
Capítulo 6: Nuevo Amigo
—Jisoo, ¿te encuentras bien? —preguntó Jennie con preocupación al ver a su hermana en completo silencio en todo el transcurso del regreso a casa— Hey... ¿Qué pasa?
Jisoo se había encerrado en su habitación sin pronunciar palabra luego de que llegaran a su destino. Solo sonreía vagamente y asentía cuando Jennie le hacía preguntas o le contaba cualquier cosa.
—Estoy bien —respondió Jisoo cubriendo su cara con la almohada.
—No te creo... Algo pasó, ¿quieres contarme? —la animó Jennie sentándose a la orilla de su cama. Normalmente siempre era Jisoo quién la hacía sentir mejor cuando algo no iba bien. Ahora era su turno para hacerle saber a su hermana que no estaba sola— Desde que llegamos te has encerrado en tu habitación y no has querido salir... Incluso Nana me dijo que no quisiste probar bocado.
—No tengo hambre, es todo...
—Tú siempre tienes hambre, dame una excusa más creíble —contestó Jennie al ver el estado tan renuente de su hermana— ¿Tiene que ver con el tal Lin?
—No quiero hablar de eso Jennie —admitió Jisoo dejando por fin al descubierto su cara— Estoy confundida, mi cabeza es un lío ahora, no sé qué hacer... Quisiera tirarme de un puente.
—¿Qué? ¿Por qué? No entiendo... Hasta antes de dejarte despedirte a solas con Lin tú estabas bien, ¿qué ha cambiado ahora?
—No me gustan los chicos, lo sabes... —Jennie asintió sin comprender— Lin es un chico...
—Claro... ¿Y eso que tiene que ver?
—Creo que Lin me atrae un poco —confesó Jisoo con las mejillas sonrojadas— Pero eso no debería de pasarme. Me he repetido hasta el cansancio que los hombres son horribles, tal vez no todos pero si la mayoría.
—De acuerdo...
—Lin es gay... —murmuró Jisoo tratando de reprimir un sollozo— Por Dios... Que patética soy.
—Estás... ¿Estas llorando porque Lin es gay y a ti te gusta? —Jisoo no contestó, simplemente se soltó a llorar con la cara hundida sobre su almohada— Oh Jisoo...
—Te juro que no sé qué me pasa... Es decir, lo acabo de conocer hoy, no puede gustarme, ¡no! —Jisoo comenzó a retorcerse sobre la cama y Jennie se sintió asombrada por la actitud de su hermana— Algo debe estar mal en mí... Soy tan idiota pero es que... Te juro que no puedo reprimir que el corazón me lata con tanta fuerza cada vez que estoy cerca de él... Siento como si el corazón se me fuese a salir del pecho.
—Supongo que estás... Deslumbrada, no sé... Tal vez debe ser porque nunca nadie te había rechazado antes y ahora que aparece alguien al que no le gustas pues...
—¿Piensas que solo es un capricho mío? —preguntó Jisoo sintiéndose ofendida de sobremanera— Debes saber que yo no lloraría por algo así, más bien lloro porque no puedo perdonarme el hecho de que me guste un hombre.
—Esto tenía que suceder tarde o temprano, yo sabía que algún día iba a llegar a tu vida el hombre perfecto para ti —dijo Jennie acariciando la espalda de Jisoo— Yo sabía que ibas a terminar por sentar cabeza. Voy a darte un consejo, sí Lin es el chico que te gusta, entonces lucha por él, lucha por su amor.
—No me has entendido Jennie... Lin es gay, a él no le gustan las mujeres, solo aceptó salir conmigo para guardar las apariencias al igual que yo —susurró Jisoo aún con los ojos llorosos— No le gusto y no le gustaré nunca... Supongo que solo debo resignarme a que él no es para mí y tal vez tengas razón en eso de que solo me he dejado deslumbrar con alguien que no está interesado en mí.
—Deberías... Salir de fiesta. Yo te cubro —murmuró Jennie y Jisoo alzó su cara enseguida. Jennie era enemiga de que su hermana se la pasara de fiesta y de cama en cama, pero la verdad es que nunca había visto a su hermana llorar por alguien, mucho menos por un "hombre", eso de alguna manera le preocupaba...
¿Y si no es solo un capricho?
Tonterías, no está hablando en serio, lo acaba de conocer, lo va a superar...
—Tú odias que vaya a fiestas...
—Lo hago, pero tal vez solo necesites distraerte para sacártelo de la cabeza y también pienso que lo ideal sería que lo dejaras de ver —Jisoo negó rotundamente— Es lo mejor...
—¿Tú dejarías de ver a Chaeyoung? —preguntó Jisoo de la nada.
—¿Chaeyoung que tiene que ver en esta conversación?
—Solo responde...
—No, no lo dejaría de ver.
—Yo tampoco dejaré de ver a Lin. Me voy a demostrar a mí misma que lo que siento por él es solo una simple atracción pasajera —dijo Jisoo sentándose al borde de la cama— Quizás solo necesitaba desahogarme para lograr sentirme mejor...
—Bien... Entonces ya no tienes que salir de fies...
—Te tomaré la palabra, necesito despejar mi mente —Jisoo comenzó a buscar en su guardarropa algo que ponerse— Hoy hay una fiesta en casa de Tzuyu, no tenía pensado ir pero... Me has hecho cambiar de opinión.
—Bueno, al menos me quedo tranquila sabiendo que en las fiestas de Tzuyu hay un 70% comida y 30% alcohol —dijo Jennie con una leve sonrisa— Le diré a papá que te quedarás en casa de Tzuyu si pregunta. Aunque por lo que sé, hoy se quedaría trabajando hasta tarde en la oficina.
—Necesito que me ayudes a escapar de mi guardaespaldas... —rogó Jisoo con las manos juntas— No quiero gorilas siguiéndome todo el tiempo... Así ya no es divertido.
Jennie y Jisoo tenían a personal de seguridad a su cuidado. Taeyang había preferido que fuera así, no quería arriesgarse a que alguien les hiciera daño a sus hijas. Aun cuando los guardaespaldas las seguían a una distancia considerable, resultaba incómodo para ellas tener a alguien siguiéndolas a todas partes. Solo habían llegado a un acuerdo con su padre y ese era que solo los días del club se les permitía ir únicamente con su chofer.
—No, ni lo pienses... Dae Sung tiene que ir contigo para cuidarte, eso no está a discu...
—Dae Sung no me deja divertirme, se la pasa como perro guardián, es irritante, siempre termina trayéndome a casa cuando la fiesta está en su punto de apogeo —Jisoo se quejó con el ceño fruncido— Por favor...
—No lograrás convencerme, o vas con Dae Sung o simplemente no vas.
—Maldición Jennie... Ya pareces a mi madre —bufó Jisoo con molestia— Está bien, solo porque en verdad necesito distraerme. Me daré una ducha y me iré.
—Que disfrutes la fiesta —murmuró Jennie en tono burlón— Me saludas a Tzuyu —no obtuvo respuesta, pero tampoco la necesitaba.
Jennie se dirigió a su habitación en busca de un libro nuevo que leer. Había terminado el libro que había estado leyendo durante los últimos cuatro días. Realmente las novelas de amor lograban engancharla de sobremanera.
¿Algún día llegaré a tener un amor tan lindo como el que se describe en los libros?
Esperaba que sí.
Jennie contaba con un enorme librero en su habitación que su padre había mandado a instalar. Él sabía sobre la afición de Jennie a la lectura y estaba orgulloso de que esa fuese su manera de pasar el rato.
No podía decir lo mismo de Jisoo, ella parecía ser todo lo contrario a Jennie, pero sin duda amaba a sus dos hijas por igual.
—Jennie... —escuchó la puerta ser tocada un par de veces— ¿Puedo pasar?
—Adelante Nana —respondió Jennie con un montón de libros en brazos.
—Te traje algo para cenar, espero que no me rechaces como lo hizo Jisoo —comentó su nana dejando una bandeja con un vaso de leche y galletas— ¿Vas a leer un libro nuevo mi niña?
— Así es Nana, ya he terminado el libro que me recomendaste y ahora quiero iniciar con uno nuevo —asintió Jennie con emoción— Nana... ¿Por qué no cenas aquí conmigo? Mi madre salió con sus amigas, mi padre estará en la oficina hasta tarde y Jisoo se irá a una fiesta... No quiero cenar sola.
—Ya he cenado abajo, pero puedo quedarme a hacerte compañía si lo deseas —comentó Nana sentándose al borde de su cama— ¿Cómo te fue hoy?
—Muy bien Nana, fui al club con Jisoo.
—¿Ya no volvió a molestarte ese chico? ¿Cómo se llamaba...? ¿Jorge?
—Jongin —corrigió Jennie soltando una risita— Lo hizo, pero un chico logró rescatarme de la situación.
—¿Un chico? —preguntó Nana con curiosidad— ¿Cómo?
—Se llama Chaeyoung... —Jennie sonrió sin poder evitarlo— No me creerás, pero tuve que inventar que él era mi novio para que Jongin me dejara en paz...
—¿Y funcionó?
—Algo así... digo, Jongin no se ve de los chicos que se den por vencido tan fácilmente pero sin duda el decirle que Chaeyoung era mi novio ayudó a que no insistiera más, al menos este día —contestó Jennie— Chaeyoung es un buen chico.
—Nunca me habías hablado de él...
—Increíblemente acabo de conocerlo hoy —dijo sorprendiendo a Nana. Normalmente Jennie era un poco cerrada con las personas y el ver que haya hecho un nuevo amigo le impresionaba— Ya sé que siempre termino huyendo de las personas, pero con Chaeyoung no fue así... Él me ha caído de maravilla.
—Oh, me alegra mucho que hagas nuevas amistades mi niña —dijo con sinceridad— Y dime... ¿Es guapo?
—¡Lo es! —respondió Jennie enseguida— No es tan varonil como los demás chicos que he conocido pero... Tiene una cara de ensueño Nana.
—No comprendo...
—Es un poco más alto que yo solo, tiene cara de bebé pero increíblemente tiene 23 años igual que yo —describió Jennie con una sonrisa en los labios— Cuando sonríe se le forma un hoyuelo en la mejilla, sus labios son gruesos, sus ojos... Sus ojos son...
—¿Te gusta? —interrumpió Nana con una leve sonrisa.
—No... —murmuró Jennie recomponiendo su pose— Simplemente es lindo, debo aceptar que es diferente a todos los hombres que he conocido.
—Perdona... Es que te vi hablar de él con tanta pasión que pensé que tal vez te gustaba —admitió Nana observando el sonrojo en las mejillas de Jennie— ¿Vas a volver a verlo?
—Yo espero que sí... —confesó Jennie sintiendo su móvil vibrar sobre su bolsillo.
Nuevo mensaje de número desconocido.
Remitente desconocido
Hey... ¡hola! Soy Chaeyoung
Solo quería disculparme por no haber podido despedirme de ti como se debe.
Me la he pasado de maravilla contigo hoy, espero podamos repetirlo.
[8:32 pm]
Esta vez sin vino... 🍷🍾
[8:32 pm]
—Es él, Nana... —Jennie mostró emocionada el mensaje de Chaeyoung.
—¿Por qué no han podido despedirse como se debe?
—Me mostró su vino favorito, no recuerdo el nombre pero te juro que es delicioso, tanto que ni siquiera sentí que estuviese ingiriendo alcohol —respondió Jennie— Tenía sabor a fresas... Nunca había probado algo parecido.
—Qué raro, tú no tomas ¿No será que él te está induciendo a la bebida?
—Oh no Nana, no... —Jennie la frenó enseguida— Chaeyoung solo me dio a probar una copa pero yo fui quien pidió más. Prácticamente fui yo quién lo obligó a tomar conmigo.
—Increíble, eso es nuevo —mencionó Nana todavía sin poder creerlo. Su niña estaba dejando de ser una niña...— Supongo que estás creciendo.
—Ya soy una mujer, Nana. Tengo 23 años —dijo Jennie viendo como su nana la veía con nostalgia— Pero aun así siempre seré tu niña.
Nana había cuidado de Jennie desde que estaba en pañales. Jennie la consideraba como su segunda madre, siempre acudía a ella para contarle cosas que le pasaban en su día a día.
No es que su mamá fuera mala, sino que en su mayoría del tiempo se la pasaba fuera al mismo tiempo que su padre y entonces a la única con la que podía recurrir era a Nana.
Cuando Jennie tenía 6 años, su padre le dio la noticia de que Jisoo, su media hermana, viviría con ellos en su casa. Al principio hubo muchas peleas, pero después lograron congeniar de maravilla y se volvieron hermanas inseparables.
Nana era amada por las hermanas Kim, y ella las amaba como si fuesen sus propias hijas.
—Así es... Jisoo y tú siempre serán mis niñas, así tengan 40 años —bromeó Nana— Pero bueno, dejemos los sentimentalismos a un lado y mejor respóndele el mensaje al chico.
—Ah sí, es verdad... —Jennie desbloqueo su celular y comenzó a responder el mensaje.
Jennie
No te preocupes Chaeyoung.
A mí también me gustaría repetirlo.
[8:37 pm]
Jennie recibió una respuesta casi de inmediato.
Chaeyoung
¿Cuándo?
[8:37 pm]
—Quiere que volvamos a salir... ¿Qué le digo? —preguntó Jennie con nerviosismo— ¿Me veré muy mal si le digo que mañana?
—Salir con él te hará bien mi niña. Disfruta de tu juventud.
—Tienes razón Nana.
Jennie
¿Qué tal mañana?
[8:39 pm]
Chaeyoung
Me parece perfecto, ¿paso por ti mañana por la tarde?
Quisiera llevarte a un lugar...
[8:40 pm]
Es decir... no sé dónde vives, ¿podrías enviarme tu ubicación?
[8:41 pm]
Jennie
Ubicación 📌
[8:42 pm]
Me parece perfecto, te esperaré mañana entonces...
[8:42 pm]
Chaeyoung
Sí... dulces sueños, hermosa.
[8:42 pm]
Jennie suspiró sin querer y bloqueó su móvil olvidándose por completo de que su nana se encontraba ahí.
—Creo que es hora de tener cierta plática —murmuró Nana haciendo reaccionar a Jennie— Sé que no me corresponde a mi tener esta charla pero me siento con la obligación de hacerlo.
—¿A qué te refieres Nana?
—A tener esa plática que tuve con tu hermana hace 4 años atrás... —comentó Nana— Aunque Jisoo comenzó su vida sexual más temprano que tú, debo decirte que...
—No tenemos que tener esta conversación Nana —interrumpió Jennie con las mejillas teñidas de rojo— Que vergüenza...
—Sí, si tenemos... —afirmó Nana— Es la primera vez que te veo un tanto interesada en un chico. Con Jisoo esto fue más fácil porque a ella le gustan las chicas, pero contigo es diferente, tienes que tener más responsabilidad de cuidarte y...
—No voy a acostarme con Chaeyoung... Acabo de conocerlo hoy, no soy una... U|na chica fácil.
—Eso lo sé... Y me alegra que sea así mi niña, pero aun así tienes que tenerlo presente.
—Gracias por preocuparte por mi Nana, pero en verdad no hay razón, yo sé cuidarme, Chaeyoung es solo un amigo para mí...
—De momento sí, pero después, quién sabe...
[💫]
—¿Estás mensajeando con ella? —preguntó Lisa con un bote de helado sobre sus manos viendo a Roseanne sonreír ante la pantalla de su móvil.
—Hmm... Sí, quedé en pasar por ella mañana por la tarde —comentó Roseanne tratando de restarle importancia— ¿Ya te sientes mejor?
—Todo bien, solo tenía tonterías en la cabeza —Lisa se sentó a lado de Roseanne y buscó el control remoto para encender el televisor— ¿Quieres ver un drama conmigo?
—Por supuesto... — Roseanne se acomodó mejor en el sofá y estiró sus pies— Oye... Por cierto, tengo una buena noticia. Hablé con el dueño de la empresa de Japón, traté de llegar a buenos términos y conseguí que nos dejaran seguir trabajando vía online.
—¿En serio? Eso es una buena noticia. Ya estaba preocupándome por encontrar empleo aquí —respondió Lisa con la vista fija en la pantalla— Por cierto, hay que rentar un nuevo auto, será difícil tener que compartir uno solo.
—Así es, tu seguirás encargándote del sitio web y yo de las redes sociales —comentó Roseanne— Y sobre lo del auto... Tienes razón, yo mañana lo necesito para pasar por Jennie y tú... ¿Cuándo saldrás con Jisoo? —vio a Lisa tensarse.
—No lo sé... —respondió sin más.
Escucharon toques en la puerta y sintieron confusión.
—Nadie más a parte de Jisoo y Jennie saben dónde vivimos —mencionó Roseanne— ¿Serán ellas?
—Lo dudo... Ya es un poco tarde —respondió Lisa llevándose una cucharada de helado a su boca.
—Iré a ver —dijo Roseanne corriendo hasta la puerta.
—¡Hola! —un chico se encontraba afuera saludando eufóricamente con una tarta entre sus manos— Soy Kim Taehyung, su vecino...
—Hola... —murmuró Roseanne.
—Creí que eran chicas... Por eso traje tarta, pero veo que me equivoqué —dijo rascándose la nuca— Bueno, aun así, mucho gusto.
—El gusto es nuestro —respondió Lisa dejándose ver detrás de la puerta— Oh, ¿es tarta de manzana? es mi favorita.
—Sí lo es, la he preparado yo mismo —comentó Taehyung orgullosamente— Espero que les guste... Me gustaría que fuésemos amigos. Tiene un mes que me mudé a Corea y sinceramente no he sido muy sociable... Pensé que esta era mi oportunidad de hacer amistades.
—Nos encantaría —dijo Roseanne con sinceridad— Justo estábamos por ver un drama... —Lisa le dio un ligero golpe en el brazo a Roseanne.
—¿Ven dramas? —preguntó Taehyung y Lisa se sintió nerviosa. No era muy normal encontrarse con chicos que comieran helado y vieran dramas.
—Quise decir que...
—¡Yo también los veo! Me encantan, veo de todo tipo de género... Creí que era el único hombre al que le gustaba hacer eso...
—Pues ya ves que no es así —murmuró Lisa sintiendo alivio.
—¿Te gustaría ver una drama con nosotros? —preguntó Roseanne y Taehyung asintió inmediatamente— Adelante.
—Muchas gracias, amigos.
Taehyung resultó ser un chico encantador y amante de los dramas. Lisa terminó por impresionarse al ver al chico llorar en una escena triste.
—¿Saben qué es lo bueno de ver dramas con ustedes? —preguntó Taehyung aún con los ojos llorosos— Que me siento en confianza de llorar, nunca pude ver un drama con mis amigos, ellos lo consideraban tonto...
—Que locura... Los dramas son geniales —dijo Roseanne.
—Lo sé, pero ellos no me comprenden...
—¿Por qué te mudaste a Corea? —preguntó Lisa con curiosidad— Dices que vivías en Nueva York... ¿Por qué mudarte de país?
—Estaba en Nueva York porque ahí curse mis estudios, pero ya he terminado la universidad y ahora he vuelto con mis padres a Corea —explicó— Recién he abierto mi nuevo antro-bar.
—¡¿Qué?! ¿Dices que tienes un bar nocturno pero tú estás aquí viendo dramas con nosotros con un bote de helado y una rebanada de tarta de manzana? —preguntó Lisa anonadada.
—Así es... —murmuró Taehyung encogiéndose de hombro— No es divertido ir a mi bar todas las noches si no tengo con quién divertirme.
—Bueno... Ya somos amigos, ¿no? —dijo Roseanne— Algún día deberías invitarnos.
—¿Irían conmigo? —preguntó Taehyung con entusiasmo.
—Por supuesto —afirma Lisa— Siempre he querido conocer lugares nocturnos.
—Les va a encantar —dijo Taehyung— Podríamos ir mañana o pasado...
—O todos los días de la semana —bromeó Roseanne soltando una risita— Estoy ansioso por ir.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro