Iban de regreso a la casa del menor, emocionados por al día siguiente dar la gran noticia.

La emoción se terminó a la hora que el auto se quedó sin gasolina parando a medio camino. Ambos salieron del auto, y buscaron formas de comunicarse con alguien por medio telefónico pero uno no contaba con batería y el otro con señal.

-Por esta calle queda cerca un hotel... podemos pedir el teléfono y hablarle a NamJoon

-Buen punto precioso, vamos.

-Si quieres yo me quedo aquí en el auto, quizás volvemos y ya no esta.

-Mi amor, no pienso dejarte solo, vamos y aparte el carro no tiene gasolina, no podrían hacerlo arrancar.

El castaño acepto y tomaron rumbo al hotel. En busca de ayuda, mientras en el camino se divertían contando anécdotas o chistes.

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-¡Eres un inútil!-Lo abofeteo-¡¿Cómo pudiste dejar que se te escapara?!

-Lo siento, llevo casi un mes buscandolo, en Houston ya no estaba.

-¡No quiero excusas!, ¡¡Tu misión era llevártelo lejos!!.

-Yo no contaba...

-Agh eres un maldito inútil, tendré que hacerlo todo por mis manos, acabaré yo con los hermanos Min. Y tu me ayudarás, con algo más sencillo, por que tu pequeño cerebro no da para tanto.

-Lo lamento, pero yo ya no ayudaré, en Houston encontré a mi omega, jamás pensé que el amor por una pareja fuese tan fuerte, ahora me doy cuenta que lo de Tae fue una obsesión, no pienso seguir ayudándolo, mi omega me necesita.

-¡Infeliz!.

Tras tal noticia el señor Min tomó cualquier cosa en sus manos, más específicamente un jarrón de metal, con el cual golpeo el estómago del alfa menor haciéndolo caer de golpe al suelo.

-Señor Min...

Otro golpe fue dado ahora en su cabeza, un golpe tras otro, el pelirrojo muy apenas podía levantar una mano.

-Se-ñor...

Min cegado en su enfermizo enojo lo golpeo, hasta que sus manos se cansaron. Se paró de encima de él, y se fue a su pieza muy tranquilo como si e cuerpo del chico ensangretando no estuviera en el suelo de su sala.

[...]

-¡Amor!, ya tengo señal-Festejo el castaño, y al mismo tiempo que ingreso a la aplicación una llamada ingreso a su celular.

Sin mirar el número contesto.

-Si, bueno.

-TaeHyung... soy HoSeok.

TaeHyung se paralizó al escuchar la voz pero su lobo no lo dejó colgar, más bien
Algo le decía que tenia que escuchar.

-Lo lamento... en serio-Tosió-lo siento. Pero ahora eso no importa... corres peligro... tu papá... tu papá esta mal, estas tu y tu alfa en peligro.... yo ya no tengo tiempo.. por favor... se que no fui bueno contigo... pero te suplico... cuida a mi omega, esta solo en mi casa... ya no me queda mucho...

JungKook escuchaba aquella llamada puesta en altavoz, sus ojos viajaron a los avellanos de su omega, miraron el número y era..

-Es el número de la casa de mi padre..

-Cuelga y déjame le marco a Lisa... vive cerca.

Dicho y echo marcaron a Lalisa que con dos unidades se dirigió a casa del señor Min, en lo que NamJoon llegaba por ellos.

Con un bote lleno de gasolina llenaron el tanque, para después dirigirse a la antigua casa de TaeHyung.

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La noche feliz se transformó en un infierno, llegaron a la casa, el padre de los Min no estaba, solo habían cintas de peligro, las cintas amarillas utilizada por los policías.

Pasaron las cintas y entraron a la casa, los paramédicos subían un cuerpo a las camillas.

-Aún vive.

JungKook junto a su prometido se acercaron y miraron al pelirrojo con la cabeza casi desecha, su rostro sangraba por las heridas, en su cabeza había suficiente sangre, a ambos no les sorprendería que ahí unieran pequeñas partes cerebrales.

TaeHyung dejo escapar un sollozo, ¿su padre había hecho eso?, no lo podía creer.

HoSeok podía morir, y una de sus últimas palabras fueron perdón. Eso para el castaño valía bastante, era una muestra de arrepentimiento sincera.

La ambulancia salió del lugar al igual que ellos, tomaron rumbo a la casa del pelirrojo, si era cierto un omega lo estaría esperando, el no sabía lo sucedido y merecía saberlo.

[...]

-Si, ¿quien es?-El pelinegro abrió la puerta.

-Hola, soy Min TaeHyung, ¿tu eres el omega de HoSeok?

-Hola, si soy EunWoo Cha, ¿y él?

Apuntó al azabache que no dejaba de sostener a TaeHyung posesivamente.

-Él es mi alfa, Jeon JungKook, venimos a informarte... HoSeok esta en el hospital muy mal herido, no creemos que sobreviva esta noche.

Fue doloroso para el omega pelirrojo llegar a aquel hospital y esperar horas para saber si su pelirrojo saldría con vida, TaeHyung y el alfa Kook le habían dicho en el camino toda, absolutamente toda la historia de ellos 3, al igual del que le había pasado a HoSeok.

Cha EunWoo no podía creer lo que su alfa había hecho, pero realmente no le importaba demasiado, solo le importaba que saliera con vida hoy. Suplicaba que eso los doctores le dijieran.

-Parientes de HoSeok Jung.

-¡Soy su omega!, ¿Cómo está él?-Exclamó con nerviosismo y miedo al escuchar la respuesta del doctor.

-Lamento informarle, que el cráneo del paciente se rompió dividiendolo en algunos pedazos que ingresaron a su cerebro causándole daños muy graves, probablemente no llegue con vida al día siguiente.

Él omega sintió su corazón romperse, su lobo debilitarse y sus piernas franquear, su cuerpo perdió fuerza pero antes de caer al suelo JungKook lo sostuvo, y TaeHyung corrió a auxiliarlo. Él omega no merecía vivir esta situación, HoSeok estaba pagando por el daño que había causado, pero ese omega de ojos azules, ¿qué estaba pagando para tener que recibir tanto dolor?.

TaeHyung no comprendía el por que a las personas buenas cosas malas les sucedía.

Y como era de esperarse, el alfa HoSeok a las 2:00 de la madrugada perdió la vida.

-Me abandonas así de fácil, ¡¡Me prometiste una vida feliz!!, ¡¡MALDITO FLOJO ABRE LOS OJOS!!, ¡¡QUIERO ESA FAMILIA QUE ME JURASTE DAR, ESA ALEGRÍA QUE ASEGURASTE ME DARÍAS!!, ¡¡¡ME ESTAS DANDO TODO LO CONTRARIO HOSEOK!!!-Gritaba con su voz desgarrandose en cada palabra de desesperó.

Los guardias llegaron jalando al omega fuera de aquella habitación.

-¡Despiertate alfa inútil!, ¡¡ES UNA ORDEN JUNG!!

TaeHyung tras esa escena tan dolorosa se dejo llevar por lo que su corazón sentía y cayó a una silla llorando, abrazándose de sí mismo, JungKook solo se arrodillo y lo abrazo para después acariciar sus hebras del cabello intentado darle tranquilidad.

Su noche de felicidad cambió abruptamente, su padre le quitaba la felicidad a otra persona más... ¿ahora que planeaba hacer?, ¿Qué otra vida robaría o que otra sonrisa borraría?.

Tenía y debía ponerle un alto a su progenitor, no le importaba ser un omega débil ante un alfa de ya experiencia y bastante fuerza física, apesar de todo, su Azabache y el se ocuparían de vengar la muerte de su madre y de HoSeok, fuese como fuese.