Por otro lado, Valka Haddock, se llevo una gran sorpresa al darse cuenta que miles de barcos con jaulas iban en dirección a donde ella junto a los demás vikingos y jinetes se encontraban

Varios dragones asesinos trataron de atacar a ella y Brinca nube, aunque ambos fueron más ágiles y fuertes, logrando así escapar de aquel lugar

—Vamonos Brinca nube— ordenó la mujer

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Las hermosas nubes rodeaban el cielo, Chimuelo rugia para intentar encontrar a aquella hermosa Furia Luminosa, no pasó mucho tiempo para que ambos dragones enamorados pudieran estar juntos de nuevo

Ambos estaban felices de estar juntos, volaron juntos por varias horas, ambos en una hermosa sinfonía, Chimuelo nunca había experimentado algo parecido a eso, pues a pesar de ser un dragón fuerte y poderoso, jamás había viajado solo, sin la compañía de su mejor amigo

Aunque aquel dragones debía aceptar que estar junto a aquella Furia Luminosa era algo maravilloso para el

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Todos en Berk estaban celebrando y festejando por estar nuevamente acentuados en aquel lugar donde habían arribado hace pocos días

—Hijo, pensé que estabas perdiendo la razón, pero este lugar no estaba nada mal— balbuceo Bocón quien ya se encontraba algo ebrio

—Se suponía que fuera una solución temporal— dijo Hipo

—Hubo democracia... todo el mundo piensa que esta fue una mejora, bien hecho Jefe— felicito Ereth

Hipo no decía nada, pero el sabía que aquel lugar no estaba ni cerca de ser el lugar que quisiera

—Hipi, un momento, oye... te he estado viendo como caminas, no cojees amigo, nadie se casara con eso— indicó Brutacio con una risita

—¿Qué quieres que haga?, tengo una prótesis— protestó Haddock

—Si, yo también— secundo Bocón

—Y yo una gemela parásito y no me ven cojeando por la vida— recalco el rubio con enojo, Hipo solo rodó los ojos, ignorando completamente lo que decía su amigo

Mientras Brutacio le daba indicaciones de cómo caminar, Valka llegó preocupada por lo que había visto anteriormente

—Mamá, ¿Estás lastimada? ¿Qué pasó haya afuera?— preguntó Hipo al mirar a su madre agitada

—No se como, pero, Grimmel... esta rastreandonos— declaró Valka

—Esto es culpa de esos Hobglotones— afirmó Bocón con preocupación

—Se acerca con cien barcos, tal vez más, con jaulas suficientes para todos los dragones que tenemos— comentó Valka mirando a los jinetes, quienes ya se encontraban ahí

—Si Grimmel los esta guiando hasta aquí, tenemos que dejarlo fuera de combate... — exclamó Hipo

—¿Cómo hacemos eso?— preguntó Billy

—Pues yendo hasta el para capturarlo— indicó el azabache con determinación

—¿Capturarlo?— cuestionó Bocón

—Cuenta con nosotros— apoyo Abel Miracle mirando al novio de su hija

—Necesitamos que todos en Berk se preparen para lo que se aproxime— declaró Astrid

—Nosotros nos quedaremos, prepararemos todo- verbalizo Anna

—No, Tu ve con Hipo, Abel, Bocón y yo preparemos todo en caso de que lleguen antes de lo previsto— sentencio Valka

—Cuídate— pidió Abel, dándole un beso a su esposa

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Grimmel el grimoso, aquel famoso cazador de Dragones recolectada lo que parecía ser veneno, sin siquiera pensar que ciertos jinetes estaban a punto de atacarlo

—Todos, separence, asi no nos atraparan— indicó Patán a los demás, acto que nadie escucho

—Tenemos que separarnos... yo digo— exclamó Ereth mirando a Anna

—Me gustan tus instintos— felicitó Anna

Todos los jinetes se separaron, preparandose para atacar

Hipo y Amelia entraron directamente hacia el lugar donde Grimmel se encontraba oculto

Una enorme jaula se extendió al rededor de ellos y de sus amigos, asustandolos en gran manera

—¿Dónde esta tu dragón cuando lo necesitas?— canturreo Grimmel burlonamente— Debe haberse olvidado de ti... primera regla de la cazeria, separa a la presa de su manada, acaban de removerse solos de esta ecuación— pronunció Grimmel con burla

—Dime, ¿Porqué lo haces?— preguntó Hipo

—¿Es enserió? no creí que te importara, pues, a diferencia de ti, cuando era pequeño y me encontré con un Furia... lo asesine, ¿Sabes porque lo hice?, mi padre murió por culpa de una bestia como esa— exclamó el cazador con odio

—Intentaste asesinar a mi padre, mi padre huyo de su hogar por culpa tuya— reclamó Amelia

—Gracias a tu padre decidí matar a todos y cada uno de ellos para traer la paz a este mundo necesitado— respondió Grimmel

—Pero tu también tienes dragones— dijo el ojiverde

—Estos, son asesinos de dragones, drogados para obedecer con su propio veneno, y ni siquiera tu preciado alfa puede controlarlos— verbalizo el hombre con una risa burlona— Te lo voy a demostrar— exclamó

—¡Todos cubranse!— grito Hipo

No pasó ni un segundo, cuando un enorme dragón escupió ácido de su boca, quemando todo a su paso

Amelia lanzaba aureolas rojas para poder parar el ataque del dragón, protegiendo así a sus amigos y a su madre

—Vamonos— ordenó la pelirroja

—¿Y mamá?— cuestionó Billy mirando que el dragón de su madre estaba solo

Ambos hermanos no lo pensaron dos veces y decidieron ir en busca de su madre

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—No me toques, maldito cerdo— vocifero Anna con enojo

—Oh Anna, siempre he querido matar a mi hermano, pero, matarte a ti será mucho más placentero— murmuró Grimmel con una siniestra sonrisa

—Aléjate de mi madre— ordenó Billy, quien lanzó una aureola en dirección a el, lanzandolo lejos de su madre

—No... mamá— lloriqueo Amelia tomando a su madre en sus brazos

Anna Miracle, había sido apuñalada con una daga, la cual estaba impregnada de veneno de dragón

—Vayanse— artículo Anna con dificultad, lágrimas salían de los ojos de la mujer, pues estaba viendo su vida pasar delante de sus ojos

—Resiste madre, Amelia vamonos de aquí— dijo Billy, este cargo a su madre entre sus brazos

—Sean fuertes mis niños, lo amo— verbalizo Anna antes de quedar inconsiente

Todos miraron como Anna estaba siendo cargada por su hijo, se asustaron al ver la sangre en ella, y sin dudarlo se fueron rápido de ese lugar

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—Busquen a Gothi, ¡rapido!— ordenó Billy desesperadamente

—Anna, ¿Qué fue lo que ocurrió?— Preguntó Abel llegando junto a su esposa, lágrimas comenzaron a salir de sus ojos

Gothi llegó rápidamente, ordenó que la pusieran en la cama de la casa de acampar en la que ella se encontraba, el único que pudo entrar fue Abel, pues la anciana necesitaba espacio para atender a la mujer

—Ella estará bien, va a estar bien— ánimo Hipo abrazando a su novia, quien lloraba desconsoladamente

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—Anna, mi Anna, recuperate ¿si?, tus hijos te necesitan... yo te necesito— suplicó Abel sosteniendo la mano de su amada

Gothi había logrado detener un poco la emorragia, logró vendarla, para que de esa forma pueda descansar un poco

—Abel...— susurró la mujer— Necesito que me prometas, que vas a cuidar de nuestros hijos... han crecido tanto, pero para mi siempre serán mis pequeños niños— pidio la mujer

—Haré lo que tu me pidas, siempre y cuando estés conmigo— respondió su esposo

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Por otro lado, Grimmel había encerrado a Brutilda, quien no había ido a la nueva isla en la que estaban acentuados

—Brutacio ocupo todo lugar en la panza de mi mamá, si no yo hubiera tenido cabeza redonda y más cerebro, según la ciencia— hablaba Brutilda mientras estaba encerrada en una celda— Mis trenzas som como pequeños Cremallerus

La rubia hablaba sin parar, era como un loro a los ojos de Grimmel y los demás cazadores

No pasó mucho rato para que la jinete desesperara a los presentes

—¿No odias a las personas que hablan demasiado?— preguntó Brutilda

—Si... las odio— murmuró Grimmel con enfado

—¿Y si alimentas a los dragones con esta loca?— insinuó una de las cazadora

—Hey, ¿Qué tienen de comer?, los crustáceos me sacan ronchas para que lo sepan, es todo lo que hay en esa estúpida isla nueva— indicó

Un clik sonó en la cabeza de Grimel, pues era hora de poner en marcha su plan

—Los muchachos me aman, excepto Ereth, con el ya no quiero nada... porque este barco ya sarpo lastima, he Hipo ya esta prácticamente casado con la cara fina de Amelia— reprocho la rubia

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—Te amo Abel, gracias por todo, mi fiel compañero— murmuró Anna con dificultad antes de cerrar sus ojos para siempre

Los gritos de Abel se escuchaban desde afuera, loa hermanos Miracle y los demás jinetes entraron rápidamente para ver que pasaba

—No...— sollozo Amelia mirando a su padre abrazo con fuerza a su madre, mientras que su hermano estaba en shock mirando el cuerpo sin vida de su madre

Anna Miracle, había muerto en manos de Grimmel el Grimoso

Todos los presentes se quitaron los cascos que traían puestos, y soltaron varias lágrimas, pues la mujer era muy querida entre todo el pueblo

Valka Haddock lloraba silenciosamente, pues la vida le había arrebatado a su mejor amiga, aquella amiga con la que se volvió a encontrar después de 20 años

—Mi madre no merecía esto— susurró Billy a un lado de su padre

—No, no lo merecía—  contestó Abel con enojo, pues el responsable de aquel sufrimiento era su hermano, y estaba dispuesto a vengar la muerte de su amada esposa

—Oigan, tenemos otro problema— habló Astrid preocupada