Algo le sucedía a Yoongi.

Esa mañana llego al restaurante usando neutralizador para ocultar su aroma pero aún así podía notar la tristeza en su rostro.

Necesitaba saber si el estado de animo tenía que ver con quien sea que estuviera saliendo, o nuevamente estaba tratando de negar su naturaleza omega. Sinceramente ambas opciones le disgustaban, pero esperaría con paciencia a que su amigo se sintiera se a encara primero, a menos que las cosas empeoraran.

— ¿Jin-hyung?

El alto chef alfa lucía un poco apenado mientras lo miraba tratando de llamar su atención.

— ¿Qué sucede Mingyu-ah?

— Yo estaba hablando por celular y me distraje al poner sal en el buldak y... pues...

El menor parecía consternado por ese pequeño error en la salsa.

— No te preocupes Mingyu-ah, podemos resolverlo.

— Respira Mingyu-ah, te dije que no era lo gran cosa. Se que apenas llevas seis meses trabajando aquí, pero ya te deberías de haber dado cuenta de que tenemos unos jefes comprensivos.

La siempre alegre Seungwan, era otra más de sus cocineras y con quien más tiempo tenían trabajando Yoongi y él pues ella llegó al restaurante tan solo tres meses después de que abrieron al público. Era alegre, extrovertida y siempre dispuesta a ayudar a cualquier nuevo empleado.

— No digas eso Seungwan-ssi, estoy molesto en realidad. — Los dos menores lo vieron con caras serias ante su mejor actuación de enojo. —¡¿Tienen idea de lo que abría pasado si nos llegara un caracol como comensal?!

Los tres rieron con diversión aligerado el ambiente.

Por lo menos hasta que un claramente molesto Yoongi camino en su dirección.

— Abrimos en menos de una hora, ¿ya está todo listo? — preguntó su amigo pelimenta.

— Casi todo está listo, incluso el buldak para matar caracoles.

Volvió a hacer una broma tratando de mantener las risas en los dos menores que solo observaron como Yoongi pasba en medio de ellos para probar la salsa. De inmediato notó que el omega estaba tratando de encontrar un escape a su ira.

— No entiendo lo divertido de este error. ¡Las recetas están para seguirse y si no les gusta pueden ir a un lugar donde se les de esa libertad! — El rojo cubría las mejillas de su amigo.

— Yoongi, estás exagerando.

— ¿Estoy exagerando? — Podía ver perfectamente que el pelimenta estaba buscado pelea. — No estoy exagerando, llegamos al punto de confiar en que harían las cosas por sí mismos y si esto no se hubiera probado antes de salir los clientes lo habrían regresado. ¡Eso es una pérdida para nosotros, que no lo entiendes!

— No, no lo entiendo.

Cruzó sus brazos y mantuvo la calma esperando que su amigo descargará un poco más su enojo contra él, ya estaba elevando un poco la voz así que no faltaba mucho para que se tranquilizara, o eso esperaba.

— ¡No se puede estar cometiendo errores así, se supone que tenemos que cuidar la calidad de la comida, por algo el negocio avanzó rápidamente, porque entregamos todos los platillos con la calidad adecuada!

Bueno, eso era nuevo. Su amigo nunca había gritado de manera tan desesperada antes.

— Yoongi quieres calmarte por favor. — Comenzó a filtrar sus aromas de alfa tratando de calmar un poco el lado omega de su amigo. — Seungwan-ssi y Mingyu-ah siempre han trabajado perfectamente, un error así con la sal le puede pasar a cualquiera y lo podemos solucionar con un poco de azúcar, no tienes que hacer un alboroto.

— Hyungs, ¿qué sucede?

Namjoon heblo su espalda obviamente confundido con la situación. Aunque eso no impidió que Yoongi siguiera buscando una pelea con el amable y alto beta.

— ¡Y tú! ¡¿Cómo te atreves a pensar en faltar cuando Hoseok ya no está en celo?! Irresponsable.

El beta se sonrojo visiblemente mientras titubeaba intentando responder a los enojados comentarios de Yoongi. Ya era demasiado, quizás en ese momento se molestaría, pero después su amigo omega le agradecería el intervenir.

— ¡Yongi es suficiente! Vamos a la oficina de Nam. — Se giró con los dos menores de la cocina mientras se interponía entre la vista de ellos y Yoongi. — Chicos lamento esto, les pido por favor arreglen el estofado con algo de azúcar y se preparen para abrir, en unos minutos volvemos.

— Cómo nos vamos a ir a hablar ahora que estamos por abrir, yo me quedaré a arreglar este desastre personalmente y-

— Ve a la oficina de Namjoon ahora.

Odiaba demasiado usar su voz alfa, él había estado con Yoongi cuando el hermano mayor utilizaba esa voz contra su amigo o la madre de ambos y ver las lágrimas acumuladas en los pequeños ojos del pelimenta de inmediato hizo doler su pecho.

Antes de poder hacer nada más, el omega salió de la cocina, tal y como le ordenarse tonto, se reprendió mentalmente.

Se giró con los dos cocineros, pero esta vez no pudo poner una sonrisa en su cara, aún sentía la amargura que le había dejado usar su voz alfa contra su amigo.

— Por favor les pido que se encarguen unos minutos y disculpen por todo esto, probablemente Yoongi tuvo un muy mal día, pero hablare con el ahora mismo.

— No se preocupe Jin-hyung, todos tenemos malos días, vaya tranquilamente con hyung nos encargaremos de tener todo listo para abrir — contestó Mingyu al mismo tiempo que él y la beta se inclinaban y mostraban una sonrisa de comprensión.

Sin entretenerse un segundo más, se dirigió a la oficina de Namjoon con el beta siguiéndolo de cerca. La imagen que lo recibió al abrir la puerta solo agrego más dolor en su pecho. Yoongi se abrazaba fuertemente a sí mismo, parado en medio de la habitación viéndose totalmente perdido en su siguiente movimiento y con lágrimas deslizándose por sus mejillas sonrojadas.

— Lo lamento tanto Yoongi, pero estabas completamente fuera de si, jamás te había visto levantar así la voz. — Se abrazó con fuerza al pequeño cuerpo mientras Namjoon imitaba su acción, tratando de brindarle confort a su amigo. — Perdóname.

— Hyung, ¿te pasó algo? ¿Recibiste una noticia que te alterara así? — Su castaño amigo beta sonaba tan preocupado como el se sentía. — Por favor dinos que pasa.

El silencio se prolongó un poco, pero estaba dispuesto a esperar el tiempo que fuera necesario hasta que su amigo se sintiera dispuesto a hablar.

— Yo... ayer... cometí una estupidez.

— ¿Qué pasó hyung? — Movieron a Yoongi a una de las sillas mientras Namjoon tomaba sus manos sentado frente al omega y él se mantenía de pie dando caricias en la espalda pequeña. — Nosotros nunca te juzgaremos hyung, puedes contarnos tranquilamente.

— Ayer en la noche pasé por parque cercano un momento, cuando empezó a llover... El parque estaba desierto... bueno yo pensé eso... pero vi a... un conocido caer desmayado. — Notó fácilmente como evitó decir el nombre de quien sea con quien se encontrara. — Me acerque para ver cómo se encontraba pero no lo podía despertar. Yo... probablemente él traía neutralizador por eso no pude oler que estaba entrando en celo. Lo lleve al callejón para cubrirlo de la lluvia y poder llamar una ambulancia... pero él despertó y me vio...

Su mente estaba trabajando rápidamente sacando conclusiones muy feas por su propia cuenta.

— Yoongi, por favor dime que ese conocido tuyo que estaba entrando en celo era un omega — tenia que serlo, ¿cierto?

Vio como el pelimenta negó solo moviendo su cabeza de un lado a otro mientras las lágrimas creaban nuevos caminos húmedos en las palidas mejillas.

— ¿Te hizo entrar en celo? Eso es violación hyung. — La voz de Namjoon era inestable al decir la palabra que ambos temían. — Tenemos que ir a denunciarlo.

Yoongi volvió a negar con un solo movimiento corto y temeros. Estaba pasando algo más, y a pesar de sus muchas conclusiones mentales solo su amigo podía decirle que es lo que sucedía en realidad y por qué estaba tan triste.

— Yoongi, termina de contarnos por favor, dinos lo que paso, nosotros te ayudaremos en todo lo que podamos.

— Él no me obligó... yo me entregue cuando sus feromonas atravesaron el neutralizador... Él es un alfa puro... yo nunca había estado con nadie y no supe como manejar a mi omega excitado, yo me entregue sin pensarlo, deje que... le pedí...

Las lágrimas impidieron que su amigo continuara hablando, pero encontró la solución para transmitir lo que quería decir. Alejó el cuello alto de su playera color negro dejando al descubierto su hombro derecho donde el blanco perfecto de la piel se veía interrumpido por la marca de un tono rosa-rojizo que señalaba una mordida de apareamiento.

— Hyung, él... ese alfa, ¿completo la marca correctamente?

Completar una marca de apareamiento Incluía que el alfa estuviera teniendo su liberación al mismo tiempo que los dientes estaban incrustados en algún lugar alrededor de la glándula olfativa, muchas parejas acordaban hacerlo con o sin protección, pero si se habían encontrado de la nada y el alfa estaba en celo, dudaba que tuviera tiempo de preocuparse por usar un condón, además Yoongi no tenía experiencia controlando su omega interior, así que sabía que en ese momento no iba a ser capaz de pensar racionalmente.

— Yoongi... tu tomaste el anticonceptivo inmediatamente, ¿cierto?

— Du-Durante toda l-la madrugada n-no se detuvo, siguió hasta que casi comenzaba a amanecer y yo me fui cuando él se quedó dormido esta mañana. — El omega hizo una pausa con las mejillas de un furioso tono rojo. — Tome la pastilla, pero... sigo asustado de que no funcione, ustedes saben que los genes de los alfas puros son muy fuertes... tengo miedo.

El enojo lo invadió al ver que efectivamente el miedo llenaba la mirada de su amigo.

— Estas usando neutralizador porque yo conozco a ese alfa verdad. Dime en este instante quién es, no me importa que no te obligará, aún así tuvo que haberse resistido un poco, demonios. Dime quien es Yoongi.

— ¡No!

— Hyung no lo protejas, tienes que denunciarlo — insistió Namjoon.

— ¡No lo entienden! El sí se resistió, me suplico que corriera, que lo dejara ahí. Me dijo que no me quería hacer daño, pero yo solo empecé a soltar feromonas. ¡Yo fui quien prácticamente lo obligó!

Ahora Yoongi se estaba comparando con su madre, la omega había perdido a su primera pareja y se volvió a enlazar otras cuatro veces más, solo que ella utilizaba su roma para atraer al alfa en celo consiguiendo una marca, su amigo había odiado ese hecho pues fue parte de lo que inició el odio del hermano mayor hacia los omegas y ahora el pelimenta se estaba comparando con ella.

— Yoonie-ah no es tu culpa. Habla con el alfa, él te quiso proteger así que tal vez quiera intentar algo serio contigo, puede ser que ambos estaban destinados pero ninguno se dio cuenta.

Su amigo mostró una sonrisa que no llegó a sus ojos.

— Él no es mi destinado.

— ¿Cómo estás tan seguro hyung? — preguntó Namjoon.

— Porque... lo hubiera sentido o no se.

— Ni siquiera estas seguro hyung, habla con él, nosotros te acompañaremos — insistió el castaño.

— No lo haré. La marca desaparecerá cuando él la comience a rechazar.

— Pero si eso pasa tu sufrirás demasiado hyung.

— Mi madre pudo superarlo tres veces yo podre con esta.

En ese momento se sentía tan enojado. Consigo mismo en realidad, él le había prometido a Yoongi que estaría a su lado, le aseguró que él nunca haría lo mismo que su madre porque siempre estaría protegiéndolo de cualquier alfa. Tenía que haber hablado antes, cuando notó que su amigo estaba saliendo con alguien, tenía que haber hablado con ese alfa y asegurarse de que su amigo aprendiera a manejar a su omega interior antes de que las cosas avanzarán más. Pero no lo hizo, le había fallado porque nuevamente había estado mas ocupado pensando en Jimin que en sus amigos.

— No puedo creer lo que estas diciendo Yoongi. No se quien eres tú pero no eres el Yoongi que conozco, este omega débil que no quiere enfrentar las cosas no eres tú.

Namjoon se movió protectoramente frente a Yoongi cuando notó el enojo en su voz y eso lo hizo sentir peor.

— Jin-hyung, por favor tiene que calmarse, Yoongi-hyung esta muy sensible ahora y sus palabras están siendo duras. Yo tampoco quiero ver a hyung sufrir pero las decisiones las tiene que tomar él. Yo se que cuando su cabeza se aclare tomara una decisión lógica como siempre. Por ahora solo necesita que lo abracemos y lo apoyemos.

Se sentía horrible por que le tuvieran que señalar lo obvio. Estaba siendo un pésimo mayor. Se puso de rodillas frente a Yoongi y rodeó sus brazos en las pantorrillas mientras apoyaba su cabeza en los muslos de su amigo. Merecía que Yoongi lo diera un golpe por gritarle de esa manera pero en su lugar sintió los delgados dedos acariciando su cabello rubio.

— Lo siento mucho Yoongi, me he portado como un bruto, pero no me gusta verte llorar, no soporto que alguien trate de hacerles algo a ninguno de ustedes. No importa la decisión que tomes, yo te apoyare con lo que digas.

Ya no se necesitaron más palabras, los tres se quedaron en silencio hasta que fue hora de iniciar a atender el restaurante. Preferiría que Yoongi descansara en casa, pero el omega dijo que necesitaba una distracción y él no se opondría a ello, además quería mantener un ojo encima del pelimenta el resto del día para asegurarse que tuviera el confort que necesitaba de sus amigos.

Despidió con la mano a sus dos mejores amigos después de pasar la tarde planeando la fiesta sorpresa para Namjoon y Jungkook. Hoseok estaba ansioso por volver con su novio beta pues acababa de salir de su celo y Taehyung quería ir con su amigo Jungkook.

Ya habían pasado cuatro meses desde que conocía a Taehyung y realmemte había creado una buena amistad con el beta, le encantaba hablar y reír con él y se sentía un poco culpable por ir a verlo a su trabajo con la excusa de visitarlo cuando su principal razón era que quería ver a Jin.

— Cariño, ¿iras hoy con Minjae?

— No lo sé papá, ya estuve toda la tarde con Hobi y Tae, mejor me quedó con mi bello papá viendo una película.

Abrazo a su padre omega reconfortandose con el dulce aroma natural.

En realidad toda la situación con Jin ya lo estaba superando. Cuando su relación con Minjae continuó él solo esperaba ver al alfa rubio tanto como fuera posible, pero eso dejó de ser suficiente él necesitaba inhalar su aroma y después solo pensaba en escuchar su voz y su risa.

Ahora ya nada de eso bastaba.

No debió de haber cruzado la línea.

No debió de haber tenido relaciones con Jin.

No solamente se sentía culpable con Minjae, se sentía repugnante al saber que tubo un maravilloso momento con su alfa destinado y a las pocas horas estuvo con Minjae.

Realmente no pudo resistirse a ninguna de las dos situaciones, entro en celo sin siquiera sentirlo pues su lobo estaba tan triste que se escondía constantemente en su interior, no sabía que Jin estaría en el departamento más temprano de lo habitual. Se sintió simplemente maravilloso estar entre los brazos del mayor a pesar de no escuchar ninguna palabra de su parte, pero todo terminó cuando el nudo se deshizo y el alfa se fue deprisa sin mirar hacia atrás.

Lloro por lo que parecieron horas sintiendo el rechazo de su alfa y apenas tuvo la suficiente fuerza para ventilar la habitación y meterse a bañar antes de que Minjae llegara. Su novio no encontró rastro de que su el había estado en los brazos de otro pero era suficientemente tortuoso el saberlo el mismo.

Pudo fingir las semanas después, pero nuevamente su celo estaba cerca y los últimos días constantemente recordaba lo que sucedió meses atrás.

Incluso el día anterior mientras estaban en el restaurante, se imagino una mirada de anhelo en los ojos de Jin aún sabiendo que eso era imposible.

Ya no se sentía con fuerzas para ver a su hermoso alfa destinado.

— Por qué mis dos amores se están abrazando tan lindamente y no me invitaron.

Su madre alfa los rodeó envolviendolos de ese sentimiento de protección que siempre lo hacía sentir seguro.

— Al parecer nuestro hermoso cachorro quiere pasar tiempo con nosotros, así que vayan a preparar todo en la sala mientras preparo algunos bocadillos.

Su padre beso su frente y dejó un tierno beso en la mejilla de su madre antes de darse la media vuelta y adentrarse en la cocina, él siguió de cerca a su madre para ir a hacer lo que su padre había dicho. Su madre podía ser la alfa, pero su padre tenía el poder absoluto en esa casa con sólo sonreír le a la mayor.

— Ve por las almohadas cachorro, yo moveré los muebles. — Asintió con entusiasmo mientras comenzaba a caminar hacia el armario. — Jimin — llamó su madre antes de que se alejara lo suficiente —, sabes que te amo mucho cachorro y que puedes contarme lo que sea, ¿verdad?

Un nudo se instaló en su estómago. ¿Realmemte podría contarle a su madre y ella no pensaría menos de él?

— Lo sé madre, yo también los amo mucho.

Se alejó con una sensación de malestar en su pecho al ocultarle algo así a su familia, pero quizás era lo mejor.

Estoy feliz de volver con las actualizaciones ☺
Ya los extrañaba mis lindxs Makis.

Aprovecho para agradecerles ya que cinco de mis historias fueron elegida para los ¡Wattys 2022! 🎉
Todo gracias al apoyo que me brindan, no las inscribire todas, solamente estaré inscribiendo "Mi Alfa Destinado" porque es la única que considero que se encuentra en condiciones, las demás tienen demasiados errores y huecos en la narrativa así que por el momento solo esa será.

De nuevo gracias por el apoyo y tengan una hermosa semanita 😚💜