•ೋ° 𝗔𝗰𝘁𝘂𝗮𝗹𝗶𝗱𝗮𝗱 °ೋ•

Yeosang...

Yeosang...

¡Kang Yeosang!

El mencionado abrió sus ojos y se sentó recto en el escritorio. Aquel grito lo había sacado de ese raro sueño.

Yeosang quedó con la vista en frente, recordando que estaba en la universidad, justo en la clase de historia el profesor hablaba de la de hechos del país ocurridos en el pasado , quedándose dormido a mitad de esta.

En la pantalla aún se podía leer el título "El príncipe que acabó con su Dinastía" y una foto de este, pero el rostro estaba borroso.

-Por fin despiertas, te perdiste la clase, ese hombre se llamaba igual que tú, además, el profesor dijo que el príncipe borro su rostro de todas las pinturas del palacio es por eso que nadie sabe como era su apariencia y lo único que quedó de él fue una carta en la tumba de un sirviente, la cuál de encuentra en el museo de Seoul. -el compañero de Yeosang volvió a hablar. -Kang ¿por qué estas llorando? -

- ¡¿Yunho?! -

- Si, soy Yunho, tu hermoso mejor amigo, oye, me estás asustando ¿pasa algo? -el rubio estaba preocupado

-Nada... Solo tuve una pesadilla y aun estoy confundido. -Limpio sus lágrimas y sonrió para no preocupar a su amigo.

-Esta bien, vamos, ya es hora del almuerzo, San debe de estar esperado cerca de la biblioteca. -

- ¿San? -

-Sí, San, tu novio. -Yunho frunció su ceño. -Amigo realmente me estás preocupado. -

-Ya dije que no pasa nada, solo estoy un poco desorientado. -

El castaño estaba demasiado confundido, solo recuerda estar en clase y mientras el profesor hablaba del segundo príncipe de Incheon su corazón dolió y sintió cansancio el cual lo llevó a quedarse dormido. Aquel sueño se había sentido tan real.

Ambos salieron del salón, tomando el camino del pasillo y bajado las escaleras para ir al primer nivel, hasta salir y llegar cerca de la biblioteca en donde habían mesas y lugares para sentarse y descansar.

Yeosang a lo lejos vio un rostro demasiado conocido, su corazón dolió y empezó a latir más de lo normal, después de aquel sueño había quedado demasiado sensible aquellas desgarradoras imágenes aún estaban frescas en su memoria.

Yeosang siempre había tenido aquel tipo de sueños, pero el rostro del chico junto a el siempre estaba borroso, hasta ahora que pudo ver claramente y el parecido que tenía con San.

¿Y si aquel sueño le había mostrado su vida pasada?

- ¡Yeosie! -el chico pelinegro corrió hasta donde estaba su amado.

Aquel gritó había sacado a Yeosang de sus pensamientos, sintiendo de inmediato ser envuelto en un cálido y fuerte abrazo.

-Bueno, yo me voy, los dejo par de enamorados. -

-Gracias por siempre estar a mi lado Yunho y ayudarme en todo. -Yeosang hablo, necesitaba decir aquello, si aquel sueño había sido su vida en el pasado, quería agradecer al amigo que siempre lo ayudó.

-Esta bien. -Yunho estaba confundido por la actitud de Yeosang, pero por una extraña razón sintió aquellas palabras reconfortantes. -Para eso son los mejores amigos, para acompañarte en tus locuras. Nos vemos mañana. -Yunho se despidió.

-Yeosie, te extrañé mucho. -San volvió a hablar.

-San. -Yeo veía fijamente al pelinegro. -Yo también te eche de menos todo este tiempo. -

-¿Me extrañaste tanto? -San sonrió con ternura. -Pero solo nos separamos por tres horas, mi amor, eres tan tierno. -empezó a dejar besos cerca del ojo de Yeosang, frunciendo su ceño al darse cuenta de algo.

- ¿Pasa algo? -

-Amor, de nuevo maquillaste tu marca. -San hizo un puchero.

- ¿Marca? -Yeosang no entendía pero de inmediato recordó su marca de nacimiento, aquella la cual tenía cerca de su ojo y en forma de corazón.

-Si, tu marca de nacimiento. -

-Oh, mi marca. -Yeosang se quedó pensando y solo se le vino la mente la escena en donde el San de sus sueño le hablaba de una marquita de amor.

-Amo demasiado tu marquita, es muy linda, no las escondas. -San con una toalla húmeda limpio el maquillaje y como siempre depósito muchos besitos en aquel lugar. -Parece una marquita de amor. -

-"será una marquita de amor, te llenaré de tantos besitos que en tu próxima vida nacerás con esa marca en forma de corazón."-

Aquellas palabras vinieron a la mente de Yeosang y sin más empezó a llorar.

Lo de la marca se había cumplido.

-Yeosie ¿Te duele algo? ¿Por qué lloras, amor? -el pálido pregunto con preocupación.

-N-no es nada, solo estoy un poco sensible. -

-No llores, tus ojitos están rojos. -San depósito un beso en los párpados de su amado.

-Gracias. -Yeo sonrió.

-Así me gusta, sonríe, me gusta mucho ver feliz a mi ojitos de miel. -

-"Solo espero reencarnar con aquella marquita de amor de la que hablabas y espero que en el futuro me sigas dando todos aquellos besos y deseo volver a ser tu ojitos de miel." -

Yeosang hizo un mohín y mordió su labio tratando de no volver a llorar.

-Nunca me dejes, San. -

-Siempre estaré a tu lado. -depósito un beso en los labios de su pareja.

-Te amo mucho. -

-Te amo mucho más. -San sonrió, mostrando aquellos bellos hoyuelos. -Ahora vamos a almorzar, también te compraré tu helado favorito, tengamos una cita ya que hoy es un día hermoso. -entrelazo su mano con la de Yeosang y depósito un beso en esta.

Yeosang veía el perfil de San y lo escuchaba atentamente, para luego sonreír con nostalgia.

Si aquel sueño le había mostrado su vida pasada, entonces había conocido a San desde mucho antes, ambos teniendo una historia con un trágico final. Si el destino les había dado una segunda oportunidad para amarse con libertad y sin miedo, realmente le daba las gracias.

Eso quería decir que aquel hilo rojo del destino era cierto y jamás se rompió, siguió con su trayectoria, pasando por todos los años y buscando a sus dueños hasta que los encontró y los unió nuevamente.

Yeosang cubría su marca de nacimiento, era algo que no le gustaba para el era "fea" , pero cuando conoció al lindo pelinegro desde la primera vez este le dijo lo linda que era. Gracias a San ahora sabía su significado, así que nunca volvería a esconderla.

Sabía que su Sannie se encargaría de que la marquita de amor perdure para siempre.

"Todo lo que amas probablemente lo perderás, pero al al final, el amor volverá de una forma diferente. "
- Frank Kafka

_FIN_

Hola algodoncitos, espero estén bien.❤️✨

Esta pequeña historia llego a su fin, es el primer SanSang que escribo y me da miedo no llenar las expectativas de los lectores ya que no tengo experiencia en escribir sobre este Shipp. Pero espero les haya gustado, como a mi me gusto escribirla.💗✨

Cuídense mucho y nunca olviden que Hope los ama mucho.♥️✨

🦋- 21/03/23