SEGUÍAMOS caminando por el que era un desierto hasta que me paré por un momento haciendo que Bellamy también
¿Te encuentras bien? -me preguntó él-
Sí, solo estoy un poco mareada. Seguro que se me pasa pronto -respondí tratando de empezar a caminar pero me volví a sujetar en sus hombros dado que sentía que me iba a caer en cualquier momento-
Toma un poco de agua, ¿vale? -me pidió sacándola de una de las mochilas y dejándomela. Yo di un par de sorbos y suspiré apoyando mi cabeza en su pecho mientras los demás seguían pasando-
Tenemos que seguir -le recordé volviendo a abrir los ojos dejando de escuchar el pitido en mis oídos-
¿Estás segura de que puedes? -me preguntó Bellamy a lo que yo asentí con la cabeza-
Tenemos que terminar ya con esta guerra -le respondí para luego dejar un beso en sus labios y comenzar a caminar a su lado. Él trataba de distraerme para que no me preocupara y yo sonreía ante lo que decía-

AL cabo de un rato, había oscurecido y habíamos montado nuestras casetas.
Bellamy había ido a hablar con su hermana mientras que yo estaba en la cama y Harper al lado acariciando mi espalda.
Había vomitado antes tras haber intentado comer algo pero el olor y sabor me había parecido tan nauseabundo que tuve que dejarlo.
Tranquila, es normal -me tranquilizó Harper- algunos días estarás mejor que otros. Son algunos síntomas del embarazo
¿Te puedes quedar un rato más conmigo? -le pedí a lo que ella asintió con la cabeza acomodándose a mi lado-
¿Sabes que he traído del anillo? -me preguntó para luego sacar un par de revistas. Yo solté una pequeña risa y tomé algunas, estabas desgastadas y eran de hace años atrás, pero aún así se podían ver las imágenes y leer los textos- es en la que aparecen esos chicos tan guapos
¿Monty y Bellamy no se pondrán celosos? -pregunté soltando una risita mientras ella apoyaba su cabeza encima de la mía y empezábamos a hablar y a reír sobre actores de películas u otros chicos guapos que aparecían en las páginas. Lo que no había visto era a Bellamy llegando a punto de decirme algo y mirarnos con una sonrisa mientras lanzábamos un par de carcajadas y se volvía a ir-

TRAS otras horas caminando, llegó la noche de nuevo.
La última noche antes de la gran pelea.
Yo estaba dormida sentada en la tierra entre las piernas de Bellamy y mi cabeza en su pecho.
La hoguera estaba frente de nosotros y su calor y las caricias de Bellamy habían hecho que pudiera descansar finalmente.
Él y yo estábamos molestos con el otro dado que Bellamy no quería que fuese a la guerra y me quedara con Monty, Harper y otros más atrás pero aún así quería aprovechar el mayor tiempo posible estando junto a él.

PARA el amanecer Bellamy estaba en la caseta colocándose una camisa.
No te irás sin despedirte, ¿verdad? -le pregunté algo somnolienta ya que me había despertado segundos atrás-
Ni lo pensaría -negó Bellamy para luego a agacharse quedando a la altura donde estaba yo acostada- sé que no te parece bien que no te deje ir, pero no puedo dejar que nada te pase a ti o al bebé. ¿Me entiendes?
¿Y tú entiendes que tampoco puedo dejar que te pase nada a ti? -le pregunté pero él solo besó mi frente-
Estaré bien, Nat. Tranquila -me pidió para luego sujetar mis mejillas y mirarme- si algo va mal mientras que...
Estaré bien -le respondí para luego sujetar su nuca y besarlo. Él correspondió mi gesto y ambos acabamos con nuestras frentes juntas- te quiero, Bell
Y yo. Pero no te despidas, nos volveremos a ver, ¿vale? -dejó otro besó más corto en mis labios y luego besó mi barriga a lo que yo sonreí mientras lo veía irse-

HABÍAN comenzado a llevar heridos de la guerra.
La gente iba a de un lado a otro tratando de ayudarlos.
Estaba ayudando a Jackson a sujetar a Miller
¿Has visto a Bellamy? -le pregunté preocupada-
Está con Octavia. Hay que ir a buscarlos -me respondió Nathan-
¿A buscarlos? ¡Esto es culpa suya! -explicó una mujer- el enemigo nos estaba esperando
Si tú y los del culto de la Llama no os hubierais ido... -replicó en un grito Miller mientras ella sacaba su espalda y peleaban en grito-
¡Basta! -gritó Monty- ¿estaban vivos?
No lo sé. Por eso tenemos que volver -respondió Nathan a lo que yo estaba tratando de controlar mi respiración-
Vuelve tú solo. Nadie más va a morir para salvar a Blodreina -replicó ella-
Ella al menos te ha mantenido con vida estos años -le recordé caminando hacia ella- tal vez tú seas tan poco agradecida que no quieres ni comprobar que la que te ha mantenido con vida esté viva y al otro chico que está allí, al que le das tan poca importancia es el padre de mi bebé y mi novio. Vuelve a repetir que los quieres dejar allí
¡Todavía podemos ganar! -gritó Nathan para luego caer al suelo haciendo que fuéramos hacia él para ayudarlo. Empecé a escuchar la radio asi que fui hacia esta-
Ya estoy aquí -le respondí a Echo- nos habías dado luz verde. ¿Qué ha pasado?
Ha sido Diyoza. Esa puta nos ha traicionado -habló Raven-
Bellamy y Octavia están allí aún. No sabemos si están vivos o no así que estamos pensando en ir a buscarlos -añadí- díganme que tienen un plan o todos moriremos
Sois muchos más que ellos. Atacad -pidió Echo-
No podemos. Solo hay algunos dispuestos a volver allí -le respondí- están enfrentados unos con otros. No hay nadie al mando ahora
Vale. Lo entendemos y lo resolveremos. Hasta entonces, la radio en silencio y ni pienses ir sola. ¿Está claro? -me pidió Echo-
Está claro -respondí a regañadientes para luego apagarlo-