—Wooyoungie, sal de ahí, todos queremos verte. —Yeosang estaba emocionado por ver a su mejor amigo, las señoras Jung estaban igual, querían ver al pequeño omega.

La cortina se abrió dejando ver a Wooyoung con un precioso traje blanco, este les sonrió a todos los presentes.

— ¿S-se me ve bien? —pregunto con nerviosismo.

— ¡Te ves hermoso! Wooyoungie, el traje te queda perfecto. —El pelirosa tenía una gran sonrisa plasmada en sus finos labios.

—No puedo creer que mi bebé se vaya a casar. —Yongsun y Moon se acercaron a su hijo envolviendo en un cálido abrazo. —Te amamos mucho. —

—En pocos días serás Choi Wooyoung, nuestro pequeño ya creció. —La alfa beso la frente de su hijo. —Estoy muy feliz por ustedes, se que San te cuidara y eso me hace sentir tranquila. —

—E-estoy muy nervioso... —

—Wooyoungie, si quieres escapar de tu boda, yo puedo ayudarte. —Bromeo Yeosang.

— ¡No! Yo si quiero casarme con mi hyungie, solo siento nerviosismo y felicidad. —Wooyoung se vio en el espejo y sonrió, le gustaba como se veía en aquel delicado y hermoso traje blanco. —Hyungie, debe de estar igual de nervioso. —

—Ahora que recuerdo, San está en la otra habitación, Seonghwa le está haciendo compañía, iré a ver como les va. —Moonbyul salió de la habitación en donde estaba Wooyoung, para dirigirse a la otra.

—San Hyung, en serio se ve bien ¿cuántas veces se lo tengo que decir? —Seonghwa estaba en una silla, su rostro se veía frustrado.

—Pero... ¿Y si a Wooyoung no le gusta? —el alfa se veía en el espejo y en sus labios había un puchero. —Creo que son los nervios los que están jugando conmigo... —

—Te ves bien, San, el traje te queda perfecto. —

—Señora Moon... —el de mechas rojas giro sorprendiéndose al escuchar la voz de la mayor.

—Wooyoung está igual que tú, solo les aseguró que se ven muy bien. —la alfa se acercó al ojigris. —San... —

— ¿Pasa algo señora Moonbyul? —

—Gracias por llegar a nuestras vidas, por alegrarnos y amar a mi Wooyoung, para mí no eres solo mi yerno, yo te quiero como si fueras mi hijo y siempre será así. —Moonbyul se acercó al alfa y lo abrazo.

—Me alegra mucho escuchar eso, usted es como una segunda madre, siempre está para apoyarme, muchas gracias. —San sonreía en medio del abrazo, estaba muy feliz.

—Créeme, el traje te queda bien... —la alfa se separó del abrazo.

—Ya quiero ver a mi Woonie en su traje de novio, se verá como un príncipe, estoy nervioso y emocionado... —San estaba en su burbuja, ignorando todo a su alrededor, pensando en lo lindo que se vería su hadita.

Los minutos pasaron, San al fin aceptó que ese traje le quedaba bien, así que fue a cambiarse, Moon y Hwa hablaban cómodamente, cuando delante de sus ojos vieron correr una pequeña y conocida figura, giraron sus rostros encontrándose con Wooyoung y San, estos estaban abrazados y dándose besitos.

—Hyungie, quería verlo con su traje... —El menor hizo un tierno puchero, el cual inmediatamente fue besado por su alfa.

—Lo veras hasta el día de la boda, yo también quería ver el tuyo, pero tiene que ser una sorpresa. —Los brazos de Wooyoung rodeaban el cuello de San, mientras sus manitos dejaban suaves caricias en el sedoso cabello y el alfa suspiraba disfrutando de aquellos mimos.

—Hyungie... —la dulce voz del omega llamó la atención de San.

—Si... ¿Qué quiere mi hermoso Woonie? —

—Quiero un besito... —Woo abulto sus labios y cerro sus ojitos esperando su beso, el mayor sonrió con ternura, acunando con sus dos manos el pequeño rostro y con sus pulgares acariciaba las mejillas rosaditas.

—Todos los que mi hadita quiera... —se inclinó y junto sus belfos con los de su omega, los dos sonreían entre aquel tierno beso.

— ¿Ya los perdimos? —Moon le pregunto al alfa rubio.

—Exacto, ya los perdimos, cuando San hyung y hadita hyung se juntan, los dos se vuelven un caso perdido. —Seonghwa contestó con una sonrisa en su rostro, amaba ver a sus dos amigos, así de felices y disfrutando de su amor.

—Wooyoungie, estuve buscándote, te dije que me acompañaras a la otra tienda. —La voz de Yeosang se escucho pero fue totalmente ignorado por su mejor amigo, ya que este estaba concentrado dándole mimos a su alfa. —A veces ustedes me hacen sentir solo... —habló en voz alta, dándose un golpe mental cuando se dio cuenta de lo que había dicho.

—Eso se puede solucionar, yo puedo estar a tu lado por siempre, mi Yeosangel... —Hwa se acercó al pelirosa dejando un dulce beso en la pálida y suave mejilla, pero Yeosang se alejo en el instante.

—N-no me beses... —el hada giro su sonrojado rostro, mientras escuchaba las risitas de Seonghwa. — ¿De qué te ríes? —

—De lo lindo que se ve cuando con su rostro esta sonrojado, me gusta mucho... —

—Ya te dije, no me gustan los lobos. —

—No importa... mi corazón le pertenece. —el pecho de Hwa dolió un poquito cuando Yeosang ignoró sus palabras y lo dejó para ir hacia donde estaba Wooyoung.

¿Había dicho algo malo?

¿Por qué Yeosang lo ignoraba de esa manera?

¿Y si mejor renunciaba y dejaba al hada en paz? —Aquellos pensamientos invadían la cabeza de Seonghwa.

Moonbyul solo veía lo que sucedían con aquellas dos parejas, se sentía fuera de lugar, así que decidió ir a buscar a su bella esposa. 

—Ya estamos aquí... —San junto a Wooyoung entraron a la heladería de Yunho, Seonghwa les había llamado para que llegaran al lugar. —Hwa me llamó e interrumpió mi tiempo de mimos... —el alfa puchereo.

—Hyungie no sea llorón, más tarde le daré sus mimos, ahora estamos aquí, además quería ver a Yunnie hyung... —

—Hoy celebraremos dos cosas... —Jongho apareció frente a la pareja.

— ¿Cuales, Jongho Hyung? —Woo pregunto con curiosidad.

—El primero es por su boda. —Yeosang habló.

—El segundo es porque mi osito y yo ¡estamos esperando un cachorrito! —La voz Yunho se escuchaba feliz.

Hubo un gran silencio en el lugar, Yeosang, Seonghwa al igual que San y Wooyoung estaban sorprendidos, escuchar aquello los tomó por sorpresa.

—Osito ¿dije algo malo? —el omega peliceleste hizo un puchero al no escuchar la respuesta de sus amigos.

—No dijiste nada malo mi amor, solo que estas personas son muy lentas para procesar todo... —Jongho se sentó junto a su omega y beso la mejilla de este.

— ¡Felicidades a los dos! —el pelimorado fue el primer en reaccionar y corrió hacia donde se encontraba sentado el omega alto.

—No perdiste nada de tiempo, Jongho... —San dio palmaditas en la espalda del castaño.

—Cállate, San, mejor felicítame. —Jongho abrió sus brazos esperando el abrazo de San.

— ¿Tengo que abrazarte? —Jongho asintió. —Felicidades... —San se acerco y abrazo al alfa castaño.

—Ahorita que estamos así, me di cuenta que es la primera vez que nos abrazamos... —Jongho hablo con voz burlona.

— Se siente raro, ya que siempre estamos discutiendo, pero hoy es un día especial así que no importa... —San se separo del abrazo.

—Mirá pastelito, nuestros alfas ya se llevan mejor, por primera vez no discuten por cosas tontas... —Yunho y Wooyoung veían a sus alfas.

— ¿Yunnie hyung p-puedo tocar su pancita? —Woo pregunto con ojitos brillosos e ilusionados, sus deditos picaban por tocar la pancita de su hyung.

—Claro que si pastelito. —Yunho se levantó, tomó las manitos de Wooyoung llevándolas al pequeño vientre. —Tengo un mes y medio de embarazo. —

—Aun está muy pequeñito. —Wooyoung acariciaba el vientre, dejando besitos en la pancita de su hyung, Yunho sonrió al ver la tierna escena. —Hola pequeño, soy tu tío Woonie, aun no te conozco pero ya te quiero mucho... —El ojiazul se alejó dando una última caricia y fue de nuevo hacia donde estaba su alfa.

—Woonie ¿te duele la pancita? — San pregunto con curiosidad al ver que su omega acariciaba su vientre.

—Uh... no, solo me imaginé como sería tener un cachorrito en mi pancita. Cuando tengamos uno ¿usted me mimara mucho, verdad? —

—Claro que si, cuando el momento llegue te mimare mucho a tí y a nuestro cachorrito... —los dos juntaron sus narices dándose un beso esquimal.

Pero un grito asustó a todos, sacándolos del cálido ambiente. — ¡Choi Jongho, no te comas el helado! Ya me debes mucho. —

—Pero hyung, se lo voy a pagar. —el alfa castaño puchereo.

—La última vez dijiste lo mismo, al final me pagaste con tu cuerpo y ahora seremos padres... —

—Fue un buen pago. —el alfa castaño respondió orgulloso.

—Eres un osito pervertido, pero así te amo. —los dos se abrazaron y olvidaron el porqué estaban discutiendo.

— ¿Que se siente tener un pequeñito dentro tuyo? —la pregunta de Yeosang llamó la atención de todos.

—Es muy lindo sentir como crece dentro de mí, eso solo me hace estar ansioso por conocerlo o conocerla. —Yunho respondió dejando caricias en su diminuto vientre. —Cuando tengas hijos lo comprenderás. —

—Yeosangel tengamos un cachorrito... —

—Pequeño mocoso, primero termina tus estudios y ten un trabajo, luego piensas en cachorritos. —Jongho interrumpió a Hwa.

—Osito, deja de regañar a Seonghwa. —el peliceleste golpeo el hombro de Jongho.

—Lo sé, Jongho Hyung... eso será en un futuro, solo imaginaba lo lindos que serian mis hijos con Yeo hyung... —Los ojos de Hwa brillaban con ilusión, giro buscando al hada y le sonrió, este solo desvío la mirada.

—Niño no digas tonterías... recuerda que son un hada, no puedo tener hijos, mejor consigue un omega y de feliz con él o ella... —El corazón del hada dolió al decir aquello ¿por qué dolía tanto? pero lo que más lo hizo sentir triste fue ver los ojitos y rostro desilusionados de Seonghwa.

¿Había sido muy duro al decir aquello? Pero era la verdad, él no podía tener hijos, Yeosang vio de nuevo al rubio, este comía helado y su rostro se veía serio y triste.

Y Hwa pensaba que era mejor ya no molestar al hada, ya no quería que su corazón doliera, cada palabra que decía Yeosang era como una puñalada.

San se dio cuenta de la fuerte tensión que habían entre sus dos menores y decido cambiar el tema. —Uh... ayer Woonie y yo fuimos a recoger nuestros trajes... —

—Espero que hagas feliz a Wooyoung, si no, yo mismo te golpeare... —

—Jongho, no te preocupes por eso, hare muy feliz a mi Woonie. —

—Pero si ya soy feliz a su lado, hyungie. —Wooyoung beso la mejilla de San.

—Ustedes son muy lindos. Estoy feliz por ustedes, Jongho abrazame, estos dos me hacen sentir solito... —a los segundos el peliceleste estaba envuelto en los cálidos brazos de su alfa.

Los seis siguieron platicando sobre la boda y el bebé, olvidando el asunto anterior, aunque Yeo y Hwa aun sentían que sus pechos dolían, sin saber el porqué.

[ 🐻💙 ]

Un alfa y un omega se encontraban en el gran sofá de la sala, el aroma a manzana y canela estaba mezclado con el de frambuesa, para ellos eso era relajante.

—Jongho, me haces cosquillas, cubre mi pancita, tengo frio... —El alfa tenía la cabeza recostada en las piernas de su omega, mientras dejaba pequeños y dulces besos en el vientre de este.

—Estoy hablando con mi hijo... —desde que Jongho se enteró de que sería padre, todas las noches le hablaba a su hijo, Yunho sonreía con ternura al ver lo lindo que se veía su alfa cuando le hablaba a su vientre.

—Pero aun está muy pequeñito... —Yunho dio pequeñas risitas cuando Jongho volvió a dejar besos en su vientre.

—Lo sé, pero quiero que reconozca, estoy pensando en cantarle ¿le gustara mi voz? —Jongho bajo el sweeter amarillo, pero aun se quedo acostado abrazando la cintura de su novio.

—Claro que le gustará, tu voz parece la de un ángel... —las manos del mayor acariciaban las hebras castañas de su alfa.

—Yunho hyung, gracias por hacerme feliz, también por este precioso regalo, nuestro cachorrito. —

—Gracias a ti por estar conmigo, sabes que te amo demasiado, eres mi pequeño y lindo osito. —

—No soy pequeño... —

—Si lo eres... —

— ¿Recuerdas nuestro primer beso? —

—Claro que si, aunque fue un poco vergonzoso. —

—Te subiste a una piedra para poder besarme. —Yunho empezó a reír y Jongho frunció su ceño.

—No se burle de mi... —puchereo.

—No te enojes, —tomo entre sus manos las mejillas gorditas de su alfa y las apretó, para luego dejar un dulce beso. —Te amo mucho, osito. —

—Yo te amo más, mi hermoso chico frambuesa. —

—Ahora que tu enojo paso, tráeme la barra de chocolate que deje en la cocina. Ve y consiénteme. —

—Está bien, pero cuando regrese prepárate, le cantare una canción a nuestro bebe. —

—Claro, pero ahora tráeme mi chocolate. —

Jongho se levanto con pereza para ir en busca del chocolate, este reposaba en la mesa, a lo lejos vio a su Yunho y sonrió, era muy afortunado de tenerlo, fue una buena decisión cuando le hizo caso a su corazón y empezó a perseguir a ese hermoso omega de cabello celeste; porque ahora estaba ahí, junto a él, alegrando su vida, sacándole sonrisas y llenándolo de amor, juro que lo protegería de todo y más ahora que tendrían un cachorrito.

Yunho era su omega, el amor de su vida y le daba gracias a la luna por ponerlo en su camino, antes pensaba que el amor no era para él, pero todo cambio cuando apareció su Yunnie con su relajante amor a frambuesa y su preciosa sonrisa, esa la cual él se encargaría que no desapareciera, porque quería verlo sonreír por siempre.

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Hola mis amores, estoy de regreso!!! tiempo sin leernos, lxs extrañe muchoooo...🤧🦋❤✨

Aquí les dejo un nuevo capitulo, espero se encuentren bien, Hope lxs ama demasiado...❤🌈✨

Gracias por leer❤
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