de hacer, mis decisiones terminan afectándolo y afectando a todos

— ¿Acaso has sido un lindo fantasma todo este tiempo?

— Sabe a lo que me refiero, una princesa de verdad, no a una llena de problemas que este llena de vida y que ni siquiera sabe lo siente

— ¿Lo amas, Violet? - me pregunto la profesora

— Usted sabe la respuesta - ella me miro con una cálida sonrisa

— Y él te ama, se nota - me susurro - Haría cualquier cosa por ti, aunque sea un poco tonto y tú lo sabes... la verdadera pregunta es ¿Empezaran a hablar entre ustedes? La comunicación es lo esencial en una relación, si no dicen lo que sienten y sus problemas no podrán tener su verdadero "Felices Para Siempre" porque uno lo tiene que hacer, no siempre es el que aparece en tu cuento.

Parecía que quería seguir hablando, pero Tedros llego.

— ¿Blancanieves está en la cabaña? - cuestiono Tedros

— ¿Una reina en una cabaña? - se rio la profesora - Blanca vive en el castillo del difunto rey y los enanos estan en otros reinos gonzando de sus riquezas. La Liga se ofreció a refugiarla en el Cuartel General, pero ella dijo que estaba feliz con su nueva vida y no tenía intención de volver a su antigua vida.

—¿Qué tiene que ver la Liga con la antigua vida de Blancanieves?

— ¿Y por qué la Liga iba a proteger a alguien cuya historia ha terminado?

En eso, un grito agudo y espeluznante retumbó en el bosque. Los cinco nos detuvimos en seco y vimos, el grito provenía del otro lado de una pared que se extendía hasta el final del sendero.

— ¡Tomaremos otro camino! - grito Uma aterrada - Usemos él... Tedros ¿¡Qué haces!?

— Me pareció oír que una chica pedía ayuda

— Pero... ¡Violet! ¿Tú también?

— Sabe cómo es, es mejor que lo vigile y lo traigo

— Rescatarlos de la tumba... esas fueron las órdenes - suspiro Uma - No perseguir a príncipes tontos y a novias celosas

— Ay, la juventud de ahora, ¿verdad? - nos miró con desaprobación Jackson - Estos jóvenes de ahora son unos-

— Ven - lo llamo Agatha, ya que todos trepábamos la pared

— Lo que digas, mi linda princesa - dijo para ir corriendo a seguir a los demás

Cuando llego Jackson, se quedó inmóvil al igual que todos al ver la horrible escena...

Estábamos en la cabaña de Blancanieves... delante de cada par de zapatos dorados yacía el cuerpo de un enano, boca abajo en un charco de sangre. Todos ellos estaban vestidos con túnicas de colores lisos que los cubrían de pies a cabeza, con gorros de dormir de terciopelo del mismo color y sus pies diminutos, perfectamente calzados en los zapatos esculpidos. Todos ellos estaban muertos...

— No... no... no es posible - chillo Uma, alejándose

— Dijiste que ellos se habían marchado de aquí - tartamudeo Agatha

— ¡Así ha sido, durante décadas! - farfulló Uma - Alguien debe haberlos traído de regreso

— ¿Qué clase de monstruo traería de vuelta a los enanos con el único propósito de matarlos? - tartamudeé

— Pues quién fuera que haya sido, ya se ha ido. Iré a ver si alguno de ellos está con vida... — fue corriendo hacia ellos Tedros

— Si es así, ¡debemos llevarlo con la Liga! - grito Uma

A lo que Jackson la siguió.

Yo permanecí atrás, la muerte de los enanos... el Guardián de la Cripta... y de... no quería estar relacionada con más muertes. Intenté de distraerme cuando recordé algo...

El grito... era agudo... femenino 

— ¿Vi? - me pregunto Agatha al verme paralizada

Entre rápidamente a la cabaña... y Agatha me siguió.

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Holi, ¿Cómo están?

Espero que les haya gustado <33

Estaré actualizando más seguido ♡♡♡

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PDT: No se olviden de tomar agua 

(Escuchen "bad idea, right?" es un temazo)