28.
Hoy era nuestro último show en Estados Unidos para terminar nuestro tour mundial en Corea.
Habían sido meses agotadores, con cada espectáculo, tratando que todo salga perfecto para nuestros fanáticos.
Estaba cansado. Física y mentalmente.
No había día que no llamara al hospital para preguntar por el estado de Yongmin, si había mejorado, si había despertado, siempre llevándome una negativa y el amargo sabor en mi boca por tal respuesta.
Doy un largo suspiro mientras me terminan de alistar, viendo a mi lado como Seokjin juega a las luchas con Seung.
Hice lo que te prometí, hermosa.
Luego del accidente, nos anunciaron del nuevo tour. Estaba tan negado a hacerlo, no quería dejar a Yongmin, quería estar con ella en todo momento... pero no pude hacerlo. La enfermera me dijo que no tenía problemas con contestar videollamadas y así podamos verla a través de la pantalla, como también me daban información diaria de ella.
Le pedí a los chicos que debía llevarme a Seung, no podía quedarse solo, pero no hubo ningún problema con eso, los demás miembros aceptaron encantados. Se llevan muy bien todos, y el niño es el más feliz al lado de las personas que él admira mucho.
Si solo estuvieras aquí.
—¡Que guapo te ves, mi vida! — Cerré mis ojos con fuerza al escuchar esa voz.
—Byeol...
—Aquí tienen a las mejores estilistas, ¿por qué no me hacen algo a mí? — preguntó sonriendo abiertamente.
Han Byeol. Modelo reconocida de Corea, hija del primer ministro.
En la compañía no encontraron nada mejor que hacer creer a los fans que nosotros teníamos algo, solo para que dejaran de hablar de mi raro comportamiento y del porque estaba tan deprimido.
¿Qué iban a decir? ¿Que estaba así por que chica que amaba había entrado en un estado de inconsciencia?
Si, eso tuvieron que haber dicho. Pero prefirieron hacer todo lo contrario.
Antes de iniciar la gira, tuvimos una cena con los primeros ministros, y ahí estaba Byeol. Comenzó a hablarnos y sí, es muy simpática y linda, pero no estaba interesado en lo absoluto en ella. Pero esa noche se pegó a mí como si fuera una lapa, tuve que darle una mirada de auxilio a Namjoon para que me salvara, pero no había caso.
No sé quien publicó una foto de nosotros en ese restaurante, con Byeol abrazándome mientras ella reía. Yo en esa portada salía de espaldas donde claramente pedía ayuda a Nam con aquella mujer... pero eso obviamente no salió.
De ahí comenzaron los rumores, y todo explotó.
Portadas en diarios, revistas, en páginas web e incluso habían muchos mas paparazzis queriendo sacar información. Me siguen a todos lados, todo con tal de tener una primicia de mi supuesta "novia".
—Te dije que no me llamaras así, me llamo Jungkook, dime por mi nombre — pedí ya cansado de repetir siempre lo mismo. Vi como la rubia rodaba los ojos.
—Y yo cuántas veces te dije que no me importa lo que tú digas. Para mi eres mi vida y se acabó — dijo mientras miraba las puntas de su largo cabello. Conté hasta diez mentalmente.
—Byeol, por favor, detente. Yo no sé si estás jugando o ya estás hablando en serio, pero esto siempre fue planeado por la compañía en la que estoy, lo tienes más que claro, ¿verdad? — pregunté mirándola fijamente. Sus ojos verdes me analizaron y pude ver como brillaban un poco, y ella al notarlo pestañeo un par de veces, para volver a sonreír.
—Lo sé, Jungkook. Pero tengo fe de que tú te terminarás enamorando de mí. ¿Por qué no puedes verme de la manera en que yo lo hago? — susurró bajo, con tal que no escucharan los demás. Pero mi estilista escuchó perfectamente, pidió retirarse un momento para dejarnos hablar solos. Yo asentí de inmediato.
—Simplemente no puedo. Y es porque ya hay otra persona en mi vida, Byeol. Eres preciosa y sé que cualquier hombre quisiera estar a tu lado...
—Menos tú — espeto. Suspiré cansado.
—Menos yo. Ya tengo a alguien en mi vida y la amo. Date la oportunidad de ser feliz con alguien que realmente te ame...
Vi como sus ojos de cristalizaban, dejando caer una lágrima por su mejilla izquierda que secó rápidamente con el dorso de su mano. Respiró profundo y volvió a sonreír.
—No soy alguien que se rinde tan fácil. Deja demostrarte que soy la chica ideal para ti.
—Yo...
—Nos vemos después del show. Te quiero. Suerte s todos chicos. — me tiró un beso y salió disparada del camerino, dejándome con la palabra en la boca.
Pasé mis manos por mi cabello con frustración y arruinando todo lo que me había hecho Sook, mi estilista.
Vi como los chicos me miraban con compasión, saben por todo lo que he pasado y sufrido. No estaban para nada de acuerdo con lo que la compañía hizo conmigo.
—Pero Jungkook, tú cabello... — Sook ya estaba a mi lado lloriqueando por haber arruinado todo su proceso. Le sonreí levemente en forma de disculpa. Ella solo suspiró derrotada para volver a peinarme. — pobre de ti que lo vuelvas a arruinar, porque lo arreglarás solo...
—Si capitana — le dije burlón.
Faltaba poco para volver a Corea y ver a Kim Yongmin, anhelaba que ese día llegara lo mas pronto posible.
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—¡Buenas noches Los Ángeles! ¡Army te amo! — gritaba Jimin y Taehyung, al despedirnos de nuestras fans y bajar del escenario.
Estaba exhausto, era la última noche aquí en Estados Unidos. Llegaron varios del staff felicitandonos por el grandioso show que hicimos.
—¡Felicidades chicos! — Seung llegó a mi lado y me abrazó fuertemente — eso estuvo fabuloso, son geniales — decía completamente emocionado.
—Que bueno que te gustó enano — Jin revolvió su cabello creando una fricción.
—Ya queda menos para volver a Corea — le dije en su oído al agacharme a su altura. Me miró con sus ojos miel tan abiertos como fuera posible. Son los mismos ojos de Yongmin, es inevitable no pensar en ella mientras veo a Seung.
—¡Es cierto! ¡Por fin podré ver a mi nana! Le pediré disculpas por haberla dejado en ese hospital... — su voz fue disminuyendo poco a poco, para luego comenzar a llorar. Lo miré completamente preocupado.
—Ey, no, no. No llores, ¿si? Siempre estuvimos pendiente de ella, las enfermeras saben que su pequeño gran hermano preguntaba siempre por su estado de salud, así que no estés así, ¿va? Queda muy poco para el reencuentro — le dije dulcemente al agacharme a su altura y limpiarle las lágrimas. El niño asintió levemente.
—Kook, disculpa que interrumpa — dijo algo apenada Sook, al llegar a nuestro lado — quería preguntar si dejas que Seung se quede en mi habitación junto a Minsuk. Él no para de hablar de su gran amigo, quieren hacer una pijamada... — miré levemente al pequeño nilo tímido.
Minsuk es el hijo de nueve años de Sook, también tuvo que llevarlo a la gira ya que el papá del niño se fue cuando apenas él era un bebé. A Min lo conocimos de cuando apenas tenía tres años.
Miré al pequeño a mi lado, como preguntándole telepáticamente si es que quería ir o no. Mensaje que captó de inmediato porque comenzó a asentir de manera efusiva.
—Pues, creo que quiere ir... — respondí divertido.
—La pasaremos genial Seung, mi mamá me compró otro juguete, y quiero que lo probemos juntos — le dijo emocionado mientras caminaban a la habitación del hotel correspondiente.
—Adiós, pórtate bien enano — le dije apuntadolo. Él se despidió con su mano para después asentir.
—Él siempre se porta bien. Gracias Jungkook — Sook hizo una leve reverencia y se marchó junto a los niños.
Suspiré con cansancio.
—No puedes estar cansado Jeon Jungkook — Jimin llegó a mi lado, golpeando levemente mi hombro — hay que ir a celebrar nuestro termino de conciertos aquí en América. Vamos por unos tragos.
—Dicen que hay un bar excelente cerca de aquí, vamos no seas aburrido — se unió Seokjin a la conversación.
—La verdad chicos, no tengo ganas...
—Aburrido. Anda vamos, no te arrepentirás — Jimin movía mis hombros de un lado al otro. ¿Que daño me hacía salir a despejar mi mente un rato?
—Está bien — dije resignado — solo un rato...
Los chicos festejaron para emprender rumbo a nuestras habitaciones y ducharnos para ir al dichoso bar.
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Esto definitivamente había sido un gran error.
Ya no sabía cuantos tragos había bebido, solo vi a Taehyung llorar frente mío al cantar una canción de Harry Styles que sonaba por el gran parlante que había en el lugar. Todo me daba vueltas. Esto no estaba bien, yo no bebía para olvidar mis problemas, no era esa clase de persona.
—Oh... Vamos Jungkookie — dijo un Hoseok mucho mas borracho que yo — pasado mañana... nos vamos a Corea... hay que disfrutar. ¡Salud por eso! — levantó su vaso.
—¿Salud p-porqué? — preguntó Seokjin, también ebrio.
—Por... — Hoseok pensó levemente con su vaso aun levantado — Por... ¿Por qué diablos era?
—¡Salud por nuestro tour mundial! — gritó Namjoon.
—¡Salud! — dijeron al unísono, para beber todo el líquido azul que había ahí. Yo quedé mirando el mío un momento y luego me encogí de hombros.
—Salud — dije para empinarme el vaso y beberlo rápidamente, sintiendo como ya mi garganta se había acostumbrado a tal magnitud del alcohol.
—Hola, guapo — sentí como alguien se sentó a mi lado, por lo cual quedé mirando fijamente tratando de averiguar quien demonio era, no podía reconocerla.
—¿Q-quién eres?
—El amor de tú vida, ya te lo dije. ¿Quieres otro trago?
—¿Y-Yongmin? — dije sorprendido.
—Soy Byeol, Jungkook...
No se porque me decepcioné tanto al escuchar esa respuesta, para comenzar a llorar fuertemente. Que patético me debo ver en esta situación.
—Y-yo necesito salir de acá...
—Te acompaño, te dejo en tu habitación — Byeol me ayudó a levantarme del asiento, cosa que costó demasiado. No sentía mis piernas y sentía que en cualquier momento perdería la conciencia.
—Ey, Jungkook, ¡Vamos! Aún... Aún es muy temprano — Jimin sostuvo el vaso en su mano, mientras estaba apoyado en la mesa.
—Deberían ir a descansar, llamaré a alguien para que vengan por ustedes. — escuché ya a lo lejos que Byeol le decía a los chicos.
—Ay, a-aguafiestas — Taehyung le sacó la lengua de la manera mas infantil posible. Lo cual me hizo soltar una gran carcajada.
—Vamos Jungkook...
—Adiós vaquero — me dijo Yoongi, mientras reía, no se le veía tan mal.
—D-disfruten por mí... Adiós — comencé a mover mi mano de una manera graciosa siendo arrastrado por la chica a mi lado.
Mentiría si dijera que recuerdo todo el trayecto del bar al gran hotel, y menos el trayecto hasta estar tendido en la cama.
Mis ojos pesaban de sobremanera, solo quería dormir.
—Dulces sueños, kookie — escuché a lo lejos, cuando sentía que algo se posaba sobre mis labios.
De ahí no sentí nada más. Caí completamente rendido en los brazos de Morfeo.
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Cerré mis ojos fuertemente al sentir el sol pegando en mi cara. No podía abrirlos, pesaban mucho.
Lentamente fui abriendo mis ojos, pestañeando varias veces para acostumbrarme a la luz, sintiendo de inmediato una gran punzada en la parte frontal de mi cabeza.
Definitivamente no tomaré más.
Comencé a analizar todo lo sucedido. ¿Cómo rayos llegué a mi habitación? ¿Y los demás chicos? Me agarré mi cabeza con desesperación al no recordar absolutamente nada de la noche anterior.
—Buenos días, cariño — escuché una voz a mis espaldas. Me sobresalté al girar y encontrar a Byeol en mi cama.
—¿Qué demonios haces acá? — le pregunté temeroso al ver su atuendo.
Era mi ropa.
—¿Qué no recuerdas? — preguntó haciendo un leve puchero — me rogaste porque me quedara junto a ti...
Mi corazón comenzó a latir con rapidez. No, no por favor...
—Tú... tú y yo... — sentí como se me iba la voz.
—Si. Pasamos la noche juntos — sonrió levemente de manera coqueta, para acercarse y robarme un beso.
Sentí que todo el mundo se me vino abajo. Jalé de mi cabello desesperado.
¿Qué mierda hice?
Tenemos nueva personaje, ¿que opinan de ella? 🤭
¿Se dieron cuenta que este capitulo está narrado en primera persona y fue Jungkook? 🤔 Mi relato de por sí es en tercera persona, pero quise hacer este de manera diferente. Espero les guste el pov del jk.
No olviden votar, gracias infinitas por los 1k de lecturas 💖😭🥺.
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