Los truenos comenzaron a hacerse presentes en el cielo, comenzando una fuerte lluvia

—¿Cómo se lo quitamos de encima sin lastimarla?— cuestionó Hipo pensado que hacer

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—Viva a la barba pachona— manifestó Brutacio con un fuerte grito

Uno de los hombres encargados de encerrar a los dragones tomo su espada y corto la barba de brutacio, partiendola a la mitad

El rubio miro con tristeza su barba, soltó un fuerte grito, y fue directo hacia el hombre, atacandolo por destruir su barba

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Los hermanos Miracle estaba siendo atacados por cientos de hombres, pues ambos estaban dando buena pelea

—¿Estás lista?— preguntó Billy mirando a su hermana, aquellos hombres que estaban dispuestos a atacar fueron detenidos por las grandes aureolas ocasionadas por ambos hermanos

Una fuerte energía se sintió en el cuerpo de William y Amelia Miracle, nunca antes habían sentido aquella energía rodeando su cuerpo, sus poderes chocaron violentamente, causando una explosión de magia, amenazando con alterar la realidad misma

Su energía se comenzó a manifestar en brillantes colores azules y rojos, su entorno se torno brillante y surrealista, ninguno de los dos sabía que era lo que pasaba

"No dejen que la magia oscura los controle"

"Salvanos"

Aquellas palabras fueron las que ambos hermanos recordaron, un clik en su cabeza se hizo presente, ambos se miraron rápidamente, comprendían lo que estaba pasando

Cada vez era más difícil para ellos controlar su magia, los ojos de Amelia se habían puesto de un rojo fuego, asustando a Billy y a todos los demás presentes

—Amelia... Amelia escuchame— suplicó Billy

Poco a poco ambos hermanos se elevaron el el cielo, siendo rodeados igualmente por la fuerte energía de magia

Las venas del rostro de la pelirroja comenzaron a tornarse de un negro, al igual que sus ojos

Billy asustado al ver a su hermana en ese estado trató de hacerla reaccionar

—Billy— soltó Amelia en un suspiro— No puedo... controlarlo

—Si, si puedes hermana— exclamó Billy sosteniendo las manos de su hermana

Tal parecia que el poder de la magia oscura se estaba apoderando del cuerpo de la ojiazul, y si eso pasaba, la Amelia Miracle que el mundo conocía, desaparecía para siempre

Billy no dudo ni un segundo, y aunque el no sabía si lo que haría funcionaria, para el valía la pena intentarlo

Se puso frente a su hermana, puso ambas manos en el pecho de la jinete, y aquella magia oscura que la poseía la comenzó a traspasarlo a su cuerpo

El dolor que el sentía en ese momento era enorme, sentía que explotaría en cualquier momento, sus ojos se tornaron negros, las venas de su rostro se pusieron de un color negro y rojo intenso, parecía que su cuerpo no podría soportar tanto poder

Amelia reacciono, miró a su hermano con horror, pues el rostro de su hermano era otro, ambos hermanos cayeron al suelo de golpe

—No... Billy— sollozo Astrid mirando a su novio

—Mi bella Astrid, mi amada novia... te amo— balbuceo el jinete con dificultad

Amelia corrio hacia el, no podia creer que su hermano se sacrificara por ella

—No, no, no— lloriqueo Amelia tomando el rostro de su hermano— Si tan solo hubiera me controlado

—No te culpes hermanita— pidió Billy— A veces el destino es caprichoso, ¿No lo crees?

William Miracle poco a poco cerró sus ojos, ocasionando el llanto de las jinetes, Amelia y Astrid, habían sido las mujeres más importantes para el, después de su madre claro estaba

Amelia no estaba dispuesta a dejar morir a su hermano, con la poca magia que le queda, creo un aura que los cubría a ambos, y cierto toda la fuerza que tenía, puso sus manos arriba del pecho de Billy

Amelia fusionó la energía que poseía en el alma de su hermano, restaurando gradualmente sus esencia y cuerpo, ella no sabía como es que esa idea se le vino a la mente, simplemente lo intento, y ofrecía funcionar bastante bien

Los ojos de Amelia y William Miracle se abrieron de golpe, sus ojos se pusieron de un tono dorado, sus ojos brillaban demasiado, ambos hermanos experimentaban una profunda conexión, una conexión que iba más allá de los límites físicos

—¿Sigo vivo?— preguntó Billy

Amelia lo miró con alegría y lo abrazo, Astrid no se quedó atrás, ambas chicas estaban felices de poder ver a el chico vivo

—¿Lo vez?, tu me salvaste esta vez— verbalizo Billy mirando a su hermana

Una fuerte energía se entrelazo entre ellos dos, no solo era magia oscura, ni magia de luz, ahora poseían otras habilidades que con el tiempo descubririan

Ahora no solo tenían una segunda oportunidad de vida, era el inicio de dos grandes leyendas

—Su armadura— exclamó Patán, quien había llegado junto a los demás jinetes

La armadura de los hermanos Miracle era distinta, Billy poseía una armadura azul rey, con un casco brillante

Amelia por su parte, tenía una armadura que se acoplada a su delgado cuerpo, en su cabeza poseía una corona, tono en tonos rojos y plateados

Habían recuperado toda su magia, y más

Ambos se elevaron en en los cielos, de su manos salieron aureolas azules

Extendieron sus manos a los lados, ocasionando que las aureolas hundieran y destruyeran los barcos de los cazadores, poniendo fin a esa batalla

Todos los jinetes celebraron lo acontecido, Abel llegó corriendo a abrazar a sus hijos, estaba orgulloso de lo que se habían convertido

—Su madre estaría muy orgullosa de ustedes— sollozo su padre, la familia Miracle se unio en un hermoso abrazo, pues ahora parte de esta guerra había terminado

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Mientras tanto, Hipo era atacado por los dragones de Grimmel, Chimuelo enfurecido logró quitárselos de encima

—¿Qué estas haciendo?— cuestionó Hipo, Chimuelo soltó un fuerte rugido, de su cuerpo salieron rayos, electrocutado así a los dragones, dejándolos inconscientes

Grimmel con enojo, tomó una jeringa que contenia veneno, incrustandolo en Chimuelo, quedando inconsiente

Hipo salto como pudo hacia la Furia Luminosa, mientras que Grimmel se sostenía de la pierna de Hipo con fuerza, Hipo quito lo que la Furia Luminosa tenía en su cabeza, logrando así que dejara de ser controlada

—Salvalo— suplicó Hipo cayendo en picada al mar junto a Grimmel

La Furia Luminosa no dudo en salvar a Chimuelo, Hipo solo miro como Chimuelo había sido rescatado

Mientras estos caían, Sareth salvo a Hipo y a Grimmel

—Tanto tiempo sin vernos hermano— dijo Abel mirando como su hermano estaba tirado en el pasto

—Maldito— maldijo Grimmel atacando a Abel

Ambos hermanos comenzaron una fuerte pelea

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—Grimmel— murmuró Billy viendo a su padre luchar con este

—No, esta es la pelea de nuestro padre— exclamó Amelia impidiéndole a su hermano ir a donde aquellos hombres peleban

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—Me arrebataste a mi esposa, ahora yo te arrebatare tu vida— grito Abel con furia

—Matar a Anna fue más sencillo de lo que creí— admito el hombre

Abel enfurecido, tomó su daga y corto la garganta de Grimmel

—Adiós hermano— se despidió Abel

Todos los vikingos celebraron el triunfo de Berk

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—Hey, upa upa... ya despierta— vocifero Hipo despertando a Chimuelo— Tu si estas lleno de sorpresas... todo tuyo— dijo Hipo mirando a Chimuelo y a la Furia Luminosa

—¿Estás bien? ¿Te lastimaste?— interrogó Hipo mirando que su novia estuviera bien

Amelia lo beso rápidamente

—Estoy bien— contestó

Hipo miro como Chimuelo estaba junto a la Furia Luminosa y con tristeza supo lo quw tenía que hacer

—Podremos visitarlos— afirmó Amelia ayudando a Hipo a mantenerse parado, pues con la caída había perdido su prótesis

El jinete se acercó con ayuda de la pelirroja a Chimuelo

—Tienes razon, estaba tan ocupado luchando por el mundo que yo quería, que no me detuve a ver por tus necesidades— exclamó Hipo mirando a Chimuelo— Creó que ya nos han cuidado mucho... ahora cuídense entre ustedes, ahí van a estar a salvo... en ese lugar van a estar más seguros que conmigo, si lo se, yo también te amo y quiero que seas libre, nuestro mundo no los merece Chimuelo... aún— se despidió el ojiverde

Chimuelo lo abrazo, pues ese abrazo sería el último que se darían

—Ve Chimuelo.... ve— sollozo Hipo, miró a la menor de los Miracle y le dio una pequeña sonrisa, Amelia comprendió lo que tenia que hacer

—Nuestros dragones merecen una vida en libertad, lejos de la mirada de los humanos, es hora de proteger su existencia...  es hora de empezar una nueva vida... nosotros siempre seremos jinete, no importa lonque pase— anunció Amelia con tristeza

Todos los vikingos con tristeza de despierta de sus dragones, deseándoles un buen viaje y una buena vida

—Sareth, mi fiel amigo, te extrañare tanto, aunque... te visitaré, no se como, pero nos volveremos a ver— sentencio la pelirroja, Sareth la abrazo, aquel abrazo fue el abrazo más triste que había dado

Chimuelo soltó un fuerte rugido, que fue contestado por el rugido de los demás dragones, ahora todos los dragones estaba siendo guiados al mundo oculto

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Tres meses habían pasado desde aquella despedida, no todo era tristeza en Berk, pues todos los habitantes de Berk estaban presenciando la boda de Hipo Haddock y Amelia Miracle

—¿Aceptas a Amelia Miracle como tu esposa, amarla y respetarla, hasta que la muerte los separe?— dijo Bocón 

—Acepto amarla incluso después de la muerte— respondió Hipo con una sonrisa

—¿Aceptas a Hipo Haddock como tu esposo, amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe?— continuó el hombre mirando a la pelirroja

—Acepto amarlo por toda la eternidad— contestó Amelia con alegría

—En ese caso, los declaró marido y mujer, puedes besar a la novia— concluyo Bocón

Hipo tomo a la ojiazul por la cintura 6 le dio un fugaz beso

—La amo, señorita Haddock— vocifero Hipo mirando a subahora esposa

—Te amo, mi amado esposo— secundo Amelia volviendo a besar a Hipo

—Por el Jefe y la Jefa— grito Patán con emoción

Todos celebraron la unión de aquellos jóvenes enamorados

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10 AÑOS DESPUÉS

Hipo de ahora 31 años, viajaba junto a toda su familia en un pequeño bote, en busca de un viejo amigo suyo

A lo lejos, pudo mirar como un enorme dragón de color negro lo miraba, este emprendió vuelo hacia el barco, se acercó a Hipo de forma amenazante, mientras que Hipo por su parte, extendió su mano

—Hola, ¿como estas amigo? ¿te acuerdas de mi?— murmuró Hipo

—Tranquilos—Amelia puso a sus hijos detrás ella para protegerlos

No tardo mucho para que Chimuelo reconociera a Hipo, salto sobre el, llenándolo de baba

—Oye, a ni también me da mucho gusto verte amigo— exclamó Hipo mientras jugaba con Chimuelo

—No se va a comer a su padre, son amigos— afirmó la pelirroja

Hipo llamo a sus hijos para que tocaran a Chimuelo, aquellos pequeños se acercaron con miedo

—No los lastimara, estiren sus manitas... dejen que se acerque— indicó Haddock, Chimuelo se acercó a los pequeños, dejando  que estos lo acariciaran

Chimuelo también estaba feliz de ver a la pelirroja, se acercó a ella para jugar, Amelia gustosa Acepto con alegría

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Habían pasado algunas horas,  Hipo junto a su hijo menor montaba a Chimuelo, mientras que Amelia volaba junto a su hija mayor y junto a Sareth, quien también estaba feliz de verla después de varios años

Toda la familia Haddock Miracle volaba junto a los dragones, felices de poder estar juntos de nuevo

—¿Una carrera?— propuso Hipo

—Siempre termino ganandote— exclamó su esposa

—Te ganaremos papá— afirmó su hija, comenzando así una carrera entre ellos

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NARRA HIPO:

Había dragones cuando yo era niño, dragones muy muy grandes y sombríos, que anidaban en acantilados como gigantescas y aterradoras aves

Había pequeños dragones color café, que  cazaban ratas y ratones en manadas bien organizadas, dragones de mar descomunales, que eran veinte o treinta veces más grandes que una ballena azul, algunos dicen que regresaron al mar sin dejar un solo hueso o colmillo para que los hombres los recordaran, otros dicen que desde un principio eran solo historias

NARRA AMELIA:

Cuenta la leyenda que cuando el suelo tiembla o la tierra escupe lava, son los dragones, haciéndonos saber que siguen aquí, esperando a que aprendamos a convivir con ellos

Los dragones son criaturas míticas que aparecen en la historias alrededor del mundo, representados como serpientes aladas con aliento de fuego, pero con su imagen imponente y misteriosa, los dragones se han convertido en iconos legendarios en la imaginación humana

Si, el mundo cree que los dragones se han ido, si es que alguna vez existieron, pero los Berkianos sabemos la verdad

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FIN