Pov San

Mi celular sonó antes que la alarma, lo revisé. Era una llamada de mi madre, decidí atender.

-Hola.

-¡Hijo! ¡Tanto tiempo! ¿Cómo estás?

-Mal si tú me llamas.

-No seas tan cruel Sannie ¡Te tengo una sorpresa! Ven al hogar, quiero enseñarte algo.

Cortó. Simplemente me dejó con las palabras en la punta de la lengua, no me dejó más escapatoria que levantarme y tomar mi traje.

"Este será el peor dia de todos."

Una vez vestido y arreglado me dirigí hacia la empresa de mis padres. ¿La verdad? No sabía de qué se trataba esa estúpida empresa, ya que habían cambiado tantas veces de propósitos por tan solo conseguir dinero. Comenzó siendo para idols, en la que debuté, pero luego me mudé una vez me di cuenta que solo me usaban, como ya no ganaban dinero terminaron organizando la creaciones de grandes edificios del país, los cuales les aburrieron, luego un orfanato, en el cual pedían dinero ¡Pedían dinero! ¡Pedían dinero por absolutamente todo!

Luego de eso no tengo idea de que ocurrió con la empresa. Parece que hoy lo descubriría.

Llamé a un taxi, el cual me llevó hacia ese lugar, llamé a la recepción y esperé para poder subir. Coloqué el codigo en la puerta. Una vez entré pude ver a mis peores pesadillas, las cuales se hacían llamar "Padres", cuando tan solo me habían encontrado, se quedaron con gran parte de mi dinero y me lastimaron de la peor manera posible. Pero allí estaban, junto a la causa por la cual me llamaron.

-¡Hijito! ¡Buenos días! Tanto tiempo sin vernos... Cambiando de tema ¡Sorpresa! ¿Recuerdas a Bae? ¿La actriz con la que trabajaste hace unos años? ¡Aquí está! Y aún más bonita que antes.

-¡A-ay! ¡Señora, no diga esas cosas! Un gusto verte de nuevo Sannie-La saludé con un apretón de manos, en el cual se sintió un poco incómodo cuando acarició un poco de más.

-Un gusto verte de nuevo Su.-Sonreí.

"Mierda, ya quiero irme de aquí."

-San, te llamé para que salgamos a alguna cafeteria de por aqui ¡Oh! ¡Hace tanto no salimos! ¡Vamos!

-No.

-Hey, amargado ¿Por qué esa carota?-Golpeando mi hombro.

-Simplemente no quiero ir.-Y esa era la verdad, no saldría con esos locos.

-Quita esa expresión muchacho, ¡No te preocupes! Buscaré el lugar más lujoso-.Me susurró.

-Te odio.

-¡Que chistoso andas hoy, Jeong! ¡Vámonos!

Me llevó prácticamente arrastrando hacia el coche, mi "Padre" y Bae nos siguieron hasta que subimos. El señor Lee-Nuestro chofer-Nos llevó hacía el lugar. Una vez estacionó bajamos, cada uno se ubicó en su lugar respectivo y esperamos a ser atendidos.

-¿Que desea, señor?

-Irme de aquí.

-¿Disculpe?

-¡San!

-¿Si?-Rodé mis ojos, la señora de mi lado me susurró.

"Comportarte, estúpido."

-¿Cual es su órden?

-Ah si disculpe-Rió-Yo pido un jugo de naranja exprimido y un trozo de pastel y... Querido ¿Que deseas tú?

-Un café-Sonrió.

"Carajo, sus sonrisas me aburren"

-Su-ji ¿Tú que quieres comer?

-Amh, lo que puedan pagar ustedes, claro.

-Traiga un café y una porción de pastel para los dos restantes.

-Enseguida traigo sus ordenes.

Una vez los pedidos estuvieron el la mesa comenzaron a hablar de los peores temas. Dinero, política y la vida.

-Hijito ¿Y tú qué piensas hacer de tu vida? ¿Alguna colaboración musical? ¿Actuar en algo? ¿Tienes pareja...?

La última pregunta me dejó pensativo, lo de Wooyoung y yo había comenzado a ser una relación, pero... No le podía contar a mis padres. Pues para mala eran los peores homofóbicos del mundo. Además, no quisiera que esto termine mal de nuevo.

-No, sigo estando soltero señora Jeong.

-¿Señora Jeong? Anda, dime madre, ma-dre, ma-dre-.Rió

Una vez el silencio inundó el lugar comenzamos a beber y comer nuestros postres. Bueno, si se llamaba comer lo que estaba haciendo, estaba asesinado al pobre pastel.

-San, al final no respondiste la pregunta de tu madre, dime ¿Que vas a hacer con tú futuro?

-Primero comenzaré por enfocarme por hacer lo que me gusta, luego me encargaré de seguir creando canciones para las personas a las que amo y luego...-Mi vista comenzó a nublarse.

-¿Y luego que, San?

-Y luego... Y luego m-me alejaré de los pedazos de basura que se hacen llamar familia.

"¡Carajo!"

No pude resistir mis lágrimas, salí corriendo del lugar, choque contra el camarero y lanze las cosas de su bandeja.

-L-lo siento, t-ten ésto, llévatelo todo, para nada sirve el dinero sin una vida feliz.

-¡E-espera!

Salí hacia el coche, me senté en el asiento del lado del conductor, allí, recién allí me permití soltar las lágrimas que estuve reteniendo.

-¿Por qué? ¿¡P-por qué tienen que ser asi!?

-San...-Intento consolarme el señor Lee, simplemente me alejé.

-Llevame lo más lejos posible de este lugar, m-muy lejos de aquí.

-¿Que te ocurre San?

-¡S-solo hazlo! No lo resisto más ¡No lo resisto!-Abrace mis piernas sobre el asiento.

-Ponte el cinto, por favor.

-No me importa nada ahora, solo hazme el favor de llevarme lejos de aquí-.Susurré en un hilo de voz.

-San, ponte el cinto y te llevaré hacia donde quieras ¿Si? Solo quiero que no salgas herido, quiero cuidarte...

-¿Por qué lloras?

-Solo tengo algo en el ojo, ponte el cinto y dime a dónde quieres ir.

Le hice caso. Le dije que me deje sobre esa calle, en ese pequeño hogar en el que me sentía seguro. En ese lugar que había visitado unas cuantas veces. En ese lugar donde se encontraba él.

-Llevame con Wooyoung.

-En camino mi capitán-.Rió-
¿Quién es Wooyoung? ¿Un amigo? ¿Productor? ¿Actor?

-Es el dueño de mi corazón.

-Veo, tienes pareja, me alegra mucho que por fin hayas encontrado la felicidad.

-¿Qué? ¿Y-yo te dije eso? Oh, lo siento.

-No te preocupes San, no le diré a nadie, es un secreto entre... E-entre socios.

-Claro-Sonreí, además de Wooyoung el señor Lee era la una persona en la que podía confiar todo el tiempo, me cuidaba como si fuéramos familiares, y eso me agradaba.

"Quiero saber sobre él"

-Señor Lee ¿Usted... Sabe dónde puedo encontrar a mi padre?

-Tu padre... Lo conozco.

-¿Lo dices de enserio?

-Si, somos grandes amigos, nos conocemos muy bien, hace unos años me dijo que fue de viaje a Francia, el quería conocer el lugar, es un gran aventurero ¿No lo crees?

-Quiero conocerlo.

-No.

-¿Eh?

-Quiero decir, él me contó que se llevaba mal con el señor y la señora Jeong, no quiere encontrarse con ellos. Además... Me dijo que quiere que aprendas a independizarte, aunque eso fue hace unos años ¿No?-Rió.-Bien, llegamos San, ve a ver a Wooyoung.

-Muchas gracias, Lee.

-Nos vemos San.

"Este niño estará feliz con Wooyoung, estoy seguro de que mi hijito está en grandes manos"

Una vez lo dejó en la casa, se alejo en su coche.

-Prométeme que te alejarás de esos malditos hijos de perra.