(𝐶𝑜𝑛𝑡𝑒𝑛𝑖𝑑𝑜 𝑠𝑒𝑛𝑠𝑖𝑏𝑙𝑒 +18)

𝑻𝒂𝒆𝒉𝒚𝒖𝒏𝒈.

Camino al departamento de Jungkook mi enojo se iba disipando, pocas veces sentía apretones o caricias en mi pierna por la mano de Jungkook, solo no lo miraba; llegamos al mismo complejo departamental que la primera vez y entramos al estacionamiento, aparco en un lugar vacío cerca del elevador y salimos del auto, rodeo el auto y me jalo hacía él y me beso profundamente dejándome sin aire.

-Te extrañe.-Dijo Jungkook al separarse de mi.

-Claro, me extrañaste tanto que me Dejaste con ganas en el auto.-Voltee los ojos.

Jungkook solo sonrió, me tomo de la mano y me llevó al elevador, ambos subimos y apreto el botón del segundo piso.

Minutos después llegamos a su piso, salimos del elevador y Jungkook sacó de uno de sus bolsillos una corbata, lo mire con el ceño fruncido de la duda.

-¿Eso para que?.-Señale la prenda.

-Es una sorpresa.-Se acercó a mí poniendose en mi espalda.

Jungkook puso la corbata enfrente mío y cubrió mis ojos, la incertidumbre y emoción me carcomian, nadie nunca se había tomado el tiempo de hacerme una "sorpresa", escuché el famoso sonido de la cerradura al abrirse y las manos de Jungkook en mi cintura guiando mi camino para no caer o tropezar, se detuvo y desató el nudo de la corbata que cubria mis ojos, de poco los abrí y mire al rededor, había un camino de velas con olor a vainilla, una mesa no tan grande redonda cubierta de un mantel blanco con dos sillas acolchadas de extremo a extremo, la mesa ya tenía platos y cubiertos, en un carrito se encontraba una cubetera con hielos y un vino dentro, al lado al parecer los alimentos, estaba en estado de shock por esto.

-¿Te gusta?.-Me abrazo por detrás y apoyó su barbilla en mi hombro.

-N-no, no sé que decir.-Respondí tímido.

-No digas nada, solo espero que sea de tu agrado.-Me guio para tomar asiento en la decorada mesa.

Corrió mi silla para que me sentara, después de mi tomo asiento en su silla frente a mi y de la cocina salió una chica con uniforme de servicio acercándose a nosotros, la chica era bonita, por accidente hice contacto visual con ella y me sonroje, Jungkook se da cuenta y se ríe.

-¿Te gustan las mujeres o te gusta ella?.-Pregunta descaradamente.

-No me gustan las mujeres.-Respondo sin titubear.

-Seyoon es muy hermosa y muy discreta.-Lo mire sorprendido por lo que dijo al último.

-¿A que te refieres?.-Fruncí el ceño.

-¿Has estado con una mujer antes?.-Alzo una ceja en pregunta.

-No, pero nunca me llamaron la atención.-La chica estaba concentrada en servir la comida ignorando totalmente la conversación.

-Pero Seyoon si llamó tu atención.-Sin importarle tomo mi mano y acarició el dorso.

-¿Has estado con ella?.-Mi rostro era serio.

-Unas veces.-Tomo un sorbo de vino sin dejar de acariciar mi mano.

-No te creo, eres gay.-Fruncí mucho el ceño al ver su negativa.

-Me consideró bisexual con preferencia masculina, pero si veo una mujer hermosa como Seyoon, me va a gustar, se darle placer a ambos sexos sin problema.-El que me dijera eso me hizo ruborizarme a no más poder, dejándome sin palabras.

La chica la cúal su nombre es Seyoon término de servir la cena, empece a comer en silencio bajo la atenta mirada de Jeon, mi piel quemaba, mentiria si dijera que lo que dijo de saber darle placer a ambos sexos no despertó algo en mí, es cierto, nunca sentí atracción por una mujer ya que estudie en colegio privado de puros hombres, así que como tal jamás tuve interacción con mujeres, y al presentarme como homosexual las pocas amigas que hice en la universidad no las ví de otra manera, pero ver a Seyoon cerca de Jungkook despertó curiosidad y deseo, pero no lo admitire, cuando Namjoon me dejó por una mujer sentí envidia y cierto rencor, jamás entendí como Jimin si aceptó mantener relaciones con su ex y otras chicas, mis pensamientos fueron interrumpidos al sentir una caricia en mis manos, mire a Jungkook, pero él estaba comiendo, mire la mano ajena y ví que era esta chica Seyoon, ella me miraba con un leve sonrojo y unos ojos muy abiertos expresando sus nervios.

-¿Si?.-La miré con las cejas alzadas.

-S-si, si desea algo más, no dude en pedirmelo.-Sus orejas y todo su rostro estaba completamente rojo, yo solo asentí y se retiró metiendose en la cocina.

Jeon me miraba detenidamente, él sabía que estaba sobre pensando las cosas, la situación me hacia sentir mucho calor, el ambiente se torno muy acalorado, estaba confundido, Jungkook sonrió, se levantó de la silla y se puso frente a mí de pie, mi vista se enfocó en sus pantalones, tenía una erección, abrí mi boca de la sorpresa, no podía creer que la situación le excitara.

-¿Por qué eso?.-Señale su entrepierna.

-Porque ya te quiero tener en cuatro.-Sus palabras provocaron un estremecimiento recorrerme el cuerpo y haciendome sonrojar.

Me tomó de la mano y me levantó quedando ambos de pie, tomó mi cuello y me beso apasionadamente, su lengua invadía mi boca, sus manos fueron a parar a mis nalgas apretándolas fuerte, sin tanto esfuerzo me levantó y envolví mis piernas en su cintura, camino un poco llevándome a la sala y me sentó en el sofá, para ese punto yo ya estaba más que excitado.

-¿Quieres ayuda con la ropa?.-Señalo mi pantalón donde tenía el bulto de mi erección.

Asentí, pero él solo sonrió y salió de mi vista adentrándose a la cocina, fruncí el ceño al no saber que haría; después de unos minutos regresó y se sentó a mi lado, lo miré confundido.

-¿Que pasa?.-Mi ceño estaba fruncido.

El solo sonríe y de un mando a distancia empieza a sonar música de altavoces que están en la sala, la melodía tiene ritmo lento y la letra es rap, no conozco el artista, pero me gusta el ritmo, por el rabillo del ojo un movimiento a mi derecha capta mi atención, la chica Seyoon esta diferente, su ropa es todo lo apuesto a un uniforme, trago fuerte, ella esta en ropa interior color negro, sin poder evitarlo miro su cuerpo, su pechos son algo grandes, llenan perfectamente el sostén, sus curvas llaman mi atención, su cintura ni es pequeña, ni grande, se nota que hace ejercicio, mi mirada baja más, sus bragas son pequeñas, de encaje, se nota mucha piel, nuevamente mi mirada sube a su cara, su expresión es distinta, no hay rastro de timidez, me mira interesante, ella también recorre mi cuerpo y se detiene en mi erección, inmediatamente me pongo nervioso, no sé como actuar, mi mano por instinto va a mi entrepierna cubriéndola, sonríe y me mira de nuevo, luego desvía su mirada hacia Jungkook, lo miro también con el ceño fruncido y él solo sonríe, voltea hacía a mí y se acerca, toma mi rostro y acerca nuestras caras mirándome a los ojos.

-¿Confias en mí?.-Asiento.-Quiero que esta noche disfrutes, solo sera un momento, dejate llevar, solo relajate.-Pegó sus labios y me beso lentamente.

Su lengua era suave, no había guerra en nuestras bocas, solo pasión, sentí dos manos extrañas en mis piernas, quise voltear a ver pero Jeon mantenía mi rostro pegado al suyo, esas manos iban subiendo más, me estaba poniendo ansioso, mi pene estaba palpitando y dolía, ella abrió más mis piernas y Jeon mordió mi labio inferior haciendome gemir, sentí sus manos ir a mi bulto y lo acarició despacio, a ese punto ya estaba jadeando, pues Jungkook me besaba el cuello y tocaba mis pechos mientras Seyoon desabrochaba mi pantalón y bajaba el cierre, su delgada mano bajo mi bóxer y libero mi verga, Jeon paro de besarme y miró lo que hacía la chica, ella solo sonrió, él bajó su mano y tomo mi pene y empezó a estimularlo de arriba abajo, para eso mis gemidos ya eran fuertes, no podía dejar de ver el rostro de la chica, esa mirada hambrienta solo hacía que la estimulación de Jungkook fuera más rápido provocando que pronto me fuera a correr, pero se detuvo y gruñí.

-¿Estas lista?.-Se dirigió a la chica y ella solo asintió.

Ella tomó mi erección y abrió su boca...

𝑜𝑛𝑡𝑖𝑛𝑢𝑎𝑟𝑎...