
Chapter two
[the funeral that hurts the most, the one in his atlantis]
La castaña seguía en shock, no reacciónaba, era como una muñeca de trapo, lo único que así era bañarse, vestirse, y quedarse viendo al vacío, ese día su prima Dora la tuvo que vestir, sintiendose terriblemente triste la ver el horrible estado de su prima, Andrómeda no fue la excepción, ver a su querida hermana así la entristeció demasiado.
Morgan había dejado de comer, incluso de dormí, si lo así la terrible pesadilla del cuerpo inerte de su novio la atormentaba.
Pero cómo no hacerlo? Había visto el cuerpo del amor de su vida muerto, sin luz, vida, alegria, amor, todo lo que ella había conocido de el.
Andrómeda había ido por ella una semana antes del funeral, como su tutora legal junto ha su esposo, tenía todo el derecho de hacerlo, en su hogar estaba sus primos, Regulus y Sirius, quienes al ver el estado de su sobrina se pusieron a alerta, como es que ella, tan parecida a la foto más bella de cualquier jardín, se estaba marchitando tan rápido.
Andrómeda, Ted, Dora, Sirius y Regulus sabían que ella estaba aún pero de lo que se miraba, no había llorado desde ese fatídico día, solamente, parecía ida, en trance, su estado no era el mejor de todos, sus ojos habían perdido cualquier emoción, su aspecto iba pareciendo como el de una persona en depresión, sus huesos comenzaban a notarsele, bajo sus ojos comenzaban a formarsele ojeras, producto de las ya vatos noches en vela, Morgan no estaba bien, era como una persona viva, peor a la vez muerta.
***
La Black paso con un rosa blanca entre las manos y la dejo en el ataúd de su alma gemela, prometiendole mentalmente que se volverían ya encontrar, que ella haría lo posible por qué fuera lo más antes posible.
Y se fue a seguir con la mirada perdida, recibiendo pésame de cualquier persona que se le acercara.
Horas después del funeral Morgan por fin había reaccionado, y no de la mejor manera, eso era claro, al llegar a la casa Tonks, acompañada de todos sus tíos, incluyendo a sirius quien hacia poco había sido liberado, se desplomó en el suelo llorando gritando, exigiendo ver a Cedric, andrómeda y Dora no encontraban la forma de decirle que estaba muerto, hasta que Regulus lo hizo, le dijo a su prima que el amor de sus vida ya no estaba, eso empeoro la situación, Morgan golpeó el piso, se estiró el pelo hasta casi arrancarlo, al ver una foto de ella y Cedric, reposada en la mesa de café de la sala principal, corrió a gatas a por ella, al tomarla entre las manos acarició al Cedric de la foto, llorandole, diciendole que le perdonará, por no poderlo salvar, su familia no encontraba que hacer sabían que ella tenía que decir adiós para siempre a Cedric y creyeron que ese era.
--No pude salvarnos -la castaña hablo con la voz ronca, teniendo los ojos irritados de tanto llorar -mi atlántida. -todos los adultos oyeron el tan ya conocido apodo que la castaña le tenía a su prometido
Lloraron?
Yo si.
Me duele hacer sufrir a mi dulce Morgan pero así de esto trata el fic.
Sin editar.
Los quiere Isa<33.
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