— Hyung, Jiminie ya esta en la entrada del edificio. Iré por él.

— No tarden, prenderé el horno para calentar la comida así que no pierdan tiempo besuqueándose allá afuera.

— ¡Hyung! — Realmente se divertía causándole sonrojo a su hermano menor. — No digas esas cosas.

— ¿Por qué no? Son novios no tiene nada de malo que se besen, pero no cuando yo prepare la comida más deliciosa de todo el país para conocer a mi nuevo cuñado.

La mención del omega puso una sonrisa en el rostro de Minjae. Pensó que ese noviazgo sería algo pasajero pero quizás tendría que reconsiderarlo, nunca había visto esa mirada su hermano menor.

— Se que se llevarán muy bien, Jiminie es bastante alegre y le encanta hacer amigos, así que no habrá problema por que seas un anciano.

— ¡Yah! ¡Mocoso! — Su mano solo sujeto aire, pues el menor había salido corriendo. — ¡En cuanto tu novio ponga un pie fuera del departamento considérate muerto Kim Minjae!

— ¡Yo también te quiero hyung!

Las comisuras de su boca estaban completamente estiradas formando una sonrisa. Su hermanito siempre ponía a su lobo de buen humor, desde que había conocido al pequeño cachorro que sus padres le presentaron como nuevo miembro de la familia, lo había amado totalmente y siempre se prometía protegerlo y hacerlo feliz.

Minjae no era indefenso físicamente nada, lo podía demostrar con su asombroso progreso en la academia de detectives, pero nunca había tenido decepciones amorosas o fracasos significativos, cuidar que eso no pasara era su trabajo, siempre lo aconsejaba cuando la situación era desfavorable para el menor de esa manera se aseguraba de que no sufriera algún fracaso en cualquier ámbito.

Y por eso durante esa comida se encargaría de evaluar al omega que tenía tan encantado a su hermanito.

Solo había escuchado cosas buenas del omega, pero sabía que nadie era perfecto y él era bueno leyendo a la gente y sus intenciones.

También era excelente a la hora de ocultar sus verdaderas intenciones, actuar infantil y bromista era su máscara mientras analizaba a los demás, justamente esa fue la actitud que adoptó en cuanto escucho el elevador que estaba tan cercano a la puerta de su departamento.

Puso su sonrisa más cortés y espero cerca de la puerta para recibir a los dos menores.

No tardó mucho en arrepentirse.

El más delicado aroma a jazmines y agua de rosas golpeó sus sentidos y a su lobo interior. Una dulzura mezclada con esas notas florales, algodón de azúcar y chicle, podía estar absolutamente seguro de que esa esencia la había sido completamente diseñada para que su alma temblará de necesidad por unirse a la contraria.

Su lobo lo confirmó cuando quedo de frente al omega más tierno y bello con el que se había encontrado. Cabello castaño claro, cuerpo pequeño y delgado pero notablemente en forma con esos hermosos muslos gruesos y esa pequeña cintura. Pero sin duda quedo totalmente encantado con los resplandecientes ojos claros, de un tono azul grisáceo que casi lo hace jadear. Su corazón latía dolorosamente sintiendo un amor inmediato por ese extraño que a la vez le resultaba tan familiar.

Ese omega parecía la ternura y sensualidad encarnadas y en perfecta sintonía.

Lo quería para él.

Necesitaba envolverlo entre sus brazos y besar los labios regordetes.

Quería conocerlo, saber absolutamente todo de él y apreciar cada centímetro del hermoso y cautivador ser que era.

— Jin-hyung, él es Park Jimin, mi novio.

Su lobo gruñó fuertemente en su interior cuando notó la mano de Minjae rodeando la pequeña y esbelta cintura.

Avanzó un paso sin duda alguna en su mente y el segundo paso tembló cuando reconsidero sus acciones.

Él iba a golpear a Minjae. Él quería herir a su hermanito adorado por un completo desconocido.

Era demasiado aterradora la idea de que alguien extraño tuviera tal control sobre sus acciones como para volverlo en contra de los seres amados que había conocido y valorado por tantos años.

Recupero su compostura tanto como su lobo enojado se lo permitió, colocó de nuevo esa máscara juguetona que lo había acompañado por años saludo amablemente esperando que Minaje no hubiera notado su comportamiento extraño que duró solo por unos segundos.

— Que gusto conocerte Jimin. Puedes llamarme Jin-hyung o solo hyung si lo prefieres.

— Gra-Gracias.

El desconcierto en el omega castaño fue demasiado evidente para él, afortunadamente pasó desapercibido por el alfa pelinegro que lo sostenía y esa comida tendría que terminar de esa misma manera, con su hermano menor sin darse cuenta de lo que sucedía.

— Enseguida vuelvo.

No se equivocó al pensar en que Jimin hablaría en cuanto ambos estuvieran a solas y desafortunadamente Minjae salió de la sala para dirigirse al baño.

— ¿Tu lobo... no sintió nada cuando nos vimos?

¿Por qué tenía que verse tan bello con esas mejillas sonrojadas?

— Eres el novio de mi hermano y eso no cambiará hoy.

— ¡Pero nosotros somos-

— Nosotros no mencionaremos ninguna palabra.

 En ningún momento miro esos ojos claros, podía oler la humedad en ellos y verlo solo debilitaría su decisión.

— Terminaré con Minjae mañana.

— Hazlo si quieres, pero eso no será motivo para que tu y yo estemos juntos. ¿Crees que puedo pasar por alto que mi hermano menor ya te beso y acarició?

¡Sí! Lo pasaría por alto y se dedicaría a llenarlo con sus propios besos y caricias.

Pero solo tenía esa oportunidad para romper el corazón de ese pequeño omega y asegurarse de que no buscará formar una relación con él. No podía permitirse caer por ese extraño que comenzaba a robar su razón con solo una mirada, no sería el causante de que su hermanito adorado sufriera por primera vez y definitivamente olvidaría a ese tierno ser.

A su omega destinado.

Y aquí comenzamos con esta historia, espero que les guste y me acompañen con este tercer libro de la saga.

Mañana actualizaré "Mi Beta Destinado", para que también estén atentxs mis linduras.I PURPLE YOU 💜