Era sábado y Jungkook todavía andaba lamentándose de la noche anterior, se recriminaba y se decía que no debió de aceptar ir a esa cabaña y acostarse con alguien más, se sentía fatal.

Ya era las 2:00 pm y todavía no salía de su cama, se había bañado 7 veces y, de su nariz no salía aquel aroma que no quería recordar.

Su celular se escuchaba en la primera planta del penthouse, no sabía cuántas veces había sonado, o cuantos mensajes había.

No pasó mucho tiempo, cuando escuchó que desarmaron la alarma de seguridad y pasos en su casa, alguien había llegado y no estaba para nadie. No era Alice, porque los fines de semana son de su descanso.

Esos pasos se estaban acercando a la habitación y esa persona, tenía tacones, pensó en su mamá, se levantó de su cama y fue a su encuentro, efectivamente, era su salvación y su paño de lágrimas.

—Mamá, yo no...yo no quería —Se le tira a los brazos y ella logra agarrarlo, ambos se sientan en pleno pasillo, el alfa poniendo su cabeza en las piernas de su mamá.

—Ya no llores mi amor, olvida lo que pasó, eso ya no es importante. Además, no hiciste nada malo, porque técnicamente no estás casado con nadie ahora mismo, así que no es tú falta.

Ella sabía que para Jungkook era difícil esta situación, porque era fiel a Jimin, aunque no esté con él, aunque ya no sean esposos, pero Jimin en su primera vez en todo y le dolía haber fallado.

—Escúchame JK, no vamos otra vez a hacer regresiones, no hiciste nada malo, fue una noche de copas y nada más, ok te acostaste con alguien más, pero es irrelevante, ¿me entiendes? No quiero que estés así, simplemente sigue tú vida y ya está.

—Mamá, es que yo pensé que era mi Mimi, ¿entiendes? —Triste— me dio duro la realidad, que haberme acostado con ese omega desconocido, eso es lo que duele.

—Es normal mi amor y, no te juzgo. Ha pasado un año, un año difícil, con porqués y muchas preguntas, pero tenemos que levantarnos, seguir adelante. Tienes ahora los bebés a tu cargo, debes estar bien y feliz para ellos, recuerda que Kookie ya cumple 11 años, es una alfa en todo su esplendor que se da cuenta de todo, no deberías preocuparla, porque yo siento que se preocupa mucho por Jimin —Le acaricia el cabello y luego su nariz sonriendo, es su cachorro, aunque tenga ya 30 años.

—Yo estaba bien mamá, no debí ir con Nam y sus amigos a esa fiesta, yo debí regresar después del bar, ya ni modo —Resoplando y sorbiendo sus mocos— Mamá, cuando llevé los cachorros ayer, Mimi tenía un golpe en su mejilla, me duele que ese alfa lo golpee, yo jamás le hubiera puesto la mano encima, solo para acariciarlo —Suspira— a veces me pregunto que hice mal, se está discapacidad lo alejó, o encontró en él una persona mejo... —Fue interrumpido.

—¡YA BASTA JUNGKOOK! —Alterada, hizo que su hijo diera un salto que cayera sentado— Estoy HARTA de que te hagas de menos y que te menosprecies. ERES EL MEJOR ALFA MUNDO JK, POR LA LUNA, cuantos omegas les hubiera gustado tenerte, eres noble, sensible y de buen corazón, yo hice un buen alfa, así que NO QUIERO que vuelvas otra vez a autosabotearte —Le dio un golpe en el hombro— Ahora lárgate a cambiar de ropa, que nos vamos a almorzar con los abuelos que acaban de llegar de Corea.

A regañadientes, Jungkook tuvo que alistarse para irse con Narah y olvidarse de la noche anterior, simplemente quería borrar cinta de ese día y no recordarlo jamás.

Estaban reunidos los Jeon en un restaurante frente a la playa, aprovecharon en cantarle el cumpleaños feliz a Jungkook por adelantado, pero cualquier excusa era buena para celebrar. En este punto ya JK estaba tranquilo, aunque le daba miradas de odio a Namjoon culpándolo de lo que pasó en su pre-cumpleaños.

Extrañamente, Jungkook comienza con unas olas de calor violentas, no hacía tanto calor en Seattle ya para estas fechas, pero el alfa estaba que se quitaba la ropa allí, su abuela, es la primera en detectar que el aroma del alfa estaba más invasivo.

No estaba en su celo, hace ya tiempo que no lo tiene, pero tenía los síntomas, pero no le dio importancia tan pronto que se le pasó el calor y volvió a su normalidad.

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Vancouver, Canadá

Jimin, estaba con sus cachorros en el centro comercial, ya había comprado la decoración para la fiesta sorpresa a JK, tenía los ingredientes para el pastel, el favorito del alfa es de plátano (banana) con crema de chocolate, ama el del omega y este, se lo hará para su día.

De comida también complacerá al alfa, por lo que decidió cocinar para él arroz con sopa de cerdo, la disfruta mucho.

Estaba en una tienda de alfas, para comprar el regalo que sus cachorros le darían a papá.

—Mamá, no sé qué le podemos comprar a papá, él tiene de todo —Lyric estaba pensando que sería lo ideal— papá necesita un nuevo maletín, si mamá, eso, un nuevo maletín para la empresa y podemos comprarle un nuevo traje, ¿te parece? —Corría para el área exclusiva de CEO'S.

—Kookie, cuidado no te vayas a caer —Resopla— espera a mamá —Iba lo más rápido que podía con el coche gemelar— ¿segura que quieres comprarle algo para el trabajo? —Mirando algunas cosas.

—Mira mamá, este maletín me gusta para papá JK, ¿podemos llevarlo? —Le mostraba.

—Está muy bonito mi amor, claro que podemos llevarlo —Sonríe, mientras miraba las corbatas— el traje es mejor no regalarle, porque él hace ejercicios y debemos ver si le cabe de brazos, es un problema siempre, así que podemos regalarle el maletín, una corbata y podemos buscar otras cositas, ¿sí? —Sonríe.

—Sí mamá, mira, esto se parece a papá JK —Mostrándole.

Lyric estaba muy emocionada, estaba feliz porque su mamá aceptó en celebrar el cumpleaños de su papá, aún cuando están divorciados.

Seguían en la tienda cuando Yoongi se comunicó con Jimin.

—¡Hola Yoongi! ¿Llegaron a Vancouver? —Seguían escogiendo regalos.

—Sí, ya estamos aquí, por eso te estoy llamando, vamos a ir al hotel ahora, ¿dónde estás? SeokJin, me dijo que no convenció a Nam para que viniera, pero él viene con el bebé, Narah y Julieth, también vienen Taehyung y Candela con el bebé.

—Ugh, creo que Nam me odia Yoongi, ahora me doy cuenta de que no debimos hacer esto tan grande, debimos hacerlo nosotros, tengo miedo de todo esto —Estaba ya con los nervios de punta— por tres veces creí ver a Taemin vigilándome, me voy a volver loco —Resopla.

—Ah, por cierto, también viene tú papá Min-Ji con Tae —Min-Ji, es el papá omega de Jimin— Minnie, no te preocupes por nada, todo el que viene es por voluntad propia, nadie te odia, cálmate, ¿ya vienes para acá?

—Siento mucha vergüenza, esa es la verdad —Resopla— ¿en serio viene mi papito? Ayyy lo extraño, quiero que vea a mis bebés —Emocionado, no ve a sus papás hace muchos meses— JK viene mañana temprano, así que debemos tener todo listo hoy, ¿lograste conseguir las dos suites? —Eran unas suite que comparten— Dame un rato, estoy en el centro comercial, comprando las últimas cosas.

—Tranquilo, por favor. Ya todo está listo, tenemos las dos suites, así que hay mucho espacio. Te voy a esperar en el hotel, ¿ok? Todos mientras vayan llegando nos dan el alcance, ¿ok?

—Eso me tranquiliza, nos vemos en un rato —Cuelga.

Jimin, estaba en las últimas cosas en el centro comercial, debía ir a hacer el pastel y decorar. Llevaba a Tobiah y Liam dormidos, mientras que una alborotosa Lyric andaba de tienda en tienda. 

A eso de las 5:00 pm, Jimin y sus cachorros iban a encontrarse con los demás en el hotel Marriot. Su papá Min-Ji se hizo cargo de sus cachorros en lo que él comenzaba con el pastel, SeokJin, Candela y Yoongi estaban llenado globos. Narah, hacía algunos piscolabis junto con su hija Julieth, estaban todos ayudando con la fiesta sorpresa.

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Seattle, Washington

Era domingo septiembre 1, 2024.

Y cumpleaños #31 de Jungkook.

El alfa, se levantó temprano y lo primero que vio fue su celular, se llenó de felicidad al ver un mensaje en especial. 

Fue a su gimnasio en casa, estuvo media hora haciendo cardio. Desayunó café y una tostada con mermelada de higos, hizo un batido de proteínas y subió para darse un baño.

Habían comenzado a explotar su celular con mensajes de felicitaciones, más de uno le sacó una sonrisa, pero no más que ese último que llegó.

La felicidad le embargó, se le cristalizaron los ojitos, pero decidió sonreír, era día de eso después de todo.

Entró a la ducha y salió de prisa, debía llegar a Vancouver temprano, ya que Jimin se lo había pedido para que recogiera los cachorros.

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Vancouver, Canadá

Estaba todo listo para la fiesta. El reloj marcaba las 9:30 am. En media hora Jimin debía encontrarse con Jungkook. Tenían un plan. Y estaba todo perfectamente calculado.

Jimin, iba a ir por el alfa al aeropuerto, sin cachorros, solo iba a ir con Tobiah. Llegó el día de la gran sorpresa.

El omega, estaba muy nervioso, le iba a decir a Jungkook su sorpresa, pero había condiciones, lamentablemente, por la seguridad de todos.

El reloj marcó las 10:00 am, Jungkook avisó que había llegado, fue cuando a Jimin le comenzó a temblar todo, le mandó su ubicación, para encontrarse.

El lugar, quedaba cerca del aeropuerto, un café que se encontraba en un callejón, pero era muy bonito, Jimin concurría el lugar, cuando necesitaba aislarse.

Lo esperó con su bebé, ordenó un café para poder calmar sus nervios. Le dio un sorbo y cuando levantó la vista, ahí estaba. Parado frente de él, tan guapo como siempre y parecía un mismo ángel con el reflejo de las luces y el sol.

—¡Hola Jungkook! Puedes sentarte, por favor —Mirándolo.

El alfa, ya pensaba lo peor, que, de nuevo, no le daría a los niños.

—¡Ho...hola Jimin! —Mirándolo— ¿Dónde están los cachorros? ¿Todo está bien? —Sentía que no podía sentarte, estaba estático ahí.

—Ellos están bien, no te preocupes, siéntate, debemos de hablar, no tomará mucho tiempo, luego vamos con los niños, ¿sí? —Jungkook, asiente y se sienta.

—Ok, hablemos... —Aunque no lo crean, el alfa sentía que Jimin se había enterado de lo que pasó el viernes con aquel omega.

—Bueno —Se rasca la cabeza— es tú cumpleaños y me alegra que estés aquí. Los niños te tienen una sorpresa, pero yo quiero darte otra, espero que eso te haga feliz, en parte...

Le saca el cobertor que le tenía al coche en donde estaba Tobiah, dejándolo ver. 

—¡Sorpresa, feliz cumpleaños papá JK! Es igualito a ti —Se le bajaban las lágrimas a Jimin— no puedes negar que eres fuerte en tus genes, solo me dejaste que Mochi se pareciera a mi —Le sonríe, Jungkook todavía no reacciona, solo miraba al bebé— siempre supiste que era tuyo, desde que estaba en la pancita, tú instinto no te falló, Toby es también tú cachorrito, nuestro, ¿quieres cargarlo?

—Jimin... s-sí, quiero cargarlo —Comenzó a llorar.

Jungkook, todavía no reaccionaba a esta sorpresa. Tan pronto tuvo a Tobiah en sus brazos, llevó hasta su nariz, lo olía y le daba besos, reconociéndolo como suyo, ese olor a vainilla con leche de mamá que tanto quería oler de cerca fue un momento intimo entre ellos dos.

Jimin, solo lloraba como magdalena, porque sentía que se había quitado un peso de encima, uno de los muchos que cargaba, pero uno menos se sentía bien.

—Jungkook, es tú bebé, nadie puede negarlo, quise mostrártelo porque te lo mereces, merecías conocer a tú otro cachorrito, pero hay cosas que todavía no pueden ser, y te pido de favor que me comprendas, dame tiempo, pero por ahora las cosas deben ser así —Resopla.

—¿Qué es lo que pasa? —No entendía— Es mi hijo y yo lo amo ya como a los otros dos, ¿qué es lo que no puedo hacer?

—Taemin, no quiere que lo sepas, se va a enojar demasiado si sabe que yo te lo mostré y que sabes que existe, no te puedo dar alguna explicación exacta ahora, pero no te lo puedes llevar como a Liam y Lyric, puedes verlo solo un rato cuando traigas y recojas a los cachorros, pero solo eso. Te prometo que cuando Toby sea más grande, las cosas cambiaran y te lo podrás llevar, ¿ok? Confía un poco en mi —Mirándolo.

Jungkook,trataba de calmarse y no alterarse en ese lugar tan pequeño y, con el bebé ensus brazos. Hizo ejercicios de respiración, pensaba muy bien lo que iba a decir,para no cagarla con Jimin y, alejarlo.

—Yo entiendo que tu alfa... —Es interrumpido, Jimin le pone dos dedos en los labios.

—No, no digas esa palabra...shhh, solo comprende un poco, ¿sí? Yo voy a lograr que puedas compartir con él, como hice con Kookie y Mochi, te lo prometo —Le retira los dedos, pero era como una caricia.

—Jimin, pero como voy a aguantar no verlo, no cargarlo —Resopla— solo te voy a pedir algo, con el corazón con mi alma, no le hagas lo mismo que hiciste con Mochi, por favor, haz un lazo fuerte, amalo mucho, cuídalo con tú vida, nuestros cachorros deben creer bien, felices, aunque no estemos juntos, ¿ok? Sabes que no te pido mucho, pero por Toby, hazlo.

—Te lo prometo alfa —Sonríe y baja su cabeza avergonzado, simplemente fueron palabras que salieron de él.

—Gracias omega —Hace una reverencia con su cabeza, para alejar sus pensamientos absurdos y concentrarse en estar un rato con Tobiah en sus brazos.

Tobiah, para Jungkook era su mini él, se parecía demasiado, tenía hasta sus gestos. Lyric, se parece a él, pero Tobiah era una cosa insólita. Y estaba feliz, a pesar de que su cumpleaños, no iba a ser con toda la familia, conocer a su otro cachorro le llenó el corazón. No dejaba de olerlo y de marcarlo con su aroma, sin pedir permiso. 

Jimin, sonreía al verlos, para él, Jungkook era el mejor papá del mundo, el más amoroso y protector, le daba gracias a la luna porque sus hijos estaban bendecidos.

Después de casi dos horas, le dieron la alerta a Jimin, que ya podía traer a Jungkook para su sorpresa de cumpleaños, bueno, de la segunda.

—Jungkook, ahora podemos ir por los cachorros, no te preocupes, allá podrás estar un rato más con Toby —Le sonríe— vamos en mi camioneta —Se levanta.

—¡Claro! —Se levanta— ¿Puedo cargarlo hasta la camioneta? Es que no lo quiero soltar...todavía.

—No hay problema, cárgalo, es tuyo tambien —Sonríe chiquito.

Caminan a la camioneta.

Jimin, la había estacionado bastante escondida para no exhibirse y que Taemin lo descubriera.

Hablando del innombrable, Jimin le había dicho que se iba a quedar en un hotel con Yoongi y los cachorros el fin de semana, otra vez.

Pero lo que Jimin no sabe, es que siempre le está siguiendo los pasos.

Se van rumbo al Hotel Marriot en el downtown. Estaciona la camioneta y alerta a todos que se preparen para gritar el "Feliz Cumpleaños".

—Jungkook, vamos, los niños están aquí con Yoongi, seguro que se pondrán felices al verte —Sonríe— Vamos a poner a Toby aquí en su coche, ¿ok? —Carga al bebé y lo pone en su coche— Vamos, cuando lleguemos, debo taparte los ojos.

—¡Eh! ¿Por qué? —Tenía temor, no sabía si lo estaba trayendo a su muerte, no es que no confiaba en el omega, pero Taemin le daba mala espina.

—No te asustes, no pasará nada, ¿no es túcumpleaños hoy? —Le habla con calma, para no asustarlo— ¡Vamos!

Mientras caminaban a dentro del hotel, Jungkook comenzó a darle esas oleadas de calor insoportable por dentro, no concebía que le estaba dando eso precisamente ahora. Trataba de estar calmado, actuar normal, pero su aroma comenzó a intensificarse y Jimin se dio cuenta.

El alfa, se veía incomodo e incluso tuvo que sentarse antes de seguir caminando, esperó que se le pasara, estaba avergonzado porque todo eso sucedió frente a Jimin.

—¿Te sientes bien? —Preocupado— Espera —Saca una servilleta de su bolso y se la daba— Estás sudando, no te veo bien, estas algo pálido, ¿llamo a alguien para que te ayude a subir?

—No, no, ya se me va a pasar, a veces me dan estos mareos —Resopla, poco a poco se le está pasando esos calentones, no puede ser que su celo esté de vuelta y ahora mismo— Ya podemos, seguir, estoy bien.

—Cualquier cosa me dices, ¿ok? —Mirándolo, él sabía que olía a celo.

Sube al ascensor y todavía la feromonas de Jungkook estaban a tope, tanto que Tobiah comenzó a destornudad y ya Jimin, como que no se sentía cómodo de la parte trasera, aquello de la nada comenzó a lubricar, no podía ser posible. Estaba loco que aquel ascensor se abriera y pudiera respirar aire fresco.

Al fin, se abrió aquella puerta, Jimin comenzó a respirar profundo para calmarse, si no, algo que no debía pasar, pasaría.

Llegan a una de las suites, el omega toca la puerta y, adentro todos se preparaban para gritar.

Es abierta la puerta, ellos entran y...

—¡SORPRESA, FELIZ CUMPLEAÑOS! —Todos dicen a unísono. 

Jungkook, al verlos a todos se emocionó tanto que comenzó a llorar de felicidad, ver a sus hijos, a Jimin, a su mamá, su suegro, sus amigos, la mayoría de las personas que amaba juntas, fue su sueño hecho realidad, lo llenaron de besos, de abrazos, de regalos y, de muchas palabras bonitas.

Después, de ese emotivo momento, pasaron a almorzar la comida favorita del alfa, quien se chupaba los dedos de lo delicioso que estaba, sabía que Jimin lo había hecho para él y, lo disfrutaba más todavía.

Más tarde fue el momento de cantar el feliz cumpleaños y comer pastel. Estaban pasando un bonito momento en familia, así haya sido en ese lugar reducido, pero Jungkook estaba feliz, Narah era testigo de eso.

Cuando partieron el pastel y Jungkook descubrió que era de plátano con crema de chocolate, saltó de felicidad, pidió un pedazo gigante con mucha crema, saboreando cada pedazo que llevaba a la boca, mientras que Liam lo miraba sonriente paradito solito mientras se agarraba de su pierna para mantener el equilibrio y no caer, también tenía el alfa a Tobiah frente suyo, que contemplaba sonriente, no todos los días se daban estos momentos últimamente.

La fiesta todavía a las 6:00 pm estaba en todo su apogeo, pero algo surgió de pronto.

Jungkook, comenzó a tener cambios, sus ojos se volvieron amarillos, su aroma se intensificó, una ola de calor de apoderó de él, su lobo tomó posesión llamando a su omega, agarró a Jimin de la mano posesivo y se lo llevó a una habitación, había entrado en celo.

Yallí comenzó el caos.

¡Hola Roomates!
Espero que todo esté bien y la estén pasando felices ʕ • ́؈ • ̀)

Aquí tenemos un nuevo capítulo, delen mucho amor, espero que lo disfruten y no se olviden regalarme ★'s y comentar que tal les pareció.

¡Hasta el próximo capítulo!ＸＯＸＯ♥ ᒍOᗩᑎ____________________

Nota: Si encuentran alguna falta de ortografía me avisan, por favor.