Un año después

El día para variar era hermoso, el sol en lo alto vaticinaba un día espectacular acompañado de la suave brisa Septembrina.

En la casa de la Familia Park todo era bullicio y actividad.

La cocina estaba repleta de personas que preparaban una deliciosa comida, Seonmi y SeokJin eran los encargados.

En el Jardín se alzaba un enorme toldo blanco decorado con globos blancos, dorados y negros y había una hilera de sillas dispuestas a lo largo frente a un altar y un pequeño podio y más a la derecha una sección de mesas y sillas adornadas con mantel blanco y margaritas frescas en el centro.

Arriba en la segunda planta de la casa en su habitación estaba Park Jimin, mirándose fijamente en el espejo.

Estaba hermoso en un traje blanco perla, su rubio cabello peinado hacia atrás y Seulki le ayudaba a colocarle maquillaje.

     —Te ves tan guapo, es una lastima que ya estés comprometido con el bobo de Yoon o juro que te desposaba yo misma.

Las mejillas de Jimin ardieron un poco, Seulki era buena pero solía molestarlo de aquella manera para enfadar a su hermano.

     —Gracias Seulki,  si no tuviera Alfa te elegiría.

     —Eres tan gentil.  —Respondió ella. —¿Llevas las bragas se encaje sexy y ligueros que te regalé? Así mi hermano estará motivado en la noche.

     —¡Ya Noona!

La muchacha comenzó a reír ante el sonrojo tierno de Jimin quien  no podía llevarse las manos al rostro porque temía arruinar su maquillaje.

     —Te ves espectacular Minnie, y la boda será linda es más al estilo de mi hermano y tú.

Jimin asintió.

Hablaron mucho al respecto, ambos deseaban una boda linda pero muy íntima sin prensa ni reporteros ni cámaras por todos lados. Solamente con sus familias cada uno y por ello al final se había decidido hacer en casa de la familia de Minnie.

Total la casa tenía un jardín hermoso y grande que Seonmi no dudó en arreglar de manera linda para la ocasión. 

     —¿Yoongi no ha venido?

     —Noop pero dice que viene en camino con nuestro primo Namjoon y Chanyeol mi novio. Han celebrado su despedida de soltero toda la noche.

Jimin le miró asustado.

     —No Minnie ni lo pienses,  les prohibí rotundamente llevarlo a un lugar de mala muerte y Namjoon sabe que si lo hacen los despellejo vivos así que solamente pasaron buen rato en el apartamento de Yoongi. Además es mi hermano por favor, el ser mas apático del mundo que odia las fiestas y los lugares así.

Jimin asintió algo más tranquilo. No desconfiaba de Yoongi pero a veces las despedidas de solteros se salian de control, todos tomaban la errónea idea de que tener sexo con alguna desconocida el último día antes de la boda era un requisito fundamental para dejar la soltería atrás.

     —Eso es estúpido.  —Respondió Seulki cuando Jimin le dijo en voz alta lo que pensaba. —La gente está tan estereotipada y cabeza hueca, ¡Estás listo!

Jimin volvió a verse en el espejo y sonrió, los últimos toques de maquillaje le habían dado una mirada más profunda y brillante.

La puerta de la habitación se abrió y por ella entró Taehyung con su enorme sonrisa como siempre y su presencia que irradiaba luz y energía positiva cada vez que llegaba a un lugar.

Afortunadamente para Taehyung esa luz que casi se extinguia había vuelto a brillar más que nunca.

Todo lo que había vivido antes finalmente obtuvo un cierre feliz para  él.

El recuerdo de esa vez en que alguien llegó hasta su casa a pedirle perdón aún estaba ahí.

Todavía recuerda a la perfección las palabras de Hoseok.

     —Se que fui un tonto y en verdad lo lamento mucho... de verdad que si lo siento y me haría muy feliz que pudieras perdonarme. No voy a excusarme ni a quitarme responsabilidad de mi parte en todo esto y tampoco espero que me perdones de primas a primeras pero al menos dime que reconsiderarás hacerlo algún día. Por favor Tete, por todo lo que un día fuimos y no valoré.

Taehyung permaneció en silencio escuchando las palabras de Hoseok que al parecer ahora si eran totalmente genuinas y al finalizar sonrió amablemente con él.

     —Eres un Omega muy lindo Hobi, uno que cometió muchos errores y yo soy un humano no un Dios, no te puedo juzgar ni aplicar la ley divina ni nada por el estilo pero aún así te perdono por todo lo que pasó.

Hoseok sonrió con su corazón muy aliviado porque aquel peso que sentía finalmente podía alojarse.

     —Mi lobo ya no te llama Hobi. —Continuó el castaño de cabello ondulado.  —Mi lobo ya no te hecha de menos como al principio porque está enamorado y aunque no es nuestro destinado a mi lobo le hace feliz, muy feliz la atención y el cariño de nuestra pareja y yo también lo amo, lo siento mucho si buscabas algo más que el perdón con tus palabras pero no hay nada... tú y yo tuvimos nuestra historia y  te digo que aquí y ahora finaliza. No te volveré a ver porque me mudaré a otro país.

Hoseok tenía sus ojos llorosos y su nariz roja por el llanto innegable.

Asintió con una sonrisa en sus labios.

     —Ya lo sabía Tae, mi lobo lo presentía. Está muy triste pero creo que lo vamos a superar algún día. Que seas muy feliz Tae, es mi último deseo para ti.

Finalmente aquella relación que no había terminado nada bien había sido sepultada.

Y aunque a Hoseok le costó mucho finalmente lo aceptó,  y Taehyung sabía que el Omega había aprendido la lección porque ahora estaba solo sin su madre, sin su primo y sin amigos.

Pero quizá la soledad era la medicina para si corazón. 

     —Hola Omega Guapo ¿Estás libre? —Bromeó al llegar al lado de Jimin.

     —No, la verdad no estoy... —Fue la respuesta del Omega.

     —Mmm es una lastima, abajo hay un Alfa bastante apuesto esperando por ti.

La sonrisa de Jimin se ensanchó mucho más.

     —¡Ya vino!

Taehyung asintió también sonriente.

Taehyung acomodó bien su traje y luego lo abrazó cariñosamente.

     —Estás muy lindo Jiminie,  gracias por permitirme ser padrino de tu boda, te quiero mucho.

Jimin asintió con sus ojos algo brillosos por la emoción. 

     —También te quiero Tae.

Se fundieron en un abrazo bastante reparador para ambos.

      —Bueno creo que debemos bajar todos están listos. —Anunció Seulki tomando a Jimin del brazo.

Ella era la madrina de parte de Yoongi. 

Finalmente Jimin bajó hasta el jardín acompañado de sus dos padrinos y en cuanto pisó el césped la música de piano comenzó a sonar.

Quien tocaba era SeokJin su director de artes escénicas del Teatro donde trabajaba y a quien había invitado porque le tenía mucho cariño.

Al frente pudo ver a un Alfa bastante guapo en traje también blanco perla y corbata que lo veía con expectación y admiración mientras caminaba hacia él. 

La sonrisa de Yoongi no se hizo esperar.

El tan solo ver que Jimin iba hacia él con aquel lindo traje, un ramo de margaritas en las manos y una bella sonrisa en sus labios lo ponía más feliz que nunca.

Cuando Jimin llegó hasta él Seulki y Tae le dieron un abrazo a ambos y se fueron a sentar, Seulki al lado de su madre y Chanyeol y Taehyung al lado de los Park y Jungkook. 

El pelinegro rápidamente le tomó de la mano y Tae le sonrió enamorado. 

Su historia era otra, tan curiosa y extraña pero esa era para otro día.

     —Estás muy hermoso futuro Min Jimin.  —Susurró Yoongi cerca de su oído.

Jimin no pudo evitar sonrojarse.

     —Tú también lo estás Alfa. —Respondió.

Los pocos invitados que solamente eran familiares muy cercanos y mejores amigos de ambos tomaron asiento expectantes.

Finalmente el sacerdote habló para comenzar con la ceremonia.

Todos oían atentos las palabras dichas por el hombre de traje negro que miraba a la joven pareja, promesa de un amor puro y un matrimonio estable.

Cuando llegó la hora de los votos, Yoongi y Jimin tomaron sus manos y me miraron a los ojos.

El primero en hablar fue Yoongi.

     —Minnie, Yo Min Yoongi hoy te prometo que  reiré contigo en los momentos de felicidad, y te reconfortaré en los momentos de dolor. Compartiré tus sueños y te alentaré a que los alcances, estando siempre a tu lado en cada paso del camino. Te escucharé con compasión, atención y comprensión, y te hablaré con honestidad, amor  y sinceridad. Juntos construiremos y compartiremos un hogar, que compartiremos con todos aquellos a los que queremos. Seré tu esposo tu amigo y compañero, desde hoy y hasta el final de nuestros días porque no hay nada que me haga más feliz que estar a tu lado.

Jimin sonrió ante las palabras dichas por Yoonie y tuvo que tomar muchas fuerzas de algún lado para no romper en llanto ahí mismo.

    —Yo Park Jimin Prometo ser siempre tu mayor admirador. Crearemos una familia juntos, que se basará en la risa, la paciencia, la comprensión y el amor. Prometo no solo hacerme anciano a tu lado, sino también crecer junto a ti. Te amaré cada día a través de los días tranquilos, así como a través de los días tormentosos, ayudándote en los momentos de duda y apoyándote en los momentos de decisión. Así como te di mi mano para que la tomaras hoy te entrego mi alma para unirla a la tuya por la eternidad. 

Ambos tomaron las sortijas que Tae y Seulki entregaban y se las colocaron para finalizar todo el ritual con un cálido beso de amor.

Al fondo podían oírse varios "Awww" y alguno que otro llanto.

     —Muy bien,  por el poder que me confiere el estado  y la madre Luna Yo les declaro Esposos, Alfa y Omega.

Todos comenzaron a aplaudir con emoción cuando finalmente la pareja se colocó de frente y levantaron ambas manos entrelazadas y adornadas con sus nuevas  alianzas de matrimonio.

≫────°❅•𝖄𝖔𝖔𝖓𝖒𝖎𝖓•❅°────≪

La ceremonia estuvo muy bonita, comieron la deliciosa comida que habían preparado Seonmi y SeokJin y bailaron a más no poder.

El grupo de músicos del Teatro de Jimin tocó en vivo.

Ahora ya en la privacidad de su habitación en el apartamento de Yoongi que ahora era también de Jimin,  ambos cuerpos se fundían entre las sábanas y la pasión.

Sus respiraciones eran erraticas mientras se unían, se volvían un sólo cuerpo y una sola alma.

Los gemidos se mezclaban a la perfección con las palabras de amor que Yoongi le susurraba a Jimin con su voz gruesa y agitada mientras lo tomaba como suyo, como tantas veces pero como si fuera la primera.

De los ojos de Jimin resbalaban pequeñas lágrimas producto de la montaña rusa de  emociones que Yoongi causaba en él.

     —M-minnie cielo, te amo tanto. —Susurraba Yoongi besando con hambre el precioso cuello ya marcado  del rubio.

     —Y-yoonie, oh Yoonie Mmmh t-tambien te amo, oh Diosa...

Sus caderas eran tomadas con fuerza mientras su punto dulce era empujado una y otra vez con precisión, tanto que le hacía delirar.

Jimin cerró fuerte sus ojos y clavó sus uñas en los hombros del pelinegro mientras alcanzaba con fuerza su orgasmo arrastrando también a Yoongi con él quien derramó toda su esencia en Jimin mientras sus afilados colmillos se enterraban en la marca, renovandola, reclamándolo nuevamente suyo para siempre.

Jimin Jaeo del dolor y la excitacion al sentir su suave carne ser traspasada por los colmillos de su Alfa.

De inmediato se formó el nudo dentro de él y así quedaron unidos recuperando sus respiraciones.

     —Eres tan precioso cielo. —Halagó Yoongi a  Jimin mientras acariciaba con amor sus mejillas rojas por la acción que acababan de tener. —Finalmente eres Mi esposo, mío y de nadie más.

Jimin soltó un suspiro mezclado con una risita y asintió.

     —Sólo tuyo Yoonie y tú mío.

Yoongi volvió a besarlo con tanta devoción sin perderse  ningún detalle de su bello rostro.

Eran muy  felices al fin estando unidos, eran uno solo y pronto serían una hermosa  familia.

≫────°❅•𝖄𝖔𝖔𝖓𝖒𝖎𝖓•❅°────≪

     —¡Yoonie!

El pelinegro dejó lo que hacía en su portátil y se levantó buscando la voz de su Omega.

Lo encontró parado a media sala con algo a sus espaldas que el Omega se moria por mostrar.

     —¿Qué pasa bebé? —Preguntó esbozando una sonrisa al verle ahí tan tierno como siempre.

     —Feliz cumpleaños Yoonie.

El rubio entregó un regalo que había preparado para su esposo.

Yoongi sonrió tomando a Jimin de la cintura y besando su frente.

     —Gracias Minnie, cada vez soy más anciano.

Jimin soltó a reír mientras unía su nariz con la del Alfa en un beso esquimal.

     —Pues si así es, entonces eres el anciano más apuesto y sexy que conocí en mi vida.

Yoongi sonrió y lo soltó para abrir su obsequio.

La caja era dorada y con un moño rojo.

El Alfa se sentó en el sofá y quitó el moño con cuidado para después abrir la cajita.

Dentro había un hermoso reloj personalizado que Jimin había enviado a hacer para ellos con sus iniciales.

     —Wow está muy lindo Minnie ¿Cómo sabías que pensaba comprarme otro reloj?

     —Porque arruinaste el otro Yoonie.  —Respondió con obviedad.

     —Ah si, es cierto.

Jimin le ayudó a ponerse su nuevo reloj.

Después vio que dentro de la caja había algo más.

Yoongi arrugó la frente al ver que era una pequeña foto en blanco y  negro que no parecía tener nada más que solo imágenes difusas que no entendía.

Jimin miraba expectante.

Yoongi introdujo sus dedos en la caja y sacó la pequeña fotografía solo para llevarse la sorpresa de no era una foto como inicialmente creyó.

¡Era una ecografía!

Miro la ecografía y después miró a Jimin  poco a poco formando una "O" con su boca.

     —Minnie esto es... es una...

     —Felicidades Yoonie serás papá.

Yoongi no salía aún de su asombro y cuando por fin lo hizo tomó a Jimin de la cintura y lo levantó en el aire dándole muchas vueltas sin borrar su gran sonrisa.

     —¡Amor gracias gracias gracias mi vida, este es el mejor cumpleaños de mi vida te amo tanto! —Gritó mientras dejaba a Jimin en el piso y lo besaba por todo el rostro.

     —Tendremos un lindo cachorro Yoonie.  —Dijo Jimin con sus ojitos llenos de lágrimas.

Yoongi las secó con cuidado y luego besó las manos de su Omega.

Esa era la mejor parte de tener a Minnie como su Omega, tendría a su primer cachorro y seguro sería tan adorable como él.

     —Tendremos un lindo cachorro. —Repitió feliz.

Y así fue, un año después ambos disfrutaban de su pequeño angelito de tres meses  que era la viva imagen de Jimin tal y como había predicho Yoongi, rubio como Jimin con sus mejillas abultadas y labios rosaditos y de forma de corazón pero con sus ojos ambarinos como los de su Papá Yoonie.

Se llamaba Min Jiyoon y era la luz de los ojos de Yoongi y la felicidad plena de Jimin.

Taehyung y Jungkook también iban a visitarlos siempre y ahora tenían la buena noticia de que iban a adoptar a un lindo bebé también para que le hiciera compañía a su cachorrito y crecieran juntos.

Jimin siguió con su carrera de bailarín y ahora viajaba a países demostrando  su talento y las empresas de Yoongi cada vez iban mejor que nunca.

Eran felices y vivían plenos amándose día con día como si realmente fuera el primero.