33.
Tres semanas habían pasado desde la última conversación que tuve con Jungkook y él no había vuelto a insistir.
Así era mejor, quería estar tranquila y disfrutar de mi hermano, lo había extrañado muchísimo y no podría soportar volver a alejarme de él. Ha sido mi cable a tierra, el motivo por el cual no he mandado todo a la mierda y aún sigo acá.
Mentiría si dijera que no he vuelto a llorar. Mis almohadas son testigo de cada lágrima que he derramado por ese idiota, llorando en total silencio.
Quería que este dolor desapareciera, quería que mi pecho y corazón deje de doler. Quiero que cada vez que nombran a Jungkook en la televisión, dejar de mirar de forma automática y encontrarme con algo que mi corazón quede más hecho añicos... como por ejemplo, la noticia de la primera ecografia de su bebé.
Si, cuando fue eso, salió en todos los noticieros de farándula y ahí llegaba Hyemin y apagaba el televisor, para después darme una leve palmada en la espalda y decirme "esto no te hace bien, cariño" y lo sabía, sabía que me hacía daño gratuitamente, pero era inevitable.
Él se estaba haciendo responsable, y eso es bueno. Fue una de las cosas que le pedí y me alegra que pueda cumplir.
Siento que es muy pronto para dejar ir a Jungkook... no puedes soltar algo tan fácilmente cuando te hizo feliz y cuando estabas completamente enamorada de esa persona, es duro, es complejo, es difícil.
—Nana... — escuché la voz de mi hermano, lo cual me hizo salir de mi pequeño trance.
—¿Si?
—Estoy preocupado por Jungkook... — dijo mordiendo su labio con nerviosismo. Fruncí mi ceño, confundida.
—¿Por qué? ¿Le pasó algo? — pregunté con una preocupación notoria, más de la que yo quería demostrar.
—Es que... no sé como decirlo — agachó la mirada — me siento muy culpable, ¿sabes?
—Enano, me estás asustando...
—Yo escuché una conversación que tuvo la novia de Jungkook — comenzó a decir, jugando con sus dedos — y... verás...
—Seung, puedes decirme lo que quieras, lo sabes, ¿verdad? Puedes confiar en mí.
—Lo sé nana, pero ya ha pasado tiempo y me siento muy mal...
—¿Tan grave es? — pregunté agachandome a su altura, ya preocupada total. El asintió, bajando su mirada nuevamente. — dime, por favor. Ya estoy preocupada...
—Ella... Ella estaba hablando con un hombre. Le decía cosas como "tú no dirás nada, si te atreves a decir algo le diré a mi papá que te haga desaparecer" y yo me quedé escuchando, sé que no debí hacerlo, tú siempre me has dicho que espiar a la gente es malo, pero fue inevitable...
—Entiendo... ¿Qué mas escuchaste? — ya estaba intrigada.
—Pues, al parecer la otra persona le dijo algo que no le gustó y ella se enojó, le dijo "no quiero volver a verte, este niño tendrá de papá a Jeon Jungkook, no un bueno para nada"...
—¿Qué? — abrí la boca para decir algo más, estaba en shock total — tú, tú... osea...
—Quería decirle a Jungkook nana — vi como sus ojos se cristalizaron — pero ella se dio cuenta que la estuve observando y me amenazó...
—¿Que ella qué? — pregunté indignada de que esa tipa se atreviera a decirle algo negativo a mi hermano —Mira Seung, esto es grave. Ella no puede ocultar una cosa así y menos amenazar a un niño, si hubiera sabido esto le hubiera dicho miles de cosas más cuando tuve la oportunidad — si antes estaba en shock, ahora estoy enojada, furiosa. Tenía ganas de ir y pegarle un puñetazo, pero no podía, estaba embarazada.
—Me dijo que si hablaba, nadie me creería y que haría hasta lo imposible porque yo no siguiera viviendo ahí, ya que nadie quiere a niños mentirosos y malcriados. Jungkook ahora ya no va a querer verme nunca más, porque soy alguien mentiroso... — terminó de decir para echarse a llorar. Lo abracé de inmediato.
—Ey, no. Tú no eres ningún mentiroso, tenías miedo, porque yo no estaba ahí, ¿sí? Jungkook jamás podría enojarse contigo, lo conozco, he podido ver y presenciar el cariño que tiene hacia ti, pero haremos lo correcto, ¿bien? — pregunté secandole sus mejillas. Me sentía tan culpable, si yo lo hubiera buscado apenas desperté, él no tendría esta culpa, no estaría así. — deberás decirle a Jungkook la verdad porque merece saberlo. Yo estaré a tu lado en todo momento...
Esa estúpida en algún momento me las pagaría. Amenazó a mi hermano y ha jugado con todos, en especial con Jeon.
—Tengo miedo de que él no quiera volver a hablar conmigo...
—No seas tonto — le dije con cariño — no pasará eso...
—¿Cómo estás tan segura? — preguntó mirándome, con sus ojos brillantes y lágrimas en sus largas pestañas.
—Sólo... solo lo estoy — me encogí de hombros — verás que todo se solucionará enano...
—¿Lo debería llamar? — dijo de forma temerosa.
¿Debería hacerlo? No creo que esto algo que se pueda hablar por celular, era algo delicado.
—Creo que tengo una idea mejor — sonreí con malicia.
Sí, haríamos lo correcto, pero a mi manera.
╰─►⸙͎ ➼➼➼✧;
—¿Yongmin? — Taehyung me preguntó algo impactado.
—¿Qué te pasa? Como si hubieras visto un fantasma — dije rodando los ojos.
—No, ósea... no pensé que volverías acá la verdad — se rascó su nuca, medio sonriendo — Jungkook no está, tuvo que salir con... Byeol.
—Oh, bien. ¿Te molesta si espero?
Taehyung me miró como si me hubiera salido un tercer ojo justo en mi frente.
—N-no, no claro que no. Pasa, adelante — abrió la puerta completamente, dejándome pasar.
—Pensé que nunca me invitarías a entrar — le saqué la lengua, mientras me descalzaba. Él río.
—Sólo me sorprendiste, te lo juro que no pensé volver a verte acá, menos con lo que pasó con Jungkook — se encogió de hombros — veo que si existen personas raras...
Le golpee el hombro.
Con Taehyung es con el que me llevaba mejor. Es muy divertido y ha sido un apoyo gigante para Seung y para mí.
Ya no era nada raro que nos comportarámos así. Con total confianza, lo consideraba mi amigo.
—No te pases Taehyung — lo apunté con el dedo — solo necesito hacer una cosa y es perfecto que esté con Byeol — mostré mi dentadura en una real sonrisa. Me divertirá esto, es seguro.
—Okey, ¿debería preocuparme? — levantó una ceja. Yo lo miré con mi mejor cara de inocente — estoy completamente seguro que a la última persona que quieres ver, es a Byeol. Ya habla, suéltalo, ¿que pasó?
—No te diré nada y menos porque me trataste de rara.
—¿Quieres que mienta? ¡Lo eres! — río fuerte.
Lo miré con cara de pocos amigos.
—Eres malvado...
Soltó una carcajada, para luego abrazarme. Le correspondí el abrazo, era agradable estar con él y me hacía olvidarme un poco de las cosas, de la cotidianidad.
Nos separamos al sentir un carraspeo.
—No quería interrumpir... — escuché a Jungkook decir mientras enarcaba una ceja, con su mirada penetrante puesta en nosotros y a su lado Byeol, con una sonrisa divertida observando la escena. Tae se corrió a un lado, rascando su nuca.
—No te sentí llegar, hermano...
—Veo que no, estabas algo ocupado — miró a Taehyung, mientras pasaba su lengua por su mejilla interna, para después posar su vista en mí.
No iba a dejar que me colocara nerviosa, no le daría el gusto.
—Bueno,Taehyung, nos arruinaron el momento. Será mejor que me vaya...
—¿Cómo? ¿No venías a hablar con Jungkook?
—¿Conmigo? — preguntó luciendo algo sorprendido.
—Oh no, gracias por acordarme Tae. No venía a hablar con Jungkook, sino con ella — al decir eso, los tres me miraron confundidos.
—¿Y que se supone que debes hablar conmigo?
—A solas, si es que se puede obviamente...
—Ni loca hablaré a solas contigo — dijo con disgusto. Rodee los ojos, me sacaba de quicio.
—Bueno, si tú quieres que diga esto frente a todos aquí, allá tú — sonreí inocente.
La rubia me analizó de pies a cabeza, y accedió a ir conmigo. Miré a peliplateado y a Jeon, y solo les faltaba el signo de interrogación arriba en sus cabezas, no entendían nada.
Al fijarme que estábamos completamente solas, iba a hablar, pero me interrumpió.
—¿Qué demonios haces aquí? — me fulminó con la mirada — ya no eres bienvenida acá, ¿no lo entiendes?
—Si, si, como tú digas... — suspiré — cuéntame, ¿qué tal todo con el bebé?
—Todo excelente. Creciendo muy bien y Jungkook cada vez más feliz — explicó con placer. Ay, ilusa.
—Claro, pues es el papá, ¿no? Tiene que estar feliz...
—Deja el drama y di que demonios quieres, Yongmin — escupió mirándome mal. Dejando a la vista su verdadera personalidad.
—Uy, veo que te sulfuraste. No hagas eso, Byeol, no es sano para el bebé.
—No estoy para tus juegos, preguntaré una última vez, ¿que demonios haces acá?
—Bueno, supe de algunas cosas, muy feas la verdad — chisté mientras negaba con la cabeza — como por ejemplo, que Jungkook no es el verdadero papá de tu bebé...
La cara de la rubia era todo un poema y el desconcierto era palpable. Por dentro estaba disfrutando tanto de esto.
—E-eso no es cierto... — titubeo.
—Conmigo no debes fingir, cariño...
—Eres una maldita, ¿crees que Jungkook te creerá algo a ti? Solo estás celosa.
—Entonces lo admites. Vaya, eso fue sencillo — aplaudi, como si estuviera en un espectáculo. Sabía que comenzaría a soltar veneno, reí divertida. —Claro, no me creerá a mí. Por eso, se lo dirás tú...
—¿Qué?
—Como escuchaste, le dirás toda la verdad a Jungkook y dirás la verdad de forma pública, cosa de que la imagen de él quede limpia — la apunté con el dedo.
—¿Y tú eres estúpida? Jamás haré eso...
—Te estoy dando la opción de se entere por tu boca, Byeol. — dije con seriedad — ¿tú crees que Jungkook no me creería? Tengo a mi hermano de testigo, te escuchó hablar con el papá del bebé.
Pude observar su rostro y estaba apretando sus dientes y también sus puños.
—Ese maldito mocoso, nunca tuvo que estar aquí.
Me acerqué a ella de manera desafiante.
—Se llama Seung, idiota. Vuelve a insultarlo y diré toda la verdad aquí mismo. No me importa lo que pienses de mí, con mi hermano no te metas.
—Tuviste que haber muerto... — levanté mis cejas al escuchar aquello.
—¡Byeol!
Dejé de apretar mis puños al escuchar su voz.
—Amor, yo... ella...
—Será mejor que me vaya — la interrumpí. — y Jungkook... — no hacía falta llamarlo, su vista ya estaba posada en mí — Byeol tiene algo que decirte...
Dije para comenzar a caminar hasta la puerta, ya que estábamos en el jardín.
—¿Estás bien? — Tae se veía preocupado, lo miré dulcemente.
—Si, hice mi buena obra hoy — dije divertida. — apoya a Jungkook, ¿si? Puede que la noticia que le de Byeol sea un balde de agua congelada para él...
—¿Noticia?
—Solo hazlo. Nos estamos viendo taetae — le di un abrazo, para salir de la casa.
Que bien se siente hacer lo correcto.
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