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Todo estaba pasando tan rápido.

Excepto por su hermano que estaba petrificado a un lado del sillón nuevo.

Quizá hubiera sido una mejor idea esperar un poco más para cambiar el sillón viejo. Si hubieran sabido lo que ocurriría, definitivamente habrían esperado.

— Minjae, golpea a tu hermano para que reaccione, porque te juro que si se sigue quedando ahí parado mirándome como idiota, lo voy a matar yo mismo.

No sabía si reír o no por las palabras de Jimin.

Pero si hizo lo que pidió, porque Lucía tan enojado y adolorido que temió por su vida.

Sacudió a su hermano mayor, tomándolo por los hombros y tratando de llamar su atención.

— Hyung. ¡Hyung! Tienes que reaccionar, Taehyung ya está subiendo las cosas al auto, nosotros tenemos que subir a Jimin. ¡Vamos!

Jimin gritó una vez más de dolor.

No podía esperar por siempre a que su hyung reaccionará. Se acercó para levantar a con cuidado al omega que estaba en labor de parto.

Todo había sucedido de un momento para otro, al menos para Jin y para él, Taehyung dijo que Jimin había tenido dolor toda la mañana, pero ellos habían estado ocupándose de mover los muebles en la nueva casa de su hermano. Habían tenido que sacar los muebles que iban a cambiar por lo que les llevó bastante tiempo. El resto de sus amigos iban a llegar a ayudar, pero decidieron iniciar por sí mismos. En cuanto él sofa estuvo en su sitio, Jimin mostró una mueca en su rostro y le pidió a Taehyung que le ayudara a sentarse, su hermano miraba con ojos de amor a su omega cuando de repente un grito desgarro la garganta de Jimin y una mancha húmeda se extendió por el pantalón deportivo gris claro que portaba.

Su novio fue el primero que reaccionó. Corrió a la habitación donde sería el cuarto del cachorro y al cabo de segundos traía una maleta pequeña que Jimin ya había preparado con antelación, su beta lucía calmado cuando les dijo que llevaran a Jimin con cuidado al auto, que los estaría esperando.

Habían pasado al menos dos minutos, pero parecía una eternidad, todo en cámara lenta y al mismo tiempo sucediendo de manera rápida.

Para el momento que logró poner a Jimin de pie, otro par de brazos tomaron el lado izquierdo del omega. Pero no era Jin. Fue Jungkook quien estaba ayudando.

Al parecer sus amigos habían llegado. Aunque solo habían entrado Namjoon y Yoongi además del alfa a su lado.

— Voy a disfrutar tanto este momento — dijo el omega pelinegro con ojos brillando de diversión antes de dar una bofetada en la mejilla izquierda de Jin.

Su hermano finalmente reaccionó.

Y peleaba con Yoongi.

Las prioridades estaban mal para el mayor de todos.

— Lleven a Jiminie, nosotros llevamos a Jin.

Asintió a las órdenes de Namjoon. Pero tuvo que esperar para caminar a la salida cuando el omega al que sostenía miró con furia a su esposo.

— Kim Seokjin, más vale que estés en el auto antes que yo si no quieres ser ahogado mientras duermes.

Riendo, Jungkook le ayudó a llevar a Jimin afuera. En el auto de Namjoon pudo ver a Hoseok en el asiento trasero jugando con su hijo de once meses y Taehyung estaba en el auto de Jungkook observando al par de gemelitos durmiendo plácidamente.

Estaban por subir al auto cuando Jin pasó corriendo a su lado y se metió en el asiento trasero para recibir a su omega. Para el momento que él se acomodó detrás del volante, Taehyung ya estaba a su lado. Emprendió la marcha hacia el hospital consciente de que sus amigos los seguían de cerca y también riendo de todas las veces que el omega bajito amenazó e insulto a su hermano mayor. Jin no hacía más que asentir a cada palabra, incluso cuando Jimin le dijo que si volvía a dejarlo embarazado le cortaría el pene. Eso era tan divertido.

Miró a su beta que también reía a su lado y suspiro, lo hacía con frecuencia, cada vez que miraba a Taehyung y no podía creer que ese ser hermoso fuera su novio. Ocho meses de relación, ocho meses magníficos al lado de su beta, incluyendo las pocas peleas y escenas de celos de su parte. Sus pensamientos y sentimientos no se habían vuelto menos posesivos, pero si había aprendido que su novio pensaba igual algunas veces.

Eran pocas las noches que dormían separados, y normalmente él se quedaba en el departamento de Taehyung, a menos que quisieran privacidad, en esas ocasiones siempre se quedaban en su departamento en el que ahora vivía solo. La madre de Taehyung sabía y bromeaba sobre esas ocasiones, al parecer le encantaba ver a su hijo sonrojarse por completo porque reía tanto cada vez que ocurría.

Definitivamente le gustaba mucho tener a Taehyung de novio, pero aun quería más. Esa idea había empezado a rondar su mente días atrás y no podía alejarla.

Se preguntaba una y otra vez cuando sería el momento adecuado en su relación. ¿Había un momento adecuado? ¿Dependía de la relación que tenían?

No estaba muy seguro de ello.

Namjoon y Hoseok tenían seis meses de novios cuando Hoseok quedó embarazado y siete meses cuando le pidió matrimonio, pero su historia de amor había tenido años ocurriendo.

Jungkook y Yoongi salieron por un par de meses, según le contó el menor, antes de que lo marcará esa vez que su celo se adelanto a causa de lo que habían puesto en su bebida. Con un vínculo ya formado entre los dos, ellos solo continuaron con su relación, volviéndola más fuerte y estable.

En cuanto a su hermano mayor y Jimin, hubo una marca de por medio desde el momento que iniciaron su noviazgo, pero ellos eran una pareja destinada, era sabido que desde el momento en que un alfa y un omega destinados se encontraban eran muy pocos los que esperaban para meterse en una relación de inmediato. Las parejas destinadas no siempre eran compatibles en todo sentido y tampoco eran necesariamente polos opuestos, simplemente encajaban bien y por ese motivo no dudaban en llevar las cosas un poco más rápido. O al menos eso sabía del tema, hasta que Jungkook y Hoseok simplemente cambiaron su idea sobre ello.

Eran una pareja destinada que habían encontrado el amor en otras personas, pero aun seguían llevándose muy bien.

No entendía.

Quizás finalmente seguiría el consejo de Jin y le preguntaría a Hoseok sobre lo que le había dicho su tío.

Esa platica podría ayudar o no en su decisión. Valía la pena intentarlo.

— 𝓑𝓮𝓽𝓪 —

Tenían horas en el hospital. Ya había visto a su pequeña hermosa sobrina en los cuneros, había acompañado a su hermano mayor mientras Jimin dormía una muy merecida siesta después de dar a luz a esa pequeña cachorra. Su hermano había derramado lágrimas al ver a su hija y él también. Todos sus amigos conocieron a Kim Jiwoo, la nueva integrante de su grupo. Incluso el hermano mayor de Jungkook y el hermano mayor de Yoongi llegaron a saludar y conocerla, aunque el hermano de Yoongi felicito a Jin de manera forzada una vez que el hermano de Jungkook lo miró fijamente. Sabía que trabajaban juntos en algún proyecto, era su tercer trabajo juntos por la reciente asociación de las empresas de publicidad donde ambos trabajaban.

Finalmente habían bajado a la cafetería, aunque solo Hoseok, Taehyung y él, el resto de sus amigos se quedaron cuidando a sus bebés y Jin había entrado con Jimin porque el omega pasaría tiempo con su hija ahora que había despertado.

Descansaban en una mesa, hablaban de cualquier tema y cuando menos lo espero surgió el tema que estaba esperando. Pero no fue él quien habló sobre ello. Hoseok fue quien lo mencionó.

— …créeme, aunque lo ocultaba bien, yo podía sentir lo nervioso que está Jungkook cada que sostenía a sus hijos las primeras veces, después de todo soy su destinado.

Él tampoco hizo la pregunta que moría por hacer, fue Taehyung quien preguntó.

— ¿Cómo funciona eso? ¿Desde el principio sabías que querías a Namjoon-hyung?

— Cierto, ustedes nunca supieron — dijo el omega pelirrojo sonriendo —. Si, desde un inicio sabía que quería a Nam. Y es posible porque Jungkook es mi destinado, no mi pareja destinada. — Taehyung y él se miraron con confusión. Hoseok reía bajito. — Bueno, cuando tenía unos meses de novio con Nam, yo empecé a tener muchos pensamientos confusos, incluso le pedí a Kookie que nos viéramos en un parque a solas. Pero no sentía atracción por él, no de manera romántica. Ambos sentimos que estamos conectados de alguna manera, nos tranquiliza la presencia del otro porque sentimos la familiaridad entre nosotros, eso es todo.

》 Mi tío llegó de visita cuando yo estaba tan  confundido y me confesó que él había sido el destinado de mi madre. — Hoseok hizo una pausa para mirarlos, de nuevo se reía de nuestras reacciones. — Si, probablemente hice la misma cara. Pero me contó su historia, mamá ya conocía a papá en ese entonces y mi tío no quería interponerse por ello se alejó. Estaba en la universidad estudiando historia cuando se interesó en investigar sobre las parejas destinadas, de hecho en dos meses publicará los resultados que él  y su equipo obtuvieron.

》 A mi me contó su teoría en ese entonces. Dijo que que había una razón por la que no sentía atracción romántica por Jungkook. Porque nosotros éramos destinados y no una pareja destinada.

— ¿Eso es diferente? — preguntó tratando de entender lo que Hoseok quería decir, pero estaba perdido.

— Si, porque una pareja destinada es como Jin y Jimin. Todo lo que nos cuentan al crecer. Cuando se conocen y no pueden imaginar estar el uno sin el otro, sienten atracción romántica por algún aspecto de la otra persona, su rostro, cuerpo, personalidad o todo. En cuanto se conocen lo saben. Pero los destinados al conocerse no sienten atracción romántica. Forman parte de la vida del otro pero de manera diferente, están ahí para cambiar la vida del otro, para ser un mejor amigo o un apoyo.

— ¿Tú y Jungkookie son así?

— Si, Tae. Estuve años evadiendo la verdad, yo ya amaba a Namjoon pero me negaba a verlo. La llegada de Kookie cambió eso, provocó que Nam y yo finalmente enfrentaremos la verdad y decidiéramos estar juntos. Así que en realidad Jungkookie ha influido en mi vida desde el principio, para bien.

— ¿Jungkook sabe?

— Si, le conté el mismo día en que mi tío me visito.

— Se hablara mucho de la investigación de tu tío en cuanto salga. — No tenía duda de ello, porque lo que les estaba contando Hoseok era algo que definitivamente llamaría la atención de muchos. — Los alfas y omegas tendrán mucho en que pensar.

— No solo ellos. — Taehyung se sentó un poco más derecho. — Mi tío dijo que los destinados no es algo de solo alfas y omegas, también de todas las castas. En el caso de los betas que no están tan en contacto con su lado instintivo es difícil que lo sientan con intensidad, pero una parte de ellos sabe o siente lo que esa otra persona es para ellos. Dijo que encontró historias, una en específico le llamó la atención. Una donde un alfa se sentía inmensamente atraído por un beta que acababa de conocer. — Él imito a sí beta, se sentó más derecho, más cerca. — Sentía por ese beta todo lo que sus padres le describieron que sentiría cuando conociera a su pareja destinada. Así que, según la investigación de mi tío los destinados y las parejas destinadas son distintos. — El celular de Hoseok se encendió con un mensaje que distrajo al omega pelirrojo. El estaba respirando diferente, pero no creyó que nadie lo notará. — Tenemos que volver, Jimin quiere vernos antes de que acabe la hora de visitas.

Asintieron y siguieron al mayor. Taehyung hablaba animadamente con el pelirrojo. Él estaba tan inmerso en sus pensamientos y en ese latido de su corazón que se puso frenético con lo que Hoseok les contó.

Miró a Taehyung que caminaba unos pasos delante. Su beta volteo por encima de su hombro y le sonrió.

Los supo en ese momento. No podía equivocarse, no en lo que sentía por su novio. Sonrió de regreso, tan feliz que las lágrimas casi escapan de sus ojos. No pudo apartar la mirada de su beta hasta que finalmente cerró sus ojos para dormir horas más tarde. Y aún así sus pensamientos lo siguieron a sus sueños. Esa noche sólo Taehyung apreció.

Su novio.

Su beta.

Tengan una linda noche 💜

Nos leemos en la actualización de mañana 😊