Blair se encontraba justo en la línea invisible del tratado, la línea que separaba a los lobos de los vampiros. Ella se mantenía en su lado escuchando y observando todo lo que había a su alrededor, hasta que unas fuertes pisadas la hicieron darse la vuelta. 

Allí, en el otro lado, encontró a Alice junto a dos hombres más. Los dos eran rubios, pero uno de ellos se veía mayor que el otro. Blair saludó con una sonrisa a los dos y se dio un gran abrazo con Alice. 

—Blair, te presento a Jasper, mi pareja, y Carlisle, mi padre. 

—Encantado de conocerte al fin. —saludó Carlisle mientras le extendía una mano que ella aceptó gustosa. 

—Igualmente. — miró a Jasper, quien solo le dirigió un asentimiento como saludo, lo respetó e hizo el mismo movimiento. — Me dijo Alice que querían verme. 

—Tuve una visión. — habló con rapidez la vampira meintras que Blair asentía curiosa. — Hoy, antes de que anochezca, Verónica vendrá. 

—¿La pelirroja?— los chicos asintieron. 

Blair se había dado una vuelta más de una vez en los recuerdo de su hermana, ahora que los Vulturi la iban a tener en la mira, le gustaría estar al día de todo lo vivido con los Cullen. Alice también la ayudó un poco en los días que la ayudó con su transformación, al igual que su cuñado. 

—¿Que necesitáis? — preguntó Blair cruzando sus brazos bajo su pecho para concentrarse. Sabía que algo querían. 

—Seguramente notaréis cuando llegue. — empezó a explicar Carlisle. Blair asintió. —Nos gustaría tener a alguien que pueda pasar tanto en nuestro territorio como en el vuestro para que sea más fácil alcanzarla. 

—Bien, supongo que Sam encontrará a alguien. — Blair asintió de acuerdo mientras murmuraba el cómo convencer a su alfa para ese plan. 

—Queremos que seas tú. — la neófita giró su vista para enfocarla en Jasper, quien aún no había hablado. — Aún convirtiéndote en vampira sigues presentando un olor neutral, no se nota que estas aquí. Alice pensó que serías buena opción. 

Blair sonrió al escucharlo, le encantaba la adrenalina que iba a consistir tal persecución y estando en los dos bandos a la vez le iba a traer mucha ventaja. No se lo pensó mucho antes de asentir y convertirse para irse de allí en su forma lobuna, era la más rápida y la más fuerte de su manada por lo que pensó que aceptarían sin dudar. 

Lo más difícil de ese día fue convencer a Sam y a toda la manada del plan de los Cullen. Todos estaban de acuerdo en que era muy peligroso para ella al ser una vampiresa principiante y aun no habían visto como podría afectar su nueva condición a las que ya tenía. Gracias a los astros, Emily estuvo presente y apoyó a su única amiga en todo momento, por lo que Sam no pudo evitar aceptar. 

Blair estaba en esos momentos en lo alto de un árbol en el territorio Cullen, ya había avisado a Alice y todos estaban listos para la llegada de la pelirroja. Blair podía escuchar a los Cullen a la lejanía y a su manada transformándose y uniendo sus mentes para trabajar en equipo, estaba feliz de poder pertenecer a aquello. 

Nunca habría imaginado pertenecer a una gran familia, mucho menos después de transformarse. Sus instintos se volvieron más agudos y siempre parecía emocionada por algo, su loba interior, desde que volvieron, no ha parado de dar saltos entusiasmados por alguna razón desconocida para ella, pero al convertirse en vampiro esos dos lados se unieron e hicieron que la emoción sea más fuerte e intensa. Como en esos momentos. 

Blair sentía algo aproximarse y por alguna razón no sentía que sería malo, ella estaba emocionada. Pero no le duró mucho al escuchar el gritó de Alice avisando la dirección por la que iba la vampiresa, fue en ese momento en donde avisó a su manada y esbozó una sonrisa divertida. 

Saltó de árbol en árbol con su máxima velocidad hasta encontrar a la susodicha, que se había parado al enfrentarse a uno de los Cullen. Blair no miró al chico, solo fijó la vista en Vicotira para entonces sorprenderla aterrizando en frente suya y logrando que cambiara de dirección. Blair podía escuchar las pisadas detrás suya mientras corría detrás de la vampiresa y sin ningún esfuerzo logró llegar a su espalda, alargó la mano y la vampira saltó. 

Victoria había cruzado el límite en un acantilado y se paró a ver con una sonrisa a Blair para burlarse, pero al ver como ella retrocedía y daba un salto transformándose en un lobo blanco volvió a correr. Esta vez toda la manada iba detrás suya, volvió a saltar al otro lado y saltó detrás de ella estando en frente de los Cullen para atraparla, Victoria saltó por un árbol para sacar ventaja y Jasper saltó detrás de ella fracasando. 

Blair saltó a donde su manada al ver que ella haría la misma jugada de nuevo y la estuvo esperando con ansias, fue entonces que olió algo diferente en el ambiente. Olisqueó el aire para darse cuenta de que había un olor a lavanda impregnado en el ambiente, pero no había ninguna de esas plantas cerca, levantó la vista y lo entendió. 

Para ella todo fue a cámara lenta, un hombre musculoso se acercó al acantilado y saltó, mientras Blair lo veía sus patas por poco y se doblan de la satisfacción al encontrar a tal persona, su otra mitad, su imprimación. Nunca pensó que algo así sucedería en ella, mucho menos al no ser licántropa del todo, pero lo único en lo que pudo pensar en ese instante fue en estar con él. 

Cuando vio al hombre intentar aterrizar en su territorio vio a Paul en su forma lobuna atacarle para que no cruzara. El hombre cayó al agua y Blair saltó para protegerlo, la chica se pusó delante de él gruñendo a Paul y mostrando sus dientes. 

—¿Qué crees que haces? ¡Apártate! ¡Han roto el tratado, lo mataré! —gruño Paul e intentó saltar por encima de ella para ir a por el vampiro, mas Blair se abalanzó a morderle y a atacarle empezando otra pelea entre ellos. 

—¡No toques a mi hombre!  

En ese momento Paul se apartó de golpe y miró a Blair, todos se reunieron al rededor de Paul para ver a la chica defendiendo a su impronta. Todos pudieron ver lo que sintió al verle y por ello se fueron sin decir nada, respetando las normas de su comunidad, todos menos Jacob. Él se quedó mirando a Blair más tiempo que los demás y cuando la chica le gruñó como advertencia, se fue. 

Blair se atrevió a darse la vuelta para mirar más de cerca a su amado. Metió las patas en el agua y aún siendo un lobo enorme, no podía llegar a la cabeza del Cullen, pero eso no impidió que levantara su cabeza para mirarle a los ojos y sentir de nuevo la imprimación en todo su ser. Por fin ella sentía esa sensación de que alguien se convertía en el centro de su mundo, y con eso presente apoyó su hocico en el pecho del hombre para seguir mirándolo, pero no duró mucho. 

—¡Emmett! — el hombre giró la vista para ver a Rosalie, quien estaba de brazos cruzados viendo la interacción. —Es hora de irnos. 

El hombre no se molestó en despedirse de la loba, no le devolvió la mirada ni se giró mientras se iba. Blair lloriqueó y su loba sintió el rechazo en toda su alma, provocando que esta caiga en el río mientras se volvía a transformar en humana cerrando los ojos y dejando que el río se la llevara.

Emmett

Emmett

Emmett

Ese nombre no dejaba en paz a Blair, solo podía pensar en él y en su rechazo a ella. El dolor que le causaba era tanto que no prestó atención a que intentaba suicidarse hundiéndose en las profundidades del río, no fue hasta que escuchó a los lobos llamándola. Ellos habían visto todo y sabían que tanto su loba como ella lo habían tomado como un rechazo. 

Blair se encontraba tendida en el sofá de la casa de Emily y Sam mirando al techo sin querer involucrarse en nada más. Había ignorado las llamadas de su hermana y de su padre, solo estaba allí porque Paul la llevó en brazos al ver que ella no se quería mover. Después del rechazo su vida carecía de sentido, no entendía que debía de hacer ahora. 

Ella nunca se había considerado una persona dependiente y mucho menos de un hombre, pero cuando sintió la imprimación y el rechazo de su amado no pudo evitar pensar que ya no tenía ninguna razón para existir. Intentó pensar en su querido padre, amaba mucho a ese hombre y mataría por él, pero no fue suficiente y mucho menos pensar en Bella. Su hermana, quiera o no, nunca había estado para Blair, siempre había sido al revés y aunque Blair no lo quiera admitir su hermana era muy narcisista y solo pensaba en ella. 

Pensó en su madre, esa mujer que seguía esperando que llegara algún día a casa y le dijera que todo estaba bien, que las dos estarían a salvo y sin miedo. Pensó en la manada, aquella que desde pequeña había sentido que era su familia y ahora era una parte fundamental de ella, pero no consiguió mitigar el dolor pensando en nadie. Solo pensaba en Emmett. 

—¿Blair? — Emily se acercó con un plato hacía la chica que seguía en el sofá. — Te hice un brownie de chocolate con mermelada de fresa, recuerdo que es tu favorito. 

Emily acercó el plato a la cara de la chica para que lo viera, todos los de la manada prestaron atención en ese momento. Todos estaban alrededor de la mesa hablando sobre ella y como ayudarla, pero no conseguían nada y ahora podría ser un momento crucial para ella. 

—No tengo hambre. — contesto simple sin dejar de mirar el techo, seguía teniendo esa mirada de vació. 

Sam suspiro y no pudo evitar los gruñidos que soltaron los demás miembros de su manada, todos estaban enfadados con el vampiro por lo que le hizo a Blair. Emily dejó el plato encima de la mesa con una mirada preocupada, no conocía a nadie que amara más la comida que Blair, sin mencionar que su apetito por ser licántropa era más intenso. 

Paul y Sam fueron los únicos que se atrevieron a acercarse a Blair pasada otra media hora. Paul alzó las piernas de la chica y se sento apoyando las piernas de la contraria en su regazo, Sam hizo algo parecido pero poniendo una almohada en su regazo para apoyar la cabeza de la castaña. 

—Tienes que comer algo Bee.— Sam empezó a acariciar el sedoso cabello de la chica mientras Paul acariciaba su brazo con una mirada preocupada. 

—No tengo hambre. — volvió a repetir, eran las únicas palabras que le habían escuchado decir en las dos horas que la llevaban observando. 

—Tu cabeza te impide comer. — habló Paul mirando a su mejor amiga pálida. — Tu cuerpo necesita comida Kamari. 

—Sabemos que ahora piensas que no te la mereces. — Sam siguió sus caricias hasta la frente de la chica, él junto a Pual eran de los pocos que sabían las migrañas que sufría muy de vez en cuando, por ello no dudo en masajear la zona logrando un suspiro agradecido de la chica. 

—No pienso eso. — habló ella mientras apretaba la mano de Paul para evitar llorar. — Siento que mi vida carece de sentido ahora que él me rechazó. 

Todos miraron a la chica con gran preocupación y los demás de la manada se acercaron al fin a brindar su apoyo a Blair, sin saber que cierta vampira acababa de ver toda la interacción a causa de su don. 

Alice estaba junto a su familia, esperando la llegada de Edward que se fue junto con Bella a Florida. Estaba sentada en el sofá junto a Jasper viendo las noticias de Seattle, las cuales empeoraban cada segundo que pasaba, toda la familia estaba reunida viendo esa noticia, hasta que escucharon el ligero temblor en el ambiente por la rigidez que mostró Alice. 

Todos giraron su vista a la chica que se enderezó y empezó a mirar a un punto fijo, en la visión mostraba a una Blair pálida y triste siendo atendida por toda la manada. Alice pudo escuchar y sentir parte de lo que sucedía y notó que su nueva amiga estaba así por culpa de su hermano, que sin darse cuenta había rechazado a la chica. 

Cuando la visión terminó notó los brazos de su amado rodearla con fuerza, todos empezaron a cuestionar su visión, tal vez pensaron que era algo sobre los vampiros de Seattle. Alice no dudó ni un segundo en levantarse de su sitio con una mirada furiosa, una que poca gente a visto alguna vez en su vida, ignoró las preguntas de todos y se acercó a su hermano logrando girar su cara con la fuerte bofetada que le dio ella. 

Emmett se vio sorprendido por ello, no entendía que había visto en su visión para que ahora su hermana le pegara. Las grietas que se formaron en su mejilla se fueron curando de a poco y cuestionó con la mirada a la chica. 

—Esto por romperle el corazón a mi amiga. 

Con eso se giró y corrió a la entrada para luego irse intentando comunicarse con Blair, quería estar con ella en esos momento y la chica no dudo en aceptar que vaya a su casa.

Heyy, aquí la desaparecida. No tenía ideas para este cap, ya que yo me suelo guiar a través de las películas y la mitad de este cap está inventado. Igualmente espero haya sido de vuestro agrado. 

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NO A LOS LECTORES FANTASMAS (bloqueo instantáneo)