Respira...

Pico corría rápidamente de sus perseguidores sentía las balas silbar cerca de su espalda, y un profundo miedo que le embargaba completamente, solo tenia algo en mente: tenia que escapar o seria el fin.

Respira....

Se escondió en un casillero oyendo los pasos alejarse, con ellos lejos empezó a sollozar.

Respira...

Pico empezó a pensar en que estaría haciendo si Cassandra no se hubiera desbocado, seguiría contando manzanas y bananas como un chico bueno en vez de estar llorando en un casillero oscuro con los cadáveres de sus compañeros por  todos lados, podía escuchar a algunos agonizando, a través de la rejilla.

Respira.....

inconscientemente Pico empezó a pensar en su madre, podía jurar escuchar su dulce voz a través de la rejilla invitándolo a llegar hasta ella en los fríos brazos de la muerte, el sabia que era una vil mentira de esas voces que empezaron a hablarle apenas Cassandra empezó a disparar, decidió pensar en otra cosa cuando un recuerdo feliz  decidió cruzar fugazmente su mente, empezó a pensar en ello para no seguir llorando.

En una habitación decorada con colores vistosos, un pequeño niño estaba en la cama  esperando a su madre, ella pronto llego, llena de risas y con olor a amapolas, Pico sonrió por el recuerdo: ella siempre había olido así. 

-¡Hola Pico!- la Fémina lo tomo en brazos mientras lo besaba-¿Quieres oír un canción de cuna?-

-¡Si! ¡Si!- el pequeño empezó a saltar en su cama ansioso, amaba la voz de su madre y era un extraño sedante para el-

-¡Entonces acuéstate!- el Pelirrojo se acomodo amorosamente en su regazo, mirándola con felicidad- te voy a cantar algo que mi madre solía cantarme a mi-

"Cuando te sientas solo, piensa que soy la estrella de la mañana"                                                                  De repente ese recuerdo se mezclo con otro, la cabeza de su amiga Nene aparecía en el suelo destrozada y chorreando sangre por todos lados, Pico se asusto. Algo andaba mal.

"Tus penas se irán, sentirás la paz"                                                                                                                                 Ahora Ciclops aparecía en escena, su cuerpo destrozado por cosas que el mismo se había causado.

"Te amo no lo olvides mi pequeño ángel"                                                                                                                   Veía a Hanzou con su sangre en el suelo "Te cortare el pene y haré un cóctel de salchicha" se dijo el, no había terminado muy bien. 

Sus recuerdos se mezclaban muy rápido y sentía los agonizantes gritos de sus amigos antes de ser asesinados, entonces hubo calma, una extraña calma, Pico se sentía cada vez mejor, pensaba que podía salvar sus amigos, derrotar a Cassandra, he incluso ser un héroe.

Miro su reloj, eran las 12:34, aun tenia tiempo.

Entonces ceso de respirar....