La cena del pelinegro había terminado, TaeHyung lavó los trastes utilizados y el de aroma a galletas limpiaba la mesa. Ambos fueron a su habitación, JungKook se sentó en la punta de la cama y el castaño por instinto se sentó a horcajadas en el alfa pelinegro.

—Mi amor, ¿ya me dirás de que quieres hablar?.

—Kookie—Mencionó aquel apodo que sólo utilizaba en temas serios o que aterraban al omega—Después de esto... la decisión que tomes la aceptaré, no importa que sea solo... te entenderé.

—Tae, amor no me preocupes, ¿Qué está ocurriendo?.

—Kookie yo... ¿Recuerdas ese cuento que Yoonie me escribió?

—Como olvidarlo, después de que saliste del hospital, cada que soñabas con ese día me pedías leertelo.

—Si... bueno. ¿que le dice la doncella al príncipe después de dos años cuando el príncipe compró la casa a las afueras del pueblo?.

—Que estaba embarazada y.... espera. No me digas que... ¿Estás?.

El de luceros avellanas bajo la mirada y asintió.

—¿Cuánto?

— Dos semanas

Sus avellanos brillaron gracias al agua que se acumulaba en ellos. No sabía el por qué pero el miedo e inseguridad se instalaban en su pecho sin permiso.

El pelinegro se estremeció con timorato. Soltó a su omega, lo bajo lenta y cuidadosamente de su regazo, el de aroma a vainilla solo levanto la mirada aún con más miedo al ver la seriedad de su amado.

Se acercó a la ventana, corrió las cortinas y abrió la puerta para después asomar su cabeza y sorpresa fue la que se llevó el omega al escuchar aquel grito.

—¡¡VOY A SER PAPÁ!!—Grito con regocijo

TaeHyung dejo salir un suspiro y unas cuantas lágrimas traicioneras, su vista se torno borrosa por el líquido transparente que inundaba sus orbes.

El alfa pelinegro al percatarse de aquel sentimiento a tranquilidad y miedo, volteó a ver a su omega quien al contacto con aquellos ojos negros llenos de luz y alegría se levantó y corrió a abrazar a su alfa.

—Eres un estúpido alfa—Golpeo su pecho y se dejo abrazar por el mayor quien solo acarició su cabellera castaña y hablo.

—Soy tu estúpido alfa.

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—Si es niña TaeSun.

—Y si es niño SuKook.

—Me gusta...

—Me encanta—Finalizó la charla el alfa besando la cien de su omega y acomodándose mejor para dormir.

A la mañana siguiente tanto alfa como omega fueron a sus trabajos.

TaeHyung tenía que ver el tema sobre aquella familia. Al estudiar como abogado su carrera fue crentrada a abogado de familia.

Ahora estaba viendo el tema de un señor que peleaba a su hijo de 3 años, quería custodia completa y más aparte una orden e restricción hacia la beta, pues esta según aquel alfa no merecía el ser llamada madre, aquella que apensar de su pequeño tener 3 años lo maltrataba tanto física como de manera verbal.

La señora de 35 años había dado fuertes declaraciones frente a él el día que los cito a ambos junto a su abogado para hablar del tema, esta había gritado asegurando que aquel pequeño niño no era hijo de él alfa. Complicado más la cosas.

El juicio se llevaría acabo el día de mañana jueves. Suspiro y una vez más se mentalizo dándose ánimos a si mismo de que aquel juicio ya lo tenía ganado cuando el timbre de sus oficinas sonó.

Aquel lugar en el que TaeHyung trabajaba era una casa dividida en dos sectores, la parte baja era su consultorio. Había una sala de estar común a la de un hogar familiar. Frente al consultorio había una puerta de cristal opacó que está daba a una  sala de juegos para los niños ya sea hijos de sus pacientes o pacientes, justo al lado de esta unas escaleras con alfombra negra daban a la planta alta donde era su oficina de trabajo y a un lado se encontraba el baño. Aquel lugar lo había recibido como regalo de parte de sus padres y con aporte de la familia Kim.

—¡Señora Jung!, ¿Qué la trae por aquí?

—Hola querido, bueno pues estuve preguntando hasta que di con la dirección de tu trabajo, quería saber su me puedes agendar una cita.

—¡claro!—Exclamó alegre—¿Me busca como Abogado o psicólogo?.

—Psicólogo querido, verás mi nieta esta teniendo dificultades ahorita en su niñez, pues quisiera que la atendieras.

—Si por supuesto, pase.

La guío hasta su consultorio y ambos tomaron asiento. TaeHyung sacó una agenda y la analizo.

—Mire le parece bien si la atiendo todos los miércoles a las cinco de la tarde.

—Si, ella está conmigo Lunes, Miércoles y sábados así que si. Bien hijo. Muchas gracias—Se levantó.

—Espere señora Jung, antes de que se vaya. Tenga—le entregó una tarjeta—Por la parte de enfrente tiene mi contacto como abogado y por detrás de psicólogo.

—Gracias TaeHyung, por cierto te felicito por tu pronta boda. Te deseo lo mejor en tu matrimonio querido.

TaeHyung agradeció con una referencia y acompañó a la señora hasta la salida.

—¿Papá?

—Hijo.. necesito que me ayudes, la familia Wang esta buscando un abogado familiar, les hable de ti. Irán a tus oficinas en dos horas.

—Claro padre, gracias.

Las horas pasaron rápidas en su trabajo, cuando ya dieron las 7 de la tarde llegó a casa preparandole una deliciosa cena a su prometido como todos los días.

—¿Amor?.

—¡JungKookie!—Corrió a sus brazos—Amor

Rio enternecido—¿Y ese mameluco mi amor?

—Hoy vamos a ver cinco películas de disney. Así que vete a bañar, tu comida ya esta lista y después se va a enfriar.

—¿Por qué está noche de películas tan repentina?—Acarició su mejilla.

—Mañana temprano es el juicio... necesito que me mimes toda la noche para tener energías para mañana.

—Mi amor pero si siempre te doy mimos.

—¡Pues hoy serán el doble!, así que rápido alfa.. a bañarse.

JungKook se metió al baño riendo y encantado por el omega que tenía por prometido, futuro esposo, padre de su futuro hijo o hija y por omega.. vaya que no se arrepentiría jamás de haberse fijado desde aquel día en "el esposo" de su mejor amigo.

Muchísimas gracias por el amor y apoyo que le están dando a esta historia 💖 y los invitó a darle ese mismo amor y apoyo a mi otra historia. El chico de los poemas!!, no se arrepentirán tan solo. Echen un vistazo.

¡¿Qué creen que sea?!, ¿niño o niña?🤔🤭.