Capitulo doce: Harry Tiene Competencia.

Y así paso el verano completo, frente a nosotros, sin darnos cuenta. Cómo las hojas de los árboles comienzan a marchitar esperando el otoño.

Solo esperando...

Después de la charla que tuvieron los adultos con Harry, no se volvió a mensionar el tema de la Orden. Con ello obviamente se fueron mis ilusiones de saber más. Claro que la tía fue exitosamente cautelosa en no mencionar nada cuando estuviéramos presentes, mucho más Harry quien era el más afectado.

A partir de ahí no hubo mucho.

El último día de vacaciones empezó con Ginny y Leah recostadas en su cama leyendo un ejemplar de corazón de bruja. Bueno, no estaban leyendo para nada, más bien admiraban la portada soltando unos cuantos suspiros soñadores.

—Es muy lindo —dice Smith alzando la revista —. Ni siquiera le puedo prestar atención a las letras.

—Ni que lo digas —asiente Ginny tratando de cambiar la página.

No tenia mucho que hacer, así que me echo en la cama junto a ellas y observo su ejemplar.

—¿Que hacen?

—Estamos leyendo corazón de bruja —Ginny extiende la revista hacia mi para poder echar un vistazo.

—Mm, ¿Quien es el?

Observo a un apuesto muchacho de tez  pálida, castaño, de ojos tremendamente azules. El chico posa al lado de un montón de libros con una sonrisa tremendamente adorable y no dude en soltar un suspiro también.

Vale, lo reconozco.

—Jake Jackson —contesta Leah con emoción —. Es hijo de Caene Jackson, jefe de relaciones Muggles en el ministerio. Pero son famosos y ricos por hallar un pozo de petróleo en su jardín. Además, Jake es modelo de la marca Louise Bulstrog para magos.

Sonrió por la euforia de mis amigas, y como una buena adolescente hojeo las páginas para enterarme de lo nuevo que hay en el mundo del espectáculo Mágico.

Cuando llegó al poster de Jake Jackson que parece un jugador de Quidditch me detengo un momento para leer la entrevista y conocerlo más.

Es muy fácil para mí cargar con la imagen del chico bueno, porque siempre lo he sido. Sin embargo, a los sucesos que han ocurrido últimamente en nuestro mundo, uno debe mantenerse al margen, escuchar a nuestros padres es importante.

¿Y podrías decirnos cómo lograr ser un chico bueno como tú?

Siguiendo las reglas, hablar con nuestros adultos sobre nuestras inquietudes y sobre todo mantener la fe y credibilidad hacia la gente que conoce el campo. Me atrevería a decir que el ministerio está manejando todo muy bien, depósito mi total confianza en ellos, como un líder adolescente me gustaría influenciar a los míos a que crean plenamente en las autoridades magistrales y no seguir a viejos locos que puedan guiar por un mal camino.

¿Cómo sabemos que tienes la razón?

Fácil, porque soy un chico bueno y yo jamás me meto en problemas. Así podrás verte como yo, algún día.

Recuerden amigos los chicos malos que se meten en problemas jamás dicen la verdad.

La última foto es de el portando un libro extraño y guiñando hacia la cámara.

Después de todo ya no me parece tan lindo que digamos.

Me levanto rápidamente, alarmando a las dos pelirrojas que imitan mi acción cuando ven mi cara preocupada.

—¿Este ejemplar de cuando es?

—Es reciente, la enviaron ayer —Ginny explica —Leah está suscrita. ¿Que hay? 

—¡Harry tiene que leer esto!

—¿Leer que? ¿El horóscopo? —Leah frunce el ceño  arrebatándome el ejemplar —No creo que le vaya muy bien en el amor este mes.

—No, me refiero a la entrevista de Jake Jackson. ¿No la han leído?

—Solo vemos las fotos —se excuso Ginny.

Tomo nuevamente la revista entre mis manos y sin pensarlo mucho me dirijo a la habitación que comparte con Ronald.

Corro hacia la segunda puerta del tercer piso, esquivando a Sirius que carga con una caja hacia su cuarto y a un Kreacher que le sigue refunfuñando.

La puerta de su habitación está abierta pero decido tocarla para llamar la atención de los amigos que parecen no hacer nada. 

Ron rueda los ojos con tan solo escuchar el ruido y Harry se alarma de pronto, aunque cuando me ve ensancha los hombros pensando que le pediré un autógrafo o algo parecido.

—¿Que pasa? —pregunta Ron irritado.

Luego las chicas me alcanzan.

—Harry tienes que leer esto, ahora —le explique al azabache que parece tan confundido como la primera vez que lo conocí. Lance la revista hacia su torso y no evitó apresurarse.

Yo le miro atentamente, cruzada de brazos.

—Ya Ellie, ¿Pero por qué quieres que lea mi horóscopo? —extiende el ejemplar.

Desesperada cambio las páginas hacia la nota del niño bonito y apuntó con mi dedo la parte específica que quiero que preste atención.

Lee enseguida.

—Mira George, están teniendo una junta sin nosotros —Fred aparece en medio de la habitación junto con su hermano pero ninguno se impresiona, después de un rato te acostumbras a verlos llegar de la nada.

—Es una pena que no seamos invitados, pero aún así exigimos los detalles de la reunión —exige George con varios sobres en la mano.

—¡Estan bromeando! —Harry por fin se pone de pie sin soltar la revista haciendo que la atención vaya dirigida hacia el —. Es obvio que está hablando de Dumbledore y yo ¿Que pretende con esto?

Sabía que Harry sería tan arrogante para captar la idea sobre el tema en cuestión, osea el, Dumbledore y todo lo que paso en el torneo.

Los medio siguiendo viendo a la pareja como loquitos del centro.

No es de esperar que la revista este rodando de mano en mano por todo el cuarto. Las expresiones de todos al leer la entrevista consiguen las mismas reacciones molestas e impresionadas que cuando la leí yo.

Los gemelos son los últimos en tener el ejemplar de corazón de bruja en sus manos y cuando acaban voltean a ver a Potter, esperando un discurso de odio.

—Para empezar ¿Quien es el? ¿Quien le da el derecho de hablar así?

—Bueno, Harry. Tampoco dice tu nombre —Ron se alza de hombros y Harry lo mira con rudeza.

—Es obvio —conteste.

—Viene de una familia millonaria —cuenta Leah mostrando la linda cara del chico —. Es como una celebridad en el mundo mágico, casi tan famoso como tú Potter.

—¡Ni siquiera estuvo presente! ¡No sabe nada!

—Es que no están prestando atención —dice la pelirroja mayor con tanta seriedad que me impresiona bastante verla así. Casi siempre tiene esa sonrisa despreocupada y relajada —. Jake Jackson es el Harry Potter de Cornelius Fudge.

—¿Cómo?

Las caras de confusión se asoman.

—Ya es de sobra el tema que el ministerio no quiere a Harry ni a Dumbledore por lo que paso al final del curso —describe Smith arrojando el ejemplar hacia un lado —. El número de gente que cree en lo que dices, es el mismo número que creen en Jake. Sobre todos los chicos del colegio. Es decir, si no supiera la realidad, no dudaría en seguir al guapísimo de Jake.

—Ni siquiera es tan guapo —susurra Ron cruzado de brazos.

—Eso quiere decir que el Ministerio contrato a Jackson para convencer a la gente que no hay ningún peligro y que el señor oscuro no ha vuelto —resume Ginny preocupa.

Leah confirma con la cabeza.

—Y pensar que los modelos dicen puras estupideces —niega Fred decepcionado.

Ese comentario nos alegra de alguna forma.

—Oh, si —habla George después de un rato, extendiendo los maquetes que su hermano sujetaba —. Tal vez esto les suba el ánimo, llegaron las cartas de Hogwarts.

Todos nos inclinamos rápidamente hacia los gemelos que reparten nuestras cartas con apresuro.

El sobre de Hogwarts estaba por fin en mis manos, después de un largo tiempo volveríamos a Hogwarts y no sabía cómo se tiene al respecto. Estaba confundida.

Quería regresar con mis amigos, a las clases, ver cosas que siempre me había imaginado pero no podía experimentar. Aunque los recuerdos de un mal día me regresan uno a uno y la ansiedad aparece.

—Nada mal, solo es un libro nuevo de Defensa Contra Las Artes Oscuras —Leah me hace salir de mis pensamientos y observo la carta. — Teoría de la Magia Defensiva de Wilbert Slinkhard.

—Eso quiere decir que Dumbledore consiguió un maestro nuevo.

—Y justo a tiempo.

—¿A qué se refieren? —custiona el azabache a los gemelos.

Fred se sienta en su cama y George se inclina hacia la pared.

—El otro día, con las orejas extensibles escuchamos a mamá y papá tener una conversación acerca de lo difícil que fue para Dumbledore conseguir un nuevo maestro.

—¡Nadie quiere el puesto! —resalta George riendo.

—¿Y como no? —refuta Fred —. Uno despedido, uno muerto, uno que perdió la memoria y uno que pasó nueve meses
encerrado en un baúl.

—Que divertido se escucha —rie Smith guardando su sobre —. Yo aceptaría.

Mis primos se ríen a carcajadas y Harry solo la observa detenidamente. ¿Como podría ser tan valiente en decir eso? Fred lo había dicho, nadie quiere correr peligro. Yo tampoco tomaría el puesto si me lo ofrecieran.

Supongo que si soy una gallina.

—¿A ti que te pasa?

Ginny señala a Ron de pronto y me volteo con interés para observar la cara de mi primo pálido aún más pálido. El parece atónito mientras sujeta su carta con una mano y una especie de insignia en la otra.

Fred se asomó para leer el pergamino, de igual manera abre la boca impactado.

—¿Prefecto?

—¡No puede ser! —George se abalanzó sobre ellos para arrebatarle la carta —. Prefecto, he cierto.

—Santos Doxys chamuscados. Harry creímos que sería para ti —mi primo se dirige al azabache que no tiene idea de lo que sucede.

Yo tampoco, ¿Por qué se alarman tanto?  ¿A caso Ron no puede tener un cargo importante?

Se que significa ser prefecto, Cedric me lo había explicado el día que lo conocí mientras me mostraba su habitación. Aunque no me quedaba claro el proceso de selección.

—¡Dumbledore estaba obligado a escogerte! Con eso de que ganaste el Torneo de los tres magos y aparte eres el niño que vivió.

—¡Es una broma! —Leah se jacto un segundo, también leyó la carta. Ron pronto le dirigió una mirada severa como esperando a que se burla o algo. Sin embargo ella se alzo de hombros con un puchero —Nada mal Ronald, lo tienes. Felicidades.

Entonces le sacude el cabello naranja y por una fracción de segundo lo veo sonreír a la chica.

—El pequeño Ronnie es un prefecto. 

—¿Y que tiene? —defiende Smith.

Claro que todos la vemos como si hubiera dicho alguna maldición. Creo que es obvio, pero si no lo notaron Leah y Ron no se caen muy bien que digamos. Así que el hecho que ambos se den ánimos es un poco extraño, menos en situaciones complicadas. Y está claro que no lo era.

—Bueno, es que es el momento perfecto del año en que Dumbledore anuncia a sus favoritos —bromea Fred —Harry tenía ese puesto desde que nació.

Harry mueve la cabeza dando a entender que no lo niega y Ron se pone colorado por la vergüenza que le da no ser suficiente para el puesto, según los otros.

—Yo tampoco me lo esperaba —declara el menor de los Weasleys. Entonces le lanza la insignia a su amigo para que la vea.

La escena parece muy chistosa, estamos ahí los menores hablando de temas como el ministerio y cosas que seguro se hablan en la Orden. Pero por otro lado nos peleamos por un título que solo sirve en el colegio. 

Yo en cambio no recibí ninguna insignia y eso me tranquiliza un poco porque significa que no tendré que ver a Cedric y a estas alturas es lo que menos quiero. Me pondría a llorar enfrente de el y Cedric probablemente no sepa que es lo que sucede conmigo. Ya que ni siquiera me conoce...

Uff, no creí que fuera difícil se procesar esa parte.

Justo cuando vuelvo a tener mi crisis existencial y creo que colapsare. Hermione entra a la habitación con lágrimas rodeando su rostro, las mejillas rosada y en las manos una insignia.

Ella mira directamente a Harry.

—¡Oh, Harry! —chilla ella —¡Yo lo sabía! ¡Oh, Dios! ¡Lo sabía! ¡Nos han elegido! ¡Estoy orgullosa de nosotros!

Uy hasta su mejor amiga lo traicionó. 

—Creo que debes felicitar a alguien más. —Contesta Harry inerte. Lanza la insignia devuelta al dueño  —No es mía.

—Oh, Ron. Santo cielo —Balbuceo Granger desconcertada —Es inesperado... Bueno, pues. Felicidades.

—No quedo de otra —rie George alzando las cejas divertido.

—No es eso... —responde HERMIONE completamente ruborisada.

Entonces entra la tía interrumpiendo nuestra pequeña junta. Apenas le puedes ver la cabeza con esa gran pila de ropa limpia que carga sobre sus brazos.

—¿Las listas han llegado? Si quieren me las pueden dar para que vaya al callejón Diagon y compré los libros mientras ustedes empacan. Ron, necesito comprarte más calzoncillos creces cada mes y es imposible que te aprieten el trasero... ¿Que color quieres?

—¡Mamá!

Ron aparece rojo de la furia y Leah se ríe a carcajadas.

La enemistad de estos dos, vuelve.

—¿Por qué no le compras calzones rojos con dorado? —opina Ginny dando una palmada en la espalda de su hermano mayor —. Para que convienen con su insignia de Prefecto.

—¿Insignia de que?

Ron le muestra la pequeña figurita un tanto cohivido por la reacción de su madre. Quien duda un segundo mirando a Harry y luego a su hijo legítimo. 

—¡Oh, no puede ser! ¡Ron! ¡Eres Prefecto como todos en la familia!

—Si olvídate de nosotros, mujer —chilla George.

—¡Oh,oh! Que bendicion, tu padre estará orgulloso y tus otros hermanos también, es una estupenda noticia.

—¡Hermione también recibió una mamá! —exclama Ginny.

Hermione modela su nuevo título y con eso la señora Weasleys no podría estar más orgullosa pues le sujeta el rostro felicitandola y alargando suspiros de felicidad por su hijo.

—Supongo que tenemos dos nuevos prefectos a no ser...— mi tía interrumpe sus palabras lamzandome una mirada de insinuación.

Yo la miro con cansancio pero no digo nada, y los otros arremedan su acción.

—¡Ah, hablan de mi! —sacudo la cabeza cuando me doy cuenta que en efecto se dirigen hacia mi. Suponiendo que soy la única que asiste en otra casa, tiene sentido —. No, no me llegó nada.

Molly hace un puchero por unos segundos pero luego dibuja una sonrisa en apoyo para que no me ponga triste.

—¡No importa! Esta noche comeremos algo delicioso.

Y la tía sujeta nuestras listas escolares para salir del cuarto. Ron y Leah le siguen. Mientras los demás nos quedamos intercambiando miradas.

Si soy sincera no me importa, sería bonito tener un título o algo, pero tampoco tengo tanto ego para segar mi vanidad. Con el hecho de estar en Hogwarts y tener una familia que me quiere es suficiente para mí.

Me siento feliz por mis amigos

Y ahora que lo pienso ¿Quien de los tejones  habrá recibido tal honor?

Hey Honeys ist me 💙

Otro capítulo más y conoceremos el estado de Cedric, aaaah!

Me pueden decir si les está gustando la historia y que quieren ver más adelante?

Lxs Leo.

Bye 💙