𝑉𝑒𝑖𝑛𝑡𝑖𝑢𝑛𝑜. >> 𝐹𝑖𝑛𝑎𝑙 <<.
Un mes había pasado.
Un mes en donde esperé volver a ver a Jungkook en cualquier lugar.
Volví al trabajo una semana después de que salí del hospital y aunque los chicos no estuvieron de acuerdo ya que decían que debía tomarme más tiempo, yo quise volver de todas formas. Estar en mi casa encerrada no me hacía bien y menos cuando la mayor parte del tiempo mi mente pasaba ocupada pensando en ese idiota que se fue. Y eso me generaba rabia contra mi misma.
¿Por qué no podía seguir adelante? Yo creo que él lo hizo, que ahora debe estar muy feliz mientras yo estoy en un estado nostálgico que no tiene fin.
—Creo que nuevamente está en modo Jungkook... — escuché el susurro de Eungi. Giré para verla con una cara de pocos amigos y ella simplemente se fue hacia otro lugar de la tienda. Di un largo suspiro y apoyé mi cabeza entre mis manos en el gran mesón de servicio.
—No le hagas caso, le gusta molestarte — Dahyun respondió riendo mientras ordenaba unos productos del local — a todo esto, ¿puedes creer que esta idiota lo logró?
La miré confundida.
—¿Qué logró? — pregunté echándome una goma de mascar a la boca.
—Conquistar a Yoongi...
Mis ojos se abrieron a más no poder y sin quererlo, tragué el chicle que hace poco me había comido. A causa de eso comencé a toser fuertemente sin parar. Dahyun corrió en busca de una botella agua y cuando la obtuvo, me la lanzó golpeando mi cabeza.
—¡¿Qué demoni...
—Tómalo, no hay tiempo de reclamos.
La miré mal y abrí la botella, dándole un largo trago sintiendo como la picazón iba desapareciendo poco a poco.
—Olvidaré que me lanzaste la botella en mi cabeza solo porque estoy emocionada, ¿por qué yo no sabía nada de eso? ¿Mmh? — indignada era poco para lo que sentía en ese momento. Eungi ha estado como si nada y no me había contado tal notición.
—Es que se supone que yo tampoco sé — respondió riendo levemente — solo escuché hablar a Yoongi por celular muy meloso, ¿entiendes eso? ¿Yoongi siendo cariñoso? Hubiera preferido escuchar metal un día entero antes que a Yoongi siendo romántico, que asco — expresó haciendo arcadas en broma — y al final, dijo: "también te quiero, Eungini"... ¡Le dijo Eungini!
—Eso es tierno — estaba emocionada. Eungi logró conquistar el corazón tan frívolo de Min Yoongi.
—Eso es asqueroso — dijo rodando los ojos.
—Así estarás cuando caigas por Hoseok y te enamores, Dahyun...
—¿Q-qué? No hables estupideces, ¿quieres? — balbuceo torpemente y la miré con sugestión moviendo mis cejas. Hoseok es nuevo trabajando aquí en la tienda y es un sol. Es muy cálido, carismático y buena persona, se nota que llamó la atención de mi querida amiga y como no, si a parte de todas las cualidades antes mencionadas, olvidé recalcar lo guapo que era.
—Si, claro, estupideces... ¡Oh! ¡Hola Hoseok!
Dahyun rápidamente volteó y notó como no había nadie. Le di una sonrisa triunfal y ella me miró enojada, arrugando su nariz.
—Jungkook te debe estar esperando.
Tomé una bolsa de ramyeon y se la lancé por la cabeza.
—Eso fue un golpe bajo, Min Dahyun — respondí apuntándole con el dedo índice. Ella solo rió y se perdió en unos de los pasillos.
Luego de atender, ordenar, generar planillas, así concluía un nuevo día de trabajo donde el aburrimiento nuevamente se estaba haciendo presente en mí. Sentía como si hubiera vuelto al principio, antes de conocer a Jungkook y la monotonía era parte de mi día a día.
♡♡♡
—Se ha puesto a llover muy fuerte, ¿tomarán taxi o irán a la estación de metro? — Eungi preguntó mientras nos alistabamos para irnos ha nuestras casas. Nadie había traído paraguas pues la lluvia fue totalmente repentina.
—No traje nada que me cubra de la lluvia, así que tomaré un auto — respondí encogiendo mis hombros y me colocaba mi bufanda. — ¿Y ustedes?
—Bueno... yo debo ir a casa de Yoongi así que me iré con Dahyun.
Le dediqué una mirada pícara y solo rió con nervios.
—Debo ir a pedirle unas cosas... ya sabes... unas cosas que se supone que me iba a prestar y al final no lo hizo y...
—Ya, no des excusas tan pobres. Nos debes una explicación, merecemos saber la verdad — le dije con gracia, mientras salíamos de la tienda al notar como los del turno nocturno habían llegado.
—Bueno... lo sé. Es solo que esto es tan irreal, ¿cuántos años estuve detrás de Yoongi? Y ahora que por fin se de cuenta de mí es... maravilloso — se oía tan emocionada. Y no podía evitar estar sumamente feliz. Era un sentimiento genuino por personas que son importantes en tu vida y es real.
—Tendremos nuestra noche de chicas y nos cuentas como fue todo, ¿si? — animé dándole un abrazo apretado y a Dahyun también, aunque ella no era tan afectuosa. — nos vemos, avísenme cuando lleguen. Las quiero.
—Nosotras a ti — respondieron al unísono. Vi como corrieron bajo la lluvia hasta cruzar la calle y tomar un taxi. Podríamos irnos juntas si tan solo la casa de Yoongi y Dahyun quedara en la misma dirección que la mía. Aún estaba debajo de una gran sombrilla y no veía ningún automóvil. Chasquee mi lengua y mientras esperaba comencé a usar mi celular, pero eso fue solo distracción ya que no me fijé que pasó un taxi. Lloriquee en mi lugar, estaba lloviendo cada vez mas fuerte y aún no podía ir a casa.
Hasta que divisé uno a lo lejos y rápidamente me acerqué a la calle para hacer que se detuviera, empapandome.
Ojalá que el conductor no se moleste por eso.
Se detuvo y yo ingresé de manera inmediata antes de mojarme aún más que caía a cántaros.
—Lo siento por esto, no creía que se pondría a llover tan fuerte — dije apuntándome. Era un desastre. Escuché como el conductor dio una risa nasal e hizo un ademán con su mano, indicando que no me preocupara. Agradecí nuevamente y le indiqué la dirección.
Se veía misterioso con ese gorro y mascarilla puesta, pero no le quise dar más vueltas al asunto. No podía desconfiar de cada persona que se viera sospechoso, estoy trabajando en ello con mi psicóloga: "hay que trabajar para que puedas volver a confiar" y creo que por eso puedo estar un poco más tranquila en este momento. Saqué nuevamente mi celular de mi bolso y les mandé un mensaje a las chicas avisando que recién había tomado el taxi para que no se preocuparan. Y sí, luego de lo acontecido han sido mis mamás osas protegiendome de todo y todos. Sonreí inconscientemente al recordar eso y di un largo suspiro. Vi a través de la ventana como la gente corría de la lluvia y es inevitable no ponerse nostálgica con este clima. Los recuerdos que tenía con la persona que me hizo feliz en tan poco tiempo eran desgarradores y aquí viene mi arrepentimiento al no aprovechar los momentos que tuvimos, el no haber sido tan testaruda cuando lo único que quería hacer era correr a sus brazos cuando me dijo que me amaba.
Me amaba y yo también a él.
No podía ser cierto que nuevamente estaba llorando. Mi sensibilidad estaba al límite y según Dahyun se debía a que estábamos en el mes de cáncer y eso hacía que me pusiera de tal forma.
Dahyun y sus temas de horóscopo.
—¿Se encuentra bien? — preguntó el señor al ver que no podía parar de llorar. Me sequé rápidamente mis lágrimas y asentí.
—No se preocupe, solo recuerdos que hace que uno se ponga sentimental — bromeé. Él asintió y no dijo nada más hasta que llegamos a mi casa. — ¿Cuánto es?
—No es nada. Tranquila.
—¿Cómo? — pregunté dudosa — oh no, le pagaré, dígame cuanto es, no sale tan caro de mi trabajo hasta aquí, solo...
— Digamos que es por el tiempo que estuve lejos. Te extrañé muchísimo, bonita.
Estaba sacando mi billetera del bolso y apenas escuché su voz me quedé paralizada. Mis manos comenzaron a temblar y mi barbilla también, indicando que estaría próxima por largarme a llorar. Levanté mi vista con temor y él se estaba sacando sus accesorios... era él y no me había dado cuenta en todo el trayecto. Tapé mi boca para evitar soltar un sollozo.
Su cabello había crecido en este mes, pero seguía igual que siempre... era Jungkook, mi Jungkook.
—¿Q-qué? ¿Cómo es... posible? — tartamudeé. Estaba completamente nerviosa y es que había imaginado muchos escenarios en donde me pudiera volver a encontrar con él, pero no... así.
—Hoy volví a Seúl y lo primero que hice fue ir por ti... yo... lo siento por desaparecer así. Fui a Busan para encontrarme conmigo mismo y poder superar todo. No sabes lo mal que me sentí al no tenerte a mi lado, sabía que necesitabas apoyo — relamió sus labios y volteo a mirarme — pero alguien jodido no te serviría de apoyo y por eso necesitaba estar bien...
Las palabras no querían salir de mi boca y solo opté por salir del auto a paso rápido. Jungkook también hizo lo mismo y tomó mi brazo de manera delicada para evitar que siguiera caminando y me hizo voltear, haciendo que chocara con su pecho. La lluvia aún no cesaba y ambos ya estábamos empapados por ella.
—Perdóname... por todo. — la diferencia de altura no era tan considerable, pero aún así tuve que levantar mi rostro para encontrarme con el de él. Sus ojos brillaban mucho y gotas caían por su rostro, lo cual lo hacía ver muy bonito. Y es que él siempre ha sido bonito. — por haberte mentido, por no haber confesado desde el primer momento lo enamorado que estaba de ti y lo loco que me tenías... si tú me lo permites, Iseul, haré las cosas bien esta vez. Dame una oportunidad, solo una — su rostro estaba bastante cerca del mío, podía sentir su respiración en mi cara y eso solo hizo que cada vello se erizara en mi piel — te amo mucho, te amo muchísimo bonita. Creemos nuestra historia de amor a nuestra manera, correcta, sin mentiras.
No pude dejar que terminara de hablar, me lancé ferozmente a sus labios, dejándolo sorprendido, pero de manera instantánea siguió mi ritmo. Nuestros labios se movían al compás, sincronizados perfectamente. Me puse de puntillas y tomé su cabello, mientras él tomó mi rostro, profundizando aún más el beso, dejando leves caricias en él. Un beso intenso, que dejaba en evidencia cuanto nos habíamos extrañado, cuanta falta nos habíamos hecho. Posó su frente junto a la mía y frotó su nariz en mi mejilla, donde depositó un beso, luego en mi frente y volvió a terminar en mis labios.
—No sabes la falta que me hiciste — susurré, tomándolo de su chaqueta — pensando cada día en que si estabas bien, el porque de tú desaparición tan repentina... tú... tú desapareciste y no pude confesarte lo mucho que te amo, Jungkook — envolví mis brazos alrededor de su cuello y él me tomó de la cintura, acercándome aún más a él — quiero que seamos felices, quiero ser feliz al lado del hombre que amo — terminé de confesarle y solo eso bastó para que me dedicara la sonrisa mas hermosa del universo y que nuevamente atacara mis labios.
Sonrió en medio del beso y me levantó dándome vueltas. Reí a causa de eso y así estuvimos, besándonos bajo la lluvia, demostrándonos todo lo que sentíamos con estos hechos.
Porque no hay mejor sensación que ésta, sentir que todo vuelve a encajar y a estar bien. No hay mejor sensación que un beso de la persona que amas y no importa si es aquí o en cualquier lugar...
Mientras que esa persona sea Jungkook, todo estaría perfecto.
Mientras siga siendo la misma persona... la misma persona que pone mi mundo de cabeza, todo estaría bien.
Y creo que siempre estaría agradecida de que el destino lo pusiera en mi camino cuando decidí tomar aquel taxi
Porque sin buscarlo, ni planearlo, es todo lo que necesitaba en mi vida.
Fin.
Ñaoooooo me puse bien sentimental y es que amo a jungkook, t amo flaco amor de mi vida ehhh kajdjs
Este es el final 😭 y doy gracias por el apoyo, cada comentario, dee verdad muchísimas gracias por darle una oportunidad tal como lo hicieron con "Iron girl" 🥺.
Nos vemos en el epílogo 💝🙏🏻.
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