¡Primero que nada les diré que en un momento dado colocaré un separador dando enterder qué una parte no será una reacción ya que algo muy íntimo que no todos deben ver (los del pasado), gracias!.

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El sonido de la música y los sonidos de protestas se perdieron en el fondo mientras Jace llevaba en su hombro a su esposa.

Ella reía divertida ante la situación, en un movimiento ágil, la tomó en brazos y ambos se miraron al rostro mientras Helianthus se aferraba a su cuello.

Los jóvenes sonrieron, era una bella imagen. Dos jóvenes enamorados y casado, por amor.

James solo pudo suspirar su hija estaba enamorada y se casó por amor, aunque no a la edad que el hubiese preferido.

Ambos se dieron pequeños besos mientras avanzaban hacia su alcoba. Jace estaba seguro que el señor Black, Lupin y Weasley habrían evitado que todos los señores llevaran a Helianthus mientras rasgaban el vestido.

Pero él conocía el valor sentimental que su Florecita le tenía a la prenda, así que también salvó al vestido de ser convertido en simples retazos de telas rasgados.

Lily sonrió, estaba encantada ante el comportamiento del principe. Era digno de su hija.

Cuando llegaron al cuarto, Jace bajó a Helianthus al suelo, ella sacó su varita y con su movimientos la redecilla que sujetaba su cabello desapareció, dejando que su largo cabello medianoche con algunos mechones plateados fluyeran sobre sus hombros, pechos para rozar sus caderas.

Los magos desviaron su mirada hacia el suelo, en señal de respeto e igualmente hicieron los visitantes.

James sonrió ante el respeto hacia su hija, ella merecía todo el respeto del mundo y así sería.

—Ahora tienes el privilegio de ver mi cabello suelto — dijo ella acercándose a él — Estamos casados ante tus dioses. Confía en mí y déjame vincular mi magia a ti, para que nuestras almas sean una sola.

Lord y Heir Potter solo pudieron bufar por lo bajo, aún no le agradaba saber que su niña se casó tan joven. Pero, por lo menos fue por amor y no por deber.

Y no podían quejarse mucho, el joven principe era alguien digno de su niña.

Jace miró a Helianthus y colocó sus manos sobre sus mejillas asintiendo con la cabeza. Ella le dio un beso en los labios y le indico que se sentara en la cama, Jace se quitó las partes superiores de su jubón quedando en una camisa de lino y sus pantalones.

Las jóvenes suspiraron ante el principe, era completamente hermoso para todas ellas, incluso envidiaban la suerte de la futura Heredera potter de poder casarse con alguien que ama.

Su esposa se sentó en el regazo de él. Se notaba sus mejillas sonrojadas, ella movió su camisa dejando su hombro expuesto. Sus delicados labios tocaron la piel y Jace sintió algo cálido recorrer, como un hilo dorado buscando su corazón.

Los targaryen, Velaryon junto a los Strong prestaron atención, todo lo que hacían los magos era algo fascinante para ellos.

La sensación de calidez envolver su corazón por completo hizo que Jace soltará un gemido ronco, su mano fue a parar hacia el cabello de Helianthus, levemente hundió sus dedos en los sedosos mechones de ella.

James hizo una mueca de frustración, no le gustaba tener que escuchar algo intimido de su hija.

Lily sonrió ante las reacciones de su novio, sabía bien que james estaba a nada de tener un ataque.

Algo cálido instaurarse en lo más profundo de Jacaerys. Luego de algunos segundos ella se separó y vio como los ojos de ella resplandecían como fuego verde.

—Jace, tus ojos — dijo Helianthus — Tu cabello.

Rhaenyra se mostró confundida como espectante, y Ser Harwin estaba igual.

"¿Qué le sucedió a Jace?" eran sus pensamientos.*

Con un movimiento de varita invoco un pequeño espejo. Sus ojos castaños se volvieron violeta, como los de su abuelo Viserys y un mechón de su cabello se tornó plateado.

El salón jadeo sorprendido menos los adultos magos. Los targaryen sonrieron aún procesando tal acontecimiento.

ㅡ Eso fue asombroso.- Harwin artículo.- jamás imaginé ver algo así.

Lord Strong y Rhaenyra asintieron aún sorprendidos por la apariencia de su familiar.

—¿Supongo que lo que hiciste provocó esto?

—Junte un poco de mi firma mágica en tu corazón— explicó Helianthus dejando su varita de lado para luego que sus delicadas manos se metieran dentro de su camisa — ¿Estaba molesto?

—No— Jace dejó el espejo de lado para ver a su esposa — Al menos ahora no negaran de mi sangre Targaryen.

Viserys frunció el ceño al igual que los presentes.

ㅡ Es inaudito, el es un targaryen, es hijo de la princesa.- Lady Weasley hablo por primera vez.- es sangre Targaryen como Strong pero también Velaryon al ser aceptado por los Lords de la casa, al igual que la magia.

Rhaenyra sonrió hacia la mujer, mientras Harwin y Leonor concordaron con ella. Su hijo no era un bastardo.

La pantalla/libro se cerró, ocasionando qué todos protestan, pero solo una mirada de la Diosa los hizo callar.

—Este pequeño momento lo pueden usar para ir al baño o estirar un poco las piernas — dijo la Diosa.

Había algo dentro de Jacaerys que se sentía como si ardiera en llamas, colocando sus manos en la espalda de Helianthus dejando la fila de botones del vestido, uno a uno se iba abriendo mientras ambos se besaban .

La tela se resbaló por los hombros de Heli, aun sin dejar de besarse, bajó por completo el vestido que quedó tirado a los pies de la cama. Jace hizo un movimiento dejando a Helianthus acostada en la cama.

Daemon lo arrastró secretamente hacia King 's Landing, a la Calle de la Seda. El abrochando fue testigo de una pareja teniendo sexo, según Daemon, debía saber como complacer a una mujer.

Jace deslizó su mano por el muslo de Helianthus hacía llegar hacia su centro. Movió dos de sus dedos de manera circular sobre su punto de placer, ella gimió en alto al primer toque.

—Jace— el aliento se le fue, sus manos se aferraron a sus brazos.

De acuerdo, todo iba bien. Siguió trazando círculos en esa zona por unos momentos más mientras ella soltaba pequeños gemidos y jadeos, cosa que provocaron que sus pantalones se sintieran ajustados.

El ardor en su pecho se instalaba aún más, como sea, se deshizo de su ropa, quedando los dos desnudos.

Jacaerys miró por un momento el retrato debajo de él. Helianthus no tenía pecas, pero si un pequeño lunar en su pecho derecho. Su cabello negro con destellos en plata se extendía en la cama y almohada, un rubor osa se extendía por sus mejillas.

Con cuidado tomó su pierna derecha y la envolvió alrededor de su cintura.

—¿Estas listas?

—Si.

—Prometo ir despacio. No quiero lastimarte.

—Lo sé. Tu jamás me harías daño.

Jace besó a Helianthus mientras se deslizaba dentro de ella de manera lenta, podía sentirla tensarse un poco debajo de él, pero Jace deslizó sus manos por sus muslos. Cuando atravesó su barra de doncellez, ella soltó un gemido de dolor.

Jace repartió besos por su rostro, así se quedaron unos minutos antes que ella dijera que podían continuar.

Jace inicio despacio y lento, esperando no provocarle mucho dolor. Las manos de Helianthus fueron hacia su espalda y rasguñó desde sus omoplatos hasta su cintura con sus delicadas uñas, provocando un gemido ronco en Jace

El fuego dentro de él lo llevó a ir un poco más rápido y duro.

Helianthus cantaba su nombre como si fuese una sirena esperando atraer a marineros para llevarlos a sus tumbas acuáticas.

Los dedos de Heli se hundieron en su cabello, sus uñas raspando su cráneo. Jace siguió con sus movimientos, su mano derecha siguió acariciándola en su intimidad haciéndola sacar gemidos.

Ella llegó a su límite, sus pecho subía y bajaba, y Jace derramó su semilla luego de unos momentos después.

Jace salió de ella con cuidado dejando su frente, la atrajo hacia él, envolviéndola en sus brazos y con las piernas entrelazadas.

—Nyke jorrāelagon (Te amo) — dijo Jace en Valyrio. Ella lo besó levemente antes de cerrar sus ojos y dormir.

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En el fondo del Ministerio de magia, en los registró de familias mágicas, en los registros de la Noble Casa de los Potter quedó archivada para siempre luego de la desaparición de la dama de la casa.

Todos  observaron intrigados aunque algunos sabían que aparecería allí.

La unión de ambos Herederos.

A lado del nombre de Lady Helianthus Saera Potter se formo el nombre Príncipe Jacaerys Velaryon.

1390 palabras.

Espero y les guste.