¡CAPÍTULO DE REGALO!

Luego de una semana de la partida del rey y la reina, Helianthus comenzó sus clases.

Helianthus esperaba ver a Canuto en acción.

Según tío Moony, en su juventud fue el mejor de la promoción de la Academia de Aurores.

—Los Black somos los mejores en duelo —dijo Cygnus con una sonrisa engreída.

—Claro, tanto que nuestros oponentes nos ruegan que los matemos de una vez por todas —dice Orión con una sonrisa cruel.

—Postura recta, Heli — le indicó. Helianthus vestía un jubón oscuro y calzas negras con botas hasta su rodilla.

Su cabello estaba atado en un trenzado holandés.

—Lanzaré un ataque y debes bloquearlo Heli — le volvió a decir —¡ Stupify !

Helianthus esgrime su varita y con un movimiento ascendente levantó un escudo, pero el hechizo de su padrino fue muy más fuerte que rompió el hechizo y la hizo caer hacia atrás un par de metros.

Ella gimió como un gato lastimado cuando cayó en la arena de espaldas.

—¡Cachorra! ¡¿Estás bien?! — preguntó Sirius.

James le dio un fuerte golpe en la cabeza del Sirius joven, el cual soltó un grito de dolor por el golpe

—¿¡Eso por que carmamenta!? —grito Sirius mientras se sobaba el golpe.

—¡Trata a mi bebé con delicadeza! — le grito James hacia su hermano.

—¿Y tu crees que el oponente de Helianthus, será cuidadoso con ella? —preguntó Sirius hacía su castaño hermano —Mi ahijada esta un mundo donde las mujeres solo sirven para dar hijos a sus infieles esposos, y donde las mujeres no son nada, más que un objeto que poseer —la voz del Black sonaba sería —No seré blando con Helianthus en los entrenamientos, ¿la razón?, mi ahijada no se arrodillara ante nadie —termino de hablar Sirius.

James miro por unos segundos a su amigo y asintió, recordando que era cierto.

ㅡ Es una Potter, ella jamás se arrodillaria ante nadie, al contrario, ellos se arrodillaran ante mi hija.- contesto Lily.

Helianthus levantó su brazo y alzó su pulgar. Como pudo se puso de pie en su saltó y recogió su varita, con un simple movimiento y un encantamiento de limpieza se quitó la arena.

Ella miró hacia las rocas, ahí estaban los tres hermanos Velaryon observándola. Luke tenía los ojos brillantes ante la demostración de Sirius.

Los Black sonrieron ante la admiración del niño.

Jace la saludó y ella sonriendo devolviéndole el saludo.

Helianthus apostaba una tarta a que Charlie estaba conversando con los Dragons Keepers sobre los dragones en la isla.

—¡Helianthus! ¡Concentrarse! —Gruñó Canuto. Helianthus arrugó la nariz.

¿No se supone que ella al ser su adorable cachorra sería considerada?

¡Patrañas!

Era demasiado estricto con ella.

Lily sonrió negando, estaba de acuerdo con sirius, su hija está en un mundo donde denigran a las mujeres y por ello, era mejor que se defienda siempre.

Nuevamente le lanzó otro hechizo y esta vez logró mantener más tiempo el escudo, pero igual terminó cediendo y cayendo sobre la arena como unas cinco veces.

Hasta que la sexta logró quedarse de pie.

—Lo hiciste bien cachorra— le palmeó la cabeza y con una sonrisa. —Aún eres una niña. Ya con el tiempo lo manejas.

-¡No! — Helianthus pisó fuerte en la arena. No le gustaba sentirse como una inútil, una débil.

Las mujeres Targaryen y Velaryon, asintieron, la debilidad era uno de las ventajas que los hombres tomaban sobre ellas, pero es momento de cambiar eso.

La noche en el cementerio aún vivía como fuego en su mente. Las risas de los mortífagos el dedo esquelético de Voldemort tocan su cicatriz haciéndola retorcerse del dolor al punto que lágrimas salieron de sus ojos.

Lily sintió ganas de llorar por su hija, todo ese infierno vivió su hija y ella no puedo hacer nada, James se sentía igual.

—¡No soy una niña! ¡Soy una mujer! ¡Una mujer que quiere saber defenderse! — volvió a pisar con más fuerza la arena.

—Una mujer no hace un berrinche —dijo Otto con desagrado, pero soltó un grito cuando un hechizo impacto sobre el.

Lord Potter guardo su varita de nuevo, mientras sus ojos brillaban peligrosamente hacia el verde.

—Una más Hightower y tu cabeza estará fuera de tu cuello — aviso Fleamont con una sonrisa cruel.

Por un momento recordado que tenía público, miró a Jacaerys que se levantó y ella giró la cabeza evitando que viera su rostro molesto.

—Lo lamento padrino, no debería gritarte — se disculpó con Sirius.

—Lo sé, lo sé — la abrazó y le besó la cicatriz en su frente — Es que a veces no proceso que ya eres toda una mujercita, perdí tantos años que aún te veo como mi cachorra con mejillas regordetas.

—Un hijo para un padre, siempre será aquel bebé que sostuvo en sus brazos por primera vez, no importa que tu hijo ya tenga familia, ellos siempre serán nuestros bebés —dijo Euphemia con una sonrisa, mientras abrazaba a si hijo con amor.

Aemma sonrió, y también abrazó a Rhaenyra, lo mismo que Rhaenys con sus hijos, y Molly con los suyos, Walburga solamente tomó las manos de sus hijos entre las suyas y les había dado una pequeña sonrisa, incluso Druella le sonrió a sus hijas.

Sirius se separó de ella y le dio una sonrisa.

—Tu cabello puede ser negro — le tocó la punta de la nariz de manera juguetona — Pero tienes el carácter de una pelirroja.

—En pocas palabras tiene el carácter de Lily — dijo Marlene con una sonrisa traviesa

Lily solo sonrío "tiernamente" hacia las personas que la miraron.

∗⋅✧⋅∗ ──── ∗⋅✧⋅∗ ──── ∗⋅✧⋅∗

—Han llegado regalos de King's Landing— dijo un mozo de cuadra. Jace estaba en Lady Helianthus en la biblioteca.

El señor Lupin alzó su mirada de un horrible tomó mientras se quitaba eso que llamaba “anteojos”.

Helianthus también se quitó los de ella.

—¡Ahí entra la ceguera Potter! — dice Frank divertido, todos rieron.

Dos mozos dejaron un baúl de considerable tamaño a los pies del señor Lupin. Jace dejó una tira de seda en la página donde estaba, para después mirar hacia el baúl.

Todos también estaban curiosos de que habría dentro de aquel baual o quién había enviado.

—¿De parte de quien ha sido enviado el regalo? — preguntó el señor Lupin, él sacó su varita y murmuró algo mientras golpeaba el baúl con su varita.

—De la reina Alicent— contestó el mozo mientras se inclinaba y se iba.

Todas las miradas fueron a parar a la joven Alicent, la cual bajo la mirada, no debía de ser una tonta para saber que le había mandando vestidos verdes a la Heredera Potter.

Helianthus miró al señor Lupin, siempre le decía tío, impaciente.

El Remus joven sonrió, su cachorra le estaba pidiendo permiso, y eso era bueno, nadie sabía lo que pudiera contener el baual.

—Ábrelo cachorra — le sonrió. Lady Helianthus se deslizó sobre sus rodillas abriendo el baúl. Jace miró telas de color verde con detalles en dorados.

Lady Helianthus soltó un jadeo de emoción ante la perspectiva de los vestidos. Jace evitó hacer una mueca, ese era el verde Hightower.

¿Qué busca la reina al enviarle vestidos con los colores de su casa?.

—Buena pregunta, futuro hijastro, buena pregunta — dijo Daemon mirando con una mueca de asco los vestidos verdes.

—Son muy lindos — dijo mirando el baúl. Sacó un sencillo de mangas extendidas y lo acercó a su cuerpo — ¿No es lindo? Aunque es un verde muy Slytherin — arrugó la nariz y aquello le pareció adorable a Jace.

Los Gryffindor también arrugaron las nariz ante eso, mientras que los Slytherin se mostraron ofendidos, pero a la vez enojados, como alguien como los Hightower podían compartir el mismo color que ellos.

El ceñir Lupin rio ante su comentario.

—Hace resaltar su mirada, Lady Helianthus— dijo Jace inconscientemente Ella se sonrojó y bajó la mirada.

—Gracias, príncipe Jacaerys.

—¡Que lindo que es el amor! — grito Marlene junto a Alice y Dorcas, las dos sonrió en grande.

—¡Son tan tiernos! —grito también Rhaenyra junto a Laena.

James junto a  Sirius y Remus, se jalaron los cabellos con celos y frustración, su bebé era una bebé aún para tener novio.

Ella guardó el vestido y cerró el baúl para luego sentarse sobre él.

Jace notó que Lady Helianthus tenía una preferencia sobre el carmesí y plata. Su vestido de hoy era un de rojo profundo sencillo y sobre él un corsé de cuero con chapas plateadas que hacían que su cintura se viera pequeña.

—Son los colores de la casa Potter, además de los colores de Gryffindor —dijo James con una dulce sonrisa ante lo hermosa que es su hija.

—Son lindos vestidos— dijo ella sonriéndole —Le enviaré una nota de agradecimiento y conjuraré una rosa de cristal. Ya domino esa rama de la Transfiguración. — ella lo miró fijamente— ¿A la reina le gustaría?

—Ese un bello regalo de agradecimiento — aprobó Madame Longbottom.

Alicent sonrió un poco, jamás en su vida alguien le había regalo una rosa, "Espero que una vez que mi padre muera a manos de los magos, yo podré ser libre al fin y irme a vivir con la familia de mi mamá", pensó la pelirroja oscura con ahanelo.

La Diosa la miró, decidida a caminar el destino de la joven Hightower.

—Su majestad estará encantada con su muestra de gratitud— contestó Jace.

Lady Helianthus del escritorio recojio un pergamino y con un tintero empezó a escribir la nota de agradecimiento, y Jace fue testigo de cómo transformó un pétalo de rosa a una rosa completa de cristal pulido.

Él no pasó por alto las ligeras muecas que hizo cuando se concentraba al momento de hacer magia.

—Lo mismo haces tu —dijo Lily en un susurró hacia su prometido.

James solamente sonrió para después darle un beso a Lily.

∗⋅✧⋅∗ ──── ∗⋅✧⋅∗ ──── ∗⋅✧⋅∗

Helianthus no podía dormir, nuevamente las pesadillas la acechaban como dementores tras su alma. Con el cabello trenzado y una bata calentita camino por los pasillos con su varita conjurando un Lumus.

—¿Que es un demeter? —preguntó Corlys interesado, Daemon estaba igual.

—Dementor — corrijo Orión —Un Dementor es una criatura oscura y siniestra que no tiene alma propia, son considerados las criaturas más oscuras del planeta, ya que se alimentan de la felicidad de las personas, dejando a sus víctimas con solo sentimientos de desesperación y tristeza — explicó el Lord Black.

Corlys Velaryon miro a Lord Black unos momentos, para después sacar una bolsa llena de dragones de oro

—¿Cuanto cuesta uno de esos? — preguntó mientras comenzaba a contar las monedas de dragónes de oro.

Daemon asintió también, le interesaba mucho esa criatura.

Los del mundo mágico se le quedaron mirando sorprendidos, le acaban de decir que un Dementor era una criatura peligrosa, y el preguntaba cuando cuesta.

"Esta gente es rara", pensaron algunos.

Y sobre ella la capa de Invisibilidad, no quería que ningún guardia la siguiera, Camino por la playa y vio al príncipe Jacaerys sentado en una roca, con un farolito cerca de él iluminando un poco la noche.

Helianthus contuvo la respiración un poco, en el día parecía tener toda la construcción y seriedad amable, pero aquí en la noche podía ver su rostro más relajado.

Ella se quitó la capa de invisibilidad y el príncipe se sobresaltó.

—Ese truco de volverse invisible es otra cosa de magos — dijo él.

—Esta capa es de la sangre Potter. Es mía y solo mía— contestó Helianthus sentándose cerca de él.

Los Potter asintieron y miraron mal a todos aquellos que los miraron con ojos ambiciosos.

—¿Pensamientos nocturnos? — preguntó el príncipe.

—Pesadillas — contestó mientras se abrazaba las piernas. El viento del mar le acarició el rostro, ella se permitió cerrar los ojos y respirar el olor a sal marina.

Permanecieron en silencio unos minutos mientras escuchaban a las olas romperse en la orilla.

Las mujeres soltaron un "aww", ante los lindos que ellos se veían.

—Nunca he sentido tanta paz— dijo ella — Se siente irreal saber que quien me quería muerta ya no está. Paz… nunca lo había pensado.

—¿Una vida difícil en tu mundo?

—Perdí a mis padres cuando aún no podía recordar. Viví diez años encerrada en una alacena y siendo tratada peor que una criada.

—Una vez que tengamos un descanso, mataré a Petunia y a su ridículo cerdito qué tiene de esposo —dijo Lily con enojo, y su magia se podía sentir pesado.

—¿Cómo pudieron tratarte así?

—Las personas hacen cosas malas — dijo ella — Pensé que podría encontrar paz en Hogwarts. Pero cuando iba por los pasillos era vista como algo… esto — tocó su cicatriz —fue mi condena. En mi segundo año algunos me miraban como si fuese la reencarnación del mal por un don con las serpientes mientras otros me veían como un trofeo a conquistar.

—¿Solo por eso? —preguntó James —Mi hija no es oscura, además su don es magnífico.

—Mi ahijada no es ningun trofeo —Sirius dijo mientras soltaba un gruñido de enojo.

—¿Por qué? — Jacaerys la miró preocupado.

—Líneas de sangre— contestó Helianthus — Si llegaba a casarme con cualquier heredero, su línea se fortalecería con mi don. A muchas brujas se les complica el embarazo, muchas solo tienen un solo hijo, bendición si tienen dos o tres. Creo que la señora Weasley debió ser bendecida por alguna diosa de la fertilidad por sus siete hijos. Mi apellido se perderá en el tiempo, pero es lo mejor… sin expectativas.

Molly se sonrojo, pero al mismo tiempo sonrió, tendría una gran familia, su sueño de se hizo realidad.

—El apellido Potter no se perdería sí Helianthus tuviera dos hijos, uno el Heredero de su padre y el otro su Heredero —dijo Euphemia.

—Las expectativas son horrendas

—¿Experiencia propia?

—Soy el heredero de la heredera. Y una sombra cierne sobre mí, Luke y Joffrey.

—¿No entiendo?

—Bastardo es lo que susurran en la corte — Jacaerys se mostró serio — No soy ciego, sé que soy un bastardo — tocó su cabello —Mira mis rasgos, no tengo nada de Targaryen o Velaryon en mí.

—¿Eso importa? —preguntó Regulus —Los rasgos no lo son todo, según tengo entendido la Reina Aemma es medio Targaryen, los niños salieron igual al algún pariente del lado materno —dijo el Black menor.

—Mi abuela materna, era una Baratheon, ellos son de cabellos negros, castaños, y de ojos azules al igual que castaños —dijo Laena mirando a su madre

—Jacaerys, se parece a mi padre —dijo Aemma —Lucerys se parece a mi, pero con el cabello de mi familia paterna, los Arryn, Joffrey es igual a Rhaenyra, pero también como un Arryn —dice la Reina con una sonrisa hacia sus nietos.

—Es triste saber  que en su mundo, todos se olvidan que las mujeres también tenemos familia y que esa familia tiene sus rasgos diferentes —dijo Andromeda con una pequeña Nymphadora durmiendo en sus brazos.

—Es horrible ser juzgado de esa manera.

—Por eso debo cortar mi cabello — Jacaerys miró al mar —Cuando empezaron a formarse rizos, cuando me vi al espejo, vi el rostro de Ser Harwin Strong, tomé una daga y los corte.

—Eso quiere decir que saliste igual de guapo que tu padre —dijo Rhaenyra, mientras miraba con hambre al Heredero Strong.

Harwin se sonrojo ante la mirada de la princesa.

Helianthus le tomó la mano, ella siempre odio los guantes, la privaban del contacto humano. Sentía los dedos ásperos por sus entrenamientos con espadas.

—Nunca pudo llorar la muerte de Ser Harwin— apretó los ojos para luego suspirar y abrirlos — Cuando murió Laenor, pude llorarles a los dos. Al hombre que llamé padre y al hombre que me enseñó a usar una espada.

Laenor soltó un suspiro triste, al igual que Harwin, dejaron solos a sus hijos, pero también agradecía a Daemon por cuidarlos como propios.

Helianthus lo tomó de la barbilla y se miraron mutuamente. Ella se perdió en sus ojos castaños.

—Al menos puedes recordar a dos hombres a quienes puedes llamar padre — ella sonrió triste— Solo escucho historias de lo maravilloso que era mi padre. Solo tuve una oportunidad de escuchar su voz, cuando de la varita de Él brotó una proyección de mi padre, su voz darme aliento a ser valiente.

James quiso llorar, en verdad quiso hacerlo, su hija, su dulce hija, la dejo sola con solo un año de vida, no estuvo con ella ni un año más, para que ella lo recordará.

Helianthus con cuidado acarició los nudillos de Jacaerys.

—Se valiente, Jacaerys — le dijo animando — Se valiente y demuéstrale al mundo que sus comentarios no pueden hacerte daño.

—No importa lo que uno es de nacimiento, si no lo que uno por si mismo —dijo Remus con seriedad y sinceridad.

—La personas son tan miserables que quieren hacer miserables a los demás, Jacaerys es un príncipe Targaryen, tiene un dragón, cuando una persona tiene envidia, no le importa destruir la vida de una persona, solo para sentirse bien — dijo Regulus.

El príncipe la escuchó, se miraron unos segundos más antes de que se inclinara hacia ella. Helianthus cerró sus ojos y sintió chispas en su estómago.

Los labios de Jacaerys tocaron levemente la comisura de boca.

—¡NO, NO, Y NO!! —grito James mientras se jalaba los cabellos, ese mocoso se atrevio a besar a su hija.

¿Por que eso contaba con un beso verdad?, ¿¡Verdad!?

∗⋅✧⋅∗ ──── ∗⋅✧⋅∗ ──── ∗⋅✧⋅∗

Daemon sonrió  a los lejos viendo como su hijastro se instalaba sobre Lady Helianthus.

Un beso de niños, pero por como ambos acercaban sus cuerpos, se notaba que se buscaban, pero ambos eran conscientes de la decencia de la moral y no hicieron mayor avance.

—¡NO QUIERO VER ESO! —grito James mientras se tapaba los ojos con las manos, además de negar con la cabeza una y otra vez.

No pasaría mucho tiempo antes de que esos dos se escabulleron a las bahías de Dragonstone para poder tener un privado para poder liberar sus hormonas adolescentes.

2952 palabras.

Espero y les guste.

Orión explicando lo que es un dementor y lo que peligroso qué es.

Corlys:

Helianthus y Jacaerys besándose por primera vez.

James: