Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐧𝐮𝐦𝐞𝐫𝐨 𝐬𝐢𝐞𝐭𝐞: ‹ ¿Debes volver? ›

Observaba él pequeño cuerpo que tenia en frente intentando mover con agilidad su primera y única espada.
Hace al menos como dos horas que llevaban alejados del hotel debido a los ruegos de Axozer a Auron para que le enseñara a usar con habilidad aquella arma para sus futuras peleas.

Obviamente peleas contra mobs chetados, no contra sus compañeros.

ㅡ ¿¡Cómo lo estoy haciendo, señor Auron!? ㅡSonrió abiertamente mientras volteaba en dirección hacia él, siempre con un brillo en los ojos.ㅡ

ㅡ Espectacular Axo, y no me llames señor, que tampoco estoy tan viejo. ㅡSonrió acercándose para así pasar su mano por el suave cabello del menor.ㅡ si la encantas un poco más de seguro te vuelves la persona más envidiada de la zona.

Los ojos ajenos volvieron a emanar aquel brillo tan característico de él cuando se emocionaba de más.
Sin mucho más que decir, el entrenamiento continuó un rato más hasta que ambos chicos estuvieron de acuerdo con que ya era bastante tarde.

La mirada de AxoZer se posó en el oscuro cielo que se encontraba encima suyo, observando a su vez las preciosas estrellas que le adornaban.
Desde pequeño adoraba apreciar aquellos pequeños puntos luminosos que tanto le causaba curiosidad.

ㅡ Psico-... ㅡMordió su labio, pensando de nuevo.ㅡ digo, Auron, si en Karmaland casi todo es posible gracias a los dioses o cosas chetadas que en otros pueblos no hay... ¿es posible ver una estrella de cerca?

El castaño, quien ya se encontraba recostado en la única cama que los aldeanos le habían ofrecido, lo observó un poco confundido.
No recordaba haber visto una estrella de cerca gracias a alguna cosa ilegalisima. Pero teniendo también en cuenta el poder de los dioses, no creía que aquello fuera algo imposible.

ㅡ Creo que para el admin eso ya es algo un poco más alejado de lo que es capaz de hacer. Por eso le pregunto. ㅡSe dio la vuelta, mostrándole una cálida sonrisa.ㅡ no todos los dioses son iguales al fin y al cabo.

ㅡ Creo que con algo de esfuerzo, y algunas ofrendas, aquello es capaz en él pueblo de Karmaland. Dime Axo, ¿te hace mucha ilusión ver las estrellas de cerca, entonces?

ㅡ Es obvio, ¿no? ㅡRio levemente, señalando las estrellas. Auron, quien seguia algo alejado, se acercó hasta poder quedar a su lado.ㅡ tan solo vea, son preciosas.

Ambos jóvenes se quedaron por un largo y silencioso tiempo observando aquellos preciosos puntos de luz que tanto emocionaban al menor. 
Una vez el castaño pensó en la hora ━ que encima a la mañana siguiente debían volver temprano a casa━, tomó su mano.

ㅡ Vámonos a dormir, es tarde y estas chiquito, ¿si?

ㅡ Psicólogo Auron, soy mayor de ed-

ㅡ Shh, a mimir.

Y con la palabra en la boca, fue tirado en la amplia y cómoda cama para luego sentir un peso a su lado.
Ambos durmieron muy a gusto esa noche.

Al día siguiente ambos volvieron al pueblo, donde un preocupado pelirrojo se encontraba en la entrada del hotel cruzado de brazos. Apenas notó como aquel dúo llegaba, corrió hacia ellos, formando un puchero.

ㅡ El viejo y yo te dijimos que iban a estar bien, Perxas, te preocupas demasiado. ㅡReia Momon recostado en una pared al igual que Reborn.ㅡ

ㅡ Ambos son personas adultas, saben en lo que se meten y como afrontarlo.
De eso se trata este asqueroso mundo en él que vivimos ㅡtodos le miraron.ㅡ supervivencia y trabajo en equipo.

ㅡ ¿Trabajo en equipo? literalmente eso es lo único que no hace-... ㅡEl menor fue golpeado por Reborn.ㅡ

ㅡ Palabras sabias de un viejo decrepito, me hace acordar a Merlón. ㅡMiradas confundidas se posaron en él.ㅡ ¿Qué? es mi abuelo, es algo raro porque le gusta salir desnudo por las calles mientras arroja cosas, pero es mi abuelo.

ㅡ ¿Enserio? ㅡCuestionó Axo.ㅡ

Perxitaa, quien se encontraba a su lado, negó lentamente tocando su hombro. Él menor se avergonzó por haberlo tomado literal.

ㅡ Eres un héroe, no deberías hablar así de él, es decir, es alguien con un papel importante en Karmala...

Tapó rápidamente su boca al notar lo que había dicho y la mirada sorprendida de su amigo, quien sabia que lo había dicho por accidente.
Los demás tan solo pudieron mirarlo de reojo, algo confundidos.

Y en cuanto estuvieron por abrir la boca para preguntar por aquello, un sonido peculiar de animal para él héroe de Karmaland, llamó su atención. Es decir, ¿cómo no iba a ser capaz de reconocer a un chocobo?
A lo lejos dos chocobos hicieron su aparición, causando impresión en los chicos de aquella aldea. Encima de estos se encontraban dos sujetos.

ㅡ ¡Fargan, Vegetta! ㅡGritó Auron moviendo su mano de un lado a otro como si su vida dependiera de ello.ㅡ

Estos sonrieron sin poder evitarlo, les causaba ternura uno de los héroes más pequeños de Karmaland, dejando de lado todas las barbaridades que había hecho, era un buen chico.

Porque a pesar de todo, ellos también habían cometido cosas que no eran permitidas en el pueblo, pero aun asi intentaban mantenerlo oculto.

De igual forma, regresando a la situación actual, ambos chicos se acercaron con sus majestuosos chocobos hasta el curioso grupo de habitantes.

ㅡ Oye Fargan, ten cuidado con estas personas. ㅡle susurró.ㅡ

ㅡ ¿uh? ¿por qué? no me digas que por ser de otro pueblo desconfias de ellos. Que mala actitud la tuya, ehh.

ㅡ ¿Siquiera puedes tomarte el tiempo para analizar las caras que se traen? Yo solo te estoy advirtiendo, luego no quiero llanto de tu parte cuando debas volver a Karmaland a pie.

El castaño, sin entender a que se refería, fijó su mirada donde los demás sujetos, quienes se encontraban impacientes esperando.
Podía reconocer aquella maligna mirada llena de deseo y determinación, aparte de dos de ellos sostener algo filoso por detrás.

Allí fue cuando se preguntó... ¿Auron dejaría que se llevaran sus chocobos?
Pues... no lo sabia con exactitud.

ㅡ ¡Ahora, Axo! ㅡGritó Auron.ㅡ

Fargan pudo voltear rápidamente, observando como aquel pequeño niño de cabello bicolor, el mismo que se encontraba hace dos segundos frente suyo, saltaba donde el con una enorme sonrisa en su cara.

Para su suerte, con tan solo un rápido movimiento en su chocobo, pudo esquivarlo, causando que cayera de cara en el duro piso, seguido de algunos rayos alrededor del hotel.

ㅡ ¡Auron, hijo mio, controla a tus amigos!

ㅡ No exageres Vegetta, mi niño tan solo estaba jugando. ㅡLevantó sus hombros, observando como Axozer seguía aun boca abajo en el piso.ㅡ tu deberías controlar a Fargan, ¡acaba de matar al bebé del grupo!

ㅡ ¿Achoche?

ㅡ Pero-

ㅡ Vegetta, si me das tu casa podemos olvidar este tema, piensalo o muere.

ㅡ ¿Cómo?-

ㅡ ¡Siguiendo el tema de porque vinimos aquí! ㅡalzó la voz Fargan.ㅡ debemos darte un mensaje de los dioses, Auron. ¿Quieres un poco de privacidad o deberíamos darte la carta ahora mismo?...

El recién nombrado suspiró, lanzándole una tranquila mirada a los demás, quienes tan solo asintieron y fueron directo al lobby con AxoZer a las rastras, quien sabe si este último se encontraba fingiendo o no.

Apenas volteó pudo notar como el de cabellos puntiagudos le acercaba una carta con bordes dorados y perfecta caligrafía, simplemente hermosa.

‘ Héroe Auron.

Hace unos días pidió el permiso para abandonar los limites establecidos por los dioses, por un tema de trabajo. Aún así, el límite de esto debe ser breve, por lo que le pedimos que resuelva lo antes posible su trabajo.
De lo contrario, deberemos tomar medidas. ’

Atte: Dioses divinos de Karmaland.

Tsk, como le causaba arcadas cada vez que leía o escuchaba aquello, simplemente desagradable.
¿Dioses? algo demasiado grande para aquellas estúpidas personas, según él.

ㅡ Siendo un psicólogo muy reconocido en Karmaland, me imagino que no te esta resultando difícil este caso... que por cierto, ¿qué pasa con ellos? ㅡpreguntó con interés.ㅡ

ㅡ Vegetta, Vegetta, Vegetta... ㅡSuspiró, guardando aquella nota en su bolsillo.ㅡ no puedo hablar de los casos con cualquier persona así por la cara, espero puedas entender.

ㅡ O-Oh, claro... es verdad. ㅡRio avergonzado, ganandose la mirada confundida de Fargan.ㅡ aún así, dentro de unos días habrá un importante evento, ¿participarás?

ㅡ Supongo que si no es obligatorio no gastaré mi preciado tiempo en ello.

ㅡ Vegetta, se que extrañas demasiado a Auron, no lo hagas más notorio... ㅡRio Fargan golpeando su hombro.ㅡ Auron, puedes poner como excusa tu trabajo, que por cierto, puedo notar él aire a libertad en Minecalv.

Vegetta aparte de tener una mirada de pocos amigos sobre él, también lo veía confundido, ¿a qué se refería con un aire de libertad?

ㅡ ¿Aire de libertad?

ㅡ ¡Claro! ¿No sientes que puedes hacer lo que quieras aquí sin miedo a los ideales exigentes de los dioses? ㅡHablaba emocionado.ㅡ me siento como-... ㅡSu sonrisa se fue desvaneciendo poco a poco.ㅡ como cuando vivía aquí...

Un abrumador silencio se posó en él ambiente. El psicólogo sabia perfectamente como se sentía su amigo y compañero, es decir, ¿cómo no lo iba a entender? él también había vivido una divertida época con él en el pueblo de Minecalv.

Era algo raro para él lo que sentía al recordar todos esos días pasados.
No sabia con exactitud lo que era, pero tampoco queria darle tantas vueltas.

ㅡ ¿No quieren quedarse por hoy?

Fargan le miró con un notorio brillo en los ojos, pero la mano del tercer sujeto en la conversación le hizo recordar que aquello era imposible.

ㅡ Debemos volver ya. ㅡAuron sintió la necesidad de golpearlo al notar como había causado que los ojos de su amigo volvieran a perder aquel característico brillo.ㅡ dudo que los dioses hagan ojos ciegos a nuestra tardía.

ㅡ Ja, tienes razón, no tenemos libertades como héroes de Karmaland. ㅡRio sin ganas él castaño.ㅡ arriesgamos nuestras vidas y dejamos que consuman nuestro tiempo, para literalmente recibir nada... perdonen, hablé de más.

Suspiró acercándose al de baja estatura, para así envolverlo en sus brazos. Minutos después se separó, dedicándole una tranquila mirada.

ㅡ Nos vemos, Auron.

ㅡ Nos vemos, Fargan.

Estos volvieron a subirse en sus chocobos para así emprender viaje de vuelta a Karmaland. Nuestro querido protagonista, por su parte, se dio la vuelta con él ánimo por los pisos, ¿por qué? sencillo y resumido en dos palabras: LOS DIOSES.

Aquellos seres no eran pacifistas y mucho menos tolerantes y pacientes como para hacerse una idea de si seria perdonado por quedarse unos días de más en su pueblo natal.
Claro que no, la presencia de todos los héroes era sumamente importante debido a todos los peligros que había.

No había algo más importante para los dioses que su pueblo y las personas que lo habitaban, por lo que si algo llegaba a pasar, podía hacerse una infinitud de ideas de lo que probablemente podría pasarle.

ㅡ ¿Algo interesante? aunque... ㅡlos oscuros ojos ajenos se posaron en los de Perxitaa.ㅡ tu expresión me hace pensar que algo malo ocurrió...

ㅡ Bueno... ㅡrio amargadamente, abollando aquella carta perfectamente decorada.ㅡ tengo un límite de tiempo para ciertas cosas, y esto no es una excepción.

ㅡ ¿Acaso te han dicho que debes volver? ㅡSe acercó rápidamente, quitándole la carta de las manos.ㅡ pero si acabas de llegar, no puedes...

ㅡ Estoy acorralado Perxas, ellos tienen todo él control sobre mi... ㅡsuspiró, caminando a paso lento en dirección hacia la casa.ㅡ en todo caso me daría igual, pero temo que tomen acciones contra cualquier cosa cercana a mi. ㅡEl contrario tan solo podía escucharlo.ㅡ ustedes, adminplay, Frederick...ㅡrio al recordarlo.ㅡ Adam, Mónica...

Un profundo silencio se apoderó del ambiente entre ambos amigos, donde Auron seguía caminando hasta su respectivo piso. El pelirrojo intentó  pensar alguna clase de solución, pero sabia que aquello era casi imposible.

Tenia que disfrutar del tiempo que disponía con su mejor amigo.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro