Mingi entró cerrando la puerta de entrada con total cautela a su casa y con Jongho en brazos y su mochila colgada, el niño seguía durmiendo plácidamente siendo las ocho de la tarde, y Mingi rogaba al cielo para que su madre tuviera turno nocturno para no encontrarse con ella y hablar sobre la fotografía que la bestia les había tomado en aquella cafetería.

Pero claro, su suerte duró un par de pasos luego de quitarse los zapatos y llegar al living comedor, su madre estaba sentada viendo televisión y con su padre al lado, ambos en pijama y viendo las noticias en silencio, pero claro, ambos al sentir la gigante figura de su hijo mayor, giraron hacia él como si estuviesen endemoniados.

Sintió la tranquila mirada de su padre sobre él, un señor de 45 años que era contador, dos centímetros más bajo que él y con el pelo bastante canoso. En si, Jongho era una fotocopia de su padre cuando niño, la misma nariz de botón, los ojitos grandes y la sonrisa de conejo, Jongho había salido a su padre, cuando él a su madre, que en este mismo momento le miraba con una ceja alzada sin si quiera haberlo saludado, y una expresión de tenemos que hablar que le hizo tragar saliva. Con su mano libre y que no sostenía a la bestia, la sacudió en saludo y con una sonrisa nerviosa apuntó escaleras arriba y luego a Jongho, indicándoles que iría a acostar a su hermanito hasta que despertara para la cena.

Recibiendo un asentimiento de parte de ambos, reafirmó el agarre en su hermanito y subió con dificultad las escaleras de su casa, exhalando aire cuando se vio lejos de la acusatoria mirada de su progenitora y con el cuidado de que Jongho no se golpease con el barandal de la escalera. Entró a la habitación color celeste bebé de Jongho, la cual estaba llena de superhéroes y dibujos hechos por él mismo, al igual que peluches de frutas  un montón de pequeños zapatitos regados por el suelo. Mingi suspiró, dejando caer la mochila al suelo junto con la lonchera para luego dejar al niño somnoliento sobre la cama, Jongho se quedó sentado, con los ojos cerrados en la orilla de su cama, y Mingi, con una pequeña sonrisa al ver lo tierno que se veía Jongho, le quitó la parka y el sweater del pequeño cuerpecito, antes de abrir la sábanas de barquito y volver a sujetar a Jongho quien se dejó hacer como masita, para ser recostado y arropado por el pelinaranja.

"Eres una bestia, ¿no?", dijo Mingi, luego de que Jongho se acomodara para dormir plácidamente apretando la almohada donde apoyó su cabeza, y Mingi volvió a reír con ternura, "Quién diría que gracias a ti conocí a mi futuro novio", negó con la cabeza y con una de sus manos, acarició los suaves cabellos de su hermanito, "Supongo que te debo una grande, bestia"

"Y supongo que yo necesito una explicación para la foto de esta tarde, ¿no?", Mingi se congeló en su sitio, con los dedos enredados en el cabello de Jongho y sintiendo la voz de su bajita madre detrás suyo como un balde de agua fria, "¿Qué significa eso de... tu futuro novio?", volvió a decir la mujer, y Mingi tragó saliva antes de darse vuelta y alzar un poco la vista hacia su madre.

"Emm...", Mingi enmudeció, pestañeando con ojos de cachorro a su mamá, no se veía enojada, se veía tranquila y hasta algo confundida según Mingi, los ojos pequeños le recorrían el rostro y el cuerpo con una de esas perfiladas cejas arqueadas. Pero si se trataba de su madre nunca se sabía qué estaba pensando o sintiendo, ahora mismo parecía confundida pero quién sabía si estaba furiosa y a punto de tirarle todos los zapatitos de Jongho a la cara, "Yo... puedo explicartelo"

Mingi se levantó, extendiendo ambas manos dando a entender que mantuviese la calma mientras una mueca adornaba su rostro, pero su madre le siguió mirando sin decirle nada y con los brazos cruzados. Y el menor se sintió temblar cuando su madre sacó el teléfono de su bolsillo trasero y lo desbloqueó, enseguida notando que en la pantalla estaba la imagen que había sacado Jongho.

Se quedaron en silencio un par de segundos, Mingi mordisqueándose el labio mientras miraba a la mujer frente suyo observar la imagen, claramente se notaba que era él por su cabello, y lastimosamente se podía ver la mayor parte del rostro de Yunho por estar ladeado, el cabello castaño y las mejillas rojas del mayor mientras sus labios estaban unidos y ambos apres de ojos cerrados. Mingi no pudo evitar sonreír aún mordiéndose el labio por la imagen, sin duda a pondría de fondo de pantalla tan pronto como saliese vivo de esta situación.

"Es Yunho, ¿cierto?", Mingi palideció ante la mención del nombre de su chico, ¿cómo carajos su madre sabía quién era Yunho? en este momento quería ocultarse bajo las mantas con Jongho y no mirarle la cara a su mamá por toda una semana. Y al parecer ella notó su pánico ya que soltó una risa calmada que dejó a la vista sus dientes, "Mingi-ah, conozco a Yunho desde que Jongho va al jardín..."

"Oh", Mingi ahora se ruborizó en tres segundos, volviendo a sacar otra risa a su madre y logrando que se tapara el rostro de la vergüenza. Era obvio que su madre conocería a Yunho, si ella llevaba meses yendo al jardín a dejar y a buscar a su hermano.

Volvieron a quedar en silencio, Mingi sin destapar su rostro y sintiéndose como si hubiese cometido una travesura cuando niño, y su madre mirándole con una sonrisa burlesca, "Anda, dime, ¿cómo es eso de que Yunho será mi futuro yerno?", Mingi ignoró a su madre y la esquivó hasta parar a la ventana de la habitación de Jongho, abriendola rápidamente para apoyar sus manos en el dintel y aspirar el frio aire de la noche, pero se quejó al  sentir un codazo de la mujer tan pronto como llegó a su costado, "Dime, dime", volvió a repetir curiosa.

Mingi la miró avergonzada, y soltó un pequeño bufido antes de hacer una sonrisita pequeña y apoyar su mano contra su mejilla.

"Yunho me gusta, mamá, me gusta muchísimo"

La señora Song le miró con enojo, "ya me di cuenta de eso, bobo"

"Yunho es la razón por la que te pedi ir a dejar a Jongho"

Su madre abrió los ojos y la boca sorprendida e indignada, para luego elevar ambas manos y comenzar a golpear torpemente el brazo de su hijo.

"¡¿Cómo que fue por Yunho?!", chilló bajito para no despertar a Jongho, y Mingi le miró con disculpa, su madre volvió a golpearle, "¡Yo pensé que fue por mi!"

Recibió un golpe en la nuca que le hizo quejarse, pero de allí su madre paró y se cruzó de brazos mirándole con los ojos entrecerrados.

"Anda, prosigue"

Mingi frunció el ceño extrañado, su mamá era muy metiche cuando quería.

"Me gustó desde la primera vez que lo vi... y Jongho me hacía de intermediario a veces, me contaba que Yunho le preguntaba por mi y cosas así", Mingi miró a su hermanito pequeño, sonriendo con ternura al verlo, "Una vez pensaron que era su novio, y hoy lo invité a salir porque... porque si"

Se encogió de hombros, omitiendole a su madre que nuevamente, fue por Jongho y su terquedad de niñito pequeño.

"Y pues, pasó, no sé, no pude resistirme y lo besé", Mingi se dio la vuelta, mirando hacia la puerta y apoyando sus  codos en la ventana, "Y me gustó muchisimo, no sabes cuanto", bajó su mirada al suelo, con una sonrisa suave al recordar lo que pasó hace tres horas, "Yunho me gusta muchisimo, mamá, y yo también le gusto... por eso quiero que sea mi novio"

"Pero... ¿estás seguro, Mingi? Hace apenas dos meses que comenzaste a dejar a Jongho, creo", escuchó a su lado.

Pensó un poquito, mirando sus zapatos y mordiéndose la mejilla interna.

"Estoy seguro", soltó luego de unos instantes, "Yunho me hace sentir... muchas cosas, su sonrisa es una de las más bonitas que he visto y él me genera la necesidad de besarlo y tenerlo conmigo."

Sonrió enamoradizo, antes de escuchar una pequeña risita de su progenitora y alzar la cabeza hacia ella.

Su madre le miraba con gracia, tapándose la boca mientras se reía bajito y burlonamente. Mingi soltó un pequeño gruñido ante eso y arrugó la frente, ¿su mamá le estaba tomando el pelo?

"¡Yah!", exclamó, y se fue de la habitación dejando a su madre carcajeandose por su enamorado hijo.

"Vale, bien, ¿Qué rayos te sucede, Song Mingi?", Mingi se sobresaltó cuando Seonghwa, su mejor amigo de la secundaria, dejó caer su bandeja de comida frente a él, y el pequeño Hongjoong confundido siguiendoles detrás.

El pelinaranja dejó su teléfono a un lado y enarcó una ceja, confundido, "¿Qué me pasa con qué?"

Seonghwa giró los ojos hastiado y se dedicó a comer las papas fritas que tenía en frente. Su mejor amigo era así, un impaciente de mal carácter que estudiaba medicina, mientras que el dulce Hongjoong estudiaba diseño de modas y ahora mismo miraba con una carita de preocupación completamente atento a Mingi.

"Estás raro, Mingi-ah", murmuró Hongjoong, acercándose más a él, y Mingi pestañeó, "Estás mucho más pendiente del teléfono que de nosotros y ya ni pasas tiempo junto a mi durante los descansos", Hongjoong puchereó, visiblemente triste y con ojos de cachorro que a Mingi le dio algo de pena.

"Lo siento, Joongie hyung, no me había dado cuenta de eso...", Mingi iba a añadir algo más, pero el timbre de su teléfono le interrumpió, por lo que dejó de prestarle atención al peliblanco para responder el nuevo mensaje que Yunho le había mandado.

Pero antes de si quiera abrir el teclado, su teléfono se le fue arrebatado de las manos por el pelinegro, quien curioso se levantó de un salto para revisar el chat de Mingi con Yunho.

"Uy Mingi, ¿Quién es "Yunyun hyung" y por qué lo tienes con corazoncitos?", preguntó burlón, y Mingi se levantó y estiró para intentar alcanzar su teléfono, pero Seonghwa retrocedió y extendió su mano hacia atrás, mientras giraba su cabeza para seguir leyendo, "¡Estás saliendo con un chico!¡Hongjoong mira esto!"

"¡Seonghwa dame eso!", Mingi gritó, llamando la atención de los demás e intentó abalanzarse sobre el pelinegro, pero este le detuvo con su brazo mientras extendía el teléfono hacia un extrañado Hongjoong.

Hongjoong tomó el teléfono entre sus manos, percatándose enseguida de que el fondo del chat era una foto de Mingi besándose con un chico, y como los mensajes del tal "Yunyun hyung" eran muy cariñosos y llenos de corazones, ¿Mingi estaba saliendo con un chico?¿Por qué no les había dicho nada?

Hongjoong se asustó al sentir las manos de Mingi tomar su teléfono y volverse a sentar con una mueca de molestia.

"Son unos idiotas", murmuró, guardando su teléfono no sin antes contestarle a Yunho.

"¿Cuando nos ibas a decir que estabas saliendo con un chico?", preguntó Seonghwa, juguetón, "Ahora entiendo por qué estas tan raro, ese tal "Yunyun" te trae loco, ¿no es así?"

Mingi miró a Seonghwa con el ceño fruncido, antes de relajar sus músculos y asentir con una sutil sonrisa.

"Pues si... estoy coladisimo por él, creo que nunca antes había sentido algo así por alguien"

Y luego de decir aquello, sintió a su pequeño amigo Hongjoong temblar, antes de que este se parase con el rostro tan pálido como su cabello y con los ojos cristalizados. Ambos amigos le miraron extrañados, y Hongjoong solo pudo tragar saliva y cerrar los ojos acuosos mientras apretaba los puños.

"Creo que... me siento algo mal, voy al baño", soltó bajito, y se esfumó casi corriendo del casino, dejando su bolso y su bandeja de comida junto con los confundidos pelinegro y pelinaranja.

Mingi miró a Seonghwa, sin entender demasiado, y se confundió aún más al ver como este parecía darse cuenta de algo, ya que sus ojos se bañaron en arrepentimiento y se mordió el labio mientras no dejaba de mirar la puerta por donde se fue Hongjoong.

"¿Qué fue eso?", preguntó Mingi, y Seonghwa se giró a verle con las cejas fruncidas en preocupación.

Seonghwa no le respondió hasta luego de unos instantes.

"A Hongjoong... en la mañana le dolía el estómago", dijo, sin mucha seguridad y esquivando los ojos de Mingi, "Supongo que por eso se sintió mal y se fue"

hwalight | 2000609