Final
El gran día había llegado, todo parecía un sueño hecho realidad, para Yoo Jeongyeon quien había renunciado al amor desde muy joven nunca se imaginó que podría llegar a este momento, mirándose en el espejo sonrío, de verdad estaba sonriendo, por mucho tiempo creyó que nunca más lo iba a hacer, miro la foto que se encontraba en su porta retrato que estaba a lado del espejo, era la foto de su familia.
-Mamá, papá...-acaricio la foto-, lo he logrado, lo hemos logrado, ya no quiero llorar y tanto Mina y Momo han crecido fuertes y felices-suspiró contenta-, es hora de que caminemos hacía un futuro mejor-levantó su rostro y peino su cabello hacía atrás.
Ya no era el simple reflejo de una adolescente tratando de esconderse de los demás, ya no se odiaba a si misma por haber nacido diferente ahora más que nunca se amaba, agradecía haber nacido así, tenía sus diferencias y así le gustaba, ya no odiaba a los alfas, la vida le enseño que no todos son malos como ella suponía y creía a toda costa, no, no todos abusaban de su poder y machacan a los omegas, algunos valen la pena conocer, convivir con ellos, en cambio el amor o el dulce veneno en que todos alguna vez caemos, porque sí, ella cayó y no quería la cura, estaba perdidamente enamorada de su futuro esposo.
-¡Jeongyeon, ven rápido, se te hará tarde!
-¡Ya voy!-ubico nuevamente la foto en su lugar-, los amo y lo haré siempre.
...
-Dios, me he superado ¡soy una genia!-gritó Nayeon y Jihyo la reprendió con la mirada-, ok, somos unas genias.
-Ya tengo miedo, díganme como quedo.
-Estas bellísima- la omega peli rubia giro la silla para que la alfa pueda ver su reflejo.
-No lo puedo creer-susurró-, ni siquiera parezco yo- su pelo ahora era de color negro no era tan largo pero tampoco se podía considerar corto, pasaba un poco más de sus hombros-, ¿pero no me veo frentona?
-Ni loca te dejaría usar flequillo en esta ocasión-respondió Nayeon-, es tu día especial y el de Jimin-, la peli negra hizo un puchero aunque no negaba que se veía diferente pero de una manera genial.
Sus amigas se veían igual de bien, Nayeon quien había optado por un color negro que hacía las puntas se volvían de un tono más claro aparentando ser grises y su amiga Jihyo quien desde antes se había vuelto rubia pero ahora había decido córtalo.
-¡Ahora viene mi parte favorita! -Gritó Mina mientras se adentraba en la habitación junto con Momo-, el vestido de la novia.
-¿Qué? Yo no he usado un vestido o una falda desde que he salido de la preparatoria.
-Pues ahora lo usaras-la omega extendió el vestido en la cama, el vestido era completamente blanco, con pequeños detalles de incrustaciones de piedras brillantes, tenía un escote en forma de corazón, no era revelador ya que sabía lo difícil que era hacer que su hermana se vistiera con esa clase de vestido, el vestido llegaba hasta sus pies, pero los tacones la ayudarían a caminar más cómodamente y sin tropezar.
-Momo, podrías ir junto a NamJoon y decirle que no poder llegar a tiempo para amamantar a Tzuyu, esta tarde será larga...-pronuncio al mirar la expresión de sorpresa y shock que llevaba la alfa, la cuestión ahora sería meterla dentro del vestido.
...
-Sabes, creo que me gustan las bodas al aire libre-dijo Yoongi llegando alado de su novia, ella giro para verlo, y quedo impresionada ante la elegancia de su novio, aquel traje negro le quedaba a la perfección, junto con aquel estilo que creyó perdido.
-¿Y tú sabías que me encantan los chicos con cabello gris?-rodeo con sus brazos el cuello del alfa- me parecen sexys- gruño imitando a un tigre, el alfa río ante la ocurrencia de su novia para luego besarla.
Los invitados iban llegando de apoco, cada vez estaban más personas presentes, tanto amigos como familiares.
-¡Oh ahí viene mi hermano!-la omega separo el abrazo y entrelazo su brazo con el de Yoongi- Oppa, ¿Cuánto tiempo?-dijo tratando de sonar lo más natural posible, pero en realidad la curiosidad la estaba matando-¿y quién es ella?-dijo refiriéndose a la chica que estaba a su lado, mientras mantenían sus manos entrelazadas.
-Nayeon, no seas tan curiosa-respondió su hermano con el rostro más serio posible-, obviamente se trata de la futura madre de mis hijos, duh.
-Eso ya lo sé-dijo de la misma manera que Jabeum, ambas parejas de los hermanos se dieron un facepalm internamente, estos hermanos no tenían solución-, ¿pero cuál es tu nombre querida?
-Me llamo Rosé, un gusto.
-El gusto es mío-chillo de felicidad.
-Y tu-hablo el peli negro-, si le haces daño a mi hermana, quedarás más enano de lo que ya eres- el nombrado trago duro.
-Oye cállate que me lo asustas-reprendió Nayeon-, recuerda que quiero darte sobrinos.
Mientras ellos estaban encerrados en su mundo, no se dieron cuenta de dos personas que acababan de llegar.
Seulgi se debatía si entraba o no, miraba por todos lados buscando una excusa para irse de ahí.
-¿Nerviosa?-la voz de un chico la sobresalto.
-NO-se acababa de dar cuenta que casi grita y se tapó la boca, el chico solo río negando con la cabeza-, lo siento, suelo ser torpe, me llamo Seulgi y ¿tú?
-Vernon, es un gusto-ambos se sonrieron, y de repente sintieron una calidez que inundaba por completo sus corazones, ambos lobos habían encontrado a su pareja destinada.
Cupido hizo de las suyas una vez más.
...
-Querida, me siento orgulloso-NamJoon quien ahora traía una apariencia más madura, cargaba a su hija y se ubicó alado de su esposa.
-Orgulloso, ¿de qué?
-De todo y de todos.
-¿Hablas de la boda?-le pregunto con una sonrisa, mientras veían como Jimin estaba parado ya en su lugar esperando a que la boda iniciara.
-No solo de eso-río-, todos hemos crecido-observo a cada uno, que se encontraba en los lugares, Yoongi y Nayeon por fin eran pareja, no tuvieron miedo al hablar y supieron que entre ellos había algo más que solo amistad, luego vio a los más pequeños de lugar, la holgazana y berrinchuda de Mina estaba sonriendo alado de su novio, si, aquel chico de sonrisa parecida al de un conejo, y la pequeña Momo quien jugaba animadamente con un niño que según el recordaba se llamaba Hoseok. No solo crecieron de altura o edad, crecieron emocional y espiritualmente.
-Chocolatito, ya está por comenzar-dijo Jihyo-, Tzuyu mi amor, ven aquí para ver mejor-hablaba mientras tomaba de la manito a su hija, la niña solo sonrió mostrando sus rosadas encías.
La marcha nupcial había iniciado y Jimin sentía que se estaba por morir de los nervios, las preguntas inundaban su cabeza.
¿Y si se arrepentía de casarse con él?
¿Y si no le gustaba como le quedaba el tinte rubio y por eso dejaba de amarlo?
Sus manos empezaron a sudar y miraba por todos lados, pero su corazón se tranquilizó al verla, estaba realmente hermosa, de pies a cabeza, era como ver a un ángel caminar, una vez que estuvo a su lado, ambos se sonrieron tímidos, con una sonrisa de oreja a oreja, y los sonrojos no podían faltar, la felicidad era tanta que casi no prestaban a tención a lo que el padre decía.
-Joven Jimin-llamo haciendo que Jimin lo mirara seriamente-, quieres recibir por esposa a Jeongyeon.
-Sí, quiero.
-Jeongyeon, quieres por esposo a Jimin. Y prometes serle fiel, tanto en la prosperidad como en la adversidad, en la salud como en la enfermedad, amándolo y respetándolo durante toda su vida?
-Sí, quiero-ambos se miraron y se dedicaron la sonrisa más sincera que alguien pueda ver.
En ese momento era como si la adrenalina recorriese sus cuerpos, para ellos no había nadie más, ambos estaban tan felices que ni siquiera prestaron la suficiente atención, solo esperaban a la oración favorita de ambos.
-Puedes besar a la novia-, era esa oración, el rubio acaricio la mejilla de Jeongyeon antes de estampar sus labios con los de ella, los invitados gritaban de felicidad.
...
La fiesta de recepción era una total sorpresa para ambos, los encargados fueron Mina y NamJoon, pero lo que nunca se hubieran esperado era que tendrían tan buen gusto.
-¡Dios mío! ¡Felicidades Jimin y Jeongyeon!-aquella chica tan tierna fue corriendo a abrazarlos.
-Gracias Sana-respondió Jimin.
-Muchas gracias Sana-miro detrás de ella-, ¿y Taehyung?
-Acaba de irse al baño, últimamente ha estado vomitando un poco-sonrío apenada-, me despido, iré a ayudarlo, vine porque ya no me aguantaba las ganas de felicitarlos.
Luego de que Sana se fuera las canciones empezaron a ser más lentas, con un toque más romántico, pero la canción que los motivo a irse en la pista de baila era una de un grupo no tan conocido, la canción se llamaba Just One Day.
-¿Bailas?-pregunto el rubio pasándole la mano.
-Solo si es contigo, guapo-cogió su mano y empezaron a moverse al ritmo de la canción, ella recostando su cabeza en el pecho de su esposo, el sosteniéndola de la cintura, Jeongyeon levanto su rustro, ambos conectando sus miradas, sin hablar, se dijeron todo lo que querían decirse.
-Te amo Park Jimin, eres el hombre que cambio mi vida, mi dulce omega.
-Y yo te amo a ti, mi encantadora alfa Jeongyeon.
La música seguía sonando, ellos inmersos en su mundo, recorrieron un largo camino, era tiempo de vivir su vida, no como los demás dictan, ellos vivirán a su manera, son diferentes, pero eso los hace únicos.
Fin.
Nota de la escritora:
Dato curioso, el primer nombre de este fic era "mi dulce omega" jajaja, y de pasó quiero decir muchas gracias a todos/as por el apoyo que me dieron con este proyecto, la verdad nunca hubiese pensado que iba ser reconocido habiendo miles de mejores historias, está historia inició como una distracción para mi, al principio ni siquiera sabía como iba a continuar, pero me llegaba la inspiración y lo escribía, aunque no quedaba como quería, si se preguntan porque no hubo triángulo amoroso es porque eso lo estoy reservando.
En serio muchas gracias, si pudiera a cada uno de ustedes mis pequeños solecitos les daría un beso gigantesco en la mejilla, de paso cuídense del corono virus.
No se olviden de votar y dejar comentarios, me encanta leer los comentarios y en serio me enoje con wattpad cuando no me dejaba leerlos.
Sin más que decir pueden pasar por mis otras historias, no se arrepentirán jajaja y por adelantado voy a mencionar un proyecto que será del género fantasía, realeza, poderes y esas cosas y obviamente la protagonista será Jeongyeon.
PD: terminé una historia romántica AHHH! Ni yo me lo creería hace un tiempo atrás.
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