— Hola un gusto mi nombre es Park Jimin — hizo una reverencia — Espero no incomodarte.

Me percaté que Tae Hyung se veía muy preocupado así que para tranquilizarlo solo asentí y me retiré del lugar.

— Pensé que se alteraría... Estoy aliviado.

— ¿Por qué lo dices? — preguntó curioso Ji Min.

— Bueno es que esta mañana Nam Joon vino a visitarlo pero Tae Yang se alteró tanto que se desmayó. Al final Nam Joon se tuvo que ir para no incomodarlo y me dijo que mañana vendría... Solo espero que mañana las cosas se calmen — suspiró para después cruzar sus brazos.

— Vaya no puedo creer lo que me estas diciendo pero hay algo que me tiene pensativo... ¿Por qué crees que él haya reaccionado así? ¿No debería reaccionar también así conmigo? — dijo mientras apoyaba sus codos en la mesa poniendo su rostro en sus dos manos.

— Ahora que lo dices tienes razón... ¿Crees que haya pasado algo entre ellos dos antes de que hyung tuviera ese accidente? — ladeó su cabeza en confusión.

— Puede que sea cierto pero no hay que sacar conclusiones sin tener pruebas. Será mejor que se lo preguntes directamente a Nam Joon — dijo Jimin parándose derecho.

— Tienes razón mañana espero poder preguntarle — habló Tae Hyung para ir a su habitación junto con Ji Min llevando los sándwichs para ir a ver una película.

Pov. Seok Jin

Al llegar a la habitación tomé asiento en la cama para tomar el agua y pensar después en lo que haría si volvería a ver a Nam Joon.

"¿Cómo es que ellos eran mejores amigos? Nam Joon jamás me contó que conocía a Tae Yang... Bueno si me dijo una vez que tenía un amigo que había conocido cuando era pequeño pero, ¿ahora como hago para evitarlo? Aparte que jamás me dijo el nombre y todo por ser un desinteresado."

Me acerqué nuevamente al escritorio para leer la carta que dio la señora Kim, saque el álbum por fin teniendo la carta en mi manos. Abrí con cuidado viendo una hoja y una foto. Me dio más curiosidad al ver que era la misma chica que Tae Yang estaba agarrando de la mano ahora en esta foto estaban besándose. Sin más empecé a leer la carta.

Tae Yang espero no me odies por eso, no quiero que pienses que te abandoné por qué siempre te amaré desde antes y desde siempre en la actualidad. Te dejé esta carta para que no malinterpretaras las cosas, me fui del país siguiendo con mis estudios para cumplir mis sueños de ser una doctora profesional y ser reconocida. Te prometo en cuanto volveré seguiré a tu lado. Se que cuando despiertes estarás bien, tienes a tu familia y amigos apoyándote así que estaré más tranquila saber que no estarás solo, tú estarás siempre en mi corazón jamás te olvidaré y eso ten lo por seguro, sé que también lo estaré en tu corazón. Volveré lo más pronto posible así que espera por mi.

Te amo, y te amaré siempre Hana.

Al terminar de leer me dejó inquieto mirando la fotografía para guardarla y esconderla en uno de los cajones, tome asiento a la cama mirando en un punto fijo de la habitación por unos minutos.

— Así que tienes novia Tae Yang — musité — Creo que no debería preocuparme todavía... Ella está en el extranjero. No es algo que deba pensar en estos momentos — tome un largo suspiro echándome en la cama sin darme cuenta que había caído profundamente dormido.

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— Hyu- hyung hyung hyung-hyung hyung despierta — decía una voz.

— ¿Uh? ¿Qué pasa Tae? — dije mientras bostezaba.

— Bueno es que nuestros padres y Tae Yong están abajo, están esperando para cenar — murmuró — Si no quieres bajar... les diré.

— ¿Y Jimin? — pregunté frotando mis ojos.

— Se fue hace una hora — respondió.

— Entiendo. Bueno esta bien... Bajaré no quiero que se preocupen — declaré un poco cansado.

Bajamos juntos hasta el comedor, ahí vi a los señores Kim al igual que a Tae Yong que me miraron felices al notar mi presencia, invitándome a que me sentara y sin más empezamos a cenar.

— ¿Hijo como te encuentras? — preguntó la señora Eunjin.

— Bien madre no hay de qué preocuparse — hablé mientras comía otro bocado de mi comida.

— ¿Seguro?... Porque Tae Hyung nos contó que te desmayaste esta mañana — declaró el señor Jungsu.

Observé que Tae Hyung miraba hacia otro evitando verme a los ojos, a lo que suspiré para mirar nuevamente al señor Kim.

— Solo me sentía cansado no se preocupen yo estoy bien — declaré mirando hacia abajo.

— Hijo no te lo tienes que guardar, nosotros en verdad nos preocupamos por ti y no queremos que te sientas incómodo — dijo la señora Eunjin preocupada tocando levemente mi hombro.

— Lo sé yo te avisaré cualquier problema que tenga — dije dada por terminada la conversación.

— Lo importante es que estés bien Tae Yang — comentó Tae Yong — Por cierto a la empresa le va bien y tenemos una reunión importante mañana para cerrar un contrato.

— Me alegra que te está yendo bien hijo. Desde muy joven construiste tu propia empresa. Estoy orgulloso — habló el señor Kim — ¿Y Tae Hyung ya descubriste lo que te gusta? Sabes que nadie sabrá de tu identidad hasta que hagas algo decente.

Miré a Taehyung que estaba inquieto e incómodo mirando hacia abajo.

— Aún no lo sé — musitó.

— Pues ya deberías estar buscando porque no quiero que mi hijo sea un bueno para nada.

— Si padre.

— Eso espero, ya deberías estar pensando.

— Sea lo que haga Taehyung... Yo lo apoyaré — comenté.

— Ojala Taehyung elija algo que pueda salir adelante — sonrió Tae Yong.

— Por cierto hijo, ¿continuarás con tu carrera de ser chef? — habló el señor Kim.

— Si — contesté viendo que el señor Kim asentía — Pero terminaré con algunos asuntos pendientes.

Todos continuaron comiendo y realmente se notaba lo muy incómodo que estaba y al parecer todos se dieron cuenta de eso, por tal razón que al terminar de cenar cada uno se dirigió a sus respectivas habitaciones sin decir alguna palabra.

Al estar en la habitación tocaron mi puerta como si tuviera miedo, no tenía por qué saber quien era ya que sabía perfectamente que era Tae Hyung.

— Pasa — dije mirando hacia la puerta.

Ahí estaba Tae Hyung entrando con la cabeza baja.

— Hyung yo... Lo siento... no debí decirle a mis padres, se qué estas molesto conmigo por favor perdóname — dijo con la voz temblorosa.

— Hey tranquilo estoy bien — interrumpí acercándome hacia él — Se que lo dijiste porque estabas preocupado y tenías el derecho de decírselo a nuestros padres y no quiero que pienses que estoy molesto — él levantó la cabeza para abalanzarse en mi cuerpo dándome un fuerte abrazo que me sorprendió mucho.

— Hyung gracias... — dijo separándose de mi — Oh bu-bueno yo me iré a descansar... de seguro estás muy cansado — se reincorporó para dirigirse a la puerta.

— Descansa bien Tae Hyung — exclamé sonriente a lo que él asintió y cerró la puerta.

Taehyung salió de la habitación y me quedé nuevamente solo, suspiré y me acerqué a la ventana para sentarme y miré la luna que estaba muy radiante. Sin querer me golpeé en un estante mi codo quejándome del dolor pero también cayó una cuadro pequeño, mire el cuadro y en esta estaba Namjoon sonriente junto a Tae Yang y suspiró. Lo puse en su lugar y me eché en la cama para dormir.

(...)

Al día siguiente me levanté para asearme y luego bajar al comedor para desayunar, el señor Kim Jungsu y Tae Yong estaban bien presentables supongo que tenía una reunión importante en la empresa así que ellos fueron los primeros en irse mientras que la señora Kim Eunjin dijo que iría a la casa de su hermana a visitarla. Quedándonos solos los dos pero después de un rato Tae Hyung me dijo que iría a la casa de Jimin para estudiar el examen que tenía en su preparatoria. Así que me quedé completamente solo en casa por casi una hora y media sin embargo escuché la puerta que sin dudarlo una de las empleadas se dirigió para abrirla.

— Hol-.

— ¿Qué haces aquí? Lárgate no quiero verte — lo corté expresando mi molestia con puños en mi manos mientras mi corazón latía de la desesperación pero tuve que mantener la calma.

— ¿Que te pasa Tae Yang? Entiendo que no me recuerdes pero no entiendo porque me odias, yo no te hice nada — exclamó Nam Joon confundido por mi reacción.

— ¡¡¡Te dije que te vayas!!! ¡¡¡Lárgate!!! — intenté cerrar la puerta pero me fue imposible así que solo lo ignoré y caminé a las escaleras para encerrarme en la habitación pero Nam Joon me tomó del brazo.

— Pues no lo haré — se acercó con pasos firmes para luego empujarme al sofá.

- ¡¿Que te pa...?! - me callé al ver como se inclinaba hacia mi mirando sus ojos haciendo que mi cuerpo se estremeciera.

- No permitiré que me sigas evitando y no pienso dejarte solo en esto.

“Mi pesadilla continuará", pensé.

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CONTINUARÁ...