♥︎[05]♥︎
Mis ojos se cerraban de nuevo, mis manos ya eran débiles al sostener mi libro, pero era tan renuente a dormir por qué quería ver a mi Alfa entrar y que se acostase a mi lado y acomodarme entre sus brazos.
La puerta se abrió y el señor Kim entró con un pantalón de pijama a cuadros y una playera muy grande color negra, su aroma combinado con el gel de baño me hizo aspirar, olía muy rico. Me sonrió al entrar y me hizo sonrojar, estaba feliz de que estuviera aquí en mi dormitorio, mi lobo movía la cola por ello, se acerco a la orilla de la cama pidiendo permiso con la mirada, levante las sábanas como invitación.
―¿Te hice esperar mucho?.―Negue y sonreí.―Bien.
Se metió a mi lado y se acomodó con cierta timidez me acerque a él, abrió sus brazos invitandome a meterme ahí, gustoso acepté y me acurruque en sus fuertes brazos, enterré mi cara en su cuello y cerré mis ojos, llene mi nariz de su tan varonil olor, una sensación de calidez me recorrió por todo el cuerpo, inmediatamente me relaje y mi cuerpo estaba cayendo en un profundo sueño.
―Descansa precioso.―Beso mi sien y yo suspiré en respuesta.
El sol entraba por la ventana, pegó a mis ojos haciendome despertar, frunci el ceño ya que quería seguir durmiendo, mi mano fue por inercia al otro lado y sentí el cuerpo de alguien, aún somnoliento quise memorizar el cuerpo contrario, sentí aquel torso marcado aún con la playera puesta, subí mi mano encontrando su fuerte pecho, pero baje de nuevo a su abdomen, pero escuche una leve risa que me hizo detener la mano abruptamente.
―Me haces cosquillas muñequito.―Abri mis ojos y ahí estaba el sonriendo.―Buenos días precioso.
―Buenos días Alfa.―Salude en señas con un leve sonrojo en mi rostro.
―¿Dormiste bien?.―Asentí.―Que bueno, vamos, el desayuno ya está listo.
El Alfa salió de la cama y me senté en ella para poder estirarme y tallar mis ojos para ahuyentar el sueño, nunca me despierto tan temprano, miré hacía arriba y ahí estaba él esperándome, sonreí apenado y salí de la cama para ir con él abajo.
Bajando las escaleras tomado de su mano, escuché ruidos, frunci levemente el sueño, luego caminando hacia la cocina un rico olor invadió mi nariz, mis ojos se abrieron de la sorpresa, la mesa estaba decorada con un mantel blanco y encima había un gran ramo de rosas de varios colores pastel, junto al desayuno que eran panqueques y en medio un tarro de miel, sonreí feliz, pues era una representación de mi aroma.
―Espero que te guste, muñequito, lo preparé especialmente para ti.―Me sonrió cálidamente con un leve sonrojo, reí por eso, pero asentí.
Me ofreció la silla para que tomara asiento y así lo hice, él se sentó a mi lado y empezó a acomodar todo para poder comer, me estaba derritiendo internamente por sus atenciones. Me ofreció miel y yo asentí, vertió un poco en mis panqueques, cortó un trozo y me lo ofreció en la boca, la abrí y metió el pan dentro de ella, masque lento, saboreando lo que mi Alfa me daba.
―Despues de comer, iremos a dar un paseo, ¿Te parece?.―Asentí y sonreí.―Perfecto, te tengo una sorpresa, pero será después.
Sonriendo me siguió alimentando y yo gustoso aceptaba todo, no recuerdo ser tratado tan bien y con tanta atención y delicadeza, ni siquiera Soohun fue así conmigo, pero el señor Kim era diferente, si sigue así me va a mal criar.
𝐶𝑜𝑛𝑡𝑖𝑛𝑢𝑎𝑟𝑎...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro